Publio Papinio Estacio
LIBRO 6, LIBRO 9
Argumento Edipo, rey de Tebas, habiéndose sacado los ojos y retirado a vivir en una cueva del monte Citerón, en pena de haber muerto a su padre Layo, sin conocerle, y casádose con su madre, llamada Yocasta, de quien tuvo dos hijos, Eteocles y Polinices, sintiéndose el rey despreciado de ellos y excluido del reino, invoca a Tesífone, furia del infierno, contra ellos, y maldícelos como a generación incestuosa. La furia siembra discordia entre los dos hermanos, y acuerdan de reinar por suertes cada uno un año. Cupo la primera a Eteocles, y sale Polinices desterrado de Tebas. Júpiter junta concilio de dioses, y determinando destruir a Tebas y a Argos, manda a Mercurio que baje al infierno por el alma de Layo, padre de Edipo, para que incite a Eteocles que, pasado el año, no permita que le suceda Polinices en la vez de reinar, al cual en este tiempo, que discurría por la Beocia, sobrevino de noche una tempestad, y compelido de la misma fortuna Tideo, príncipe de Calidonia, aportan juntos al alcázar de Larisa, corte de Adrasto, rey de los argivos; y recogiéndose en los zaguanes de su palacio, riñen los dos sobre la posada. Al rumor baja Adrasto y los pone en paz. Juzgándoles por personas nobles, los aposenta. Lleva Polinices vestido el despojo del león nemeo, y Tideo el del jabalí de Calidonia. Repara Adrasto en ello, y certifícase de un oráculo antiguo de Apolo, que le dijo que dos hijas suyas casarían una con un león y otra con un jabalí. Hácelas venir a un convite que hizo a los forasteros, y en la mesa cuenta la causa de un sacrificio que este día se celebraba en Argos al dios Apolo. 615 1 Las armas, el furor de dos hermanos (1) en pertinaz discordia divididos, contra ley natural odios profanos, reinos a veces entre dos regidos, delitos sin disculpa, de tebanos, por injuria del tiempo no sabidos, para que al mundo su memoria espante, me incita Apolo que renueve y cante. 2 ¿Por dónde, oh musas, del Parnaso gloria, (3) mandáis que dé principio al triste cuento? Cantaré en el principio de mi historia de esta gente feroz el nacimiento, traeré el robo de Europa a la memoria, la ley inviolable y mandamiento de Agenor, y forzado del destino a Cadmo, navegante peregrino. 3 Largo fuera el discurso si dijera, (7) tomando tan de lejos la corriente, de aqueste labrador la sementera que tuvo por cosecha armada gente, cuando, no sin temor de que naciera el fruto semejante a la simiente, dientes sembró en los surcos de esta tierra, que guerra nace donde siembran guerra. 4 Ni es bien ahora que despacio cante 9) con cual pudo Anfión dulce armonía cercar de muros la ciudad triunfante si tirios montes a su voz traía, ni el triste fin de Sémele ignorante, obra de Juno, que celosa ardía, ni por cuál ocasión, con rigor grave. al propio hijo dio la muerte Agave. 5 Ni diré contra quién, con desatino, (12) arco flechó Atamante desdichado, ni cómo, por huir sus furias, Ino las olas no temió del mar hinchado y en los brazos del Jonio cristalino fiada más que del marido airado, se arrojó con su hijo, do Neptuno dio nueva vida y nombre a cada uno. 6 Por tanto, pues, de Cadmo dejar quiero (15) la contraria fortuna o suerte buena, 616 el mal presagio o el feliz agüero, la causa de su llanto y de su pena; que si otra lira le cantó primero, la morada de Edipo, siempre llena de confusos gemidos y de llanto, han de ser el principio de mi canto. [Dedicatoria de Estacio al emperador Domiciano, 7-11] 7 Puesto que yo cantar no he merecido (17) triunfante a Italia tremolar banderas, dos veces al flamenco, y dos vencido al que del Istro ocupa las riberas, ni al godo rebelado, compelido dejar al monte, habitación de fieras, ni cuando tiernos años, raro ejemplo defendieron de Júpiter el templo. 8 Y tú, gloria de Italia, que a su fama (22) nuevo esplendor y nueva luz aumentas, y al valor de tu padre, que te llama, no menos digno hijo te presentas; de ti, que de su estirpe clara rama, en las hazañas imitarle intentas, imperio eterno Roma se desea y que un monarca solo en ti posea. 9 Y aunque, señor, te ofrezcan las estrellas (24) lugar entre los rayos que despiden, y porque quepa tu grandeza entre ellas la suya estrechen si a la tuya impiden, y aunque por digno de sus luces bellas con la región los cielos te conviden de lluvias libre, y donde, por sublime, ni el rayo abrasador ni Bóreas gime; 10 y aunque Apolo su clara luz serena (27) te comunique al fin tan igualmente, que los rayos que adornan su melena imprima por diadema de tu frente, y aunque de los caballos que él enfrena te entregue el freno en su carrera ardiente, y aunque te dé que tengas en gobierno su medio cielo Júpiter eterno; 11 contento goza el cetro merecido, (30) poderoso señor de mar y tierra, 617 y al cielo vuelve el don que te ha ofrecido, que no en aqueste honor tu honor se encierra: y tiempo habrá que yo, más instruido, cantando hazañas en ajena guerra, las tuyas cante en laureada trompa, que con fuerza mayor los aires rompa.] 12 ahora, pues, mi mal templada lira (33) armas de Tebas bastará que cante, cetro de dos tiranos, cuya ira no halló en la muerte límite bastante. llama que juntos abrasar no aspira, reyes muertos en odio semejante; vivos sin reino, y sin sepulcros muertos, pueblos de gente viudos y desiertos. 13 Digo en aquel infausto y triste día (38) cuando con griega sangre sus raudales tiñeron, Dirce bella, que solía adornar sus corrientes de cristales, y el claro y manso Ismeno, que corría mojando apenas secos arenales, que a Tetis admiró, cuando a su seno llegó de tanto estrago y muertes lleno. 14 Musa, con cuyo aliento los afanes (41) renovar de la antigua Tebas quiero, decidme a quién de tantos capitanes daré en mis versos el honor primero. ¿Al destemplado en iras y ademanes Tideo, ilustre, si soberbio y fiero, o al sacerdote que en la injusta guerra armado, vivo le tragó la tierra? 15 De Hipomedón me llama el gran trofeo, (43) contra el rigor de un río opuesto en vano, y del de Arcadia el pertinaz deseo, que su muerte obligó a llorar temprano, y el soberbio furor de Capaneo, despreciador de Jove soberano, sujeto digno de inmortal memoria y de cantarse en más heroica historia. 16 Ya el lecho incestuoso había dejado (46) de Layo el sucesor, y a noche obscura él mismo había sus ojos condenado, quitando con sus manos su luz pura; 618 y dando nombre de infernal pecado a lo que fue ignorancia y desventura, en parte obscura y lóbrega vivía con larga muerte, aborreciendo el día. 17 Allí donde esconder piensa su afrenta (49) y llorar, aun sin ojos, sus delitos, el triste día se le representa principio de sus males infinitos; y allí con viva muerte se atormenta, porque siempre en el alma dando gritos le está, hecha verdugo, la conciencia. ¡Duro castigo, extraña penitencia! 18 Y viendo que con ánimo insolente (53) triunfan sus hijos de su pena y llanto, con la rabia y dolor que el alma siente, venganza pide al reino del espanto; y al fin, hiriendo la arrugada frente, Sus ojos enseñando al cielo santo (castigo de su error), de luz vacíos, así dijo, haciéndolos dos ríos: 19 «Escuchad, negra Estige y Flegeto (56) y vosotras, deidades infernales, que gobernáis el reino de Caronte, angosto reino para tantos males; tú, mi siempre invocada Tesifonte, para alivio en mis penas inmortales tu auxilio en mi cruel intento pido, si algún bien de tu mano he merecido. 20 »Tú, que cuando nací, mi cuerpo tierno (60) de la tierra en tu gremio recibiste, y después el amparo y el gobierno de mi desamparada vida fuiste; tú, que con aguas de tu lago Averno no esperada salud y fuerza diste a mis heridas plantas traspasadas, porque seguir pudiera tus pisadas; 21 »tú, que de Cirra en la corriente fría (62) para buscar mi padre diste aliento, con Polibo pudiendo, a quien tenía por padre (aunque fingido), estar contento; y en Fócida llevándote por guía, la vida con injusto atrevimiento 619 quité a mi viejo padre deseado, con daño suyo, por mi mal hallado. 22 »Si el enigma intrincado y los rodeos (66) vencí por ti de Esfinge, y satisfecho con nobles, aunque infames himeneos, alegres furias escondí en mi pecho; si hijos te engendré que son trofeos de tu maldad, y si el infausto lecho de mi madre ocupé mil noches frías, con triste error gozando alegres días; 23 »Después, por castigar mi vida errada, (71) si con mi mano, un tiempo tan temida, entre las de mi madre desdichada dejé mis ojos, luz aborrecida, oye mis ruegos. pues sin ser rogada, tan conforme a tu gusto y a mi vida es lo que pido, si aunque no me oyeras, por ser venganza, tú la concedieras. 24 »Aquellos que engendraron mis pecados, (74) que no me excusa la ignorancia en esto, hijos propios al fin, pero engendrados en lecho infame de nefando incesto, viendo mis ojos de la luz privados, y a mí del reino, que ocuparon presto, en tanta pena; ¡ay triste! y dolor tanto. alegres triunfan de mi amargo llanto, 25 »no los puede ablandar mi desventura: (76) antes, menospreciando mis gemidos, tratan ya de mi muerte y sepultura, soberbios más que nunca y atrevidos. De mis hijos también ¡ay suerte dura! mis años han de ser aborrecidos; Y ¿no hay castigo para tanta ofensa? ¡Oh flojedad de Júpiter inmensa! 26 »De ti, furia, de ti justicia espero, (80) si no la hay en los dioses soberanos: mueve el infierno en mi venganza fiera contra estos insolentes dos hermanos; y la corona que manché primero con sangre de mi padre, tú en tus manos recibe, y con veneno del infierno 620 pon en ella discordia y odio eterno. 27 »Vea yo ¡oh reina del tartáreo seno! (85) la ejecución que mi deseo encierra: siembra en ellos furor de ambición lleno, que de armas hincha la heredada tierra: ni has menester gastar mucho veneno, que en la facilidad con que esta guerra aceptarán, verás en pocos días cuán tuyos son: que al fin son prendas mías.» 28 Dijo y la voz horrenda y lastimera (88) llegó al infierno apenas, cuando oídos con grande agrado de la Diosa fiera fueron del ciego Edipo los gemidos. estaba de Cocito en la ribera, los cabellos, serpientes esparcidos, dejándolos beber a su albedrío ardientes aguas del funesto río. 29 Al punto mueve la ligera planta, (92) que no la vista tan veloz se aleja. ni ardiente exhalación con fuerza tanta de polo a polo deslizar te deja, ni el rayo con que Júpiter espanta, de quien las altas torres tienen queja, cuando dorado chapitel injuria, baja con tanta ligereza y furia. 30 Y al salir de los campos infernales, (94) aquel sin vida vulgo miserable huye y le da lugar; que nuevos males aun teme en su tormento perdurable. Ya ocupa de Tenaria los umbrales, y fácil el portero inexorable, aunque a nadie al salir abre la puerta, franca a la furia la ofreció y abierta. 31 Apenas puso en la región del día (97) las plantas, cuando el mundo alborotado, al sol, que entonces claro amanecía, vido en un punto de su luz privado; la negra noche, que del sol huía, habiendo vuelto atrás con pecho osado, llena de admiración, aunque contenta, mirando estuvo al sol con cara exenta. 621 32 De sus hombros la máquina pesada (98) ya casi estuvo por dejar Atlante, : que a tanto miedo la cerviz cansada, y a tanto peso apenas fue bastante; siguiendo, pues, la senda más usada de Tebas la infernal furia arrogante, atrás se deja el valle de Malea, que en larga punta sobre el mar campea. 33 Ni otro camino con mejor aliento (101) que éste de Tebas, de ella apetecido. atravesara con mayor contento; porque un retrato de su infierno ha sido. cerastas mil que eriza por el viento, le hacen sombra al rostro denegrido, y de los ojos arrojar parece fuego, que más las sombras le obscurece. 34 Tal suele entre las nubes vez alguna, (106) con la fuerza de mágico veneno mostrar su rostro la encantada luna, de negras sombras y de manchas lleno, y por la boca de infernal laguna encendido vapor lanza del seno, que engendra en los que toca de una suerte, sed, rabia, hambre, enfermedades, muerte. 35 Todo es veneno desde el pie a la frente (109) cuanto la triste tez fogosa encubre, ni es del talle el vestido diferente, que hórrido y negro sus espaldas cubre. al pecho se le añuda una serpiente, que parte esconde y parte de él descubre, con que siempre Prosérpina la adorna cuando al infierno victoriosa torna. 36 Viva culebra en una mano esgrime, (112) que azota el viento, y con esa otra mano rayo fúnebre arroja, con que oprime la tierra, que su injuria llora en vano. De esta suerte la cumbre más sublime, por donde más al cielo soberano el Citerón soberbio se avecina, alegre ocupa, y toca su bocina. 37 Triste señal de su venida al suelo (115) con fieros silbos las culebras dieron, 622 y cual si rayos enviara el cielo, llenas las fieras de temor, huyeron; las aves, olvidadas de su vuelo, atónitas de espanto se cayeron, y oyóse, al son con que amenaza guerra, turbarse el mar y retumbar la tierra. 38 Viose el reino de Pélope alterado, (117) creció Eurota, Parnaso alborotóse, con ser centro del mundo, y al un lado Heta, de dos collados, trastornóse, y el Istmo, de dos mares azotado, de suerte al fiero son estremecióse, que si menos pudiera reportarse, llegaran ambos mares a juntarse. 39 Las nereidas, turbadas y huyendo, (121) miden ligeras la menuda arena. Cayó Palemón al terrible estruendo desde un delfín que navegando enfrena; la madre al punto, su peligro viendo, de gran temor y sobresaltos llena, abrazada con él entre las ondas se fue a esconder en las cavernas hondas. 40 Apenas puso en el umbral la planta (123) del palacio de Cadmo, cuando luego de los Penates la presencia santa inficionó el vapor de infernal fuego engendra en los hermanos ira tanta el nuevo movimiento y furor ciego, que cada cual en el soberbio pecho fabrica en daño ajeno su provecho. 41 Siembra la envidia triste su veneno, (126) nace el torpe temor, que el odio cría, rompe el deseo de mandar el freno con que el fraterno amor la paz regía; de impaciente ambición cada cual lleno, no admite ya en el reino compañía; salió al fin la discordia a la batalla, que donde reinan dos siempre se halla 42 Cual suelen dos novillos escogidos (131) del cauto labrador para el arado, que rasgando la tierra, al yugo unidos, si aun no bien las cervices han domado, 623 difícilmente del gañán regidos, discordes cada cual hacia su lado tirar del peso con rebelde pecho y confundir los surcos que habían hecho; 43 no de otra suerte la discordia lleva (137) a despeñar los míseros hermanos: condena el uno lo que el otro aprueba, causando mil motines inhumanos: resolviéronse al fin con traza nueva, por no venir a ensangrentar las manos, que uno solo reinase, y que el gobierno cada año se mudase y fuese alterno. 44 Que en tanto que uno reina el otro viva (140) en destierro, de Tebas apartado; y en cumpliéndose el año, que reciba el cetro, y salga el otro desterrado. ¡Oh dura condición, fortuna esquiva, con qué pensión el reino les has dado! ¡Que venga un rey a gobernar por tasa, contando el año, qué ligero pasa! 45 Esta fue su piedad, su amistad ésta, (142) falsa, pues que durar aun no podía hasta el segundo rey; tregua molesta, que con nombre de paz discordias cría; y aun no el oro, que tantas vidas cuesta, soberbios techos adornar solía ni salas de brocado entapizadas en bello jaspe estaban sustentadas. 46 Aún no había de marfil soberbio lecho (146) en el palacio, aunque real, pequeño, donde adornaba al mal pulido techo humilde y sin primor desnudo leño; y aún no el temor entonces había hecho que estuviese a su rey guardando el sueño, seguro de asechanzas de traidores, escuadrón de vasallos veladores. 47 De nadie adulterados habían sido (149) los frutos de la tierra, aún no cansada ni aún entonces el gusto había sabido guisar engaños con industria osada; no el metal más precioso, derretido servido en los manjares, no adornada 624 la mesa con vajilla de oro fino, ni rica perla deshacerse en vino. 48 Un dominio desnudo, un pobre estado, (150) un reino humilde, en infinitos males la paz de dos hermanos ha trocado, y la amistad en odios inmortales parece que a la tierra han trasladado su morada las furias infernales. mientras la suerte, en quien el pleito para, con destierro del uno al otro ampara. 49 La traición y mentira florecieron (154) no quedó sin usarse algún engaño; con la vergüenza y la razón murieron La justicia y verdad con igual daño. ¿Qué pretensiones poderosas fueron para engendrar con odio tan extraño el furor que a la muerte un reino entrega? ¡Oh hermanos miserables! ¿quién os ciega? 50 ¿Qué mayor ira con delito tanto (156) vuestros pechos indómitos moviera, si cuanto cubre el estrellado manto vuestro ciego furor os prometiera, si con las armas pretendierais cuánto ve el sol desde que empieza su carrera hasta que llega a descansar adonde Tetis lo abraza y su carroza esconde? 51 Y ¿qué, si conquistara esa fiereza (160) desde el suelo del sol más abrasado hasta donde el Bóreas la aspereza con soplo eterno aflige al Escita helado? ¿Qué, si de Troya y Grecia la riqueza se hubiera para el uno amontonado, y tanto imperio a la fortuna avara con la muerte del otro se comprara? 52 Un infame lugar, ciudad maldita, (162) con infelice agüero fabricada cuando ciego furor, ira infinita al fiero Cadmo señaló morada, ¿para tantas maldades os incita, que la silla de Edipo desdichada por fuerza ha de manchar sangre de hermanos? ¡Oh, maldad de los hados inhumanos! 625 53 Y Polinice, a quien la desventura (164) el imperio negó, su Tebas deja, y de haber puesto en suerte su ventura en vano y tarde se arrepiente y queja; mas tú, soberbio, que con alma dura miras tu hermano, que de ti se aleja ¡Con qué nueva arrogancia y alegría la silla ocupas, de émulo vacía! 54 Ya nadie ves igual, todos menores (167) son cuantos acompañan tu persona; tuyo es todo el gobierno y sus favores, sola tu frente ciñe real corona; mas ya comienza a haber nuevos rumores; que el vulgo, que a sus reyes no perdona si una vez pierde el miedo y la vergüenza del nuevo rey a murmurar comienza. 55 Ya el año es largo y ya el imperio es duro, (170) y el insolente pueblo lo aborrece más noble, más piadoso y más seguro y amado el venidero rey parece; y alguno, adivinando lo futuro cuya mala intención siempre le ofrece decir del que más vale alguna mengua, así soltó la venenosa lengua: 56 «Con sentencia tan áspera los hados (173) vuelven de nuevo a perseguir a Tebas, con tan varios temores y cuidados hacen de nuevo en su paciencia pruebas; siempre hemos de servir a desterrados, sujetas siempre a voluntades nuevas nuestras cervices, con temor eterno las tiene de oprimir un yugo alterno. 57 »¿Tal novedad te agrada y tal violencia, (176) oh, gran Rector del cielo cristalino? mas ¡ay! que ésta sin duda fue la herencia que de su agüero antiguo a Tebas vino desde que, obedeciendo la sentencia del fiero padre, el tirio peregrino el mar Carpacio navegó, buscando del toro celestial el peso blando 58 »Halló reino, y sembró de la serpiente (183) los dientes llenos de fraterna guerra, 626 pues un fiero escuadrón de armada gente produjo luego la preñada tierra, y hoy de aquel triste agüero Tebas siente el triste efecto que su paz destierra, y hasta hoy los nietos heredaron el furor con que tantos acabaron. 59 »Este a quien hoy la suerte favorece, (185) después que igual ninguno ve delante, ¿No veis con qué rigor se ensoberbece? ¿Que intratable se ha hecho y qué arrogante? ¿Con qué gravedad mira, que parece que amenazando está con el semblante? ¿Con cuánta majestad, acaso injusto, hace y deshace leyes a su gusto? 60 »¿Es posible que al fin del año espera (189) al nuevo sucesor este tirano? ¿Es posible que el cetro dejar quiera que ahora ocupa su soberbia mano? Pluguiera al cielo de su hermano fuera, que era, al fin, más piadoso y más humano, y de aplacar más fácil si enojado; mas ¿qué mucho? Reinaba acompañado. 61 »Nosotros, pueblo vil, vulgo oprimido, (191) siempre hemos de vivir avasallados; siempre de uno soberbio y atrevido sujetos, de otro siempre amenazados, cual leño de des vientos combatido, que soberbios, contrarios y obstinados, le hacen embestir con igual pena, ya en los peñascos altos, ya en la arena.» 62 Júpiter en su alcázar entretanto (197) concilio de los dioses ha juntado, senado insigne, venerable y santo, de mil varias deidades ilustrado. Los que del cielo el estrellado manto adornan, los primeros han llegado, luego con su colegio soberano el gran rector del húmedo Oceano. 63 Cuál desampara el monte y cuál la fuente; (200) nadie, aunque muy remoto, se detiene, ni el que vive en los reinos del Oriente, ni el que al Ocaso su morada tiene; 627 tan presto allega el de la Libia ardiente como el que de la helada Escitia viene. Tantos fueron al fin, que el viejo Atlante a tanto peso apenas fue bastante. 64 Júpiter ocupó su rico estrado, (203) y estando un poco los demás atentos, licencia que se asienten les ha dado; porque antes no ocuparan sus asientos. Los sátiros y faunos se han sentado, callan de miedo al derredor los vientos, y al fin los ríos a sentarse vienen, que con las nubes parentesco tienen. 65 La rica sala de oro se estremece, (208) de tanta majestad y dioses llena, y en columnas y techo resplandece secreta luz, más pura y más serena; calla asombrado el mundo y enmudece, ningún rumor entre los dioses suena; y viendo el orbe todo tan atento, así propone Júpiter su intento. 66 Graves son y desnudas de clemencia (211) las palabras que dice al gran Senado, y por ejecutor de su sentencia tras de ellas sale inexorable el hado. «De los mortales, dice, la insolencia es tal, que habiendo en vano procurado domar mil veces sus rebeldes cuellos, sólo os junte para quejarme de ellos. 67 »¿Hasta cuándo su pena merecida (215) tiene de alborotar mi santo pecho? nunca para enmendar su infame vida tienen de ser mis rayos de provecho; ya a Vulcano, que es cosa nunca oída, falta el fuego, de tantos como ha hecho; y de lo que han sudado y padecido cansados los cíclopes, se han rendido. 68 »Por esto tuve tanto sufrimiento (219) cuando el carro del Sol Faetón regía, aunque vi por su loco atrevimiento que en cenizas el mundo se volvía; mas ni el rayo ni el húmedo elemento con que cubrió los montes otro día 628 el gran Neptuno, mi segundo hermano, nada enmendaron al linaje humano. 69 »Castigar a dos casas determino, (224) aunque de mi descienden (no lo niego): Argos y Tebas son, que ya el destino irrevocable está soplando el fuego. ¿Quién no sabe de Cadmo peregrino la muerte y de su casa el furor ciego, contra quien tantas veces el infierno ha hecho guerra con rigor eterno? 70 »Los infames placeres y locuras (229) de las tebanas madres ¿quién ignora? Culpas de más de un dios y travesuras que yo por su respeto callo ahora; Dejo otras tan enormes desventuras, que muchas veces se corrió el Aurora de verlas; y son tantas que en un día, si quisiese contarlas, no podría. 71 »¿Qué pena, qué castigo habrá que cuadre (233) a éste, de los hombres monstruo fiero, temerario homicida de su padre, aunque de su corona el heredero? pues con infame incesto de su madre el lecho profanó, y donde primero la vida que aborrece ha recibido, hijos de sus maldades ha tenido. 72 »Mas ya paga a los dioses su pecado, (236) pues no goza la luz de nuestro cielo; que él mismo, a noche eterna condenado, sus tristes ojos arrojó en el suelo, y luego (¡extraño ejemplo!) que aumentado del afligido padre el desconsuelo, sus hijos atrevidos los pisaron y el cetro infame alegres heredaron. 73 »Mas, presto ¡oh viejo mísero! cumplido (239) has de ver tu deseo y tu esperanza, presto verás tu reino destruido; que no puede en el hado haber mudanza ya, ya tu noche obscura ha merecido que Júpiter procure tu venganza: yo mismo arrancaré, con nueva guerra, tu maldito linaje de la tierra. 629 74 Adrasto y uno y otro casamiento, (243) hechos con infelice y triste agüero, el principio serán y el instrumento que para aquesta guerra elegir quiero que aun no olvido el maldito atrevimiento de Tántalo, y su mesa; y así, espero con esta nueva pena merecida castigar esta gente aborrecida. 75 Así dijo el gran Padre omnipotente, (248) y del peligro de Argos lastimada Juno, que en su inflamado pecho siente nuevo dolor y pena no esperada. «¿Cuál hado, respondió, cuál dios consiente, oh Júpiter justísimo, que armada en las batallas entre mi persona, el oficio usurpándole a Belona? 76 »Ya sabes cuánto debo al pueblo argivo, (251) cuánto en fuego inmortal humo sabeo, cuántas honras y fiestas de él recibo, cuánta sangre en mis aras siempre veo; y así contra el rigor del hado esquivo, porque temo su mal, su bien deseo, lo debo socorrer, cual siempre he hecho, con armas, con valor y osado pecho. 77 »Aunque por ti a la guarda vigilante (253) de mi enemiga en vaca convertida, tu cauto ejecutor, nieto de Atlante, cerró los ojos y quitó la vida; y aunque entres hecho lluvia rutilante adonde en vano Dánae fue escondida, mis agravios perdono, aunque celosa; que entraste al fin en forma mentirosa. 78 »Mas, que ofenderme quieras revelando (256) tu gran poder y majestad inmensa, cercado de mis rayos y tronando, no hay para tanto agravio recompensa. Siempre de Tebas me estaré quejando, donde aun duran señales de mi ofensa; Tebas lo pague, a Tebas aborrezco, y el daño que le ordenas te agradezco. 79 »Mas ¿por qué el instrumento de su llanto (259) Argos tiene de ser a costa mía? 630 Si en tan poco me tienes y si tanto aborreces mis cosas cada día; si en el que siempre fue tálamo santo nuevos enojos la discordia cría: si al fin te pueden alegrar mis penas, asola a Esparta, a Samos y Micenas. 80 »No quede en todo el mundo pueblo mío (262) que altares me levante y templos haga, donde con sangre y con incienso pío al honor de tu esposa satisfaga. Mejor merece aquestas honras Io, pues nunca el fuego de su altar se apaga, y del Nilo lloroso en la corriente siempre su nombre resonar se siente. 81 »Si porque te ofendieron sus pasados (266) han de pagar las gentes su insolencia, y de antiguos delitos ya olvidados quieres tomar al mundo residencia, ¿cuándo (si son aquestos tus cuidados) se ha de acabar tan larga penitencia, pues no habrá pueblo que inocente sea en cuanto abraza el mar y el sol rodea? 82 »Si la inocencia, pues, a nadie excusa, (270) a ejecutar comienza tu deseo desde donde siguiendo a su Aretusa ligero corre el peregrino Alfeo; allí verás tu Arcadia, a quien acusa la memoria de algún delito feo; y ¿no te da vergüenza ni reparas que en infame lugar te hagan aras? 83 »Allí el pisano rey, digno por cierto (274) de vivir entre fieros animales, o del bárbaro Heta en el desierto, o del Libia en los secos arenales, tanto rival dejó en el campo muerto que aún duran de su estrago las señales; y ¿entre huesos de tantos no enterrados te agrada ver tus templos levantados? 84 »A Creta mentirosa y atrevida (278) ¿cómo no das la pena que merece pues ha hecho mortal tu inmortal vida, y con tu sepultura se ennoblece. 631 ¿Como te agradan los curetes de Ida, si el mundo sus maldades aborrece? Argos sola peca; ¡qué desventura! su triste fin y mi dolor procura. 85 »Otros reinos malditos y otras gentes (280) dignas de tu rigor tiene la tierra; lleven allá esos yernos insolentes el estrago y furor de tanta guerra; no paguen mis argivos inocentes. Mira el dolor que aqueste pecho encierra, o mira al menos que de ti descienden, que son tuyos también y no te ofenden.» 86 Esto con libertad responde Juno; (283) ya ruega humilde y ya arrogante y fiera dice otras mil injurias que ninguno para decirlas libertad tuviera. Júpiter, que al hablar tan importuno estuvo cual si dura roca fuera, con menos gravedad y más airado esta áspera respuesta a Juno ha dado: 87 »Siempre de tu soberbia he presumido (285) que sola osaras oponerte a cuánto tiene de Argos el hado establecido con justísima causa y celo santo: y sé que (si les fuera permitido) Baco y Venus hicieran otro tanto por Tebas; pero callan, que en efeto reverencia me tienen y respeto. 88 »Y porque de los dioses inmortales (290) ninguno como tú con pecho osado procurando el remedio a tantos males, ose contradecir lo que he hablado, yo juro por las aguas infernales que ha de cumplirse lo que ordena el hado, y que sólo el furor de dos hermanos ha de asolar argivos y tebanos. 89 »Por tanto, alado mensajero mío, (292) diligente ministro de mi intento, vuela con tanta ligereza y brío, que atrás se quede, aunque te lleva, el viento. Baja al profundo infierno, y a tu tío, rector de los lugares del tormento, 632 dile que al viejo Layo dé licencia para que haga del infierno ausencia. 90 »Está ahora de Lete a la ribera, (296) que después de su muerte miserable pasar allende, por su ley severa, le prohíbe el Erebo irrevocable. Vuelva a Tebas de nuevo, a quién espera con tanto estrago el hado inexorable; y porque lo ordenado tenga efeto, aquesto diga al arrogante nieto: 91 »Que a Polinice, ahora desterrado, (299) no consienta jamás que a Tebas llegue, aunque pida, en su suegro confiado, que el cetro al fin del año se le entregue; y pues el reinar solo ha deseado, de su reino el alterno honor le niegue. este principio a tanto mal pretendo, por su orden lo demás se irá siguiendo.» 92 Obedeció al gran Padre soberano (303) Mercurio, y a sus plantas luego añade ligerísimas alas, con que ufano deja los cielos y los vientos mide; la vara lleva en su derecha mano, con que sueño provoca y sueño impide, y por quién el infierno le permite que los muertos que quiere resucite. 93 El sombrero se pone, que deshace (306) las tempestades y serena el viento, adorno usado cuando ausencias hace de su estrellado y cristalino asiento; de aquesto prevenido, satisface del gran Rector del cielo el mandamiento, y con ligero y presuroso vuelo, cortando nubes, se avecina al suelo. 94 Y de Beocia Polinice en tanto (312) vagando pasa la desierta tierra que tanta sangre humana y tanto llanto ha de beber en la vecina guerra; que el Sol en cada signo se esté tanto siente en el alma, porque en ella encierra cuidado eterno con inmenso daño del mal debido reino al fin del año. 633 95 Este, que nunca un punto de su pecho (316) (esté velando o duerma) se desvía, siempre, a pesar del tiempo libre, ha hecho larga la noche y perezoso el día; sólo con mil engaños satisfecho, que inventa su engañosa fantasía, con fingida esperanza y bien dudoso hace dulce el cuidado venenoso. 96 Finge que el año largo se ha cumplido, (321) que a Tebas vuelve y que a su hermano aleja, y que dándole el cetro prometido, él mismo humilde el reino y patria deja; ya se alegra de verse rey temido, de verse desterrado ya se queja, y así entretiene en esperanza larga de su deseo la pesada carga. 97 Y mientras llega el plazo deseado (324) ir a pasarlo en Argos determina, o en Micenas, do el Sol, avergonzado, en tiempo les negó su luz divina; o que esto ordena el inmudable hado, o Erimnis que a su pena así lo inclina, o que Atropos le enseña este camino, a Argos al fin lo lleva su destino. 98 Ya de Ogige se deja atrás las cuevas, (328) albergue de aulladoras bacanales, y el alto Citerón, que a un lado a Tebas y a otro mira del mar los arenales, pasa por donde hizo tantas pruebas de su crueldad Escirón, que aun las señales se ven en los peñascos y en la arena, de sangre tintos y de huesos llena. 99 Llega al reino de Niso, a quién pudiera (332) eternamente asegurar la vida el cabello encantado, si tuviera hija más casta y menos atrevida; los campos pasa donde Escila fiera lloró su ceguedad mal conocida, y al fin deja a Corinto, donde oyendo estuvo de dos mares el estruendo. 100 Ya el fugitivo Sol había escondido (336) entre las nubes del ocaso el día, 634 y habiendo sus tinieblas esparcido, el aire adelgazó la noche fría; calla el ganado ya, ningún ruido en las ciudades ni en el campo oía; sólo se hace de la tierra dueño, lleno de olvido y de silencio el sueño. 101 Mas, dura tempestad prometió al suelo (342) al esconder el Sol su rubia frente, cubriendo el carro de funesto velo, escasa luz ofrece al nuevo Oriente; tendiendo largos rayos por el cielo, llegó lleno de luto al Occidente, y apenas se escondió en el mar profundo, cuando la noche triste ocupó el mundo. 102 Espesa y negra más que nunca encubre (345) la hermosura y luz del cielo santo; ninguna estrella al mundo se descubre que la salida impide el negro manto; el torpe miedo vuela, el suelo cubre silencio, obscuridad, horror y espanto; y ya con ronco son, confusa y ciega, la tempestad amenazando llega. 103 Los vientos, mal regidos y enfrenados (348) del animoso rey que los gobierna, furiosos más que nunca y enojados, piden su libertad con rabia eterna; viéndolos tan soberbios y obstinados, las puertas les abrió de su caverna, estrecho albergue para tanta furia y al fin salen, haciendo al mundo injuria. 104 El confuso tropel la tierra hiere, (350) tiembla el eje del cielo cristalino, cada uno alzarse con el mundo quiere, gime el mar, brama el fiero torbellino; triste del marinero que tuviere fuera del puerto el leño peregrino, pues ha de verse en tanto sobresalto, lleno de miedo y de esperanza falto. 105 Con espesos relámpagos el cielo (353-354) por mil partes parece que se enciende, truena con brava furia y tiembla el suelo, a quién tanto enemigo a un tiempo ofende; 635 de las nubes preñadas rasga el velo el fiero rayo, y con rigor desciende, y en el más rico chapitel agravia de Siria el cedro y el metal de Arabia. 106 Con más violencia el austro hace guerra, (350-353) y de Arcadia las cumbres humedece, en negras nubes su humedad encierra, y espesas gotas a la tierra ofrece; mas primero que lleguen a la tierra el Alquilón las cuaja y endurece, cubre la nieve ya las montes fríos, entran hinchados en el mar los ríos. 107 Mil humildes arroyos que se vieron (356) secos ayer, pasados a pie enjuto, ricos de tantas aguas, hoy pudieron quitar al campo el mal seguro fruto; Inaco y Erasino al mar corrieron, llevándole ya guerra, y no tributo, y de Lerna también el hondo seno derramó por los campos su veneno. 108 A las selvas su honor y su hermosura (361) quita la tempestad con furia brava; yace midiendo ya la tierra dura planta que ayer al cielo amenazaba; no aprovechó a Liceo su espesura, donde apenas la luz del Sol entraba; que ya la tempestad desembaraza en sus obscuros senos ancha plaza. 109 El mancebo tebano, que oprimido (364) se ve en tanto peligro, ya suspira con no usado temor; cada ruido flechas de miedo al corazón le tira; ya escucha de los vientos el bramido, ya desgarrarse un medio monte mira, y atónito y confuso queda, oyendo de fugitivas peñas el estruendo. 110 Oye el rumor de algún arroyo fiero, (366) y mientras más se acerca, más se espanta cuando mira nadando un monte entero donde apenas mojara ayer la planta; nada la choza y huye el ganadero dichoso al fin en desventura tanta, 636 y el humilde ganado va nadando donde andaba la hierba ayer buscando. 111 Mas no por esto su camino deja, (367) aunque entre tanta confusión dudoso, que el temor del hermano es quien le aqueja más que el temor del tiempo riguroso; cual marinero incauto que se aleja de la tierra, y al viento más furioso entrega de sus velas el gobierno, con el rigor del erizado invierno. 112 Combatido del viento en noche obscura (371) no puede ver el norte ni la Luna le puede dar en tanta desventura alguna lumbre ni esperanza alguna; en vano en tanta obscuridad procura remedio contra la áspera fortuna pues contra la tormenta en mar tan alta faltan las fuerzas y el gobierno falta. 113 Y mientras más está lejos del puerto, (373) del viento teme más la rabia fiera, o ya de algún peñasco que encubierto las ondas tienen, su naufragio espera; a cada parte ve el peligro cierto, que más se enoja el mar y más se altera, y al fin deja su vida y su navío del enemigo viento al albedrío. 114 Tal el tebano incierto va siguiendo (376) por donde el hado y su rigor le lleva, ya espesos matorrales va rompiendo, a donde hace de sus fuerzas prueba; ya fiera se le opone, que huyendo va por el monte a la segura cueva; el ancho escudo embraza y cubre el pecho, que ya animoso su temor le ha hecho. 115 En esto, de Larisa en la alta cumbre, (380) alcázar de Argos y de rey morada, resplandeció un farol, que con su lumbre descubrió la ciudad tan deseada; guardaba el pueblo argivo esta costumbre, tanto en la paz como en la guerra usada, y como alivio en desventura tanta, el tebano adoró la lumbre santa. 637 116 A la antigua Prosina a un lado deja, (382) rico templo de Juno, y a otro lado a Lerna venenosa, que se queja de Alcides, que sus aguas ha infamado; con esperanza nueva el miedo aleja, y vuela ya con paso acelerado; al muro llega al fin y a nadie encuentra, sigue la amiga luz y en Argos entra. 117 Del rey en el palacio suntuoso (386) halló el ancho zaguán desocupado, contra el furor del tiempo riguroso seguro albergue y sitio acomodado; en él pensó tener algún reposo, y así, tendiendo el cuerpo fatigado, convida al blando sueño en cama dura, si haberle puede en tanta desventura. 118 El noble rey Adrasto aquí vivía, (390) de abuelos rico, en majestad temida, que gobernando en paz pasado había ya la mitad del curso de su vida; del mayor de los dioses descendía de ambas partes su sangre esclarecida, mas no tiene, y en vano lo desea hijo varón que su heredero sea. 119 Dos bellísimas hijas le dio el cielo, (393) que han de heredar su reino, su nobleza, mas por lo que esperaba algún consuelo, vive con más dolor y más tristeza; que el Dios que avisa lo futuro al suelo amenazada tiene su belleza: «De una, dijo, un león será su esposo, y de otra un fiero jabalí cerdoso.» 120 Cual si se hubiera visto ya el efeto, (398) gime el padre infelice el caso duro; ninguno de sus sabios el secreto pudo alcanzar de aquel enigma obscuro; ni el mismo Anfiarao, a quien sujeto Apolo hizo todo lo futuro, lo pudo penetrar, y un caso raro hizo después aquel enigma claro. 121 Al portal que ocupaba ya el tebano (401) vino acaso a parar el gran Tideo, 638 que en el mismo rigor del tiempo insano a Argos también le trajo un caso feo; huyendo, por la muerte de su hermano, de Calidonia y de su padre Eneo, adonde estaba Polinices para siguiendo del farol la lumbre clara. 122 Turbóse luego, y de la tierra dura (408) se levantó con ira acelerada, y porque de ninguno se asegura, quiso negarle la común posada, era grande el tebano de estatura, de persona fornida y bien trazada; pequeño el calidonio, en vaso chico tiene de gran valor tesoro rico. 123 Cada cual fugitivo y desterrado, (410) perseguido del tiempo, de ira lleno, huésped en tierra ajena recatado, rompe atrevido al sufrimiento el freno; con amenazas el temor osado armó a entrambos las lenguas de veneno, las manos de furor, de injurias hecho, de fuego el corazón, de rabia el pecho. 124 De tantas amenazas ofendidos, (418) ya con rabia v furor llegan a asirse, con piernas y con brazos atrevidos, queriendo en fiera lucha preferirse; ya con desnudas manos desasidos, con tanta prisa llegan a herirse, que no el granizo de la nube espesa con tanta furia baja y tanta priesa. 125 Tal de valientes mozos deseada (421) ve lucha el sacro Olimpo semejante, cuando el tiempo, con planta acelerada, sus lustros restituye al gran Tonante; arde la tierra, de sudor bañada, muestra la juventud pecho arrogante, y entretanto las madres desde afuera cada una el premio y la victoria espera. 126 Con no menos valor, si con más ira, (425) aunque sin esperar premio ni gloria, cada uno de éstos insolente aspira, bañado ya en su sangre, a la victoria; 639 éste con rabia gime, aquél suspira, pierden con el enojo la memoria, pues sin echar de ver que traen espadas, a bocados se ofenden y a puñadas. 127 A sacar las espadas, el tebano (428) medido hubiera ya la tierra dura: muriera al fin por enemiga mano, que fuera menos mal y desventura; fuera al menos llorado de su hermano, y aun vengara su muerte por ventura; mas la maldad del enemigo hado para más triste fin lo ha reservado. 128 Al estruendo a tal hora nunca oído, (431) que retumbaba en el soberbio techo, no menos admirado que ofendido, pide el rey lumbre y desocupa el lecho. Hallóle recordado el gran ruido, que un cuidado inmortal, que se había hecho de su memoria y de sus ojos dueño, le ahuyentaba el deseado sueño. 129 Las puertas abre, y con antorchas luego (435) por el alto palacio discurriendo, de los que perturbaron su sosiego el miserable estrago estuvo viendo; encendidos en rabia, en ira, en fuego, dos furias infernales (¡caso horrendo!), monstruos de sangre llenos y furiosos, desgarrados los rostros y espantosos. 130 «¿Qué ocasión, oh extranjeros -dijo- ha sido (438) bastante a tal furor, a ira tan loca? Que no sois de Argos, pues me habéis tenido poco respeto y reverencia poca; pero decid de dónde habéis venido, quién sois, adónde vais y qué os provoca a usurparle a la noche su derecho, para el reposo de los hombres hecho. 131 »¿Es tan pequeño por ventura el día, (442) y el sueño y breve paz tan triste cosa, que en las tinieblas de la noche fría derramáis sangre ilustre y preciosa? tal imagino que es, que no se cría tal valor sino en sangre generosa, 640 y en la que habéis vertido me parece que una oculta grandeza resplandece.» 132 »Oh príncipe, el mejor del pueblo aqueo, (447) ya ves que nuestra sangre el suelo baña, ¿qué importará saber el caso feo, si enojo de algún dios nos acompaña?» Esto responden ambos; y Tideo, deseando consuelo en tanta saña, mirando al noble rey con rostro fijo, ya más humilde y suspirando, dijo: 133 »Del reino y campos fértiles que riega (452) Aqueloo calidonio, aquí he venido, donde el error de aquesta noche ciega por extraña desgracia me ha traido; y éste, lleno de rabia, a quien se entrega, la posada común me ha prohibido, no sé con qué derecho o con qué fuero, si no es decir que aquí llegó primero. 134 »Aunque fieros y de ánimo impaciente, (457) juntos ya los Centauros se albergaron, y los bravos cíclopes, si no miente la fama, en Etna juntos habitaron, tal vez rabiosas fieras juntamente en la secreta cueva se hallaron; y éste la común cama de la tierra quiere estorbarme con funesta guerra. 135 »Pero ¿qué me detengo? Hoy de mi muerte, (461) quienquiera que eres, triunfarás ufano si no ha embotado la enemiga suerte el antiguo valor de aquesta mano; verás que soy del tronco de Eneo fuerte generoso renuevo, y que no en vano el dios Marte es mi abuelo verdadero, ya que de su valor no degenero.» 136 «Yo, respondió también, ¿qué me detengo, (465) escuchando arrogancia tal a un hombre? que no de sangre tan humilde vengo, que de la tuya y de tu honor me asombre; tronco también de que preciarme tengo.» dijo; mas de su padre calló el nombre, que pudo de su error la infamia y mengua, al pronunciarlo, enmudecer la lengua. 641 137 »Antes, dijo el rey noble, oh caballeros, (467) a quien ira o virtud demasiada encendió de los pechos los aceros o el rigor de la noche no esperada, cesen las amenazas y los fieros, y entrad ambos conmigo en mi morada; juntad las diestras, que tras ira tanta, nobles prendas serán de amistad santa. 138 »Tal vez se ha visto ya de un odio inmenso (471) una inmensa amistad haber nacido, no sin misterio me tenéis suspenso, que algún Dios a mi casa os ha traido; que de un amor inseparable pienso ira tan grande el fundamento ha sido, y que siempre del caso la memoria aumentará de la amistad la gloria.» 139 Llenas de verdadera profecía (473) del viejo sabio las palabras fueron, porque después de aquella noche fría tanta amistad se dice que tuvieron, que no del Quersoneso en la porfía muestras mayores de amistad se vieron entre Orestes y Pilades, ni creo fue tal la de Perito con Teseo. 140 Con esto cada cual menos airado, (478) aquel furor, mas no del todo, deja, cual suele cuando Bóreas enojado con brava tempestad el mar aqueja, que aunque ya su rigor ha mitigado, al despedirse entre las velas deja, después de su furor soberbio y loco, viento fácil, que muere poco a poco. 141 Entrambos, pues, siguiendo al rey han ido (482) al real palacio, que el alcázar era, donde el talle, las armas y el vestido de ambos despacio Adrasto considera. cubre al uno de un fiero león temido el gran despojo, vestidura fiera que horrible a cada lado está pendiendo, inculta selva del cabello horrendo. 142 Era aqueste despojo horrible y feo (485) del león a quien Hércules dio muerte 642 de Teumeso en la selva, y por trofeo cubrió siempre con él el pecho fuerte hasta que, dando muerte al cleoneo, trocó el despojo y mejoró la suerte, y en el primero sucedió el tebano, con que espantoso se mostró y ufano. 143 Y cerdosa piel del otro era el vestido, (488) con que apenas cubrir los hombros pudo, de un fiero jabalí que, retorcido, muestra en cada mejilla el diente agudo; fue en Calidonia en grande honor tenido, y por blasón de su real escudo lo heredó con el reino el padre Eneo, de que arrogante se vistió Tideo. 144 Al punto el noble rey, lleno de espanto, (490) conoce del oráculo divino la verdadera voz que temió tanto, que ya lloró el rigor de su destino; trueca su pena y su pasado llanto en un horror alegre y peregrino, que por sus miembros presuroso vuela, y al pronunciar la voz la lengua hiela. 145 Siente que no sin orden han venido (494) del cielo y de sus dioses soberanos los dos yernos que Apolo ha prometido con nombre de dos monstruos inhumanos estuvo un grande rato enmudecido, y al fin, alzando al cielo entrambas manos, rompiendo aquel silencio tan prolijo lleno de admiración, aquesto dijo: 146 «Noche, que abrazas en tus sombras frías (498) del cielo y de la tierra las fatigas, que con ligero movimiento guías estrellas vagas, de inquietud amigas, y a los mortales tu reposo envías, alivio en sus congojas enemigas, en tanto que el dorado carro suyo lleva, huyendo el Sol del negro tuyo. 147 »Noche, a cuya deidad están sujetos (502) los misterios de Apolo soberano, que aclaras de su enigma los efetos y pones fe en su voz, buscada en vano; 643 tú que del hado antiguo los secretos que no pudo alcanzar ingenio humano sola descubres, antes que te alejes tus agüeros confirma y no me dejes. 148 »Será en aquesta casa eternamente (505) cada año tu memoria respetada, y será tu deidad de gente en gente con mil honras y fiestas celebrada; por ti cada año el toro más valiente dejará suspirando su manada, y siempre nueva leche, si hoy me amparas, y ofrenda negra quemaré en tus aras. 149 »Salve, caverna y voz irrevocable, (509) antigua fe y oráculo divino, y tú también, fortuna variable, que el rigor has trocado del destino.» aquesto dijo el viejo venerable, y luego con los dos guerreros vino, habiendo a cada cual la mano dado a un aposento oculto y retirado. 150 El fuego en un altar aún todavía (514) guardado entre cenizas, vivo estaba, y una ofrenda que en él ardido había, no gastada del todo aún, humeaba, y aunque ya el carro de la noche fría de la mitad del curso declinaba, renovar el banquete manda luego, de nuevo olor enriqueciendo el fuego. 151 Al punto, con un gusto extraordinario, (515) cada ministro alegre y diligente acude a prevenir lo necesario a tanta fiesta y majestad decente: el gran palacio con tumulto vario a cada parte resonar se siente; quién previene las mesas, que es su oficio; quién la comida y quién el sacrificio. 152 Cuál la víctima ofrece al santo fuego, (518) que otro ya de oloroso cedro enciende, cual acude después, y al humo ciego con vario olor enriquecer pretende; éste las mesas pone y otro luego tapetes de oro y seda encima tiende: 644 en el aparador otro previene rica vajilla, que a su cargo tiene. 153 Los lechos otro en tanto aderezando, (520) colchas tiende con oro recamadas: otro, la noche negra ahuyentando, bálsamo enciende en lámparas doradas de las muertas ovejas otro asando las entrañas está ya desangradas; éste va, viene aquél, el otro torna, otro de blanco pan la mesa adorna. 154 Alegre el noble rey, que obedecido (524) con tanta diligencia ve su intento, venerable de rostro y de vestido, ocupa de marfil un rico asiento; los huéspedes también, que ya habían sido curados con precioso y rico ungüento, limpios de tanta sangre, se sentaron, y del rey ambos lados ocuparon 155 Mírase el uno al otro, y satisfecho (527) del gran valor que a cada cual admira, perdonan los agravios que se han hecho, convirtiendo en amor la mortal ira; crece la gloria en el piadoso pecho del noble rey, que su concordia mira, y porque su esperanza efecto tenga, manda que Acastes a la mesa venga. 156 Era una vieja sabia, que criaba (530) sus hijas con cuidado y santo celo, y su sagrada honestidad guardaba a los esposos que les diese el cielo; viniendo, pues, adonde Adrasto estaba, lleno sin esperarlo, de consuelo que al oído lo que el rey le ordena, y vuelve atrás, de nueva gloria llena. 157 Al punto con primor y con presteza, (533) porque a su rey obedecer desea, de honestas galas, llenas de riqueza, las infantas bellísimas arrea con ellas viene luego, y su belleza con tanta honestidad se hermosea, que a los ojos de todos (¡raro ejemplo!) diosas parecen, y el palacio templo. 645 158 Si ojo mortal a Palas y a Diana (535) alguna vez acaso vio en la tierra ésta de Apolo cazadora hermana persiguiendo las fieras de la sierra, con lanza aquélla y con escudo ufana, bella diosa abogada de la guerra, fuera de aquel terror que tienen ellas, tales pienso que son las dos doncellas. 159 Con simple honestidad, luego que vieron (537) que eran de los dos huéspedes miradas, ya pálidas, ya rojas se pusieron, de una vergüenza nueva salteadas; los ojos a su padre revolvieron, vergonzosas, humildes y turbadas, y en tanto que se da fin a la cena, esperan lo que el padre les ordena. 160 Vencida ya la hambre, el rey aqueo (539) pide una rica taza, dedicada para los ministerios de Lieo y de varias figuras adornada; de Dánao fue y del viejo Foroneo en tales sacrificios siempre usada, hecha con tal primor y tal decoro que vence en ella el artificio al oro. 161 Caballo alado, volador ligero, (543) en ella está rompiendo el aire vano, regido de un osado caballero, con la cabeza de Medusa ufano: tan al vivo se ve, que el monstruo fiero, lánguido, ensangrentando el verde llano, con graves ojos, el color perdiendo, parece que en el oro esta muriendo. 162 El cazador troyano arrebatado (548) también se ve de un águila ligera, y monteros y perros, que han quedado atónitos, mirando al ave fiera: uno ladra a las nubes enojado, otro sigue a la sombra y no le espera; al vivo todo y tal, que parecía que Ida se abaja y Troya se desvía. 163 La taza rica de figuras tales (552) corona el rey de vino generoso, 646 invocando a los dioses inmortales, pero primero a Febo poderoso; con himnos y alabanzas celestiales a Febo, a Febo invoca el rey piadoso; «Febo», responden todos, coronados con ramos de laurel, de Febo amados. 164 Era de Febo aquel alegre día (555) a él dedicado en todo el reino aqueo, y así honrando a su nombre, enriquecía el fuego de su altar humo sabeo. «La causa, dijo el rey, de esta alegría ya por ventura os pedirá el deseo, viendo con tanta fiesta y placer tanto a Febo celebrar el nombre santo. 165 »Sabed pues, oh mancebos, que no han sido (559) aquestos sacrificios comenzados (sin que bastantes causas haya habido), de santa religión aconsejados; mil desventuras son que ha padecido el pueblo argivo en años ya pasados, de aqueste sacrificio el fundamento: atentos escuchad, y os diré el cuento. 166 »El gran Pitón el mundo amenazaba, (562) bestia fiera, engendrada de la Tierra, que a Delfos con sus roscas rodeaba, haciendo a la ciudad y al campo guerra; la gente y ganado ahuyentaba, no hay seguro lugar en llano o sierra, pues cubierto de escama y dura concha, derriba muros y arboledas troncha. 167 »Si alguna vez alimentar quería (565) a la insaciable sed de su veneno, no de Castalia la corriente fría bastante era a henchir el ancho seno; toda con lenguas tres se la bebía asolándole en pago el sitio ameno; mas no sufriendo Apolo aquesta injuria, osó oponerse sólo a tanta furia. 168 »Con una y otra flecha al monstruo hiere, (567) que su concha y rigor no le aprovecha; apúntale primero, y donde quiere la jara voladora va derecha; 647 vacía toda el aljaba, el monstruo muere, llegando al corazón más de una flecha; tiéndese al fin vencido por su mano, ocupando de Cirra todo el llano. 169 »Apenas tuvo muerto al monstruo fiero, (569) cuando tomando de Argos el camino, de nuestro rey Crotopo el rubio arquero al no rico palacio a parar vino: tenía una sola hija el rey Severo, de hermosura y ejemplo peregrino, ya de perfecta edad, pero doncella, honesta por extremo como bella. 170 »Dichosa si de Febo nunca fuera (573) para tanta desdicha conocida, y de su amor y hurtos no tuviera tanta noticia a costa de su vida. Febo, pues, de Nemeo en la ribera gozó la flor, en vano defendida; forzó su honestidad, venció su llanto, y ofendió el hospedaje sacrosanto. 171 »Con lágrimas y ruegos importuna (576) se rindió, ya cansada, a su porfía, que mal pudiera haber defensa alguna bastante a resistir tanta osadía; y va que nueva luz la blanca Luna diez veces en sus cuernos visto había, acudiendo Lucina al grande aprieto, parió a luz a Latona un bello nieto. 172 »Temiendo de su padre la ira insana, (578) de quien en tal error nunca alcanzara perdón, por ser en él disculpa vana aunque de un dios la fuerza le halagara, sigue los ejercicios de Diana, clavando ya con voladora jara al ciervo vividor que va volando, ya engaños a las aves fabricando. 173 »Y por cubrir mejor su desventura (580) el niño dio a un pastor secretamente para que lo criase en la espesura, entre el ganado, oculto de la gente. ¡Oh fortuna enemiga, oh suerte dura! ¡Bello hijo del Sol, niño inocente, 648 que entre los cabritillos resplandeces, y apenas has nacido ya padeces! 174 »No tuvo lino en desventura tanta (583) que le defienda del calor paterno; desnudo en cama vil, humilde planta con hojas le cubrió su cuerpo tierno; bala el ganado humilde y no se espanta, sujeto a suerte igual e igual gobierno; crece con él al fin, y en su bajeza su cuna fue de un tronco la corteza. 175 »Goza albergue común con el ganado, (585) y al son de una zampoña, en lecho duro le halla el blando sueño descuidado, en tanta desventura aun no seguro; que la maldad del enemigo hado, por dar triste principio al mal futuro, no pudiendo a mas mengua derribarlo, de aquel pequeño bien quiso privarlo. 176 »Dejado a solas temerariamente, (587) estaba entre unos céspedes durmiendo, la boca abierta al sol, que su mal siente, en ella el aire fresco recibiendo: dieron perros en él con rabia ardiente, y antes que recordase al grande estruendo, con la insaciable hambre que traían medio vivo en sus vientres lo tenían. 177 »A la infanta afligida el nuevo espanto (590) de aquesta dura nueva echó del pecho la vergüenza y temor, que en dolor tanto no hubo consuelo alguno de provecho; baña la tierra con prolijo llanto, hiere con voces el paterno techo, y llena de furor, buscando al padre, su error confiesa la infelice madre. 178 »No se movió a piedad, aunque pudiera (594) una roca mover helada y dura y ablandar las entrañas de una fiera tanto dolor y tanta hermosura. Con injusto rigor manda que muera, aunque ella, en tanto mal y desventura, también la muerte elige, que la muerte sola podrá acabar su dolor fuerte. 649 179 »Tarde se movió Apolo a la defensa, (596) aunque turbó el dolor su luz serena; mas ya el castigo de su agravio piensa, vano consuelo para tanta pena. Un monstruo horrendo de crueldad inmensa de Flegetón en la abrasada arena, de un demonio engendrado y de una furia, vino a la tierra a castigar su injuria. 180 »El rostro y pecho de mujer tenía, (598) pero con un eterno silbo horrendo, una culebra en su cerviz nacía, al rostro sus cabellos esparciendo; en el silencio de la noche fría, cuando va todo el mundo está durmiendo, este monstruo infernal, fiero y horrible, entraba en nuestras casas invisible. 181 »El niño tierno, que durmiendo estaba, (602) recién nacido en el materno seno, con terrible furor arrebataba. y de él alimentaba su veneno; con hambre eterna allí se lo tragaba, dejando de su sangre el lecho lleno; llora la madre triste en dolor tanto, y el monstruo fiero engorda con su llanto. 182 »Viendo el daño común y la ruina (605) del pueblo argivo, en lágrimas bañado, a morir o vengar lo determina Corebo, un noble caballero osado; y cuando ya la noche se avecina. consigo algunos mozos ha juntado, amigos de morir o ganar fama, cuando el peligro o la ocasión los llama. 183 »Y estando ya la gente sosegada, (608) de armas y de valor apercibido, cerca la ciudad triste y desdichada, con gran secreto y sin hacer ruido. Buscando, al fin, en una encrucijada, de dos niños cargado al monstruo vido, hincando ya las uñas y los dientes en los recién nacidos inocentes. 184 »Al punto, de los suyos rodeado, (612) al monstruo arremetió en el paso estrecho, 650 de un asta veloz que le ha tirado el hierro todo le escondió en el pecho; y habiendo al triste corazón hallado, para aposento de la vida hecho, la puerta al alma fugitiva abriendo, restituyó a Plutón su monstruo horrendo. 185 »La fama pregonera vuela al punto, (616) hierven las calles con alegre espanto, que nunca tanto vulgo se vio junto, ni en Argos vimos regocijo tanto: salen a ver el monstruo ya difunto, principal ocasión de nuestro llanto, y tal era el temor de sus enojos. que apenas tienen crédito los ojos. 186 »No libre aun de temor la gente, mira (619) los colmillos, el vientre, el pecho y boca, y aquel extraño horror (que aun muerto admira) al más cobarde a más furor provoca; muestra en un muerto el vulgo mortal ira, en tan grande dolor venganza poca, y ninguno se tiene por honrado si no llega a herir el monstruo helado. 187 »El monstruo, de Aqueronte en las riberas (623) engendrado, en el campo se dejaron: mas ni el lobo hambriento ni otras fieras su rabia y hambre en él alimentaron. Huyeron de él las aves carniceras, con miedo extraño al derredor ladraron los perros, que sintiendo su veneno, a su hambre y su furor pusieron freno. 188 »No en aquesto paró la desventura, (627) pues de ella otra desdicha nació inmensa a la ciudad del monstruo aun no segura, que ya aliviarse en sus trabajos piensa; que Febo con mayor rigor procura vengar al que tan bien vengó su ofensa, y desde la alta cumbre de Parnaso dió infelice principio al duro caso. 189 »A la ciudad, al campo, al llano y sierra (629-633) flechas tiró que el aire inficionaron; mueren hombres y fieras. y a la tierra nieblas, de muerte llenas, ocuparon; 651 igualmente la muerte hace la guerra, las parcas sus estambres le entregaron, y ella desplegó en Argos sus banderas al triste son de quejas lastimeras. 190 »Primero los humildes animales (-) a sentir comenzaron la inclemencia del crudo mal, y en cuerpos desiguales igual fuerza mostró la pestilencia. Muere el perro fiel en los umbrales del amo, que, ignorando la violencia de aquel veneno que invisible hiere, lo llega a halagar y con él muere. 191 »El soberbio animal, que ya se vido (-) argentando de espuma el rico freno, el cuello humilde ya gime herido con fuerza oculta de mortal veneno; el pajarillo que al amado nido vuelve alegre, de cebo el pico lleno, rendido en la mitad de su camino, flojas las alas, a la tierra vino. 192 »Humilde el jabalí terrible y fiero (-) el pecho ofrece al cazador osado, y cuando llega el enemigo acero halla ya muerto el corazón helado; el ciervo, antiguo volador ligero, que en vano de los perros se ha escapado, rinde en el monte al fin la amada vida, con pie ligero en vano defendida. 193 »Tal vez al yugo unidos mansamente (-) tiraban dos novillos del arado y cayó el uno de ellos de repente sin acabar el surco comenzado; afloja la coyunda de su frente de presto el triste labrador, turbado y tímido del otro, y mal seguro descarga su cerviz del peso duro. 194 »Pues no porque el rigor de algún veneno (-) probó en tazas de vino coronadas o enemigo manjar, de muerte lleno, entre ricas comidas regaladas; su pasto fue la hierba y blando heno, aguas bebió entre peñas quebrantadas, 652 y por vivir en desdichado suelo probó el rigor del enojado cielo. 195 »Tal vez también la víctima escogida (-) por la mejor en toda la manada, cayendo en tierra muerta, aún no herida, del ministro burló la mano alzada. La malicia del mal ya conocida en la ciudad renueva desdichada tristes quejas y lágrimas, que en vano la gente ofrece al cielo soberano. 196 »De cuerpos no enterrados se ven llenas (-) las calles y del monte la espesura, que en pueblo y campo ofrece iguales penas en suerte desigual la desventura. Tanta es al fin la mortandad que apenas bastante es para tanta sepultura todo el suelo que ve nuestro horizonte, ni para tanto fuego todo el monte. 197 »Riñen por los sepulcros no ocupados (-) los pocos vivos que la muerte esperan y otros en los sepulcros heredados se encierran a morir antes que mueran. Si al fuego son algunos entregados, ni parientes ni amigos hay que quieran llevar al venerable monumento las cenizas, que al fin se lleva el viento. 198 »Tal de un muerto atizaba el santo fuego, (-) de religión y de clemencia lleno, y cayendo dio el último sosiego su infelice cuerpo en fuego ajeno. Lleno de espanto el vulgo, siembra luego un temor general, mortal veneno; huyen todos al fin, sin que allí quede quien su piedad y religión herede. 199 »Huye la madre triste y desdichada (-) del hijo y el hermano del hermano; huye el marido de la esposa amada, que, afligida, socorro pide en vano; doncella tierna, en vano recatada, descubre sin recato al cirujano (desnudo el cuerpo honesto) flor hermosa que ya marchita estrella rigurosa. 653 200 »Ríndese el arte al mal y sin provecho (-) los remedios se ven y la experiencia, que más ofende en ésta lo que ha hecho que algún efecto en otra pestilencia. Del sénico mortal que esconde el pecho señales da del rostro la apariencia, que encendido color en él resulta del fuego que está ardiendo en parte oculta. 201 »Crece en el pecho el ávido elemento, (-) enciéndese la sangre en cada vena, da el pulmón y recibe poco aliento, vese la lengua de vejigas llena; la boca, abierta siempre al fresco viento, de él refrigerio espera en tanta pena, y más la enciende el aire, porque luego, mudando calidad, se vuelve en fuego. 202 »Nunca sin escuchar funesto llanto (-) al mundo amaneció sereno día, ni en la tierra tendió jamás su manto que no oyese gemir la noche fría. No con tanto rigor el cielo santo castigue gente religiosa y pía; use de otros azotes y castigos, padezcan tanto mal los enemigos. 203 »Viendo el rigor del mal contagioso, (-) ricas prendas da al fuego la justicia antes que el heredero, codicioso del mal, herede en ellas la malicia; triunfa de todo el fuego poderoso, puede más el temor que la avaricia, pues nadie hay tan avaro que defienda del fuego y su rigor la mejor prenda. 204 »En vano el sabio, de experiencia lleno, (-) defensivos antídotos previene, que a la inclemencia del mortal veneno no hay diligencia alguna que refrene; y en mal tan grande, de remedio ajeno, pensando que el lugar la culpa tiene, no del autor de tanto mal se quejan, mas culpan el lugar y de él se alejan. 205 »Salen huyendo de él, y donde quiera (-) los sigue con rigor la suerte dura; 654 que no puede haber planta tan ligera que alcance no le dé la desventura. Dejan, huyendo de la muerte fiera, la ciudad convertida en sepultura, y hallan también llenos los desiertos de muertos animales y hombres muertos. 206 »El rey, de tantos males fatigado, (634) rey ya de muros y ciudad vacía de poco y triste pueblo acompañado, de Cirra visitó la fuente fría; y hecho el sacrificio acostumbrado remedio pide al que el azote envía o al menos, si el remedio es imposible descubra la ocasión del mal terrible. 207 »Responde el mismo Dios que en sacrificio (636) ofrezcan los que al monstruo muerte dieron, pues ellos con osado maleficio de tanta mortandad la causa fueron. ¡Oh mancebo animoso, a quien propicio fue siempre el cielo y sus deidades fueron, digno que en todo el mundo eternamente tu gran valor y tu piedad se cuente! 208 »No por ver que el oráculo responde (639) que él muera, se turbó, ni acobardado con ver la muerte tan cercana esconde las armas con que al monstruo muerte ha dado; antes entrando con valor a donde el santo altar está, con labio osado que a Febo a más furor mover pudiera desde el umbral habló de esta manera: 209 »-No vengo porque alguno acá me envía (643) a pedirte remedio para tantos males; no a aplacar tu rigor, si al fin se cría rigor tan grande en pechos celestiales; mi valor, mi virtud, la piedad mía me han forzado a venir a tus umbrales; que si libro a mi patria con mi muerte ¿qué mas bien pudo pretender mi suerte? 210 »Yo soy quien, dando muerte al monstruo horrible, (645) eché del mundo tu maldad y afrenta; que afrenta tuya fue, si ya es posible que un pecho celestial deshonra sienta; 655 por vengarlo con rigor terrible, que más tu infamia y tu maldad aumenta, con nubes que inficionan a la tierra a un inocente pueblo haces guerra. 211 »Si es tan amado un monstruo que parece (648) que más lo estima el soberano cielo que al humano linaje, pues perece y no hay piedad para el humilde suelo, Argos ¿qué mereció, que así padece? ¿qué culpa tiene en tanto desconsuelo? Yo, soberano Dios, yo solo he sido el que tanto rigor he merecido. 212 »¿Es tu deleite ver sin moradores (652) una insigne ciudad desamparada y mirar viuda ya de agricultores la tierra de ninguno cultivada? Pero ¿qué te detengo? Mis errores, mi atrevimiento y culpa confesada, mi muerte merecieron, y hablando, mi muerte estoy en vano dilatando. 213 »Ya las argivas madres en mi muerte (656) esperan su remedio, y cobardía podrán juzgar en mí si de esta suerte con mis palabras entretengo el día. Mueve ya el arco, y a este pecho fuerte flechas mortales de tu aljaba envía, y en ocasión tan noble y tan piadosa salga del pecho el alma victoriosa. 214 »No merece perdón mi atrevimiento, (659) pues de tan grande mal la causa ha sido; la nueva gloria que en mi muerte siento es lo que mi piedad ha merecido. Aqueste globo que inficiona el viento, vapor mortal sobre Argos detenido, sólo que aparte de mi patria ruego, pues yo por su salud la vida entrego.- 215 »¡Oh, cuánto un pecho noble y virtud rara, (662) no fingido valor, estima el cielo! Pues Febo en sus enojos no repara, viendo en Corebo aquel piadoso celo la vida le otorgue y el aire aclara, purga el contagio que asolaba el suelo, 656 y a Argos alegre se volvió Corebo, lleno de admiración dejando a Febo. 216 »Desde entonces cada año celebramos (666) la memoria de aqueste beneficio, y con alegre fiesta renovamos la cena y el solemne sacrificio donde con nuevas honras aplacamos a Febo porque siempre esté propicio y esta, por dicha, la ocasión ha sido que a esta tierra a tal tiempo os ha traido. 217 »Decid quién sois, pues muerta ya la saña (671) en vuestros pechos generosos veo, aunque, si la memoria no me engaña, vos descendéis del calidonio Eneo; y vos, puesto que sois de tierra extraña, quién sois y a qué venís saber deseo, ya que es esta hora, al levantar de cena, para gastarla en varios cuentos buena.» 218 Aquesto apenas escuchó el tebano, (673) cuando los ojos en la tierra dura, lleno de miedo y de vergüenza, en vano callar su infamia y su dolor procura; pero viendo que ya no está en su mano encubrir su pesar y desventura, venciendo su temor y su vergüenza, mirando al calidonio, así comienza: 219 »No en fiestas de tan grande reverencia, (676) en tan alegre y tan solemne día se debiera contar mi descendencia, mi sangre, antiguo tronco y patria mía; mas pues es tan forzosa la obediencia, porque menos se ofenda la alegría y el honor de estas honras celestiales, con brevedad os contaré mis males, 220 »Origen y principio de mi casta (679) Cadmo, de Tiro desterrado, ha sido; Tebas mi patria, y me parió Yocasta, si ya acaso su nombre habéis sabido.» «No más, respondió Adrasto; aquesto basta, que no a nuestras orejas ha venido tan dudosa la fama y sus rumores, que ignoremos de Tebas los errores. 657 221 »Los ojos arrojados en el suelo, (684) las furias, de ese reino el llanto y pena, ¿Qué tierra los ignora en cuanto el cielo comunica su luz pura y serena, desde de Escitia el riguroso hielo hasta de Libia la abrasada arena, y desde el rubio Ganges hasta adonde el fugitivo Sol su carro esconde? 222 »Al fin, en Argos todo se ha sabido; (688) pero no os sea el contarlo tan amargo, pues los errores que otro ha cometido no los debéis poner a vuestro cargo; yerros también en nuestra sangre ha habido, que aun no puede borrar el tiempo largo; mas no de los abuelos la memoria a los nietos usurpa alguna gloria. 223 »La piedad, el valor y bondad vuestra (691) disculpe de los vuestros el pecado; que esta es obligación y deuda nuestra, pues no habemos sus culpas heredado; mas ya, flojo el timón, sin luz se muestra a los mortales el portero helado de la Osa fugitiva, y ya la Noche declina al Occidente el negro coche. 224 »Por tanto, los cantares renovemos (694) de Febo, en quien ponemos la esperanza; nuestro conservador, por quien podemos no temer de los hados la mudanza. Vino en el fuego santo derramemos, y mientras yo pronuncio su alabanza el vino derramando en sus altares, mis voces repetid y mis cantares: 225 »Febo, ya estés de nieve rodeado (696) de Licia en el collado Patareo; ya en Troya, do serviste al rey osado y donde el mundo te llamó Timbreo; ya en el materno Cintio levantado, que cubre con su sombra el mar Egeo, o ya de tu Castalia en la corriente, pues no Delo te agrada solamente; 226 »¡Oh tú, que de enemigos victorioso (701) con flechas de tu aljaba siempre fuiste, 658 y por favor el cielo piadoso de eternas flores tus mejillas viste; tú, que a pesar del hado, el fin dudoso presente ves cual lo pasado viste, y antes que vengan sabes sus efetos, y de Júpiter sabes los secretos; 227 »tú, que sabes del hilo de la vida (706) cuándo han de echar las Parcas la tijera, cual año es de cosecha más florida, cuál reino apunta la cometa fiera; no vio Marsias tu citara vencida, ni tu madre el castigo en Ticio espera que en su honor y en venganza del delito extiendes en la arena de Cocito; 228 »Tu siempre victoriosa armada mano (711) dió la muerte a Pitón, y a la tebana soberbia madre, orgullecida en vano, castigo justo a su jactancia insana, porque abrasó tu templo soberano, Megera aflige, en tu venganza ufana, a Flegia, ayuno siempre en mesa llena, donde es mayor la hambre que su pena. 229 »Ten en memoria siempre, oh Sol piadoso, (715) este palacio tuyo, que algún día te sirvió de hospedaje venturoso, honra que lo ennoblece todavía; con rostro alegre y con amor piadoso a estos campos de Juno amparo envía, flechero poderoso, Apolo santo que en tierra, infierno y cielo puedes tanto. 230 »0 rosado Titán llamarte quieras, (717) cual de Aquemenia te llamó la gente u Osiris, cual de Nilo en las riberas te llaman los que beben su corriente. O cual de Persia entre las gentes fieras que adoran por su dios tu llama ardiente, te llames Mitra, y con rigor eterno tuerzas del toro el indomable cuerno.»
Libro II Argumento Mercurio saca el ánima de Layo del infierno por una senda del monte Ténaro, que es promontorio de Laconia. Llega a Tebas hasta el palacio del rey Eteocle, que está durmiendo, y tomando Layo la forma de Tiresias, adivino, le amonesta que se arme contra su hermano y resista a la pretensión que trae del reino. Adrasto en Argos ofrece sus dos hijas en casamiento a Polinice y Tideo. Celébranse los desposorios de Polinice con Argía y de Tideo con Deífile, y entrando en el templo de Minerva se manifestaron ciertos agüeros desgraciados, de que fue causa el collar de Harmonía, que llevaba puesto Argía. Píntanse los efectos y origen de este collar. Después de acabadas las fiestas, Polinice, con deseo de reinar, platica con Argía y su pretensión, y aunque ella se lo estorba, se resuelve en ello y de pedir el reino a su hermano; y con parecer de Adrasto y su consejo sale Tideo con esta embajada. Siendo mal recibido y negada su pretensión, se vuelve amenazado de guerra a Tebas. Eteocles manda que le salgan a matar cincuenta soldados de noche. Hacen la emboscada junto a la peña de Esfinge, donde le acometieron. Tideo los vence a todos, quedando sólo Meonte, adivino, el cual lleva las nuevas a Tebas, y Tideo, alegre de su victoria, cuelga todos los despojos de una encina, y canta un himno en alabanza de Minerva, a quien lo dedica.
1 Llevando del gran Jove el mandamiento 1 de Maya el hijo alado, deja en tanto las sombras y lugares del tormento, lleno de horror, de confusión y llanto 663 donde un inficionado y triste viento, que del callado reino del espanto nace, sopla en sus alas flojamente que céfiro jamás allí se siente. 2 De nubes perezosas rodeado, 5 no ya tan presuroso el paso mueve; que un húmedo vapor turbio y helado humor pesado entre sus alas llueve; ya estorba su camino comenzado Estige, que humedece campos nueve, y ya, arrojando llamas de sus senos, Cocito y Flegetón, de espanto llenos. 3 Sigue tras de él la sombra temerosa 7 del viejo rey tebano, aun todavía por su antigua herida perezosa, por quien dolor eterno padecía desde que con espada rigurosa su hijo mismo aquel infausto día la vida le quitó, con cuya injuria sufrió de Tesifón la primer furia. 4 Va al fin, y del alado mensajero 11 la vara el paso débil le ha alentado; déjase atrás el bosque horrible y fiero, sólo de tristes almas habitado y en ver que vuelve al mundo tan ligero, el mismo bosque se quedó pasmado, y la tierra, que abierta atrás se deja, se admira en verse tal y que el se aleja. 5 La Envidia, aun entre muertos atrevida, 14 sembró entre aquellas sombras su veneno; que envidiosas miraban su salida las tristes almas del tartáreo seno; y alguno, que viviendo en esta vida le afligió el corazón el bien ajeno, de envidia lleno, suspirando en vano, dijo a la sombra así del rey tebano: 6 «Ve, sombra venturosa, o ya llamada 19 del mismo Jove soberano seas, o vengativa Erinis, enojada te apremie a que la luz del cielo veas, o ya de sus conjuros ayudada, tésala maga, con palabras feas 664 del sepulcro te saque, venturosa; que al fin verás del Sol la luz hermosa. 7 »Vuelve dichosa a ver del santo cielo 23 las estrellas hermosas y regado de puras fuentes el alegre suelo, de bellísimas flores matizado; mas poco gozarás de ese consuelo: que al fin, del mundo en vano deseado, volverás a vivir en llanto eterno entre aquestas tinieblas del infierno.» 8 Llegando ya a las puertas infernales, 26 sus pasos siente el velador Cerbero, que de la ciega puerta en los umbrales estaba recostado, horrible y fiero. Ladrando, lleno de iras inmortales, tres bocas abre el infernal portero, tres negros cuellos alza, el pelo eriza y al pueblo que va a entrar atemoriza. 9 Los huesos esparcidos por la tierra 29 de humanos cuerpos trilla con estruendo; pero Mercurio aquel furor destierra tocando con la vara al monstruo horrendo, tres cuellos inclinó, seis ojos cierra, tres lenguas enmudece y no pudiendo al sueño resistir, que ya le oprime en lugar de ladrar, durmiendo gime. 10 Hay un monte de altura no creída, 32 que Ténaro llamó la gente griega donde Malea espumosa su temida cumbre, de nadie vista, al cielo entrega; nunca de aguas o vientos ofendida que nunca el agua o viento al cielo llega; y así mira sereno el monte exento llover las nubes y bramar el viento. 11 En su cumbre, de alguno no pisada, 37 descansa de luceros muchedumbre; los fatigados vientos su morada pusieron, mas abajo de su cumbre la falda está de nubes rodeada, por do pasan los rayos con su lumbre; no hay ave que a su cumbre haya subido ni aun llega allá de truenos el ruido. 665 12 Mas hacia donde el Sol, cuando declina 41 del monte sobre el mar la sombra alarga, y nadando parece que camina al paso que va el Sol, siempre más larga; en un seno que forma en la marina tan altas olas quiebran de agua amarga, que parece, aunque el puerto se las bebe, que a igualarlas el monte no se atreve. 13 Aquí, del mar Egeo fatigados, 45 (como en lugar oculto y más caliente), sus caballos sacar suele mojados el gran rector del húmedo tridente, caballos poderosos y alentados en brazos, en cabeza, en pecho y frente, y desde el medio cuerpo al fin postrero peces de escama y conchas como acero. 14 De aquí es fama que va al tartáreo seno 48 un oculto camino no pisado lugar de sombras amarillas lleno, de espíritus desnudos ocupado, donde labran las furias su veneno: y Plutón, que estos reinos ha heredado, ve llenos sus alcázares vacíos de negros y funestos atavíos. 15 Mil veces del infierno los clamores, 50 en medio de estos campos se han oído, si dicen la verdad los labradores de Arcadia, de quien esto se ha sabido; los gemidos de penas y dolores de las furias las voces y el ruido en medio oyeron del sereno día y en el silencio de la noche fría. 16 Muchos, que los ladridos escucharon 53 del triforme infernal portero airado, huyeron los gañanes, y dejaron los bueyes en el campo y el arado; por aquí, pues al mundo al fin llegaron el rey de Tebas con el Dios alado las nubes del infierno sacudiendo, obscuras sombras que le van siguiendo. 17 Con vivos aires del alegre suelo 57 serena el rostro, y mueve presuroso, 666 con el silencio de la Luna, el vuelo por medio del Arturo perezoso: lleno de olvido y sin ningún recelo encontró con el Sueño poderoso, que echado flojamente en negro coche, llevaba los caballos de la Noche. 18 Al punto se levanta, y bostezando, 60 el carro aparta, y con honor divino reverencia a Mercurio y en pasando, vuelve a acostarse y sigue su camino; tras del alado Dios pasa volando el rey tebano, al suelo mas vecino, mirando de los cielos las estrellas, y su principio conociendo en ellas. 19 Deja atrás la alta Cirra levantada, 63 y con dolor en Fócida suspira, viendo que de la sangre está manchada de su cuerpo, que aun no enterrado mira, al fin, de Tebas llega a su morada, y luego el paso del umbral retira, reacio, por no entrar con mil gemidos donde están sus penates conocidos. 20 Al fin entró, mas luego que colgado 67 vio su famoso arnés, y en su presencia su carro, aún con su sangre matizado, aquí perdió del todo la paciencia; turbado vuelve atrás, tan enojado, que apenas resistió tanta licencia la vara que a Mercurio abre el camino ni el mandato de Júpiter divino. 21 La fiesta acaso entonces había sido 71 a Baco dedicada desde el día que Júpiter el hijo, aún no nacido, al muslo suyo trasladado había y así, el pueblo tebano entretenido, gastaba, sin dormir, la noche fría en regocijos de uno y otro juego rompiendo su silencio y su sosiego. 22 Coros del pueblo alegre, derramados 75 por calles, plazas, campos, fuentes, ríos se ven a cada paso recostados entre frascos de vino ya vacíos; 667 llenos del dulce Baco, y ya cansados de vencer en su honor mil desafíos, tendidos, descuidados y anhelando, por todo el cuerpo al mismo dios sudando. 23 àyense de zampoñas los acentos, 77 música sólo usada en fiestas tales y de liso metal mil instrumentos que vencen sonorosos atabales, ofrece el Citerón frescos asientos a las tebanas madres bacanales, que discurren por él más sosegadas. de vino más doncel embriagadas. 24 Tales de Osa en los valles se hallaron, 81 o en Ródope nevado, los bistones cuando en grande concurso se juntaron a algún banquete en varias ocasiones, para el cual de la boca arrebataron medio vivo el manjar a los leones, usando por bebida regalada sangre con nueva leche aderezada. 25 Pero si Baco enciende con su fuego 85 alguna vez sus pechos inhumanos, volar tazas y piedras se ven luego y sangre derramar de sus hermanos; y ya que han aplacado el furor ciego con ver sangrientas sus airadas manos, en la mesa de sangre humedecida, renuevan más alegres la comida. 26 En noche y ocasión de fiesta tanta, 89 en pueblo tan alegre y descuidado, entró el cilenio dios con libre planta del palacio real al rico estrado, en reverencia de la fiesta santa con tapetes de Asiria aderezado donde el rey, retirado de la gente, durmiendo estaba descuidadamente. 27 Oh ciego y torpe entendimiento humano, 92 y de sus hados ignorante y rudo. Que sin recato alguno está ¡qué ufano!, pues que puede dormir y comer pudo, la sombra, pues, del viejo rey tebano, contra sus nietos mensajero crudo, 668 el divino precepto obedeciendo, se llega adonde el rey esta durmiendo. 28 Y porque de sus males ignorante, 94 no imaginase, sepultado el vino que era, a sueño engañoso semejante, vana fantasma que a engañarle vino, la voz fingió, y sin ojos el semblante, del gran Tiresia, en Tebas adivino, no el pálido color ni barba cana, que ese él lo tuvo en su vejez anciana; 29 pero finge el ornato y la persona, 97 la venda a los cabellos rodeada, y de pálida oliva una corona siempre del viejo sacerdote usada; y como sacerdote que pregona de los hados la voz con lengua osada, parece que en el pecho un ramo ha puesto, que abre la boca y que pronuncia aquesto: 30 «No es tiempo de dormir, recuerda luego 102 ¡Oh flojo y descuidado rey tebano! que de la noche gastas el sosiego en el lecho, seguro de tu hermano. Deja ya el sueño perezoso y ciego; que ha mucho que te llama el hado insano. gran novedad te espera, y no lo sabes, grandes empresas y negocios graves. 31 »Y tú, como piloto descuidado, 105 que en medio del mar Jonio mal seguro, cuando más lo alborota el Austro airado en el cielo poniendo un velo obscuro, reposa y el timón deja olvidado, sin prevenir remedio al mal futuro ¿Tan descuidado duermes, olvidando las armas que te están amenazando? 32 »Tu hermano, según fama, ya insolente 108 del nuevo casamiento no esperado, fuerzas adquiere y apercibe gente para quitarte el reino deseado. ¿Quién se lo ha de estorbar, si osadamente, de tantos escuadrones rodeado, en la silla que pide, y tuya ha sido descansada vez se ha prometido? 669 33 »Su atrevimiento anima y su deseo 111 su fatal suegro, Adrasto poderoso, y la argiva nación, donde Himeneo le ha dado dote rico y venturoso. No esperanza menor le da Tideo de verle rey de Tebas, deseoso desde que de amistad le dio la mano, manchada con la sangre de su hermano. 34 »De aquesto sólo la ambición le viene, 114 que lejos ya del reino te destierra; mas el amor, y la piedad que tiene el padre de los dioses a esta tierra, porque su gran soberbia se refrene en el rigor de la vecina guerra, me manda a ti venir para que vivas recatado y con tiempo te apercibas. 35 »Del fiero hermano la ciudad defiende, 116 osa lo que ha de osar si a reinar llega; goza tú solo el reino que pretende, pues la codicia de reinar le ciega; y no a las redes que a tu vida tiende, no a sus engaños tu corona entrega, no sufras que de Cadmo en las almenas; a ser reina con él venga Micenas.» 36 Dijo; y porque mostraba ya marchita 120 su luz con la del Sol cada lucero, venda y corona de la frente quita y muestra ser su abuelo verdadero y echando, al parecer, sangre infinita por la herida que encubrió primero, sobre el dormido y descuidado pecho del nieto injusto, se acostó en el lecho. 37 Rómpese el sueño, y de sudor bañado 123-124 recuerda el rey, y con medrosa mano llega a tentarse el pecho no mojado, la vana sangre sacudiendo en vano; ya del abuelo huye alborotado, y ya buscando el enemigo hermano, 132-133 tal ira y rabia tal su pecho encierra, que ya quisiera comenzar la guerra. 38 Tal, si de cazadores el ruido 128-132 tigre parida oyó desde su cueva, 670 rabia, y el sueño torpe sacudido. las uñas templa y los colmillos prueba; y habiéndolos después acometido, medio vivo en la boca uno se lleva a ser, que nadie su furor resiste, de sus hijuelos alimento triste. 39 Ya del albergue de Titón saliendo, 134 ahuyentaba la tiniebla fría la Aurora, y todo el campo humedeciendo, los mojados cabellos sacudía: y tanto su beldad iba creciendo con la lumbre del Sol, que le seguía, que parece por todo el horizonte lleno de oro y rosas cada monte. 40 Con ella en un caballo perezoso, 137 cubierto de carbunclos de oro y grana sale el lucero alegre y amoroso, con su vista alegrando la mañana; y cuando ya del todo el Sol hermoso la luz prestada le quitó a su hermana, cubrió la alegre suya flojamente, las espaldas volviendo al rojo Oriente; 41 cuando de Talaón el hijo anciano 141 en Argos deja el perezoso lecho, y luego el calidonio y el tebano, alegre cada cual y satisfecho: que cansados de haber con dura mano el uno al otro mil agravios hecho, el Sueño, lleno de oportuno olvido. sobre ellos todo el cuerno había vertido. 42 Poco el argivo rey dormido había, 145 de un cuidado importuno fatigado, que siempre a la memoria le traía el hospedaje nuevo comenzado del cielo los misterios revolvía y el no esperado fin del libre hado; y así tuvo en su pecho poco abrigo el sueño, de cuidados enemigo. 43 Después que juntos otra vez se vieron, 148 habiendo con debida reverencia saludado al buen rey, los dos se dieron las manos otra vez en su presencia; 671 y al fin a un aposento oculto fueron, do suele el rey tener secreta audiencia, y habiéndose sentado el viejo sabio movió primero de esta suerte el labio: 44 «Nobles mancebos, a quien ha ofendido 152 el rigor de los vientos enojosos no la confusa noche os ha traido sin orden de los cielos poderosos; que Febo estos nublados ha movido, lluvias mezclando y rayos luminosos, porque el rigor de aquesta noche fuese la causa que a mis reinos os trajese. 45 »No en Grecia tan humilde soy, ni creo 156 que es tan poco mi nombre conocido, que ignore alguno en todo el reino aqueo cuántos mi parentesco han pretendido; que herederas del cetro que poseo dos hijas me dio el cielo que han crecido con favorable estrella, que asegura alegres nietos a mi edad madura. 46 »Cuánta su gravedad y cuánta sea 160 su honestidad, de hermosura llena, pudisteis ver (al padre no se crea) de aquesta noche en la pasada cena; de éstas el dulce tálamo desea el príncipe más rico, el rey que enfrena más pueblos y adquirió más heredades, más campos labra y goza más ciudades. 47 »Largo fuera contar del reino aqueo 163 cuantas madres por nueras las quisieron, y cuánto Evalio, príncipe, o fereo su casamiento en vano pretendieron; no tantos yernos despreció tu Eneo ni Enomao cruel, a quien hicieron suegro temido a mil competidores, sus pisanos caballos voladores. 48 »Pero no lo permite el libre hado 167 que rey de Elide o príncipe espartano aunque con mil industrias procurado, de este bien goce, pretendido en vano, sólo para vosotros ha guardado esta ventura el cielo soberano 672 que este reino, mi sangre, y más si puede, el orden de los hados os concede. 49 »Gracias doy a los dioses inmortales, 170 que sus respuestas han favorecido: pues no esperados a mi casa tales de sangre y de valor, habéis venido. aqueste bien de los pasados males el rigor de esta noche os ha adquirido, y esta de vuestra sangre derramada es la paga y merced no imaginada. 50 Ya que atentos y alegres escucharon, 173 en tanto que esto el noble rey hablaba, mudos el uno al otro se miraron por ver el responder a quién tocaba callando un breve espacio, porfiaron que aquel honor el uno al otro daba, y al fin Tideo en todo más osado esta respuesta al sabio rey ha dado: 51 «Oh cuán escaso, oh noble rey, te ha hecho 176 tu edad madura en pregonar tu fama! ¡Oh cuanto tu virtud doma en tu pecho la fortuna, que al cielo te encarama, aunque no es mi alabanza de provecho! ¿Que rey, en cuanto el sol su luz derrama, aventajarse a tu grandeza puede? ¿Quién en imperio y majestad te excede? 52 »Quién ignora en el mundo que tuviste 179 tu antiguo Sición, reino heredado donde querido de los tuyos fuiste y de los extranjeros respetado, hasta que a gobernar a Argos viniste pueblo siempre en el mal desenfrenado, donde tus leyes son freno seguro, que en paz gobierna siempre el pueblo duro? 53 »Y ya pluguiera al cielo sacrosanto 181 que sólo rey de toda Grecia fueras, y que del Istmo gobernaras cuanto junta y aparta el mar con dos riberas que no Micenas se infamara tanto ni al Sol huyendo de ella visto hubieras ni estuviera manchada, horrible y fea con tanta sangre la campaña Elea. 673 54 »Ni otro algún reino hubiera padecido 186 el rigor de las furias inhumano. como, mejor que yo, puede haber sido testigo el noble príncipe tebano, con alma al fin y pecho agradecido oh sabio rey, ponemos en tu mano la voluntad, que ya por tuya tienes porque de entrambos a tu gusto ordenes.» 55 Aquesto dijo; y Polinice luego 188 Del gran Tideo el parecer aprueba ¿Quién, dice, podrá ser tan loco o ciego, que a tales suegros despreciar se atreva? y aunque a los dos con tal desasosiego huyendo de la patria el hado lleva que apenas da lugar donde el contento en nuestras almas tenga algún asiento; 56 Mas ya, aunque siempre ha estado tan asido 193 a nuestros pechos el dolor, nos deja que el bien que tu bondad nos ha ofrecido cualquier tristeza y pesadumbre aleja; y no menor nuestro consuelo ha sido que el de la nave a quien el viento aqueja en medio el mar, y al fin de su fatiga llega a seguro puerto en tierra amiga. 57 »Así que por dichosos nos tenemos 195 de haber en este reino tuyo entrado con tan buenos agüeros, pues habemos lo que nunca esperamos alcanzado, con bien o mal, en guerra o paz, queremos vivir en tu fortuna en cuanto el hado, ya nos sea favorable o ya enemigo. vida nos diere que gastar contigo.» 58 Sin detenerse más, aquesto oyendo, 197 el noble padre alegre se levanta, sus abrazos a entrambos ofreciendo, que lazos han de ser de amistad santa; sus promesas confirma, prometiendo de armas, gente y dinero ayuda tanta, que el uno y otro, ya más animoso, verse espera en su patria victorioso. 59 El cuento al punto en Argos se ha sabido, 201 que toda la ciudad corrió ligero, 674 y en alegres corrillos esparcido, el caso cuenta el vulgo novelero. Dicen que al rey dos yernos le han venido de gran fama valor, y que al primero ya por esposa prometido había el noble Adrasto a la hermosa Argía; 60 y que al segundo ofrece por esposa, 203 no menos bella o menos alabada, a Deífile, honestísima y hermosa, de ya madura edad para casada. Vuela al punto la fama presurosa, publicando la nueva deseada de los pueblos amigos en las calles y en los vecinos comarcanos valles. 61 A los montes partenios y liceos, 206 aunque apartados, brevemente llega, con los nunca esperados himeneos, y lo que allí publica aquí lo niega; a los valles y campos efireos, ya con más variedad la nueva entrega; al fin por Tebas se entra alborotada, llena de más horror y más turbada. 62 Las alas en sus muros bate apriesa, 209 atemoriza al vulgo, al rey espanta, pues semejante al sueño, la promesa del reino, el hospedaje y bodas canta; llena de horror, las calles atraviesa ¿Quién a un monstruo le dio licencia? ¿Qué nueva furia es ésta de la tierra? apenas llega, y ya publica guerra. 63 Ya de las bodas el alegre día, 213 tanto del pueblo argivo deseado, llena de gente la ciudad tenía, que a ver la rica fiesta se ha juntado; crece el tumulto, el pueblo no cabía en el real palacio, aderezado, donde los simulacros se pusieron de antiguos reyes que en la tierra fueron. 64 Allí, a pesar del tiempo fugitivo, 216 llena la antigüedad de verdad era, pues más de un (ya pasado) rey argivo, sin nombres, pudo conocer cualquiera; 675 que, aunque de bronce, estaba tan al vivo que con lo vivo competir pudiera; dicen los rostros lo que no los nombres: tanto pueden las manos de los hombres. 65 Sobre la urna Inaco sentado, 218 con dos cuernos, disforme, horrible y feo está, y el viejo Jasio, y a su lado el agradable y sabio Foroneo; vese el guerrero Abante, y enojado con Júpiter, Acrisio, a quien Perseo en piedra convirtió con ira inmensa, vengando de su madre así la ofensa. 66 Del bravo Dánao, con sus yernos crudo, 221 la fiera imagen tan al vivo estaba, que de ella conocer cualquiera pudo que alguna gran maldad imaginaba; Corebo, que fue de Argos firme escudo, parece que la espada desnudaba. Vense, sin éstos, otros mil famosos reyes y capitanes valerosos. 67 Del vulgo entra la turba sediciosa 223 llena de confusión, rumor y estruendo, cual agua detenida que, furiosa, rompe el estorbo y sale al fin corriendo. La gente más granada y poderosa estaba junto al rey, primero habiendo a cada uno dado al rey licencia, según su calidad y preeminencia. 68 El lugar del palacio más oculto 226 están los sacerdotes ocupando, y en los altares, con divino culto, está el fuego sagrado humeando, en otra parte el mujeril tumulto la deseada fiesta celebrando, con mayor gravedad y más decoro hace (corona casta) alegre coro. 69 Aquí, de honestas madres rodeadas, 228 las doncellas se ven, que unas diciendo están la nueva ley a que obligadas quedan, el nuevo estado obedeciendo; la obediencia y la fe que las casadas deben a sus maridos, y otras, viendo 676 su pena y turbación, las aseguran y sus temores aplacar procuran. 70 Las dos, entre casadas y doncellas, 230 venerables de rostro y de vestido, callando están, y sus mejillas bellas de un rosado color se habían teñido, que aumenta más la hermosura de ellas, aunque es color de su temor nacido, fe cierta, último amor, secreta nube de su virginidad, que al rostro sube. 71 Hace la confusión clara apariencia, 234 aunque el miedo en los pechos la sepulta; que pensando que es culpa su inocencia, confunde el rostro una modestia oculta; y al fin, hallando poca resistencia el temor, tierno llanto de él resulta; pero alegran sus lágrimas en tanto al padre, enternecido con su llanto. 72 No de otra suerte Palas y Diana 236 se pueden ver, si el estrellado cielo dejan alguna vez, y les da gana de descender a vuestro humilde suelo; que con sus armas cada cual ufana, cubierta cada cual de un rojo velo, ambas fieras, aquélla a su Aracinto, y ésta sus ninfas lleve al monte Cinto. 73 43 Y si a vista mortal se concediese 240 mirarlas, afirmar nadie pudiera cuál más honesta o más hermosa fuese, más parecida a Jove o más severa; y sin alguna duda, si las viese con las armas trocadas ¿qué dijera? que a Palas le parece bien la aljaba y que a Diana el yelmo bien le estaba. 74 En cada casa están con alegría 244 el sordo cielo importunando en vano porque en cada lugar se concedía sacrificar al cielo soberano; y alguno, que en ofrenda dado había el animal ya muerto por su mano, contempla sus entrañas, y procura saber por ellas la verdad futura. 677 75 Otro en desnudo altar incienso ofrece 247 no menos de los dioses recibido; que mucho un limpio corazón merece, y siempre de los dioses es oído. Otro alegre las puertas enriquece de ramos y de flores que ha traido de las selvas vecinas, que gimieron cuando herirse y destrozarse vieron. 76 Tal se hallaba la ciudad argiva, 249 cuando un triste prodigio de repente (cual quiso alguna furia vengativa, que bien tanto en la tierra no consiente) con nunca visto sobresalto priva de aquel breve placer la alegre gente; y quitándole al vulgo su alegría, turbó las bodas y el solemne día. 77 Estaba de Larisa en las almenas 251 un rico templo, a Palas dedicado, no menos estimado que el de Atenas ni menos de la diosa visitado, donde los padres de Argos y Micenas, de uso antiguo, de nadie quebrantado, al tiempo que casarlas pretendían, sus castas hijas presentar solían. 78 Sus cabellos aquí sacrificaban 255 cual la antigua costumbre les obliga, y sus primeras bodas disculpaban con la diosa, de bodas enemiga. El rey, pues, y sus hijas aquí entraban, y otra gran multitud de gente amiga, haciendo todos el debido oficio en el usado siempre sacrificio. 79 Apenas al altar habían subido, 257 cuando un escudo grande, que colgado estaba en lo más alto y había sido del fuerte Evipo en otro tiempo usado, cayó en el suelo con tan gran ruido, que retumbó del templo cada lado, las hachas apagando en un instante, fuego nupcial que ardiendo iba delante. 80 Vuelve el pie atrás la gente alborotada, 260 que detenerse alguno fue imposible, 678 cuando de alguna cueva desviada una trompeta resonó terrible. La gente al punto, del temor helada, vuelve a mirar al rey con vista horrible, casi diciendo, aunque con muda boca, que el triste agüero a las esposas toca. 81 Mas luego, porque al rey no es de provecho 263 niegan todos el son terrible y fiero, aunque en lo oculto cada cual del pecho revuelve con temor el triste agüero. ¡Oh cortes de los reyes, do se ha hecho hasta el vulgo ignorante lisonjero y donde siempre la lisonja oprime a la verdad, que siempre hollada gime! 82 Turbóse al fin aquel alegre día; 265 mas ni milagro fue ni cosa nueva, pues ha nacido de un joyel que Argía (infausto don de su marido) lleva. Fue primero de Harmonía, que ya había visto de su rigor la primer prueba: de otras después, que en desventura y llanto pararon por la fuerza de su encanto. 83 Terribles e infinitos son los males 267 que del triste joyel han procedido y sólo contaré los principales porque es el cuento largo y muy sabido; mas primero diré de efectos tales cuál la ocasión tan poderosa ha sido, aunque para la historia que aquí toco fuerza será volver atrás un poco. 84 Dícese que Vulcano, no pudiendo 269 disimular de Marte el adulterio. gran tiempo oculto padeció, gimiendo de su enemiga el riguroso imperio; y al fin sus redes sin efecto viendo, que acrecentaron más su vituperio, perdida ya del todo la esperanza, procuró traza nueva a su venganza. 85 Del adulterio y su deshonra había 272 nacido Harmonía, y ya de edad madura, del casamiento se llegaba el día por Venus concertado en suerte dura, 679 el dios celoso, pues, que pretendía vengarse en ella, a Venus asegura mandando que en su fragua se hiciese un joyel rico, que a su hija diese. 86 A labrar en efecto comenzaron 273 el oro sus cíclopes codiciosos, y con manos amigas ayudaron los telquines, artífices famosos: y no ellos solos son los que sudaron, que, aunque en cosas mayores ingeniosos, quiso también el mismo dios Vulcano poner en su joyel su industria y mano. 87 Mezcla con esmeraldas que ha labrado, 276 llenas de oculto fuego radiante, cenizas que en su yunque se han quedado cuando rayos fabrica al gran Tonante; y entre infaustas figuras que ha entallado, sobre más de un durísimo diamante puso el infame rostro de Medusa, cuya crueldad inmensa Libia acusa. 88 Del infausto joyel el oro fino 278 (aunque no era de aquel que el Tago cría) era de aquel dorado vellocino que en Colcos tanto mal causó algún día, o del que a las Hespérides contino un terrible dragón guardar solía; oro de escamas duras, relucientes, que tienen los dragones en las frentes, 89 Entretejido con el oro bello 282 lleno de alegre, aunque mortal veneno de Tesifón cortó el peor cabello de muerte y varias pestilencias lleno: echó la espuma de la Luna el sello, que mano astuta la cogió al sereno de alguna muda noche y que se halla presente a tanto mal, y siempre calla. 90 No se halló presente Pasitea, 286 ni Eufrosina ni Aglaye se hallaron; que mientras el joyel Vulcano arrea, el placer y el amor se retiraron, ira, llanto, dolor y muerte fea a la ciega Discordia acompañaron, 680 porque ella puso su derecha mano y trabajó en el yunque de Vulcano. 91 Hizo Harmonía primero la experiencia 289 que, casada con Cadmo, ambos sintieron del joyel enemigo la potencia, cuando en culebras convertir se vieron y dejando a su triste descendencia el reino suyo y el joyel, se fueron, los cuellos y los pechos alargando, de Iliria por los campos arrastrando. 92 De Jove estando Sémele preñada, 292 desvergonzada y sin temor alguno, apenas del joyel se vio adornada, cuando entró a verla la celosa Juno, y en traje mentiroso disfrazada, dándole la ocasión tiempo oportuno, con su apariencia la engañó de suerte, que vengó sus agravios con su muerte. 93 Fue después de Yocasta poseido, 294 triste reina tebana, sin ventura, que ufana del joyel mal conocido, su beldad aumentaba mal segura; mas, ay incauta, ¿para qué marido procuras aumentar tu hermosura? Ay desdichada, que el joyel te pones y para el propio hijo te compones. 94 Al fin en otras muchas, que sería 296 cosa prolija detenernos tanto, sin reservar alguna, hecho había su triste efecto el poderoso encanto. Aqueste, pues, llevaba ahora Argía, amenazada ya de triste llanto; y, adornada con él, excede ufana el vil y pobre ornato de su hermana. 95 Vio acaso este joyel, aún no temido, 299 la mujer de Anfiarao, de envidia llena, y luego ni a los juegos ha podido estar alegre, ni en la mesa o cena: sólo imagina ya, si concedido le fuera el joyel rico, prenda ajena, ¡Qué ufana que se viera! mas ¡ay triste! ¡qué poco del agüero el fin temiste! 681 96 ¡Qué de muertes y estragos de tu gente 303 deseas, qué de penas y dolores! ¡Qué de llanto y gemidos neciamente, debido galardón a tus errores! mas ¿qué tu hijo mereció, inocente, que ha de pagar sin culpa tus furores? ¿qué tu adivino esposo, a quien tu engaño buscó la muerte y procuró tu daño? 97 Después que ya del vulgo se acabaron 306 las fiestas, los placeres y alegrías, pasadas ya las bodas, que duraron de juegos y banquetes doce días, de nuevo los cuidados comenzaron, llenos de mil temores y agonías, a afligir al tebano, y ya procura para cobrar su reino coyuntura. 98 Presente la memoria está en su pecho 309 del infelice día en que excluido se vio de Tebas y a su hermano hecho (del reino que era de ambos) rey temido, cuando huyendo del paterno techo, a los que sus amigos habían sido dejó afligidos, sin defensa alguna, sujetos al rigor de su fortuna; 99 Y salió de ninguno acompañado, 313 que aún una hermana suya, que atrevida llena de su dolor, con pecho osado le quiso acompañar en su partida, en el primer umbral había dejado llorando su destierro y su caída, donde pudo el dolor y su ira tanto que en las entrañas encerró su llanto. 100 Acuérdase de haber en aquel punto 316 notado en sus vasallos la apariencia: cuál muy alegre y con su hermano junto, celebrando su suerte y nueva herencia cuál, afligido y de color difunto, le vio gemir en su forzosa ausencia, todo esto en la memoria revolvía sin descansar de noche ni de día. 101 Tiene la ira en su memoria asiento, 319 crece el dolor con la esperanza larga, 682 que es de los hombres el mayor tormento, más insufrible mientras más se alarga. Aquesto revolviendo el pensamiento, nube de confusión, pesada carga, se determina al fin con pecho osado de volver a su reino deseado. 102 Cual toro que el amado valle deja 323 después que, victorioso su enemigo, la amada vaca le quitó, y lo aleja del campo de su bien y mal testigo, celoso brama y con dolor se queja, ausente de su vaca y campo amigo, hasta que nueva furia y sangre nueva la antigua fuerza en su cerviz renueva; 103 entonces, por vengar con pecho fiero 328 su afrenta y su destierro mal sufrido, mejor de pie y de cuerno y mas ligero vuelve al ganado y campo conocido; témele el vencedor, y el ganadero, que conocerlo apenas ha podido, viendo de nuevo en él fiereza tanta, atónito lo mira y de él se espanta: 104 Tal Polinice en su callado pecho 331 atiza su dolor y su ira ardiente; mas su afligida esposa, que en el lecho siente su pena y sus congojas siente, haciendo de su abrazo un lazo estrecho, casi temiendo ya de verse ausente, ya que la Aurora a su balcón salía, así le dijo, suspirando, un día: 105 »¿Qué partida, qué nuevo movimiento 334 (que de helado temor mi pecho cubre) siempre estás maquinando, bien lo siento; que nada a los amantes se le encubre, conozco tu importuno pensamiento, que tu misma inquietud me lo descubre; pues aun durmiendo, avivan tus gemidos veladores suspiros encendidos. 106 »Cuántas veces en lágrimas bañado 337 este rostro, halló mano medrosa y cuánta en tal pecho alborotado, donde nunca el corazón reposa 683 del inoportuno y velador cuidado la fuerza he conocido poderosa que mucho que a temer me obligue tanto suspiros, ansias, inquietud y llanto. 107 »No el juramento ni la fe quebrada, 339 ni esta mi juventud pudo moverme. aunque al principio de mi edad dejada eternamente muda habré de verme: ni el lecho me ha movido, aunque obligada pudo ya en él el crudo amor hacerme pero tan poco en él dormido habemos, que aún apenas caliente le tenemos. 108 »Tu vida sola y tu salud me obliga: 342 confieso mi temor y desventura, sólo a tierra (aunque patria) ya enemiga y desarmado vas ¿Quién te asegura? pues cuando buen efecto no consiga tu justa pretensión y mi ventura, claramente se ve que te habrás puesto a peligro de muerte manifiesto. 109 »La fama pregonera, que en olvido 345 nunca tiene a los reyes, de tu hermano dice cuán ambicioso siempre ha sido, cuán difícil contigo y qué inhumano, y aún no entonces el año había cumplido; ahora ¿qué hará, que ya es tirano, de más rigor y más soberbia lleno, injusto usurpador de cetro ajeno? 110 »Y sin esto, adivinas de mis males 348 (en más cuidado y confusión me han puesto) las entrañas de muertos animales, sacrificados para sólo aquesto, de algún nuevo dolor me dan señales, ya de las aves el cantar funesto, ya alguna vez, en tanto que dormía, turbada imagen de noche fría. 111 No sin causa me acuerdo, vez alguna 350 soñando, haberme Juno aparecido, que con mil apariencias importuna, a turbarme estas noches ha venido. ¿Dónde vas, qué imperio, qué fortuna este nuevo furor te ha prometido? 684 ¿En qué fundada tu esperanza llevas? ¿Qué mejor suegro has de hallar en Tebas?» 112 Con breve risa, aunque fingida en vano, 352 con que el cuchillo a su dolor afila, a su esposa bellísima el tebano de su temor las causas aniquila; y bebiendo el aljófar soberano que por sus ojos el amor destila, tras mil besos y abrazos, en que esconde su pena y su dolor, así responde: 113 »Desata ¡oh solo bien del alma mía! 356 de tu hermoso pecho el miedo helado que al fin mi pretensión y mi osadía han de llegar al puerto deseado. Vendrá sin duda el esperado día; olvida aunque importuno este cuidado que por ventura el cielo lo gobierna y es grave peso para edad tan tierna. 114 »Si el padre eterno que los cielos huella, 358 la tierra mira y la razón ampara mire él mi causa y juzgue mi querella que en su justicia mi defensa para y vendrá por ventura esposa bella el tiempo que en mi reino y patria cara ya sin temores, te verás ufana reina de dos ciudades soberana.» 115 Esto dijo: y con paso arrebatado 363 va luego al aposento de Tideo, que tiene parte igual de su cuidado, y amigo y compañero en su deseo tanto ha podido amor que se ha trocado en inmensa amistad el odio feo, juntos de allí se fueron y despacio hablan al suegro Adrasto en su palacio. 116 Junta consejo el rey sabio y severo, 367 y habiendo varios pareceres dado, todos determinaron que primero (porque aún no es enemigo declarado) vaya al tebano rey un mensajero, que en nombre del hermano desterrado le pida, pues el año ya es cumplido seguridad y el reino prometido. 685 117 Pide la empresa el calidonio dura, 370 y ser embajador de ella se encarga, aunque estorbarlo Deífile procura, llorando en vano su partida amarga; mas, viendo que su padre le asegura de que la ausencia no será muy larga, y que es seguro embajador se allana, rendida al justo ruego de su hermana. 118 Luego el viaje comenzó atrevido 375 por ásperos caminos; y pasando mas de un arroyo lleno de ruïdo, y más de un monte y selva atravesando, a Lerna allega, que temida ha sido con la abrasada sierpe aún humeando, ya Nemea, en que apenas han osado acercar los pastores su ganado. 119 Por donde el Euro a Efires hace guerra 379 se deja atrás el puerto sisifeo, y el agua, que enojada con la tierra, entre peñascos encerró Lequeo; pasaje halla en la empinada sierra, y dando prisa siempre a su deseo, a la ciudad que a Niso llora en vano y a Eleusis deja a la siniestra mano. 120 Ya de Teumeso la arboleda espesa, 383 a quien Alcides tan famosa ha hecho, se deja atrás, y al fin se da tal priesa, que entra por Tebas con osado pecho; sus calles y sus plazas atraviesa, y al alcázar de Cadmo va derecho, donde al fiero Eteocles vio sentado, de armados escuadrones rodeado. 121 Oyendo diferencias de su gente, 386 contra la ley y término del año justicia administraba injustamente, solicitando así su propio daño; mas el semblante y su orgullosa frente daba de su crueldad indicio extraño, pues sólo con mirar su horror, cualquiera que era traidor tirano conociera. 122 Hablando estaba acaso de su hermano, 387 y lleno de ambiciosa confianza, 686 llamando sinrazón su intento vano, celebraba con risa su tardanza, cuando mostrando en su derecha mano, ramo de oliva, y no derecha lanza, señal de embajador, a su presencia entra Tideo sin pedir licencia. 123 Párase en medio, y luego manifiesta 389 su nombre y la ocasión de su venida; pero no con retórica y compuesta oración grave, humilde y comedida, que es nido de lenguaje, y así, aquesta, desnuda de hojas y atrevida, con alta voz y con soberbia mucha dice, y en tanto el rey rabiando escucha: 124 «Si hubiera fe en tu pecho, y si cuidado 393 del concierto y promesa en ti viniera, en cumpliéndose el año concertado, tú mismo (que justicia y razón fuera) a tu hermano le hubieras enviado embajador que el reino le ofreciera dejando luego sin tardanza alguna tu alegre reino y próspera fortuna. 125 »Y el pobre desterrado, que ha sufrido 397 mil indignos trabajos por el mundo, volviera al fin al reino prometido, y descansara un año rey segundo, mas, porque dulce cosa siempre ha sido el amor de reinar (sueño profundo), vengo a pedirte, argivo mensajero, lo que debieras ofrecer primero. 126 »Ya el padre de Faetón del ancho cielo 400 los signos ha corrido, y ya estuvieron llenos del sol los valles, ya del hielo, y obscuras sombras ocupar se vieron, después que ausente del paterno suelo tu pobre hermano, a quien los hados fueron tan rigurosos, afligido ha andado por no sabidos pueblos desterrado. 127 »Ya el mismo tiempo y la razón te obliga 403 a pasar al sereno algunos días y a probar en tus miembros la fatiga de noches largas del invierno frías; 687 vuelva tu hermano ya a la patria amiga, deja el palacio y salas, ya vacías, y pues has dado un año a Tebas leyes, ve ahora a obedecer a extraños reyes. 128 »Pon modo a tu alegría y tu riqueza, 406 pues de oro rico y púrpura cubierto, reíste de tu hermano la pobreza mientras fue un año peregrino incierto. Aconséjote al fin que esa grandeza renuncies, pues cumpliendo así el concierto, su año apenas estará cumplido, cuando a tu reino vuelvas merecido.» 129 Así dijo: mas ya en su pecho airado 410 estaba el rey el corazón ardiendo, cual sierpe a quien tiró pastor osado furiosa piedra y se aleja huyendo que el pecho de la tierra levantado, do larga sed estuvo padeciendo, su veneno y furor muestra enojada, en el cuello escamoso, boca airada. 130 «Si antes de ahora -dice- no tuviera 415 de mi hermano el intento conocido y si tan manifiesta no me fuera la enemistad que siempre me ha tenido. bastante indicio de su pecho diera la arrogancia y furor con que has venido. Parece que en tu pecho al mismo tienes, tan bravo y lleno de arrogancias vienes. 131 »Si los muros de Tebas coronados 418 batieran ya enemigos escuadrones, o en sus montes y campos ya abrasados, tremolando estuvieran sus pendones ¿Qué más furor tuvieras si entre helados bistones o entre pálidos Gelones estuvieras, hablaras por ventura con más comedimiento y más cordura. 132 »Pero no (porque al fin mandado fuiste) 423 culparé tu furor y atrevimiento; mas pues tan a la clara descubriste de mi enemigo hermano el fiero intento, y lleno de amenazas me pediste el reino con furor libre y exento 688 casi empuñando el hierro y vengativo, esto dirás al nuevo rey argivo: 133 »el cetro y el honor que a mí debido, 428 por ser mayor de edad me dio la suerte, tengo con justa causa; lo he tenido y lo pienso tener hasta la muerte goza tú en tanto, pues dichoso has sido, de Argos, ciudad más rica, grande y fuerte, a ti amontone tus riquezas ella, dote famoso de tu esposa bella. 134 »Que yo ¿por qué a tu suerte venturosa 431 he de tener envidia? en paz gobierna y en buen agüero tu ciudad famosa y cuanto baña la abrasada Lerna, reines en Grecia, al fin tierra dichosa, y haga el cielo tu ventura eterna; que yo con mi bajeza, rey tebano, sin envidiar tu gloria, estaré ufano. 135 »Yo los hórridos campos que humedece 433 la humilde Dirce gozaré y la tierra cuya orilla ensangosta y enflaquece de Eubea el mar con tan eterna guerra; y en tanto que ese honor que te ennoblece, nuestra infamia y dolor de ti destierra; que yo que tanto bien no participo confesaré por padre al ciego Edipo. 136 »A ti Pélope y Tántalo, que han sido 436 de la nobleza de tu esposa autores, o Jove, de quien ellos la han tenido, te ennoblezcan allá con sus favores; que una reina que en Argos ha vivido en la grandeza al fin, de sus mayores, ¿cómo podrá venir de esa grandeza a sufrir de este reino la pobreza? 137 »Será razón que en el paterno techo 439 nuestras hermanas por criadas tenga y aunque quiera humillar su altivo pecho, a ser humilde reina en Tebas venga? mi madre, a quien el llanto haya deshecho, ¿Querrá que al lado suyo se entretenga? o ¿sufrirá que ofendan sus oídos de un suegro miserable los gemidos? 689 138 »El vulgo ya a mi imperio no pesado 442 está hecho, y contento está en efeto y es vergüenza también que este Senado siempre a incierto señor esté sujeto. De él soy obedecido y respetado y yo también le trato con respeto, y ha de ofenderle nuevo rey si viene, de quien ignora la intención que tiene. 139 »No reyes libres son, pero tiranos, 446 los que un año gobiernan solamente, pues no perdonan sus avaras manos en cosa alguna la afligida gente: mira entre los confusos ciudadanos murmurando el rumor que ya se siente: ¿Téngolos de entregar a quien ya ordena En su inocencia rigurosa pena; 140 »Airado, hermano, vienes, pero advierte, 449 según el pueblo la afición me tiene que, aunque yo quiera el reino concederte, el Senado dirá que no conviene.» Más quisiera decir, pero de suerte (sin que haya quien su cólera refrene) la rabia al calidonio fue creciendo, que las palabras le atajó, diciendo: 141 »Daraslo a tu pesar, que ya te espera 452 el castigo debido a tanta ofensa: darás el reino, digo, aunque estuviera de hierro duro un monte en tu defensa; y aunque con otro canto Anfión ciñera de tres murallas fortaleza inmensa esta ciudad, ni el fuego o hierro duro de nuestras manos te harán seguro. 142 »Y por aquesta espada vengativa 456 (pues ya la paz de Tebas se destierra), que has de tocar con tu diadema altiva el duro suelo y abrazar la tierra pagarás con razón, que al fin se priva Tebas por ti, ocasión de aquesta guerra, de la paz que en sus campos hoy florece; pero esta pobre gente ¿qué merece? 143 »De ellos me pesa, oh rey piadoso y bueno, 458 que han de perder sus hijos y mujeres, 690 pues entregarlos, de injusticia lleno a tanto mal y desventura quieres. Tú si de sangre tinto, oh claro Ismeno, llena de muertes tu corriente vieres que es aquesta, dirás al Oceano, una gran impiedad de un rey tebano. 144 »Mas ¿qué me admiro, si el delito ha sido 462 de padres y de abuelos heredado? ¿Que ha de esperarse de quien ha nacido de tal incesto en lecho profanado? aunque no herencia igual, de sangre habido, ni todos heredaron su pecado, tú solo, el más injusto de la gente, eres del ciego Edipo descendiente. 145 »Tú el premio llevarás, pues por tu daño 465 eres de su delito el heredero; yo ahora solamente pido el año debido a Polinice; mas ¿qué espero?» aquesto dijo, y con furor extraño desocupa la sala osado y fiero, y dando voces, se partió volando, aquí y allí la gente atropellando. 146 No de otra suerte el jabalí cerdoso 469 que de Diana castigó la ofensa, todo erizado, arremetió furioso contra el griego escuadrón con rabia inmensa, ya mostrando el colmillo riguroso, ya peñas arrancando en su defensa. y ya quebrando como frágil caña las plantas que en su orilla Aqueloo baña. 147 Éste se ve animoso, aquél huyendo 473 del fiero jabalí por llano y sierra. ya deja a Telamón allí gimiendo, y aquí al bravo Ixión tiende en la tierra; al fin, a Meleagro arremetiendo, paró en su lanza y concluyó la guerra, pues abierto con ella el hombre fiero, humilló su cerviz al duro acero. 148 Con furia tal el calidonio deja 476 temeroso al Senado, y cual si fuera suyo el cetro que pide, así se queja de que negado el reino se le hubiera, 691 de olivo el ramo humilde de sí aleja, y de nuevo los pasos aligera, dejando los tejados y ventanas llenos de las atónitas tebanas. 149 Échanle rigurosas maldiciones 480 y en su callado pecho temeroso al cielo dan las mismas peticiones contra el tirano injusto y ambicioso mas él, que para engaños y traiciones nunca tuvo el ingenio perezoso a cincuenta mancebos ha escogido, los que mejores en la guerra han sido. 150 Con dádivas aquél, y éste obligado 484 con alguna promesa mal segura, obedece al injusto rey airado, que así su infancia y perdición procura: tantos contra uno solo se han armado, solo y embajador en noche obscura y el nombre ofenden, respetado tanto en todo el mundo religioso y santo. 151 ¿Qué vileza no intenta el que es tirano, 488 si el deseo de reinar le enciende el pecho? si en vez del mensajero, al mismo hermano tuviera en su poder, ¿qué hubiera hecho? ¡oh grande ceguedad del hombre insano, que busca con infamia su provecho! pues su misma maldad, de temor llena es en su pecho rigurosa pena. 152 Cual campo que presenta la batalla 490 a otro enemigo campo armado y fiero, o cual el que a batir va la muralla del que en el campo le huyó primero así, vestidos de menuda malla, contra uno solo sale un pueblo entero, y aunque no al son de cajas alistados, en orden salen por la puerta armados. 153 ¡Oh flor de aquella edad y el más valiente, 495 pues tanta fama y crédito tuviste, que ves contra ti solo tanta gente, y de tantas espadas digno fuiste, sigue el camino, pues calladamente el escuadrón tebano en suerte triste, 692 para ocuparle el paso a toda priesa por el atajo de una selva espesa. 154 Para traición tan grande han escogido 498 un valle algo de Tebas apartado, estrecho a las entradas y ceñido de un altísimo monte a cada lado, por cuya eterna sombra nunca ha sido del claro sol el valle visitado, y la selva obscurece al lugar tanto, que añade en él horror, miedo y espanto. 155 Parece que el lugar insidioso 501 fue de Natura para engaños hecho, ciego, inútil, oculto y temeroso, sólo para asechanzas de provecho, a un lado el monte es áspero y fragoso, y entre sus peñas va un camino estrecho, debajo un campo llano y apacible a las faldas se ve del monte horrible. 156 Al otro lado un gran peñasco había, 504 más áspero y más alto, en cuyo seno esfinge en otro tiempo estar solía, alado monstruo, fiero, de horror lleno; horrible el rostro y pálido tenía, la boca llena siempre de veneno, los ojos como brasas encendidas, y alas de sangre humedecidas. 157 De allí, sobre los huesos mal roidos 509 de los que muertos en la cumbre estaban, miraba por los campos extendidos si algunos caminantes asomaban, o ya del hado por error traidos porque de animosos le buscaban queriendo con ingenio mal seguro vencerlo y desatar su enigma obscuro. 158 Y apenas al enigma obscuro y ciego 513 el engañado huésped dado había no acertada respuesta, cuando luego pagaba al monstruo fiero su osadía; por los ojos echando vivo fuego con uñas y con dientes lo hería; o bajaba escapando de sus brazos, por las penas haciéndose pedazos. 693 159 Duró aquella crueldad hasta que vino 516 Edipo con dichoso atrevimiento, y con sutil ingenio y peregrino desató su obscurísimo argumento y el monstruo, victorioso de contino, sin usar de sus alas, al momento se despeñó y sus huesos divididos quedaron por las peñas esparcidos. 160 Quedó todo el lugar inficionado, 519 tanto, que no hay novillo que apetezca los pastos de aquel campo, ni ganado que sus hierbas odiosas no aborrezca; no las ninfas o faunos han osado hacer sus coros a la sombra fresca ni osan entrar en él algunas fieras, ni entran en él las aves carniceras. 161 A este infame lugar, en triste agüero, 523 con secreto y silencio, a la ligera, el escuadrón llegó perecedero y al enemigo descuidado espera, cuál se arrima a una pica, y cuál ligero la vega corre, el campo y la ladera; coronan valle, monte y arboleda, y nada al fin desocupado queda. 162 Ya al Occidente el sol se retiraba, 527 y de la noche el húmedo vestido sus sombras en la tierra derramaba, mojadas en las aguas del olvido; cuando, ya que a las selvas se acercaba, escuchó el calidonio algún ruido de armas que entre los árboles parecen, y al rayo de la luna resplandecen. 163 Pero no, aunque admirado se detiene, 533 mas, porque algún peligro ya imagina, de dos dardos que lleva se previene, la espada tienta, y sin temor camina, y al fin, sin miedo, que ninguno tiene, ya que un poco a la selva se avecina. «¿Quién sois? -pregunta- ¿qué esperáis, soldados? ¿por qué os escondéis, estando armados?» 164 Nadie de responder tuvo osadía; 536 pero en aquel silencio sospechoso 694 vido la paz segura que podía esperar de un tirano cauteloso en esto el fiero Cromio, que venía por capitán del escuadrón furioso, puso en el arco una ligera punta y el un extremo con el otro junta. 165 La flecha vuela, pero no ha podido 539 alcanzar el efecto deseado, que Fortuna, que suele al atrevido dar favor, esta vez se lo ha negado al pellejo del puerco que vestido llevaba, el hombro izquierdo le ha pasado, y rayendo la carne al fin la flecha, a herir en un tronco fue derecha. 166 Al punto, con furor de inmortal ira, 544 fuego de enojo en sus entrañas arde, aquí y allí descolorido mira por ver de cuántos o de quien se guarde; con rabia gime y con dolor suspira, y sin saber que el escuadrón cobarde de tantos juntos es, verlo desea, y erizado el cabello así vocea: 167 «¿Qué os acobarda tanto o qué os detiene? 547 mostrad ya el rostro infame descubierto, salid: que nadie en mi defensa viene; sólo espero; salid en campo abierto, cual suele cuando ya en el monte tiene: puesta la red el cazador experto que salen de su voz amedrentadas de aquí, de allí las fieras a manadas; 168 Tal a su voz el escuadrón tebano 549 el valle desocupa y la espesura, resplandeció con armas todo el llano, y el peso estremeció la tierra dura, turbado en ver que con armada mano de tantos es el escuadrón, procura por herirlo más bien y asegurarse al peñasco de Esfinge retirarse. 169 Rompe con pies y manos, atrevido, 556 los matorrales, de aspereza llenos, no de sus enemigos bien seguido, que pocos son allí sin alas buenos; 695 y sobre un peñón alto se ha subido, que las espaldas le asegura al menos, desde donde más bien y sin trabajo puede ofender a los que están debajo. 170 Una peña de esotras arrancada, 559 de tanto peso, que difícilmente pudiera por lo llano ser llevada por el par de novillos más valiente, sobre sus fuertes hombros levantada, adonde más espesa ve la gente, con tal furia arrojó, que no ofendiera tanto si un muro encima se cayera. 171 Cual el vaso que Folo tiró un día 563 a los lapitas, bárbaros airados, tal, y con más vigor bajar se vía la peña a los tebanos admirados; deja deshechos en la tierra fría pechos de hierro duro en vano armados, escudos, brazos, piernas y cabezas ya divididos en menudas piezas. 172 Debajo de la peña padecieron 568 cuatro, que allí enterró su desventura, aunque por su virtud y sangre fueron dignos de más honrada sepultura; Dorilo fue y Terón, que descendieron de aquellos que parió la Tierra dura cuando sirvió en sus surcos de simiente aquel de Cadmo serpentino diente. 173 Halis, que el más famoso en Tebas era 573 domador de caballos, fue el tercero que quiso la fortuna que a pie muera, si anduvo siempre en corredor ligero; y el cuarto cual si fuera blanda cera que en la tierra selló el peñasco fiero, Fédimo es de Penteo descendiente, que heredó la desgracia del pariente. 174 Con escarmiento y con temor helados, 576 apagado el furor la sangre fría huyen del escuadrón los más osados con nunca imaginada cobardía; viéndolos divididos y apartados, tirándoles dos dardos que tenía, 696 los hizo contra dos volar de suerte que le sirvieron de alas a la muerte. 175 Y viendo en la empezada infame guerra 580 no tan espeso el escuadrón tebano, el gran peñasco y la fragosa sierra desocupa de un salto y baja al llano, donde el famoso escudo vio en la tierra que al ya muerto Terón armaba en vano que, arrojado o rodando por ventura, pudo escaparse de la peña dura. 176 Embrazólo, y así con él se vía 583 de todo punto armado y más seguro, pues ya el pecho y espaldas le cubría del fiero jabalí el despojo duro. Vuelve a hacer la gente que huía, cerrándose de nuevo un fuerte muro, y viendo el temor que la acobarda, afirma el pie y al enemigo aguarda. 177 Saca la espada al punto el gran Tideo, 586 que tinta en sangre de bistones era, que en premio ofreció Marte al fuerte Eneo cuando triunfó de aquella gente fiera, con ésta, que era igual a su deseo, embiste al escuadrón, que junto espera, y aquí y allí la esgrime tan ligero, que despedaza el más templado acero. 178 Tantos son, tan espesos y cerrados, 590 que unos de otros impiden las heridas, y algunos, en los hierros arrojados de hermanos, pierden las amadas vidas; otros, ya por el suelo derribados, reciben daño en armas conocidas, y tal tiñó en la sangre del amigo la flecha que tiraba al enemigo. 179 Y él, con ajena sangre ya teñido, 593 resiste a tantas armas invencible, lleno todo el escudo y el vestido de flechas, que le hacen más horrible, tal la gética Flegra, embravecido (si ya tal caso puede ser creíble) vio al inhumano y grande Briareo, armado contra el cielo, horrible y feo. 697 180 Ya Apolo con las flechas de su aljaba, 597 ya con las suyas Delia el arco tiende, ya el escudo gorgonio, airada y brava, esgrime Palas, que la vista ofende, ya Marte el pino que teñido estaba en sangre de bistones, y va enciende Jove el suelo, cansándose Vulcano de darle tantos rayos a la mano. 181 Y con ver tanto rayo y tanto trueno, 601 y a un tiempo tantas armas, le parece que es todo poco, y que su inmenso seno más armas y enemigos más merece; de furia igual el calidonio lleno a mil heridas el escudo ofrece, ya se retira un poco, y ya más fiero da nueva sangre al ya manchado acero. 182 Armas le da su escudo a su vestido 604 con mil flechas y dardos enclavado, y ya arrancando alguno, ha sucedido que al propio dueño el hierro muerte ha dado; ya en mil partes también está herido, mas no ha sido algún hierro tan osado, que llegue a penetrar con su herida el secreto aposento de la vida. 183 Deíloco, que airado arremetía 607 mortalmente herido va rodando: muere con él Fegeo, que venía con una gran segur amenazando: con un velador dardo mata a Gía, con otro a Licofonte, que sacando estaba agudas flechas de su aljaba, y el fuerte brazo en el pecho enclava. 184 Ya se buscan y cuentan temerosos, 611 no con tanto furor y amor de guerra, viendo que los más fuertes y animosos muertos ocupan ya la dura tierra temen del escuadrón los más famosos, en cada pecho igual temor se encierra; solo Cromio, de Cadmo descendiente, tuvo valor para anular la gente. 185 Dicen que éste nació de una tebana, 614 hermosísima ninfa, que preñada, 698 estando ya a su parto muy cercana, a las fiestas de Baco fue llevada, y viendo el baile de la gente ufana, de esotras bacanales incitada, olvidada del vientre entró en el coro y asió, bailando, por el cuerno a un toro. 186 El por soltarse y ella de atrevida, 616 porque no se le fuese porfiando, al fin del animal fue sacudida lejos en tierra, un grande golpe dando; y allí, no sin peligro de la vida, turbada, sin sentido y anhelando parió un infante en la desnuda tierra, que fue después famoso por la guerra. 187 Éste, pues, más que esotros animado, 618 la cobardía de los suyos viendo, con el despojo de un león armado, y una nudosa lanza sacudiendo: «Volved -dice- volved con pecho osado, volved, que un hombre sólo os va siguiendo; ¿No hay honra ya? ¿No hay armas ya ni manos? ¿a dónde vais, oh míseros tebanos? 188 »Que un hombre sólo victorioso sea 623 de tan lucida y tan famosa gente, ¿Quién en Argos habrá que se lo crea cuando su gloria y nuestra infamia cuente? no sin que el rostro el enemigo os vea volved a Tebas, oh Cidón valiente, oh noble Lampo ¿a aquesto acá venimos? ¿es esto lo que al rey le prometimos?» 189 Así de cada cual el nombre invoca, 624 cuando un dardo llegó, que en la espesura se cortó de Teumeso, y por la boca entró, lleno de muerte y amargura; en los dientes halló defensa poca y rompe el paladar la punta dura, de donde al fin la lengua desatada, perdida ya la voz en sangre nada. 190 Estábase aún en pie, y un mortal hielo 627 del paladar al pecho descendiendo le hizo que midiese el duro suelo con la mordida lanza enmudeciendo. 699 Levante por mi voz la fama el vuelo, pues no vosotros la perdéis muriendo, hijos de Tespio; que si puedo tanto, aunque muertos, tendréis vida en mi canto. 191 Perito el cuerpo de su hermano alzaba 630 de la tierra, a la muerte ya cercano, con la derecha el lado sustentaba, y el flojo cuello con la izquierda mano, no se vio igual piedad; llorando lava el ya pálido rostro de su hermano, sin que el almete, aunque cerrado, impida a sus lágrimas tiernas la salida; 192 cuando llegó una lanza a su costado, 635 y tan furiosa entró la dura punta, que pasando del uno al otro lado, el un hermano con el otro junta, con lazo más estrecho va abrazado, muere aquél, y la cara ya difunta parece que a su hermano está esperando, que al fin muere con él, así hablando: 193 »Dente, fiero enemigo, abrazos tales 641 tus hijos, si los hados te los dieron.» con esto entrambos mueren, y así iguales en muerte son como en la vida fueron; de un vientre, de una edad, de unas señales, juntos, iguales en amor, crecieron con esperanza igual, y al fin la suerte también los hizo iguales en la muerte. 194 Huye Meneto con ligera planta 644 del enemigo airado y victorioso, más cayó por estar de sangre tanta húmedo todo el suelo y resbaloso; sobre él el fiero vencedor levanta con una lanza el brazo riguroso, y asiéndola con una y otra mano, así le ruega el mísero tebano: 195 »Perdona aquesta vida desdichada, 649 detén por Dios la mano poderosa, por las estrellas y la sombra helada de aquesta noche, para ti dichosa, deja que esta victoria no esperada 700 cuente en Tebas mi lengua temerosa. donde luego, a pesar del rey infame, por las lenguas del vulgo se derrame. 196 »Así en la tierra caigan sin provecho 652 las armas nuestras y jamás te hieran, y victorioso y sin herida el pecho vuelvas a los amigos que te esperan.» Dijo, mas él, inexorable hecho, cual si de piedra sus entrañas fueran, responde: «En vano, sin provecho y tarde derramas esas lágrimas, cobarde. 197 »Que tú al injusto rey, si no me engaño, 656 mi cabeza también le prometiste mas fue promesa bárbara, fue engaño, pues a pagarlo con morir viniste. ¿Que buscas dilaciones a tu daño? ¿No ves que aquesta espada que hoy temiste mañana ha de volver con nueva guerra contra aquesta perjura, infame tierra?» 198 Así dijo; y del pecho ya teñida 659 sacó la dura lanza, y en saliendo, la muerte helada entró por la herida, y él sigue a los demás, así diciendo: «Pensaste, gente infame, aborrecida, la obscuridad de aquesta noche viendo, que era de las de Baco deseada, y de tres a tres años celebrada. 199 »No penséis que de Cadmo son los juegos 663 donde al son de lascivos atabales usáis incestos bárbaros y ciegos con vuestras propias madres bacanales; otros son, otras músicas y fuegos son los de estos funestos matorrales: no con hembras la guerra aquí se tiene, ni aquí con tirsos frágiles se viene. 200 »Otro furor es éste y otra guerra, 667 hecha al son de instrumentos temerosos. Morid, infames, ocupad la tierra, o cobardes, o pocos y medrosos.» Esto diciendo, el llano, el valle y sierra discurre, no con pies tan presurosos, que, cansada la sangre ya en las venas, 701 en ellos puede sustentarse apenas. 201 Ya con menos furor y menos brío 670 la espada esgrime, y ya pesado hecho el escudo, de hierros no vacío, le hace ya más daño que provecho, y ya un helado y húmedo rocío cansancio añade al fatigado pecho, y de sangre enemiga humedecido. del cabello a los pies está teñido. 202 Tal suele de Masilia entre el ganado, 675 después que a su pastor con pie ligero ahuyentó, hallarse fatigado entre muertas ovejas león fiero, que, vencida la hambre y sosegado, menos hambriento y menos carnicero, no ya erizado el cuello, ni tan alta la cerviz coronada, a nadie asalta. 203 Párase en medio del ganado muerto 678 anhelando, cansado y ya vencido de sus mismos manjares, y cubierto de la ya helada sangre que ha vertido; a nadie sigue va por el desierto, y en la secreta cueva al fin tendido, sin que el hambre a más furor lo llame, las blandas piernas con la lengua lame. 204 No con aquesto el vencedor contento, 682 lleno de los despojos, bien quisiera volver a la ciudad, y que sangriento el rey y el pueblo atónito le viera; y cumpliera sin duda el fiero intento, si otro mejor consejo no le diera Palas, que, su cansancio conociendo, le sosegó el furor, así diciendo: 205 «Oh, descendiente del famoso Eneo, 686 a quien ahora concedido habemos vencer a Tebas, y con tal trofeo la fama de tu sangre ennoblecemos, enfrena tu furor y tu deseo, que aun en el bien son malos los extremos; vuelve a Argos a contar tu gran victoria, baste ya tanto bien y tanta gloria.» 702 206 Ya todo el escuadrón de tanta gente 690 que tan soberbio y confiado vino, muerto estaba, quedando solamente vivo Meonte, en Tebas adivino; bien el estrago y mortandad presente con tiempo adivinó, mas el destino no quiso que algún crédito tuviese, por más veces que al rey se lo dijese. 207 Aqueste, no cobarde o fugitivo, 695 pues vivo a su pesar quedado había, perdona sólo el vencedor altivo, y a la ciudad, diciendo así, lo envía: «Oh tu, quienquiera que eres, a quien vivo verá la luz del venidero día, libre de mi furor a Tebas parte, y esto di al rey tebano de mi parte: 208 «Ciñe de foso tu ciudad, perjuro, 699 todas sus puertas cierra diligente, armas busca, renueva el viejo muro, y junta sobre todo mucha gente; mira de sangre aqueste campo duro bañado por mi espada solamente, y en este fiero estrago el tuyo advierte, que tal cual vine he de volver a verte.» 209 Pártese aquél, y luego el gran Tideo, 704 a la tritonia diosa agradecido, del despojo levanta un gran trofeo, honor por sus favores merecido, de muertos un montón horrible y feo del espacioso campo ha recogido, y en él alegre sus hazañas mira, y viendo tanta mortandad se admira. 210 Estaba fuera de la selva obscura, 707 en medio un campo, de otras apartada, una robusta encina, antigua y dura, ya de su mocedad muy olvidada, de no vista grandeza y espesura, espaciosa de ramos e intrincada, cuyos torcidos brazos a la alfombra hacen del verde campo eterna sombra. 211 De aquí cuelga por orden las espadas, 710 trozos de lanza, yelmos, morriones, 703 dardos, escudos, golas y celadas, arcos y aljabas llenas de arpones; y viendo así las ramas adornadas, y de armas y de cuerpos los montones, este, en honra de Palas, himno santo dice, y el valle escucha y calla en tanto: 212 «Guerrera diosa, ingenio peregrino, 715 de tu gran padre al fin, y honra primera, que con semblante airado, aunque divino, en guerras eres poderosa y fiera, y a cuyo rostro el yelmo de oro fino añade horror y majestad severa, no menos que el gorgonio escudo fuerte, lleno de tanta sangre y tanta muerte. 213 »Tú, que entre las batallas, de horror llenas, 718 cual Marte y cual Belona has encendido igual furor en las heladas venas de aquellos a quien has favorecido, esta ofrenda recibe, o ya de Atenas a ver aqueste estrago hayas venido, o de los coros del Itón aonio, o de tu antiguo líbico tritonio. 214 »Aquí sólo te ofrezco por trofeo 725 tristes despojos, rotos y bañados en sangre de hombres; mas si al fin poseo los partaonios campos deseados, y a Pleurón, mi querida patria, veo no ya tan perseguido de los hados, te haré un rico templo de obra bella, dorado todo, en el alcázar de ella; 215 »desde donde el Jonio proceloso 729 y en medio de él la peregrina flota, alegre mires, golfo riguroso, que con cualquiera viento se alborota; y lo que por Alcides tan famoso Aqueloo levantando el mar azota hasta donde su túrbida corriente baña a las cinco Equínadas la frente. 216 »De mis pasados los famosos hechos 732 en él por orden se verán pintados, y los reyes vencidos y deshechos, 704 bravos de rostro, al vivo retratados; en sus columnas y dorados techos armas y escudos se verán colgados, y algunos adquiridos por mi espada, a costa de mi sangre derramada. 217 »Las ricas armas que quitarle espero, 735 con tu favor, de Tebas al tirano, aquí colgadas se verán primero, ganadas y ofrecidas por mi mano: y al fin, colgando el vencedor acero, ya en paz alegre descansando ufano, servirán en tus aras cien doncellas, de toda Calidonia las más bellas. 218 »Emplearán en tejer su hermosura, 738 y no habrá tela alguna que no sea de color varia y varia de pintura donde su industria y tu poder se vea: sacerdotisa allí de edad madura. que ya segura honestidad posea tendrá de tus altares el gobierno, guardando el fuego velador eterno. 219 »Al fin en paz y en guerra, de contino 741 de mí recibirás ofrenda rica, sin que se enoje por tu honor divino la bella diosa que a cazar se aplica.» dijo; y tomando de Argos el camino, pasa pueblos y campos, y publica por donde pasa la vecina guerra, tiembla debajo de sus pies la tierra.
TERCER LIBRO.
[3,1] El rey traidor de Tebas, en el medio de la noche,
aunque las estrellas sigue siendo una larga carrera para ir a Aurora, se niega a
dormir resto; dolor antes en su corazón, y la conciencia del delito de tortura;
entonces el miedo, presagios más siniestros en la incertidumbre, se deja caer de
un pensamiento a:
"Infeliz que soy, exclama, ¿de dónde viene esto. tarde?
(Ya que, según él, es fácil que tantos guerreros llegan al final de una Tideo, y
el número no mide la fuerza y el valor.) ¿Hubieran tomado otro camino? Habrían
enviado tropas de Argos a su rescate? [3,10] El informe de esta empresa criminal
sería repartidos en las ciudades cercanas? Eran muy pocos, O Marte! o eran
cobardes, los que han elegido? Pero no me he Chromis Dorylas mis valientes
guerreros; Yo, el hijo de Tespis, poderoso como los muros de Tebas, que
eliminaría me Argos hasta sus cimientos. Pero este hombre, que no es, creo,
impenetrable para los brazos, no lo hizo brazos de bronce o de diamante Oh!
suelta si, después de haber sido capaz de luchar, son detenidos por un solo
hombre! "
Así, el flujo turbulento de pensamiento prevalece aquí y allá;
[3.20] se queja sobre todo, no tener, en plena asamblea, traspasó su espada
Embajador medio de su discurso, y se reunió con la superficie de toda su cruel
resentimiento. Ya que se avergüenza de su empresa, ya que se arrepienta: tales
controlador Calabria dice que su barco a las olas jónicas; él conoce el mar,
pero la serenidad engañosa de la estrella Olénie le hizo abandonar el puerto
amigo; De repente la tormenta ataca la tonelada mundo en todas sus
profundidades, Orion tira de su peso en los polos; para él, se lamenta la tierra
y la lucha para volver; Notus poderosa del timón de caza: al salir de su arte,
[3.30] se quejó, y abandona las ondas caprichos ciegos. Este es el descendiente
del rey Agenor; acusa a Lucifer, permanecía en el cielo y la salida del sol,
demasiado lenta para que se adapte a los que sufren.
Ahora, de repente,
cuando el carro de la noche se inclina hacia el oeste, donde las estrellas se
van desvaneciendo en el espacio, donde la gran Tetis condujo Hyperion, dudando
en dejar los mares del amanecer, la tierra sacudido, signo sombrío de la
calamidad, sacudió hasta sus cimientos, y el Citerón tambaleante dejó escapar su
antigua nieve; a continuación, los edificios parecían levantar, y las siete
puertas de Tebas inclinan sus copas hacia la otra.
[3,40] La causa es poco
conocida: la frescura de la mañana regresó el hijo de Hemon, irritado contra el
destino, y desesperada que la muerte habría sido denegada. Todavía no vemos la
cara distinctement.son, que aún no se deciden a reconocer; pero muestra signos
inequívocos de que trae la noticia de una gran desgracia; se golpea el pecho, se
quejó; no llora, habiendo pagado, de repente las lágrimas. Por lo tanto lejos de
la selva, despojado por la voracidad del lobo, el pastor de una lluvia
repentina, un viento violento temporal producida por la luna nueva, empujado a
la noche en el bosque con la manada confiado a su cuidado. Al día descubre en
sus ojos la carnicería; [3.50] que tiene miedo de anunciar a sí mismo a su
maestro esta reciente desgracia espantosa, manchado de polvo, que llena las
campañas de sus quejas, imaginar la desesperación silencio de la gran granero, y
pide una tras otros perdieron sus toros.
Cuando las mujeres de Tebas, se
reunieron en las puertas de la ciudad, lo vio llegar solo, horror! solo, sin
compañeros, sin sus líderes magnánimos, sin atreverse a preguntarle, que lanzó
un grito como el último grito de una ciudad tomada por la tormenta, o recipiente
que abismo.
Cuando el hijo de Hemon es la presencia del rey odia y busca:
"En tantos guerreros, aquí es el único Tideo que regresa: [3.60] o decreto de
los dioses, o por casualidad, o mejor dicho, me avergüenza decir, el valor
invencible de este hombre, todos (y creo que soy el único que el anuncio)
murieron todos, todos; Juro luces parásitas de la noche, y las crines de mis
compañeros, y tu eres la primera ave, fatales han gobernado mi regreso, he
recibido ni lágrimas, ni por la astucia, esta cruel Lo sentimos, que ahora una
vida desgraciada! Las órdenes de los dioses, Atropos, insensible a los deseos de
los hombres, mi destino, que no estaba fuera de la vida por esa puerta, me
arrebataron esta noble muerte. [3.70] Pero, para demostrar que soy generoso con
mi vida y no me estremezco ante la visión de la muerte, escucha: Usted ha
planteado, rey mortal guerra execrable repeler todos los presagios, con ganas de
su orgullo, la caza, y el estado, y las leyes y su hermano. La descendencia
arrancado de tantas familias en luto incesantemente que despiertan con sus
quejas, y has oído frémiras terror volar día y noche a su alrededor las almas de
sus cincuenta guerreros; porque yo también seguiré ".
La feroz monarca se
mueve, la sangre corre a su cara oscura, y se inflama. En el lugar y Phlegyas
Lábdaco, ejecutores siempre listo para cualquier orden injusto [3.80] (que es su
Eteocles dio la espada del imperio), por adelantado, y se preparan para entrar
el culpable; pero el adivino magnánima tenía la espada; y busca, se enfrentan
ahora al tirano horrible, a veces su propia plancha: "Usted nunca será capaz de
nada de mi sangre, que nunca hiera la mama que no ha afectado a Tideo. Por
supuesto voy con alegría, voy a buscar la muerte que me encantaba, y ver las
sombras de mis compañeros que me esperan. Usted, que es a los dioses, es tu
hermano ---". Nunca se ha completado; espada de sumergirse en su lado hasta el
guardia se lo impide: él lucha contra el dolor, y, doblado en dos por su
esfuerzo para ponerse en frente del golpe, [3.90] cae, y en su últimos râlements
hace girar a la sangre alrededor de su boca y su lesión.
los consejeros del
rey, preocupado por el terror, murmurando en voz baja, como el hijo de Hemon,
cuyo rostro sigue siendo amenazante y feroz incluso en la muerte, su esposa y
sus padres fieles, pronto se ven privados de la alegría de su espalda, superan
su lugar.
Pero la furia del rey abominable no se detiene allí; los impíos le
prohíbe las llamas de la pira y la paz de la tumba, pero en vano, aunque, como
su espíritu ignorar.
Usted, sin embargo, que fue muy bien en su destino y su
corazón; [3100] cuyo nombre nunca sufre el óxido digno del olvido, los que Osas
buena cara a un tirano, y trazar su ruta mostró que la libertad, por lo que, por
lo canciones que égalerai su fama a sus virtudes, como presagio de los dioses?
No es en vano Apolo ha enseñado las cosas del cielo y digno de su bahía, y
Dodona, la madre de los bosques vírgenes y Cirra, silenciando el Dios que los
inspira, llevar a la gente en suspenso. Ahora lejos del Averno y Tártaro va,
gana los campos elíseos, lugares inaccesibles a las crines de Tebas, [3110],
donde las órdenes del tirano inicuas tienen más poder; que su ropa, que sus
miembros se ahorran los dientes de las bestias; tu cuerpo tendido en el aire,
está protegido por el miedo y el respeto de las aves de presa.
Sin embargo
las mujeres, la desesperación, los niños, los padres, se extendió fuera de las
paredes, y los caminos trazados por lugares intransitables pálido, todos
ansiosos por ver los objetos de sus lágrimas correr en lugar de lucha. Miles de
personas les acompañan para consolarlos; algunos se queman para ver las acciones
de un hombre, y por lo tanto el trabajo realizado en una sola noche. [3.120] Un
sonido de todo el camino, y los ecos responden a los gritos.
Cuando llegó a
las rocas notorios en este bosque horrible, entonces, como si no hubiéramos
siquiera gimió, como si una lluvia de lágrimas no había ya emitidos, tantas
bocas que liberan único, grito deprimente; y la multitud a la vista de estos
cadáveres se transporta por la rabia. El duelo es horrible, vestida con jirones
sangrientos, el pecho desgarrado, causando madres. Ellos buscaron los cascos de
los muertos y los cuerpos muestran que hayan reconocido y examinado toda
exterior y de los padres. Ellos secan el pelo con los desfiladeros de sangre
corruptos, donde se sellan sus tapas, [3130] y cumplir con sus heridas profundas
de lágrimas; algunos, un vano mano cuidado, retirar los dardos clavados en la
carne; otra encajan suavemente los brazos cortan el tronco, y la posición de las
cabezas sobre sus hombros.
Pero paseando por los arbustos y en el polvo del
campo fatal, esta noble madre de dos jóvenes guerreros que ahora son sólo dos
cuerpos, IDE, el cabello despeinado, presionando sus uñas el rostro lívido,
objeto, ya sea lástima, pero el terror en medio de las armas entre los muertos,
rollos aquí y allá en ese suelo fatídico su pelo blanco en el trastorno, busca a
sus hijos y se lamenta de todos los cuerpos.
[3.140] Así alegría de una
reciente guerra del tesalio, obedeciendo el uso execrable su nación para
recordar a un hombre que pasaba por su canto mágico, armado con una antorcha
encendida de cedro viaja en la noche el campo de batalla, el retorno de los
cuerpos en su sangre, y examina cuál de los espíritus que puede dar más mensajes
para los vivos; las almas tristes se quejan, y el padre de Averno negro se
indigna.
El hijo de Ide estaba lejos debajo de una roca: el placer, ese
mismo día, la misma mano se habría eliminado; esa misma línea, cruzando el
pecho, los había encadenado para siempre! Ide los ve, [3150] y las lágrimas se
escape a borbotones de sus ojos:
"¿Son estas sus abrazos, estas son tus
besos, O mi hijo? Está presente en el último término, la muerte, crueldad
ingeniosa, que ha atrapado el uno al otro? Lo herida toco por primera vez? lo
que la cara voy a presionar la primera de mis labios? Es que, el poder de su
madre, que, el orgullo de mis lados, usted por quien yo pensaba que el partido
dioses y superar en la nobleza todas las madres de Tebas? Oh! cómo son más
felices, ¿cómo son bendecidos en su unión aquellos cuya capa era estéril,
aquellos que nunca han, en los dolores del parto, sus gritos atrajeron la
atención de Lucine en su casa! [3160] Me es mi fertilidad es la causa de mis
males. Y eso no es ni siquiera en una batalla en la luz del día, ilustrado por
una de esas acciones que las naciones mantienen una memoria eterna, se fue por
lesiones, al menos gloriosa para su desafortunada madre ; se trata de una muerte
oscura y miserable que han soportado. ¡Ay! en este derramamiento de sangre, que
es el vuelo a la gloria! Oh! No me atrevo a separar sus manos entrelazadas en un
abrazo triste, o deshacer esos nudos apretados por la muerte: voy, y siempre
hermanos, quemo el mismo juego, confundir sus cenizas en la misma urna ".
[3.170] Mientras tanto, todo el mundo ha colocado a sus muertos aquí hay Ctonio
Penteo se llaman en voz alta, por primera vez por su esposa, la segunda por su
madre Astíoque; estos niños pequeños esperan a su raza, O Phedima haber
aprendido de la muerte de su padre; Marpisse, la de su prometida Phyllée y
hermanas Acamante lavar su cuerpo ensangrentado.
Entonces, con la espada en
la mano, que entre en el día en el bosque, y tira de la colina cercana de su
corona con árboles antiguos, confidentes actúa anoche y fue testigo de los
gritos de los moribundos: allí, delante de hogueras, cada uno de los cuales
tiene su propia, que no se puede romper, un hombre de avanzada edad, alethes,
trata de calmar a la congregación funeral
"Si bien desafortunadas juguetes
del destino, nuestra raza tiene muchas cascadas, [3180], ya Sidón extranjera
sembró en surcos del tebano una cosecha de hierro que produce la fruta
extranjera, e hizo nuestros grandes campos a los que se cultivar; pero nunca, ni
cuando el palacio de Cadmo, siguiendo el consejo celosa Juno, fue reducida a
cenizas por un rayo, o cuando, orgulloso de una victoria funeral, el
desafortunado Athamas bajó de la montaña asustado, la presentación de informes,
por desgracia ! con gritos de alegría, el cuerpo sin vida de Learchus, no, nunca
Tebas pronunció tales gemidos, no su morada resonó hay más gritos, [3190],
incluso cuando por fin domesticado por la fatiga, Agave perdió su furia ya la
vista de las lágrimas de sus compañeros, fue congelado por el miedo. Un día,
como éste por desgracia, también igualado su aspecto sombrío, el día que la hija
de Tántalo malvados expiado sus orgullosos palabras lorsqu'entourée innumerables
ruinas se quitó la tierra tantos cadáveres, exigido tantas piras.
"Tal era
el estado de la multitud; abandonando así la ciudad, jóvenes y viejos, y un
largo enjambre de mujeres se mezclaban con su gemido afrentan los dioses en su
injusticia y lleno de gente tumulto grito a las siete puertas de Tebas, después
dos veces convoy que venía por cada uno de ellos. Yo mismo, recordar, sin
embargo mi edad todavía no era capaz de aflicción, [3200] lloré, égalai mis
gritos a los de mis padres. Estas desgracias, sin embargo, que eran dioses, y no
me gustaría, oh Delia! porque Acteón haberse deslizado a los bordes de la fuente
de casta, y han manchado sus ojos profanos, acabó desgarrada por sus perros en
una rabia, o porque una reina vio su sangre, resolviéndose en el agua de repente
formar un lago, no derramaría lágrimas nuevas; y quería el momento fatal de las
Parcas, y el Júpiter ordenó. Hoy en día es por el delito de perjurio rey que
hemos perdido a tantos ciudadanos inocentes, la élite de nuestro país; la
noticia de que el tratado fue pisado aún no ha alcanzado Argos, y ya deploramos
las recientes desgracias de la guerra. [3.210] Oh! para caballos y jinetes qué
tan grueso polvo y el sudor qué! oh! lo que es un terrible roja teindra nuestros
ríos hinchados a que estas peleas, que están en el verdor de la edad: para mí,
¿me permite, cuando todavía se permite, conseguir un montón de mi propia, y en
la cama tumba de mis padres! "
Así dice el anciano, la adición de
maldiciones contra los impíos Eteocles, que calificó de cruel e infame, y
predecir el castigo. ¿De dónde viene esta libertad de expresión? Su término está
cerca, su vida está detrás de él, y que iba a ilustrar su muerte tardía.
El
que sembró las estrellas, observando durante mucho tiempo más importante del
mundo estos eventos y ver a desarrollar en estas naciones un primer germen de la
sangre, [3220] se llama Marte en un apuro. Este dios había perdido el país de
Bistons feroz getas y ciudades, y se agitó adicionalmente, se pulsa la carrera
de caballos a las regiones etéreas, sacudiendo su casco que los relámpagos de
brillantez, y las armas de oro un lustre oscuro, animado figuras terribles de
monstruos. Bajo su carro se vuelve el cielo, y una luz sangrienta mostró su
escudo, que rivaliza con el orbe del sol.
Una vez que Júpiter visto aún
jadeante de su país fatigas sármata, y el pecho levantado por el torbellino de
la guerra:
"Tal como eres, dijo, O mi hijo, [3230] ir a Argos; como eres,
espada y húmeda, y la nebulosa ira delante. Deje que las personas se dan el
freno; que, teniendo todo lo demás en odio, quieren sólo le; que se dedican a su
cuerpo y el alma. Golpes obligan a quien vacila, enfreins las leyes que les he
dado. Se te permite engullir el ardor bélico de los anfitriones del cielo, y
para tranquilizar mi alma ya mi mismo puse las semillas de la guerra; Tideo dar
marcha atrás, diciendo a la infame bombardeo de Eteocles, preludio de odio a una
guerra vergonzosa; estas trampas, esta traición que sus armas han vengado.
"¿Nos lo creemos. Para usted, dioses cuyo rango es mío, en cualquier grado que
sea, [3240] no bloquee mi odio, no tratar de doblar con sus oraciones; y los
destinos y las zonas negras de las tres hermanas mismo día han prometido que
desde el principio del mundo, se establecen para la guerra, y estas personas han
nacido para la lucha. ¿Por qué me impide continuar en estas naciones venganza
por los crímenes del pasado, castigar a los descendientes malditos? Certifico
que el frente, santuario eterno de mi pensamiento, y las fuentes del Elíseo,
poderes sagrados, incluso para mí, con mi propia mano trastornaré Tebas, voy a
rasgar las paredes de sus fundaciones, y las casas Argos [3250] voy desmoronando
torres, y cambiará el lago, lluvia torrencial; Sí, incluso si Juno a sí misma,
en medio de esta agitación, se besan en un último esfuerzo y las co ".
El
dice; y attérés como si hubieran sido tan fatales, todos los dioses y conservan
sus voces y pensamientos. Por lo tanto, cuando los vientos dan un breve respiro,
los pinos del mar y sus costas duermen un sueño tranquilo; aire, caliente y
pesado, los trazos de una respiración apenas perceptible la madera follaje y las
nubes; mientras que los estanques, lagos suenan colapso, ríos están en silencio,
agotado por el sol.
[3.260] marzo de triunfo alegría al oír esta orden, se
eleva el ardor en su coche sigue ardiendo hirviendo, y gira las riendas hacia la
izquierda. Él ya ha alcanzado los límites donde el cielo termina abruptamente
cuando Venus viene a descansar sin temor delante de sus caballos: se contraen e
inmediatamente Surle su melena erizada reduce humildemente. Por lo tanto, el
pecho presionado contra la punta de la lengua, y desviando los ojos húmedos,
mientras que se inclina a los pies de la diosa, los caballos formación de espuma
roer su freno de diamante, que comienza:
"Es la guerra contra Tebas, oh el
mejor de los padrastros, [3270] es la guerra que se prepara es la extinción de
su hijo nietos? Ni el nacimiento de Harmonia, o este matrimonio celebrado por
los dioses ni las lágrimas que derramé, nada, furioso que son, nada puede
detenerte? Esta es la recompensa de mi culpa? Esta es la razón, la reputación,
la modestia, he sacrificado todo? Eso es todo lo que me tiene de usted Lemnos la
red? Llevar a cabo, puesto que tal es tu voluntad, pero no tan bien como me
obedece Vulcano, Vulcano, el marido herido, el marido enojado, y sin embargo mi
esclavo. Cuando le habría pedido a agotarse para mí en su forja y pasar las
noches tras día, que sería feliz, aunque sólo sea para hacer que los nuevos
adornos y armas! [3.280] Y usted! ... pero sólo rocas, pero es un corazón de
bronce Quiero flexionar con oraciones. Pero una cosa, que te pido en la
angustia: ¿por qué te obligué a sumarse a esta chica querido esposo de Tiro, y
se entregó a este matrimonio fatal? Tuvieron que ilustran por las armas, que se
formaron corazones para la acción, estos tirio nacido de la sangre de un dragón,
se dijo con orgullo; eran los descendientes de Júpiter .... Ah! que habría sido
mejor para que me case con mi hija a la Osa Mayor, a alguien su tracios! ¿No
hemos sufrido suficientes humillaciones? ¿No es suficiente que la hija de la
diosa Venus rastreo coloque sus largos pliegues, [3290] y contamina sus hierbas
limo Illyria? Y ahora es su raza inocente! "
El dios de la guerra ya no
podía soportar sus lágrimas; pasa su lanza en su mano izquierda, saltó de su
carro, Venus la toma en sus brazos y se lesionó el escudo besos; entonces él
halagado por estas dulces palabras:
"Oh, mi paz después de los combates, mi
santo placer, la única paz de mi alma! ustedes que, el único de los dioses son
lo suficientemente potente como para tirar con impunidad en frente de mi cara, y
cuando tiritan en medio de la carnicería que le impida cerca de los caballos, y
me Tiro esta mano de la espada ; [3300] No, ni sangre lazos que me unen al tirio
Cadmo, ni su precioso amor (no se deleitan en mí reproches inmerecidos), están
fuera de mi memoria. Puede que antes de cualquier dios que soy, que se sumerge
en los lagos subterráneos del reino de mi tío, desarmado y tirado en medio de
las sombras pálidas! Pero en este momento, obligado a ejecutar los decretos del
destino y los mandos supremos de mi padre, porque este no es el brazo de Vulcano
elegimos para esa misión, con lo cara iba yo a querer oponerse Júpiter y
desprecian las leyes que dictó a mí, que en otro tiempo, el poder Oh! vieron la
tierra y el cielo y los mares tiemblan al oír el sonido de su voz, y dioses, tan
grande, sin embargo, a pesar de que después de él, [3310], ocultando el horror?
Pero no empuje, oh mi amado, su miedo a la desesperación! si no tengo el poder
de cambiar lo que es, al menos, cuando las dos naciones se batalla bajo los
muros de Tebas, voy a estar allí, y voy a apoyar al partido que nos está aliado.
Entonces, al verme a través de la llanura sangrienta, caminando muerte en las
filas de Argos, que haces. son mayores y desanimado. Esta ley, I y destino no se
oponen ".
Dicho esto, se lanzó al espacio sus caballos de fuego. La ira de
la gran Júpiter no lo hace rápidamente cae al suelo, cuando a veces se detiene
en Otris cubiertas de nieve o hielo en la parte superior de la Ossa, [3320] y se
lleva en el rayo nube se su arma el brazo: la masa de moscas de fuego; todas las
crueles órdenes del dios y la triple dardo aterrorizar al cielo; se anuncia la
rica devastación campo, los desafortunados marineros murieron en el lecho
marino.
Ya Tideo, llegado al final de su camino, después de un no pesados
por la fatiga de las campañas de Argos y las verdes laderas de Prosimna; su
aspecto es aterrador; su cabello está cubierto de polvo; un sudor espeso cae de
sus hombros en las heridas profundas; insomnio ojos enrojecidos; su boca está
reseca por la sed y jadeante, [3330], pero su alma respira la gran gloria de sus
acciones recientes. Así que de vuelta a sus pastos acostumbrados toro agresivo,
incluyendo el cuello, los hombros y la parte desgarrada por goteo de la sangre
de su oponente y su propia. Sus fuerzas golpeadas pero no su valor; la cabeza se
inclina, pero su pecho se hincha de orgullo: su enemigo tumbado en la arena,
gimiendo sin vergüenza, e impide sentir su escozor.
Tal fue Tideo. Ha
continuado, atravesando las ciudades entre el Asopo y argón, para encender su
odio; siempre y donde quiera que va MP que por una nación griega [3340] fue a
reclamar el trono de Tebas exiliado Polinices, pero que la violencia, emboscadas
nocturnas, criminal y traicionero ataque, que era todo lo que podía conseguir el
rey de Tebas, que se niega a reconocer los derechos de su hermano. Las personas
creen fácilmente. El dios de la lucha tiene una fe sin límites, la fama y
duplica suena el miedo que recoge.
Tan pronto como entró en la ciudad (la
casualidad de que en este momento Adraste reconciliar consultar a los líderes
más distinguidos), que se.présente de forma inesperada, y el umbral de la
puerta, gritos de una voz de trueno:
"A las armas! Armas, guerreros! y tú,
gran rey de argón, si todavía tiene una gota de la sangre de sus antepasados
magnánimo [3350] a las armas! Más piedad, más respeto por el derecho de gentes,
la única preocupación de Júpiter! Hubiera sido mejor para mí ser diputado en
sármata codiciosos, sediento de sangre entre el guardián del bosque Bébrycie. Y
acuso a nadie, y no me quejo de la misión se me dio; no, yo celebro mi viaje, me
complace tener el dedo en la villanía de Tebas. En sus ataques, créanme, sus
ataques me resistía como un poderoso a su vez como una ciudad estrecha entre sus
paredes; sus guerreros, los más valientes, armados de pies a cabeza, por la
noche, en una emboscada, cuando estaba desnudo, cuando supe la escena, a
traición me rodearon, pero en vano: se encuentran en la sangre [ 3360] a su
ciudad desierta. Ahora, oh! Ahora es el momento, el enemigo, como tiembla cuando
está pálido de miedo mientras él lleva a sus muertos en la hoguera, mientras que
su mano es todavía camillas funerarias! a mí mismo, todo lo que estoy cansado de
tener sombras de esos cincuenta héroes, ya pesar de las heridas aún sangrantes,
adelante, adelante! es mi deseo ".
Temblor, los Inachides levantan de sus
asientos; y, en primer lugar, el héroe tebano, avances, la cara inversa, "Yo, el
objeto del odio de los dioses, I, cuya vida es un crimen, veo estas heridas, y
luego hago si no se presenta! Fue este retorno, oh, mi hermano, que está
preparando? [3.370] Era mi contra que dirigen estos rasgos? O el deseo vergüenza
para la vida! infeliz! Privé a mi hermano una magnífica hazaña. Y ahora que la
paz dulce sigue viva en sus paredes, y que yo no estoy a favor de que la causa
del problema tan grande, todavía estoy en el extranjero usted! Lo sé, y la
felicidad no me ha hecho olvidar lo difícil que es para ser arrancado de sus
hijos a su cama a su país; familia nunca preocupado por un ser querido va a
acusarme; madres nunca me echen una mirada oblicua y feroz. Voy a salir con un
buen corazón, y otros para morir; cuando mi querida esposa, cuando mi padre me
llevaría a cabo de nuevo. ¡Mi vida! es en Tebas [3380] es para ti, mi hermano, a
usted especialmente magnánimo Tideo, se lo debo! "
Así, mediante palabras
fingidas que escudriña los corazones, e indirectamente una oración. Sus quejas
excita la ira y lágrimas de piedad se mezclaron con feroz resentimiento. En
todos los corazones, ya sean jóvenes o congelado y entumecido con la edad, la
regla un pensamiento, a llamar a la gente a las armas, unirse a las naciones
vecinas, y caminar inmediatamente. Pero el rey, tan profundo en sus diseños que
capaz de manejar la carga del imperio:
"Que dijo, a los dioses y para mí, te
lo ruego, la atención a remediar estos males; [3390] usted, su hermano no es
impunemente se priva del trono; y que, no se dedican a ciegas en esta guerra ..
Ahora la bienvenida a esta noble hijo de Eneo, tan orgulloso de tanto
derramamiento de sangre; y el alma y el cuerpo se relaja en una situación
prolongada. Para nosotros, el dolor no nos hará volvemos locos ".
Inmediatamente amigos Tideo y su esposa, pálidos de miedo, los entouren agotado
es la fatiga de la batalla y la carretera. Sin embargo contento, se detiene en
medio de la habitación; y, apoyado en una columna enorme mientras qu'ldmon, un
discípulo del dios de Epidauro, lavándose las heridas, a veces con una puerta de
mano ligera es el hierro, a veces se ablanda con hierbas de gran virtud, [ 3400]
rasgado de este dolor por la grandeza de su alma, dijo que el origen de la
disputa, sus palabras y las de Eteocles, el lugar de la emboscada, el momento
elegido para esta sorpresa, los guerreros que la atacado, sus líderes, y lo que
cuenta! aquellos cuya muerte más le costó finalmente Méon preservado para un
mensaje triste; y mientras habla, sus fieles amigos, el estado grande, su
padrastro, estaban inmóviles con asombro, y desterrado de Tebas es transportado
por la furia.
El sol inclinado a lo largo del mar occidental había
desenganchado sus caballos de fuego, y se sumergió en las aguas del océano el
pelo brillante; [3.410] la multitud de las hijas de Nereo y las horas punta un
ritmo rápido; que se desprenden de la frente coronar los rayos de oro, que
privan a los caballos de sus frenos y arnés carmesí descargar sus pechos
sudorosa; otros conducen a suave césped que se merecían, caen bajo la barra de
tiro y volcar el carro.
Llegó la noche: se calmó las preocupaciones de los
hombres y arrebatos desordenadas de los animales salvajes, y envolvió los cielos
de su abrigo negro. Ella es dulce para todos, pero no para ti, ni por Adrasto
Polinices; sobre Tideo, duerme un sueño profundo, y lleno de la gran imagen de
su valor.
[3.420] Y ya es el dios de la batalla, en medio de las sombras
errantes de la noche, en las fronteras de la Arcadia, en las campañas de Nemea;
en la parte superior de Ténaro en Thérapnée, favorito de Apolo, suena el trueno
de sus armas, y llena de amor los coeurs.les más tímidos. Enojo, ira ajustar su
brillantez; El miedo, su escudero, tiene las riendas de sus caballos, tandisque
fama, a la que se escapa ningún sonido, como un cinturón que rodea y mil rumores
diferentes volando delante de su carro, y empujado por los caballos gemidos
viento con los pies alados, sacude sus plumas temblorosos con un murmullo sordo
es que el escudero, apretando su látigo ensangrentado, [3430] fuerzas para decir
lo que es y lo que no lo es; y su carro a sí mismo a Dios, implacable, golpea la
espalda y la cabeza con su terrible lanza.
Así que cuando Neptuno tiene
vientos de las casas de Aeolus, caza delante de él, y precipita en la gran mar
Egeo; entre las riendas de la aljaba carro, triste procesión, y las nubes y la
niebla y las heladas, y las tormentas. Lourdes de escombros fangosa de la tierra
destrozada, las Cícladas, sacudida hasta sus cimientos, resistir, pero tropieza;
a ti mismo, oh Delos, que temen ser separado de Mycone y Gyare, sus compañeros,
y da fe de la fe de tu bebé grande.
[3.440] Ya por séptima vez, Dawn
complexión púrpura hizo la tierra y los dioses de la luz del día, cuando los
viejos héroes, descendiente de Perseo, la mente perturbada de mil ansiedades
sobre la guerra y en el orgullo de sus yernos, todavía dudado en darle a su
carrera ardor guerrero y se siente el aguijón de la lucha contra las naciones, o
si sería frenar los resentimientos, y retener la media espada de la vaina. Por
un lado, las dulzuras de la paz se atraen; Por otro, su orgullo se rebeló
vergüenza de un descanso tales; Y, además, intoxicado nuevos encantos de la
guerra, los pueblos serán difíciles de contener. [3.450] En su duda, sonrió una
última reflexión es hablar sacerdotes inspirados, y para aprender y la voluntad
de los dioses.
Es usted, Anfiarao, se encomienda este cuidado inteligente
del futuro; y al lado de hijo de amitaón, ya antigua en el cuerpo, pero fuerte
de ánimo e inspiración; Melampo, no se une quieren. No podemos decir cuál de los
dos Apolo favorece más, cuál de los dos que más se riega aguas Cirra. En primer
lugar, en los intestinos y la sangre de las víctimas cuestionan los dioses:
desde el principio, que ven con terror manchado corazones de las ovejas rechazar
una respuesta favorable, y sus venas llenas de sangre negro, amenazar a los
problemas recientes . Quieren seguir, sin embargo, y pedir augurios al aire
libre del cielo.
[3.460] se había escondido en una montaña al descubierto su
trasero negrita (los habitantes de Lerna llaman Aphésas), y desde siempre
sagrada para el pueblo de Argos: aquí es donde Perseo, rápido vuelo , saltó en
el aire el día en que su madre vive asustado, desde lo alto de una roca, los
pies de su hijo se levantan del suelo, y fue tentado a seguir.
Aquí es donde
los dos intérpretes de los dioses en su frente una corona de olivo pálido y
templos adornados con bandas blancas como la nieve, van de la mano, al igual que
el sol seca las campañas húmedas rocío, y disipa las nieblas heladas de la
noche. [3.470] El primero, el hijo de ecles discurso a la deidad, para que sea
adecuado, la oración habitual:
"Júpiter Todopoderoso! es que, por ejemplo,
que dio a los Eagles rápida asesor de poder, lleno de las aves de la ciencia del
futuro y dio a conocer en el cielo para los presagios y las causas ocultas de
eventos. Encontraríamos oráculos más seguros o la guarida de Cirra ni en los
árboles Chaonie cual, si uno cree que el habló reputación en tu nombre al país
de perros; No, aunque incluso llevar en competición y árido Hammon, y los
hechizos de Licia, y carne Nilo y Branchus igual a su padre, y los habitantes
rústicos de Pisa, [3480], que en la noche , oye la voz de Pan en la sombra del
bosque Licaonia. Aunque la inspiración más rica es la persona a quien se te
manifiestes, oh Júpiter, en el vuelo de las aves favorables: el privilegio que
tienen es increíble, pero existe, y mucho; es el fundador del cielo ha como se
desee, cuando se ven atrapados en los componentes dispersos de los gérmenes caos
nuevos mundos; ya sea que cambiado de forma después de tener nuestro, el ave se
ha elevado a la región de los vientos, que es una esencia pura, y que su
inocencia y el contacto inusual con la tierra le enseñan la verdad ; es su
creador soberano de los hombres y los dioses, pertenece a saber: [3,490] para
nosotros, se nos permite leer solamente por delante en el cielo si desea iniciar
esta guerra y lo que será nuestro futuro trabajo. Si el destino lo quiere, si
Parcas inflexibles decidieron que los ejes Argos rompen las puertas de Tebas, da
una señal, tonelada izquierda, y la mitad del aire que se escucha el misterioso
lenguaje de los pájaros y una favorable unánime susurro. Si se trata de lo
contrario, nos parar ahora, y cubre el día una nube de pájaros que vuelan
derecho ".
Dijo, y se coloca en la parte superior de una roca: entonces
pronunciar los nombres de varios dioses desconocidos, y entra en la oscuridad
los ojos del gran universo.
Cuando estaban en las formas consagradas
compartida las estrellas, [3500] tenían tiempo, el alma y los ojos; seguido
observado cuidadosamente todos los movimientos del aire, el hijo de amitaón
comienza, después de un largo silencio:
"¿No ves, Anfiarao, en las regiones
superiores del cielo ninguna ave tiene vuelo regular? todo se elevará después de
haber deslizado todos los puntos de 1'espace, o huir con un aleteo siniestro? Ni
el negro trípodes de compañía o la quema de un rayo ministro, no se muestran y
el pájaro pico ganchudo de la rubia Minerva no viene traerla aún más auspicioso:
no, esto es el buitre, es es el triunfo de halcón, que giran sobre su presa.
[3.510] Los monstruos volar, pájaros tristes silbidos en el, gemido nocturna
bate al descubierto, y los destinos fatales ad madre de salmuera. ¿Vamos a
seguir a estos primeros presagios? Son estos anfitriones Thymbra dios, son
entregas al cielo? Juntos, las uñas curvadas, desgarro entre sí de rabia;
susurro de sus alas, imitando los gemidos, que cazan los céfiros, y rompió el
plumaje de su pecho ".
Anfiarao sigue: "Seguramente mi padre, Febo es
variable en sus portentos; A menudo he sentido, y desde mi juventud, cuando el
buque tesalio me dio a luz a estos reyes, hijo de los dioses. Allí, la
predicción de los peligros que correría en la tierra y en el mar, [3520] me
sorprendió a los líderes; y cuando hablé del futuro en circunstancias
embarazosas, Mopso no era más que escuché Jason; pero nunca, antes de este día,
que tengo: signos notado tan terrible ni leer en las estrellas el anuncio de más
prodigios, sin embargo, las cosas más aterradoras están en marcha. Poner su
atención en ese lado: en las profundidades luminosas del cielo, incontables
cisnes están dispuestos en batallones, si Boreas ha llevado a los bancos heladas
del Estrimón, si los vientos suaves fertilizantes a lo largo del Nilo criarlos a
nosotros. Se detuvieron: ¿se imaginan que esta es la imagen de Tebas; porque
formado en un círculo, inmóvil y en silencio, [3530] Parecen una ciudad rodeada
de murallas y fortificaciones. Pero aquí hay un ejército más fuerte avanzar a
través del vacío; Veo, en la misma línea, siete de estas aves salvajes que
llevan el rayo de Zeus gran marcha a la cabeza de la columna triunfal. Estos
son, lo entienden así, los siete reyes que mandan el ejército de Argos. Fundaron
las alas de nieve compañía, el pico abierto a la carnicería y las garras
extendidas.
"Ves esta lluvia de sangre dispersado por los vientos, esta nube
de plumas cuyo día se oscureció? Lo repentina y cruel ira vengativa de Júpiter
se sumerge ganadores en la muerte! Uno, se eleve demasiado, de repente enciende
los fuegos del sol, [3.540] y deja caer su furia; el otro lucha contra los
enemigos más formidables, pero no puede sostener sus alas demasiado débil. Esto,
unido a su oponente, cae con él; la otra se resta de vuelo desde el destino
fatal de sus compañeros. El otro, envuelto en una nube, muere; hay uno que, a
punto de expirar, se come a su enemigo con vida; sangre riega nubes huecas. ¿Por
qué estas lágrimas furtivas? Éste, venerable Melampo, el que cae, lo reconozco.
"
Temblando bajo el peso del futuro con anticipación por los males que ven
la verdadera imagen, los augurios son golpeados por el terror; [3.550] se
arrepienten de ser la fuerza a los clientes la fórmula entrado aire, y han
penetrado los secretos del cielo a pesar del cielo. Maldicen los dioses que
escucharon. ¿Dónde los mortales desafortunados este deseo loco de conocer el
futuro? Es un regalo de los dioses, o la necesidad de la raza humana que nunca
puede ser fijo? Queremos saber a toda costa lo que era nuestro primer día, lo
que será la última; que en su bondad el padre de los dioses, que en su alma de
hierro Klotho nos reservamos; cuestionamos las entrañas de las víctimas, el robo
y canto de los pájaros en las nubes, el curso de las estrellas, las fases de
ajuste de la luna, y tesalianos arte sacrílegas. [3.560] Estos no eran hombres
de la edad de oro, nuestros antepasados de sangre pura, estos niños duras rocas
y árboles de roble, lo que habría diseñados estos intentos audaces; sólo tenían
amor, bosques domesticados y el suelo; y para ellos, cavar en el futuro era un
crimen. Para nosotros, débil y corrupto turba, examinamos a fondo el pensamiento
de los dioses; hay palidez y el odio, por lo tanto, los ataques, y la perfidia,
y una ambición sin límites.
En sus propias tiras Anfiarao mano de lágrimas y
guirnaldas malditos y de la frente, despojado del follaje sagrada, por debajo de
la montaña de odio ahora: ya que el sonido de los disparos y el sonido de la
trompeta están en las orejas, y Tebas ausentes en estremecieron su corazón.
[3.570] No muestra la multitud o en secreto conversando con el rey, o para
asistir a la reunión de los grandes; se esconden en la sombra de su lugar y se
niega a revelar los dioses. Para ti, la vergüenza y el dolor que tienes en el
campo, O Melampus!
Doce días permanecen boca cerrada, y mantiene a la gente
y los líderes a una incertidumbre desgarradora. Y ya el mando supremo del sonido
tronador, y despoblar ciudadanos campañas y antiguas ciudades; el dios de la
guerra trae en su estela innumerables combatientes; todo con mucho gusto
abandonado sus hogares y sus amadas mujeres y niños llorando en el umbral:
[3580] es tan poderoso dios que inspira! Armas colgadas en la puerta de la casa
paterna, tanques cerrados en los templos, que están luchando con la felicidad;
dardos disminuidos por el tiempo, espadas puntiagudas oxidan enderezar el fin de
atacar de nuevo, y rejuvenecer, afilado en la piedra. Ellos están tratando de
cascos, corazas pulido con grandes puños americanos, túnicas de acero cuya
herrumbre está gritando de malla; otros se relajan los arcos de Creta. Pronto
guadañas, arados, rastras, arados doblada, rubor hambre terrible en las forjas.
[3590] no se avergüenza de tallar lanzas en arboledas, y los escudos en los
lados de edad toro.
Argos se apresura a la casa del rey, que la tristeza
devora; la guerra es en todos los corazones, la guerra está en boca de todos; un
grito sube en el aire, tan formidable como el rugido de los trienios mar, o el
ruido que se está convirtiendo Encelado: Monte tonelada fuera de sus casas de la
quema; cráteres, más allá del promontorio de Pelorus aprieta sus olas en una
cama estrecha, y la tierra de Sicilia, una vez arrancado continente, espera
regresar a su punto de partida.
Mientras avanza Capaneo, excitado por el
amor de la lucha, y esta larga paz que infla la corte indignación. [3600] Los
espectáculos nobleza y viejo, pero sus hazañas que ha superado sus antepasados
larga impunes desprecio de los dioses y la justicia, y pródiga de su vida,
cuando la ira inspira, como uno de los locales bosque oscuro Foloe, o un
cíclope, que de igual tamaño, que está de pie en la puerta, con la cabeza y
temblorosa multitud Anfiarao.
"¿Qué cobardía, si llora, hijo de Inachus! y
vosotros, griegos, nuestros aliados de la sangre! ¿No es una vergüenza que en el
umbral de una plebeyas [3610] tantas naciones armadas y lleno de ardor y dejar
en suspenso? No, cuando, en las bóvedas cavernosos Cirra, Apolo mismo, lo que es
para los cobardes, lo publica la mugirait reconocido encerrado en su guarida
fatídico, que podía esperar una luz llegó virgen anunciar sus oráculos
aterradoras y engañosas. Dios mío, es mi valor es la espada que quiero! Deje que
él por lo que en este momento, con su cobardía y la mentira, el cura; o voy a
saber hoy qué punto el poder de los pájaros! "
Un temblor de alegría,
aplauso unánime la bienvenida a estas palabras con furia. Por último, forzado a
salir, el hijo de ecles, agitado por muchas otras preocupaciones, muestra:
[3.620] "Ciertamente, no se trata, dijo, el clamor de los jóvenes malos, ni
amenazas, a pesar de estas amenazas van a la demencia, que me sacó de mi
oscuridad para otro m ' espera, y mi último día no va a ser el trabajo de un
mortal. Es mi amor por ti es Febo, cuya mente se desborda en mí que me vuelve a
revelar el secreto del futuro. Todo lo que tiene que suceder, todo lo que está
delante de nosotros, voy a revelar que, a pesar de mi dolor; pero, loco, está
prohibido para advertirle de antemano, y sólo tú eres mi silencio Apolo. Cuando
lo hace, infeliz, a pesar de los destinos y los dioses, [3630], donde se usan
estas armas? ¿Es el látigo de las Furias que atormentarte y ciego? ¿Está tan
disgustado con la vida? odias Argos? Sus casas han perdido sus encantos que:? No
se preocupe no hay presagio? ¿Por qué hacia la misteriosa cima del monte Perseo
me has obligado a llevar mis pasos temblorosos, y para obligar a la entrada de
los consejos de Dios? Podría gustaría que ignora la situación de nuestras armas,
nuestros días suprema para todas sus y la mía. Yo le llevará a presenciar las
profundidades del mundo que inspeccioné, las aves tienen escuché la lengua, y
que, dios Thymbra, en mis invocaciones nunca he encontrado tan cruel, ya sabe
cuáles son los signos futuro [3640] tuviera que sufrir! Vi presagios de inmensa
ruina; Vi crímenes hombres y dioses sucios; Vi domada en alegría, y Lachesis
mediante la eliminación de los siglos en su husillo negro.
Echad de que
estas armas. Es un dios que se opone a su furia, es un dios! Infeliz! Qué
encuentras hermosa para inundar la sangre del Aonie y surcos sembrados por Cadmo
cruel? Pero ¿por qué estas predicciones vanas? por qué estos esfuerzos para
prevenir los acontecimientos inevitables? Nosotros también ". A estas palabras,
el sacerdote está en silencio y suspiros.
Capaneo sigue: "te Guardia tus
augurio ira, y sus predicciones gran excusa para quedarse en solitario
vergonzosamente Argos. [3.650] Cualquiera que sea el sonido de la bocina para ir
de la oreja! Pero ¿por qué estás retrasado el impulso de los guerreros más
valientes que tú? Sin lugar a dudas, por lo que puede lánguidamente tumbado en
su cama, disfrutar de sus auspicios vanos, su hijo, su casa; veremos en
silencio, no vemos la venganza pecho traspasado al noble Tideo, y el tratado
desgarrado por la espada? Sin duda estos guirnaldas que tendrá un valor de la
paz; tal vez sus palabras brotan de las causas cielo vacío y las fuentes ocultas
de eventos? lástima que los dioses, si están preocupados acerca de los
encantamientos [3.660] y oraciones de los hombres. ¿Por qué quiere asustar a los
corazones tímidos? Es el temor de que los dioses entraron en el mundo. Para
usted, usted puede dar seguridad a su carrera ahora con entusiasmo; pero al
primer sonido de la bocina, cuando ya tomamos en nuestros cascos aguas enemigas
de Ismene y Dirce, no vienen, te lo advierto, cuando ya no escucho el sonido de
cornetas y armas, se lanzan a la cruz, y por alguna visión de viento o los
pájaros, disminuyen los días de luchar! lejos de ti entonces estos vendajes
suaves, y su furia profética, y el espectro de su dios. A continuación, habrá
una señal de que yo y nadie conmigo está listo para carnicería borracho ".
Una segunda vez los aplausos estallaron con un enorme accidente, [3670] y rodar
en tumulto a las estrellas.
Tal corriente rápida, los vientos de la
primavera, el derretimiento de la nieve de la montaña, el aumento de la rabia,
rompió todas las presas, vagando aquí y allá en las llanuras, y lleva sin orden
ni concierto, con gran ruido, cabañas, restos tierras, rebaños, hombres, hasta
una colina, más fuerte que él, se detuvo, y su amplio bulevar finalmente lo
hacen los bancos. debates de estos líderes son interrumpidos por la noche.
Sin embargo Argie ya no podía soportar los gemidos de su marido, y tocó de
piedad por el dolor que comparte [3680] estaba en el estado que tenía el pelo
largo y desordenado, las mejillas surcadas de lágrimas, al palacio de su padre
venerable, y llevaba su abuelo del joven Thessandre colgando de su pecho, en un
momento en que termina la noche, cuando el alba no se levanta, sin embargo,
donde el oso, quedó solo en horizonte, ve con envidia las estrellas huyen hacia
el océano.
Cuando cruzó el umbral y fue arrojado a los pies de Adrasto,
"¿Por qué estoy llorando, triste sin mi marido, escrito, la golpeó la noche en
la puerta, a pesar de que no te lo dije, sabes ¡padre! Pero juro que los dioses
que presiden al nacer, [3.690] y que, a mi padre, no es el que me ha enviado es
una pena que me vuelve inquieto de mi cama; Porque desde el himen, y después de
él, el fatal Juno encendió la antorcha para nosotros un desastre, siempre
lágrimas Polinices, siempre quejándose de que crece conmigo he quitado el sueño
de mis ojos. No, cuando tengo la ferocidad de un tigre, cuando mi corazón está
rodeado por una corteza dura piedra, podría estar allí. Sólo nos puede ayudar,
sólo se puede curar nuestros males; Danos la guerra, mi padre! Ver humillación,
ver el descenso de su hijo, ver a este hijo del exilio; un día se avergüenza de
su nacimiento. Recuerde que este exilio fue su primer invitado, y que se unen
las manos que attestas los dioses! [3700] Es él que el destino en el almacén
para mí, que prefiguró Apolo. Yo no colarse quemado Venus ardor o encendí un
penal de la antorcha; Yo respetaba sus pedidos, he apreciado su consejo. Ahora
sufre, voy a ser tan cruel como para despreciar sus quejas? No sabes, querido
padre, ¿no sabes que el amor brillante fue para mí una razón más para casarse
con una desafortunada. Y ahora, en mi aflicción te pido que una triste y
terrible para mí que va a ser una fuente de terror y lágrimas. Pero cuando el
día fatal interrumpirá el beso de despedida, cuando los tonos discordantes de la
trompeta darán los guerreros de la señal; salida, y que brillará sus frentes
brillo salvaje de los cascos de oro, [3710] ay! querido padre, voy a enviar es
posible que otra oración ".
El rostro bañado en lágrimas, sus besos padre.
"No soy yo, mi hija, que nunca comete un delito de este tipo de quejas; Así que
no temas; su solicitud es honorable; y no habría injusticia para rechazar. Pero
las revelaciones de los dioses (que no deja de esperar), mis propios miedos,
tronos inestabilidad, me puso a mil dudas en la mente: estas dudas, sin embargo,
mi hija, cuando sea necesario, tendrá un plazo ; y plaindras que hay que clama
en vano. Su papel que le es confortar a su marido, que es menos dura una
expectativa necesaria. Que poco a poco, mi hija, amplios preparativos. Nuestras
armas se beneficiarán de estos retrasos. "[3.720] Mientras habla nace él nació,
y se eleva para llenar su enorme tarea.
LIBRO CUARTO.
[4,1] Por tercera vez el aliento de Febo Zephyrs se había
derretido la escarcha del invierno, día y lo obligó a entrar en la pista más
ancha que corre a través de la primavera, cuando la cautela de Adrasto fue roto
por el impulso de destino, y las listas de los combates, finalmente abiertas a
Argos infeliz. La primera cumbre de Larisa, Bellone sacude una mano una antorcha
brillante, y el otro lanza una enorme jabalina, que atraviesa el silbido del
aire, y se detiene en la cima del monte frente Dirce . Pronto entró en el
campamento, se mezcla con los guerreros cubiertos con una armadura de acero
brillante y oro, [4,10] y se estremece como una escuadra; distribuye espadas,
excita caballos gesto, que llama a las puertas; las órdenes del valiente delante
de ellos, e incluso suelta sienten ellos vale la pena un momento.
El día
señalado llegó; cae en honor de Júpiter y Marte, un sinnúmero de víctimas; la
aparición de la matriz en la que nada positivo velará, el cura se puso pálido, y
sin embargo, en presencia de hombres armados, pretendió a la esperanza.
Ya,
en torno a sus padres, niños, chicas jóvenes, ancianos, multitud, se mezclan, y
su multitud obstruyen el pasado desde el campamento. Ninguna acción de las
lágrimas; que la lluvia y escudos guerreros plumas en su triste despedida,
[4,20] y cada armadura se suspende por completo una familia del fallecido; pasar
cuidadosamente besa través de las aberturas viseras bajos, y busca en estas
abarca las crestas salvajes. Los que últimamente y armas y la muerte misma
parecía suave gemido; la ira se calma y se tambalea en medio de sollozos.
Así, los hombres se embarcan en un viaje largo, cuando los vientos ya la vela se
hinchan cuando el anclaje de los mares rotos de fondo, pulse durante mucho
tiempo una mano amiga; que entrelazan sus brazos, aprietan uno contra el otro
sus ojos bañados en lágrimas; todos los problemas, aquí besos, entonces la
oscura inmensidad de las olas; Finalmente se van.
Los que quedan están de
pie sobre una roca; [4.30] aquellos que huyen de las velas, es dulce para seguir
su mirada, y se quejan de ver redoblar los vientos que soplan desde la orilla;
Permanecen, sin embargo, y esta nave amada, la parte superior de la roca, que lo
reciben.
Para mí ahora, por primera vez, la fama antigua, a la que el
universo no tiene misterios, usted, cuya función es la de preservar la memoria
de los guerreros y sus vidas para siempre; revélame mis héroes! Y tú, reina de
la madera lisa de las musas, Calíope, toma su lira y cantar las armas, las armas
que ponen en marcha el dios de la guerra, las ciudades que despoblada. Nunca
poeta ha extraído de la fuente sagrada inspiration.Roi un sublime triste,
doblado bajo el peso de las preocupaciones y cierre de los años ya la
disminución de [4,40] entre vítores avanza casi a su pesar Adrastus ciñe a
cualquier arma de una espada; Los oficiales llevan su armadura después de él; en
la puerta del campo de su escudero pare sus veloces caballos, y ya luchar contra
el yugo Arion.
Para él arma Larissa sus guerreros para él y para armar a su
alto Prosymne cuyos toros superen a las de Midea y Phyllos rico en ganado, y en
su larga Neris qu'épouvante el valle de la formación de espuma y Charadrus Thyre
que bebe una día de la sangre espartana. Un Adraste unirse a los reyes que se
jactan de compartir su origen, [4.50] los que cultivan las rocas de Drepanum y
llanuras fértiles de Sición de oliva, o lugares regados por el Langie sus aguas
dormidas y silenciosas, y grietas aprieta sus bancos sinuosa Élissus. Este río
es notorio: las Euménides, dijo, bañado por sus aguas oscuras; amaban a bucear
en sin el Phlegethon arrepintió, sus cabezas y víboras jadeantes, si deben venir
a molestar a los hogares de los tracios, o palacio de Micenas impía, o la casa
de Cadmo: el río huyó antes de que éstos nadadores, y contaminaron innumerables
venenos.
Cerca de ellos caminando Ephyra, infortunios confortado Ino, [4,60]
y los guerreros de Cencrea adyacentes a este amigo fuente de poetas, dijo que
brotan, golpeando con el pie tierra, caballo nacido de la Gorgona y frente a las
olas, donde el istmo empuja a los esfuerzos de los dos mares.
La compañía,
que consta de tres mil hombres siguientes Adraste saltando de alegría: algunos
son jabalinas mano, otros largas lanzas endurecidas al fuego, porque estas
personas armadas no todos tienen la misma moral, ni misma sangre; otros son
expertos en el manejo de la honda, para hacer de él dando vueltas en el aire.
Adrastus marcha a la cabeza, doblemente venerado por sus años y su cetro.
Que, a través de los pastos donde reinó para largas caminatas, la cabeza alta,
un toro; [4.70] ya que la piel de su cuello estaba floja, sus hombros son menos
completa; él es el rey sin embargo, y novillos se atreven provocar, porque ven
truncados sus cuernos por las lesiones, y su pecho se cubren con grandes
cicatrices.
Después de la edad Adrastus vienen las banderas de su hijo de
Tebas, para los que esta guerra es por la quema de la ira de todo el ejército; a
él también se unió a los voluntarios de su país, dibujado, algunos de esta
piedad inspirado un exiliado, por esta lealtad que la infelicidad se incrementa,
otros por el deseo de cambiar de amo, muchos de la justicia de su causa.
[4.80] Su padrastro le había dado para gobernar Egio, Arena y rica Troezen donde
nació Teseo, para que pudiera caminar con honor, rodeado de muchos soldados, y
olvidar el rango que había perdido en su tierra natal.
El héroe lleva la
misma ropa, las mismas armas que llevaba, predestinada anfitrión de Adrasto, en
esta noche de tormenta. la piel del león Theumèse cubre la espalda; lanzas de
hierro doble chispa en su mano; a la pared lateral está suspendida una espada
formidable, que supera la figura picado de un Sphinx. Ya su trono, ya los brazos
de su madre y sus hermanas son fieles a él por el deseo y la esperanza.
[4,90] Sin embargo, la parte superior de una torre, Argie distraído se asoma de
toda la longitud de su cuerpo; se da la vuelta, él lo ve; la mujer lleva a su
alma y los ojos de su marido, y la caza de su corazón a su amada Tebas.
En
medio del ejército avanzó, el jefe de los soldados de su país, la inmensa Tideo,
ya alegre y cuerpo sin lesiones; Para la bocina. Por lo tanto, el corazón de la
tierra, una serpiente, los suaves rayos del sol de primavera, manantiales,
rejuvenecido, robó una chaqueta de edad y se puso en verde, amenazante, a través
de las hierbas desgracia de risa enorme labrador que se reuniría en hierba,
[4100] y agotado su primera veneno!
Los guerreros más valientes de las
ciudades italianas llegaron a unirse a él en la primera guerra bruitsde, los
rumores de la cual se mueven y la pedregosa Pylene y Pleurón lamentaron que,
convertidos en pájaros, hermanas de Meleagro, y empinado Calidonia y Olenos el
cual compite con el monte Ida la gloria de haber alimentado a Júpiter, y Calcis,
puerto hospitalaria del mar Jónico, y el río que Hércules, en su lucha con él,
deshonrado la cara; sin embargo casi no se atreve a levantar la frente mutilado
por encima del agua, y, escondiendo la cabeza en su guarida verdoso, grita:
alteran sus costas están contaminados con polvo.
[4,110] Todos ellos
defendió el pecho por un tejido de malla de acero; jabalinas formidables arman
sus manos; el dios de su tierra natal, Marte, se sitúa en la cima de sus cascos.
En todas partes esta élite jóvenes de todo el magnánimo hijo de Eneo, feliz de
entrar en batalla, y adornado con cicatrices ilustres; no es ni menos amenazante
o menos furioso de que Polinices, y no podemos decir cuál de los dos es la
guerra.
Pero más fuerte y diferente ejército luego viene una nueva banda de
los griegos, aquellos que manejan muchos arados sus orillas, O Lyrcius! el suyo
también, rey de los ríos de Acaya, Inachus (ningún otro efecto, tiene un más
impetuoso que su supuesto, cuando se trata de la tierra de Perseus y de esa
escoria, [4120] hinchado por las aguas verter el Tauro y las Pléyades, por las
lluvias que caen desde el interior de su hijo Júpiter); aquellos pueblos que
rodean el rápido Asterión, y rra rodando en sus aguas los cultivos de dríopes;
los que cultivan el campo y las colinas de Epidauro visitados por Baco, pero la
diosa de Enna, Ceres, descuida: el inalcanzable Dyme también envió sus
guerreros, y sus batallones apretados Pylos, Pylos, donde reinaba Nele, Pylos
aún se desconoce. Nestor estaba en la flor de la juventud, pero se negó a entrar
en el ejército, planeó condenado a muerte.
Quien les guía y les enseña a
amar la gloria, es el orgullo hipomedón; mueve la cabeza un casco de bronce,
[4130] coronada por un penacho blanco de triple; mientras que su lado es
presionado por un tórax de hierro; un escudo grande y brillante que cubre los
hombros y el pecho, y reproducido, hábilmente talladas en oro, la noche del
Danaus: Negro Furias antorcha ilumina culpables cincuenta camas; el propio
padre, de pie en el umbral de sangre, elogia el paquete de sus hijas, y revisó
sus espadas.
Desciende de la fortaleza de Argos; nemean caballo que monta
tiene miedo a la vista de los brazos, lleva, moscas, cumple con las campañas de
su inmensa sombra, y levantando nubes de polvo. Por lo tanto, sus hombros y sus
dos pechos rompiendo árboles forestales, [4140] Hylée el centauro sube de su
guarida; Ossa tiembla bajo su carrera; los rebaños, los animales se encuentran
en el miedo; sus hermanos sí mismos temblando, hasta que por fin un gran salto
se lanza clanes riega Pene y su cuerpo hace que el río en un obstáculo
insalvable.
¿Quién puede decir cuántos guerreros, el nombre de las naciones
y fuerza, que tiene la voz de un mortal? El dios de Tirinto llamados a las armas
de la antigua ciudad; no ha dejado de producir héroes ni la fama degenerado de
su gran bebé; pero su fortuna ha caído, [4150] no tiene el poder de la riqueza;
los pocos habitantes de las campañas desiertas muestran el extranjero
terraplenes construidos por el Cíclope. Sin embargo, se envía trescientos
hombres jóvenes que sus multiplica el valor en los combates, y que no tienen
lanzas o espadas, estas armas feroz resplandor: la cabeza y los hombros están
cubiertos con tiras de oro leones sello distintivo de la raza ; sus manos están
armados con los clubes (pino, y su carcaj lleno aglomeran innumerables flechas
de Hércules Cantan el himno, y la tierra despobladas de monstruos. bunchy top de
Eta, dios oye su . canciones distantes de sus compañeros de los niños de Nemea,
[4160] y que se reúnen los soldados viñedos sagrados Cléonéen Molorchus su
cabina es ilustre. en sus puertas de sauce están representados los brazos del
dios que recibió el hospitalidad, y, en un pequeño campo, se muestra un árbol de
roble, donde Hércules presionó su club y su arco relajado y cerca de la cual la
tierra todavía tiene la impronta de su codo.
Caminar detrás y que sobresale
de la cabeza todo el ejército Capaneo un escudo balanza, formado por cuatro
pieles arrancadas de toros salvajes, y se revistieron láminas de cobre amarillo
masivo: la parte inferior del escudo se desprende, doblado tres veces sobre sí
misma, muerto recientemente una hidra; de sus cabezas, algunos todavía viven,
[4170] y plata cincelada, chispa; otros son destruidos por la industria de
Hércules y llamas, muriendo, todo el esplendor de oro; todos los remansos se
extienden alrededor de pantano Hydra, figurado por una zona de hierro oscuro. En
cuanto a sus enormes flancos sobre su amplio pecho, la armadura protege una
malla de acero de armadura innumerables tejidos, libro horrible, que no es el de
una madre; en la cresta de su casco brillante sobresale un gigante, y el único
de todo, él lleva una lanza como un ciprés despojado de sus ramas, y rematado
con un hierro agudo.
A obedecer sus órdenes pueblos que se alimenta el
fértil Anfigenia los llanos
Mesenia y las montañas de Itome, [4180] los
Thrion, los epy, construido en la cima de una roca, y los Helos Pteleon, que
finalmente Dorion, tan fatal para Gete Thamyris: este poeta, por haber creído
capaz de superar por su canto las hermanas aprendido, condenados a silenciar la
voz y la lira (que se atreva a competir con los dioses?), se quedó en silencio
para siempre engañar a que conocía la lucha de Febo y Marsias, y la muerte
sangrienta de sátiro Célènes!
Pronto el alma de augurio divinos, asediado
por todos lados, se inclinó; Mientras que ve signos desgracia terrible, pero
Atropos, a pesar de sí mismo, pone sus brazos en la mano, [4190] y ahoga el dios
en su corazón, no es de nuevo una trampa de su esposa, y su casa ya oro
brillante este collar que nunca habían llegado; el oro, el destino había
anunciado que sería fatal para el vidente de Argos; él lo sabía; pero su esposa
había intercambiado traicionero contra esta vida actual de su marido, porque
ella codiciado botín de Argie, su amante, y superaría mediante la eliminación de
su vestido.
Argie, vio a los reyes no resueltas y poco inclinado a la
guerra, si Anfiarao no lo hizo con ellos, sólo a sí misma en el regazo de su
archivo de Polinices amada sin pesar, sin tristeza; collar execrable, y por lo
tanto le dice: [4200] "No es para mí El tiempo adornos brillantes; y que puede
elevar mi belleza, lo que haría yo, infeliz y sin ti? Baste olvidar un momento
entre mis compañeros de mis ansiedades dolorosas, y arrastrar el pie del altar
mi pelo en desorden. Oye, ¿qué! grandes dioses, cuando estás encerrado en un
casco amenazante, en una armadura rotundo, que usarían esta rica Harmonia
nupcial? Algunos Dios me podría hacer un regalo más hermoso, y yo la tomaré por
mi gala de todas las mujeres de Argos, cuando, esposa de un rey, cuando,
contento de verte, voy a llenar los templos coros votiva:. ahora ella usa el
cuello, [4210] la mujer que lo quiere y que puede ser feliz cuando su marido
lucha "
Así, el oro fatal entró en la casa de Erífile y lanzó el germen
crímenes abominables: Tisiphone ríe una risa terrible pensar en el futuro.
Anfiarao, montado en un carro tirado por caballos Spartan había tenido un
cyllarus misalliance, sin el conocimiento de ricino, su maestro, temblar la
tierra; sacerdote de Apolo, que lleva las tiras, insignias de su dignidad; su
casco se corona con una rama de olivo y una voileblanc entrelaza sus gradas
Garza en rouge.Il mismo tiempo sus armas y las riendas de sus caballos.
[4.220] A cada lado de él caminando, entrenado como los espartanos, batallones
armados de jabalinas, a rasgos forestales temblando, agitado por las carreras de
su carro; sin embargo, ahora se ve apoyado en su terrible lanza, estar por
encima de toda su familia; y su escudo Python derrotado chispa.
Los
guerreros que acompañan a su carro son los de Amyclae, favorito de Apolo, las de
Pilos, los de Malea, qu'évitent barcos de miedo; Kariye aquellos que conocen la
respuesta baila bailes Diana; los Pharis y Messe, esta ave madre dedicado a
Venus, la falange del Taigeto y los hombres duros del Eurotas, cuyas orillas
están cubiertas de olivos; sí plantea el mercurio en el medio del polvo de la
arena, y el arte de las luchas donde los cuerpos están desnudos, que los inspira
con el ardor que les hace el amor; [4230] a partir de ahí la fuerza de sus
almas, y que el deseo sagrado para una muerte gloriosa. Los padres están
contentos con el destino de su hijo, y les animan a morir; toda la multitud de
luto por la muerte de un joven atleta; su madre tiene uno, murió coronado.
Por un lado que poseen la brida sus caballos, y los otros dos lanzas atadas con
una correa; están al descubierto sus hombros, de la que cuelga una capa gruesa y
un casco de plumas del penacho del ave de Leda.
No sólo los que, Anfiarao,
siguiendo sus normas; sus batallones aumentan los pueblos de Elis, la ciudad
inclinado al lado de una colina, y Pisa, construido en un valle profundo; Pisa,
donde la gente se baña en sus aguas de oro, O Alfeo [4240] que se discute en las
orillas exteriores de Sicilia, sin embargo, en un largo viaje, se mezclan sus
ondas de las olas del mar. Estas personas cansadas por un sinnúmero de carruajes
del suelo friable de sus campañas, y caballos domesticados para la guerra,
glorioso de talento cuyo origen no es, volviendo al coche roto de OEnomaiis;
freno de sus monturas se llena de espuma y crujir bajo sus picaduras, y una
lluvia blanca como la nieve asperja la arena cavar sus pies.
Y también, la
cabeza guerreros de Arcadia, pero sin el conocimiento de su madre, joven
imprudente implicaba nuevos encantos de la gloria, oh Parthenopaeus, tú esbelta!
Cuando te fuiste, tu madre, feroz y amenazante, su madre, que jamás había
permitido que un joven se fuera, su madre, arco en mano, despoblado de las
bestias de los bosques más remotos [4250 ] y de las pistas de alta escuela frío.
Nadie que fue a estas luchas mortales tenía un rostro tan hermoso, nadie tenía
un cuerpo tan hermoso. El valor o bien no lo hace fracasar sólo vienen de la
fuerza edad! ¿Qué dioses de madera, que las deidades de los ríos, lo que ha
ninfas pastizales no inflamado de amor? Diane a sí misma, cuando vio a un niño,
a la sombra del monte Maenalus, pulse el césped de un pie todavía tambaleante,
perdonó, le dijo a su compañero Atalante, y con las manos atadas a su hombro un
carcaj Amyclee llena flechas de Creta.
[4.260] Saltó, hirviendo espíritu
audaz y guerrera; se quema en un solo propósito, se oye el sonido de las armas y
las trompetas, el polvo contamina la lucha contra el pelo rubio de nuevo en un
caballo tomado al enemigo. Caza aburrido; y la gloria culpable de derramar
sangre humana, que se avergüenza de que sus flechas no lo hacen.
oro
brillante, brillante de color púrpura, que eclipsa a todos los demás: su vestido
está flotando, y de primera necesidad Ibérica juntos los pliegues; en su escudo,
todavía virgen, se lucha contra su jabalí de Calidonia madre pintada; en su mano
izquierda suena un terrible arco; en la espalda, que está repleta de plumas, es
mejor que un carcaj de flechas Cydon [4.270] y decorado tanto ámbar pálido y el
brillo de Oriental Jasper. Su caballo, que se utiliza para la carrera por
delante de los ciervos tímidos, el caballo, que cubren dos pieles de lince, y es
sorprendido por las armas de gravedad inusuales de su maestro, el guía de un
aire de orgullo, la cara colorido un enrojecimiento suave, y las mejillas
adornadas toda la frescura de la primera juventud.
Los seguidores arcadios,
estos antiguos antes de ellos, las estrellas y la luna, y la fidelidad probada.
Nacieron, según fama, troncos duros en este tiempo en que la tierra se asombró
los primeros pasos del hombre; Todavía no había campos de cultivo, ni casas, ni
pueblos o matrimonios asentados; robles, laurel de ánima [4280] para partos
dolorosos; cenizas creado la inmensa sombra de poblaciones enteras, y los
flancos del olmo niño escapó como una ramita verde. Estos primeros hombres,
dicen, vieron con terror la alternancia de luz y oscuridad, y ahuyentar a la
puesta de sol, ya no con la esperanza de tenerlo de vuelta.
La alta Maenalus
despoblado, bosque Parthenie está desierto, los combatientes en masa fuera de
Rhipé a Stratie, de Enispe, vientos tormentosos. Tegea Muestra, Cilene, feliz de
haber dado a luz a un dios alado; Peligro con cuernos contiene un templo de
Minerva; a continuación, Clito rápido, Ladón, que era casi su padre, orgulloso
ganador de Python; [4290] Monte Lampie, la parte superior de la brillante
blancura de la nieve; y el lago Feneo que proporciona, según se cree, las aguas
de la laguna Estigia al dios oscuro de los bajos fondos. Todavía se puede ver el
Monte Azan, cuyos aullidos rivalizan con los de Ida, guerreros Parrhasie los
Nonacrie Plains, donde viste, ama, con una sonrisa maliciosa, el dios del trueno
armado con un carcaj ; y Orcómenos rico en rebaños y Cynosure, rica en animales
salvajes. El mismo ardor campos de Éphitie y altos Psofis y montañas ilustrados
por los trabajos de Hércules, y Erymanthus padre de tantos monstruos despoblado,
y Estinfale, que todavía suena el sonido de los platillos de latón. Todos estos
guerreros son arcadios, todos ellos tienen el mismo origen, pero difieren en la
demanda: [4300] cada uno, ir a la batalla, la curva en el extremo caro mirto a
Venus, y son un arma de conducido por el pastor; otros realizar arcos, otros
tienen que cuenta con lanzas; que cubre el pelo con un casco, que uno no salió
de la tapa de la piel, el cabello de su país; Por otro fin erige su frente
fauces abiertas de un oso Licaonia.
En este turba armada, entre estos
corazones dedicados a marzo, no había ni un solo soldado de Micenas, tan cerca
de Argos. La ciudad entonces vio una fiesta horrible, y el sol volviendo sobre
sus pasos en la mitad de su carrera; También en Micenas, otra pelea entre
hermanos provocó el desorden y la lucha. Pronto un sonido llega a los oídos de
Atalanta, [4.310] que su hijo toma el mando en esta guerra y que lleva consigo
toda la Arcadia: sus pies están temblando, su fuga cara de sus manos; huyó, más
rápido que las alas del viento a través de los bosques, y las rocas y los ríos
que fluyen hasta el borde, ya que es, su vestido, su pelo rubio dispersa y
flotante, y una tigresa , que fue privada de sus cachorros, furiosos, siguiendo
los pasos del secuestrador que entraña su caballo.
Ella salta, se pone de
pie en frente de mensajería Partenopeo, que palideció y miró hacia abajo: "¿De
dónde sacaste esta rabia guerrera, mi hijo? De ahí el valor excesivo en un
corazón tan joven? [4.320] Ustedes, soldados de guía en la lucha? usted, apoyar
el trabajo de Marte y se lanza en medio de batallones armados? Al menos
complacer a los dioses que hubiera estado en vigor! Anteriormente, pálido de
miedo, que te vi, espada en mano, apriete casi un jabalí volvió contra usted;
las rodillas flexionadas, que estaba doblada hacia atrás, que iba hacia abajo; y
si, doblando mi arco, que había lanzado flechas ... Y ahora qué vas a hacer en
la guerra? Mis características son incapaces de proteger allí, ni son mi o este
caballo a la capa manchada de negro, en quien confían; y es usted quien busca en
las luchas heroicas, tú, niño, apenas maduros para la capa de las dríadas, por
una lucha romántica con las ninfas de Erymanthus!
[4.330] Los augurios son
verdaderas: No pregunto si me sentí una vez que sacudió el templo de Diana, la
diosa parecía por lo que me ven menos favorable si los cuerpos de las bestias
cayeron a mismas bóvedas sagrados: desde ese día mi arco hay primavera, ninguna
dirección de mis manos y mis golpes inciertos. Espere hasta que su belleza se
convirtió en más masculino, como la edad ha fortalecido su cuerpo, que sus
mejillas rosadas son sombra, su cara se ve menos como la mía; entonces estas
peleas, armas que usted desea tan ardientemente, les daré a mí, y que no sirve
detenidos por las lágrimas de su madre. Pero ahora ellos, estas armas informes,
en mi patio; y usted, va a dejar ir, Arcadians? ...
[4.340] Oh! usted es el
hijo de las rocas y los árboles de roble "! Ella quiere seguir: presionado a su
alrededor, su hijo y jefes del ejército de la consola, calmar sus temores, y ya
oyó la trompeta señal terrible, que no puede dejar a su hijo lejos de su tierno
abraza, y recomendar una y mil veces a la cabeza de todos, a Adrasto.
Por
otro lado la gente marciales de Cadmo, triste la furia del rey, pero no
alarmados, rumores de guerra (que se había extendido Argos avanzó con todas las
fuerzas de Grecia), más lento, porque se avergonzaba de su cabeza y su causa, se
estaba preparando para la lucha, pero sin embargo preparado para: [4350] sin
afán de sacar la espada, ningún placer para cargar el escudo paterna, o para
Parry el mensajero de pies alados, las alegrías de la guerra; sacrificados,
temblando, sin energía, sin ira, que se han comprometido a servir; uno se
quejaron de la difícil situación de su amado padre, el otro a su joven y tierna
esposa, los niños desafortunados que crecieron clanes sus brazos. Ninguno de
ellos es calentado por el aliento de Marte; las mismas paredes de Tebas son
comidas por la dilapidación, las torres de Amphion abren su lado agotado por la
edad; y estas paredes una lira divina elevaron al cielo, una obra sin gloria de
silencio y fortalece.
[4.360] Pero una rabia vengativa inspira las ciudades
de Beocia, y. es mucho menos para apoyar un rey injusto por el apego a una
nación aliada a armes.Étéocle corren, él es como un lobo que viene a forzar una
oveja grasa. El cofre lleno de sangre coagulada y negro, erizado mandíbulas, la
boca abierta, y jirones manchados de lana ensangrentada, se trata del establo,
rodando de aquí para allá sus ojos preocupados para ver si los pastores
salvajes, se enteraron de su pérdida , no perseguirlo; y huye con la conciencia
de su fama audace.La, la causa de tantos problemas, extendiéndose cada momento
nuevos terrores.
[4,370] Esto se ve en las orillas de los Asopo vagan
aislado puente Lerna; éste dice que orgías teatro Citerón, otra Theumèse que
estén ocupadas por el enemigo, y se dice haber visto en las sombras de la noche
brillan las luces de un campamento cerca de Platea. Tebas dioses sudado, Dirce
agua se tiñó de sangre, monstruos nacen, y otra vez el Sphinx habló desde lo
alto de la roca. Lo que no hemos aprendido? Eso no vemos? eso no se cree
autorizado a decir?
Un nuevo temor viene en tantas ansiedades: pronto como
dardos, el pelo revuelto, la Reina del coro bacantes extiende en la llanura
[4380] la cima del Monte Ogygia; ojo oscuro y se inflama, blandía su antorcha
invertida en todas partes, a continuación, furioso, lleno de la ciudad alarmado
por los gritos de terror: "Dios Todopoderoso de Nisa, incluyendo esta carrera
que vio nacer en perdido hace mucho tiempo el amor, ahora, bajo el oso erizado
de heladas, se golpea golpes presionados belicosa Ismare al final de su tirso de
acero; te mando un bosque vid para abrazar a Licurgo; o, al Ganges orgullosos, a
los confines más remotos del Mar Rojo, a las regiones de la aurora, bella y
triunfante, que ejercita su ira, o fuentes de Hermo de ir todo cubierto de oro.
[4.390] Y sus hijos, que depositamos las armas de nuestros padres para pasar
sus vacaciones, la guerra, las lágrimas, el miedo, el crimen de dos hermanos, la
carga de un trono usurpado, eso es todo lo que tú correas! Más allá de la hielo
eterno, oh Baco, más allá del Cáucaso, donde resuenan los gritos y las armas de
las Amazonas, me lleve, pero no me hagas fuerza para revelar los planes
monstruosas de nuestros líderes y la impiedad de nuestra raza!
Me apuras ...
Baco, no la rabia que he condenada! ... Veo una fusión similar a los otros dos
toros; tanto en la belleza misma, la misma sangre; entreheurtent sus frentes,
sus cuernos se entrelazan, [4400] y en su ardiente ira se dan recíprocamente
muerte. Renunciar a, eres la más injusta, vende, usted es el culpable, ustedes
que quieren poseer un pasto a sus antepasados y de este pueblo de montaña que es
usted! Ah! miserable en esta lucha que se vierte tanta sangre, y sus bosques,
otro se lo lleva ". Ella dijo, y su cara de hielo, y Baco, la retirada de ella,
deja tranquilo y silencioso.
Pero, miedo de la maravilla y entregado mil
vagos terrores; Rey utiliza el viejo adivino Tiresias, el ciego si avistado, y,
siguiendo la costumbre de los que temen infortunios inciertos, consulta sobre
sus preocupaciones.
El anciano respondió que ni abundantemente derramada
sangre de los toros, [4410] o pájaros rápidos del ala o las entrañas de que
exhala la verdad o ambigüedad trípode o la evolución armoniosa de las estrellas,
ni el humo de incienso que se cierne sobre los altares, no muestra tan
claramente la voluntad de los dioses que las cortinas rasgadas reinos oscuros de
la muerte y las sagradas aguas del Leteo; luego se sumergió el rey en las aguas
de Ismene, donde se mezclan con las olas del mar, las preparaciones completas
por delante de la evocación, y todo alrededor, con las entrañas picados de
ovejas, el aromas de azufre, hierbas frescas, murmurando fórmulas misteriosas,
que purifica el aire.
Es un antiguo bosque, siendo robusta, aunque inclinada
con la edad, [4.420] que nunca ha mutilado hierro, donde cada vez que el sol
haya penetrado; tormentas sacudirán el lugar, y en contra de ella son impotentes
y Notus y Boreas que se precipita regiones del oso. A continuación reinar una
calma pesada, qu'entretient de terror triste y silenciosa, no el día, pero su
pálida imagen, cuestionable. Esta divinidad bosque oscuro; La hija de Latona
vive allí; cedros y robles llevan su impronta figura ese velo del lugar sagrado
de las tinieblas. Oímos en la noche sin verlos; silbidos y ladridos de perros
flechas, cuando escapó de la influencia de su tío, [4430] y ha tomado la forma
más leve de Diana. Pero cuando las montañas estaban cansados, y el sol, a la
altura de su curso, invitó a dormir dulce, ella planta cara a su alrededor, y la
cabeza apoyada en su carcaj, se apoya.
Fuera se encuentra un vasto llano de
la tierra de Marte, fertilizado por Cadmo. Tenía un espíritu áspero, que primero
desde las luchas entre hermanos, ya que habíamos abierto los surcos culpables
atrevieron empujar el arado en la tierra, arrancando el césped de estas llanuras
de sangre cebados. Ella deja escapar terribles ruidos que la tierra infeliz,
desde la mitad del día y en la soledad de la noche, [4440], cuando los niños
negros de la tierra pertenecen a disfrutar vanos simulacros de batallas: uno ve
huir de la ranura comenzó obrero temblando, y preocupado por el terror, volver a
los toros granero.
Allí el viejo adivino (él piensa más limpio que cualquier
otro en la celebración de los misterios infernales esta tierra Impregnado de
tanta sangre) en realidad llevar a las ovejas para el vellón oscuro y novillas
negras; las mejores cabezas de ganado se elige; Dirce gimió Citerón es triste, y
un extraño silencio se cierne sobre los valles ruidosos.
Así Tiresias
entrelaza los cuernos de las víctimas de coronas de luto, [4450] palpando con la
mano; entonces, en el borde de la madera, excavado nueve veces el suelo, y luego
se extiende grandes vasos de vino, leche, miel de regalo del resorte Ática, y la
sangre atrae a los espíritus; se paga hasta que la tierra seca completamente
empapado.
A continuación, el cura se hace de árboles talados en el bosque,
y, triste, ordenó encender hogueras durante tres Hécate, como las tres
doncellas, hijas de Acheron siniestra: el suyo, el rey de la lluvia, aunque en
el fondo de la suelo, se eleva por encima de su otra pino apilados; cerca de
esta última se encuentra en una pequeña [4460] en honor a la infernal Ceres; el
follaje de ciprés funeral cubre flancos enteros. Ya marcados en la frente por el
hierro, y la harina de torta puro sobre la cabeza, las víctimas cayeron bajo el
cuchillo: lo que la virgen Manto recibe sangre en tazones, y dips sus labios;
Luego, después de tres vueltas alrededor de la hoguera, según la costumbre del
adivino su padre, se coloca las entrañas todavía emocionante, donde la vida se
acaba apagado, y sin demora, se introduce en las antorchas ardientes follaje
oscuros: cuando escucha llama fizz través de las ramas, y el crack estas pilas
funerarias de madera, [4.470] Tirésias, cuyas mejillas se consiguen por la quema
de exhalaciones y las basas huecas llenas de humo, gritos, y voz sacudió las
estacas y el aumento de la violencia del fuego:
"Se alojó el tártaro
maravilloso reino de la muerte insaciable, y usted, el más terrible de los tres
hermanos, ustedes que reina sobre los Manes y el castigo eterno de los
culpables, tú que ver arrastrándose a sus pies el mundo subterráneo, abierto,
toco a sus puertas, abrir estos lugares silenciosos, y el imperio de vacío de
Proserpina severa! Esta multitud de buceo en las profundidades de la noche,
sacarlo, y el barquero de la laguna Estigia volverá este río en todo su barco.
[4.480] ¡Que vienen corriendo, todos vienen juntos de nuevo a la luz, estos
tonos, pero no de la misma manera! Usted, dejar a un lado, la hija de Perseo,
anfitrión pía del Elíseo, y la de su poderosa barra oscura Arcadia dios
guiarlos; aquellos por el contrario, como muchos que murieron en el crimen,
viven Erebus; y son parte de la carrera de Cadmo, agitando tres veces la
serpiente usado para azotar, y antes, si una mano inflamada, O Tisiphone,
guiarlos hasta que estén deseosos de ver, Cerberus y eso no hace que sus tres
cabezas un obstáculo de las sombras "!
Dijo, y ambos también, el anciano y
la sacerdotisa de Febo, esperando con confianza. Ellos, temen nada, [4490],
porque tienen a Dios en sus corazones; pero una increíble terror abruma hijo de
Edipo, y mientras el vidente entrega su evocación horrible, presiona gira los
hombros, las manos, los vendajes; y en su miedo, se interrumpiría el
commencé.Tel misterio, espesura del bosque Gaetulia, un cazador por sus gritos
despertaron prolongados que espera un león, se emociona coraje y sacudidas
convulsivamente sus características, sus esfuerzos están bañados en sudor; El
miedo de hielo su cara, sus rodillas tiemblan, porque él no sabe qué animal
aproxima o lo que es su fuerza; pero un rugido y terrible señal sonó en sus
oídos, y midió sus miedos ciegos [4500] Tiresias, viendo las sombras fallan de
nuevo. "Juro, si llora, deidades por quien lo he alimentado los incendios y
vaciado la mano izquierda estos cortes de pecho extraída de la tierra, no puedo
soportar su demora. Es en vano que me escucha, su sacerdote? Y si por cantos de
ira un tesalio te llama, ¿quieres venir? Y cada vez que un ejército venenos
Escitia la princesa de Cólquida que evocan, Tártaro, pálida de terror, comenzará
a moverse? Usted no tendrá ningún cargo de mí si no me tire los cuerpos de su
participación si no extrajo las tumbas de antiguos urnas llenas de huesos, por
lo que no se mezclan los dioses del cielo y Erebus [4.510] por profanar entre
sí, si no mutilar las caras lívidas, si no me corté las entrañas corruptas de
los muertos? No se desprecia la vejez y la nube espesa en la frente, no me
desprecian, te lo advierto! y también puedo usar la violencia. Sé todo lo que
temes a escuchar todo lo que temen ser revelada; y que podría molestar a Hécate,
sin el respeto que tengo para ti, dios Thymbra! Sé que el nombre de la regla de
la triple mundo, está prohibido pronunciar, pero cerró; cita en gracias a mi
vejez, amigo del resto. Sin embargo, si ... "!
Manto inspirado interrumpió
con impaciencia: "Usted está sometido de mi padre! gente pálida dibujan. [4520]
El caos de los bajos fondos se abre; La inmensa sombra ráfagas escena
underground; oscuros bosques y ríos oscuras muestran hasta la fecha; Acheron
vomita su arena lívido; Phlegethon los rollos con las olas olas de humo negro de
fuego; y la laguna Estigia, que fluye entre las crines, se opone al paso de
aquellos que no deberían ver la luz. Aquí propio Plutón, palideciendo en su
trono, rodeado de las Euménides, los ministros de sus deseos mortales, aquí está
el duro piso de la infernal Juno, aquí está su capa triste. En centinela se
encuentra la espantosa muerte, haciendo su maestría contado el pueblo, sombras
silenciosas; todavía hay más de lo que se ha contado. [4.530] El juez de Creta
lanzamientos de sus nombres en la terrible urna, que rasga la verdad por sus
amenazas, y los obliga a colocar toda su vida pasada, para finalmente hacer
confesiones que agravan su castigo. Lo que te digo? Veo todos los monstruos del
Erebus, el Escilas, Centauros animados con rabia impotente, entrelazadas cadenas
de diamantes gigantes, y la sombra encogida de Egeon, este Titán con cien brazos
".
"O que, dice, la guía y el apoyo de mi vejez, no me digas más. Que no
sabría Sísifo y su roca, que siempre cae, Tántalo y su lago engañosa Titye,
alimentan un ave de presa; Ixion, deslumbrado por el rápido movimiento y la
rueda sin fin que gana? [4540] Yo mismo, cuando mi sangre corrió con más calor,
visité estos misteriosos mansiones llevaron Hécate antes de un dios, la
eliminación de la luz de mis ojos, habría bajado toda en mi corazón. Llamar aquí
preferentemente por sus conspiraciones almas de Argos y Tebas, como para los
demás, leche pulverización repitió cuatro veces para lejos, llevarlos a cabo, O
mi hija, esta triste bosque; entonces el rostro de cada sombra, su exterior, su
avidez de beber la sangre derramada, las dos naciones que viene con más orgullo,
me describir todo; va, se disipa gradualmente la noche a mi alrededor ".
Ella obedeció, e hizo un hechizo para dispersar algunas de las sombras [4.550] y
recoger la otra, de forma similar, el crimen próximo, Medea, la hechicera y Ea,
Circe. Luego se dirigió estas palabras a su padre sacerdote: "El primero en
hundir la boca congelada en el lago de sangre es Cadmo, y por su marido sostiene
a su hija Cytherea; sus cabezas escapan dos serpientes; Hijos de la Tierra, esta
raza de Marte alrededor de ellos: su vida duraron sólo un día; partido entero es
de hasta casquillo del ejército, todos tienen la mano en la empuñadura de sus
espadas; interfieren, empujan, se lanzan el uno al otro con la rabia que les
condujo vivos; y no mira el surco fea [4560] preocupación que es la sangre de
sus hermanos que les gustaría beber. Después de ellos vienen las hijas multitud
de Cadmo y su hijo nietos deplorable. Veo Autónoe, Acteón privado; Veo Ino,
jadeante, los ojos fijos en la proa de Athamas, ternura presionando sobre su
pecho el fruto de su amor, y Semele ver con sus brazos una defensa a sus
flancos, donde su hijo se estremece. La madre de Penteo se rompió el tirso, se
emitió el dios que lo obsesionaba, se rasga hizo sangrar su pecho y sigue al
cuerpo, gritando: para él, huyó a través de las barreras del Leteo y Styx, a los
lagos del Elíseo, donde, más tierno, su padre Equión el grito, y ajusta sus
extremidades rotas.
[4.570] acepto la triste y Lico hijo de Eolo, la mano
derecha traído en los riñones, llevando un cadáver en triunfo en su hombro.
Todavía conserva esta metamorfosis, que acusa al hijo de Aristeo: su frente está
erizada de cuernos, mano sostiene características, y empuja a sus perros, cuya
boca se abre para devorarlo. Pero aquí viene acompañado de un numeroso séquito,
la hija de Tántalo celoso orgullo, incluso en su dolor, ella tiene los cuerpos
de sus hijos, y sus problemas hizo puntos abatidos; que está contenta de haber
escapado del poder de los dioses, y para poder dar rienda suelta a la furia de
la lengua" .Tandis la sacerdotisa casta habla bien a su padre, [4580] canas del
anciano se encuentra en su frente y elevar las tiras, y su cara está animado por
un ligero rubor. Él continúa empujando el bastón en su miel virgen, y de pie en
el suelo:
"Cállate, mi hija exclamó, ya no necesitan luz exterior; bostezos
de nubes brillantes, la oscuridad ya no obstruyen los ojos. ¿Son estas las
sombras, es un dios desde arriba, es Apolo que me inspira? Ahora veo lo que
estaba escuchando. Pero aquí, los ojos tristes y abatidos, los espíritus de
Argos, la feroz Abas, el Prétus culpable, dulce Foroneo [4590] la Pélope
mutilado, y, manchado con polvo de sangre, Enomao, bañadas sus caras. copiosas
lágrimas. Me augurar que allí Tebas en esta lucha tendrá la ventaja. ¿Cuál es
esta banda estrecha de guerreros (sus armas y heridas demuestran cómo estas
almas guerreras) que avanzan, la cara ensangrentada y el pecho, y haciendo vanos
esfuerzos por gritar, tienden constantemente las manos hacia nosotros?
Rey,
yo engañado a mí mismo? no está allí .... Ves estos cincuenta Ctonio y Chromis y
Fegeo y Méon que distingue, como yo, el laurel. Calmarse, guerreros. nada en
todo esto, créanme, es el fruto de consejos humana; [4600] inflexibles Atropos
había hecho girar estos años; que ha escapado de las desgracias nosotros,
todavía tiene que someterse a la guerra horriblie, y vamos a ver Tideo. "
Dijo, y tomando una franja de follaje entrelazado repele los que instan a él, y
les muestra la sangre. Sólo de pie en la orilla del oscuro Cocito Layo, el dios
alado que ya había visitado la despiadada Averno; y lanzando una mirada de
soslayo a su pequeño hijo cruel, reconoció las características, no se acercó a
tomar como el resto de las sombras su cuota de sangre y otras libaciones, fue
animado por un odio inmortal; [4.610] pero Tiresias llamado "Ilustre Rey de
Tebas, dijo, desde la muerte de Amphion ciudadelas que no han visto un buen día;
O tú, cuyo sangriento final era lo suficientemente vengado, cuya sombra había
que ser apaciguado por los muchos sacrificios de sus descendientes, por eso,
infeliz, la DO huyes? Se encuentra en un largo muerto quien persigue su odio,
siempre presa de los horrores de la agonía, con los ojos arrancados, con el
rostro manchado de sangre y barro, impulsada desde el área de la jornada; su
destino es más horrible que la muerte, créeme, pero su pequeño hijo, que no es
culpable hacia usted, ¿qué razón habría que evitarla? Ven aquí, [4620] que acaba
de llenar estas libaciones; a continuación, eventos futuros, plagas de guerra,
revela todo, si usted mantiene su resentimiento, o que tiene compasión de las
desgracias de sus hijos. Así que, en el barco, el objeto de sus deseos, voy a
hacer que pase el Leteo, que ahora está prohibido cruzar; Voy a presento en la
morada de la paz piadoso, y se lo recomiendo a los dioses del inframundo ".
Layo se siente halagado por estas ofertas honorables, y las lágrimas mojar sus
mejillas; entonces él responde diciendo: "¿Por qué, cuando se pone en marcha el
cura crines cuya edad igual mía, es a mi a quien es elegido para revelar? ¿Por
qué tantas grandes sombras si soy yo prefería para dar a conocer el futuro?
Tengo suficiente para recordar el pasado. Es esta mi, oh vergüenza! ven, mis
nietos ilustre hijo? [4.630] Él es, él está obligado a llamar a estos misterios
abominables, el hombre que rompió con alegría su espada en el lado de su padre,
que ha regresado a su fuente, y se entregó a su madre prendas de su amor
indigno. Y ahora cansado de sus deseos dioses y Furias negros, y llamó a mi
sombra en estas luchas. Sin embargo, si en estas circunstancias deplorables
estaban tan ansiosos por mí adivino, hablo, voy a decir todo lo Lachesis, toda
fiera domada permítame decir, la guerra, la guerra viene, arrastrando tras
incontables batallones, todos los hijos de Lerna, qu'aiguillonne el dios mortal
de las batallas; estos guerreros de maravillas de la naturaleza [4.640] y la ira
de los dioses por delante, muertes gloriosas y las leyes penales que retrasarán
para ellos los honores de la pira: victoria está asegurada en Tebas, el miedo
no, y tu trono no será la presa de un hermano orgulloso. Estas son las furias,
que es un paquete doble está en medio de la carnicería (ay de mí) un padre
bárbaro triunfará ". Dijo, y se desmayó; y su respuesta ambigua les deja en el
limbo.
Sin embargo, a través de los nemeos frío, y testigos matorrales de
las hazañas de Hércules, se extendieron en su vagar legiones hijos de Inachus.
Piller Tebas, los estragos, destruir, es el deseo de que las quemaduras y las
empuja hacia adelante. [4.650] ¿Quién frena su ardor, que los detuvo y los
obligó a salir en medio de su raza, ô Phébus, esto es para que nos diga; que
rara vez podemos remonterjusqu'aux fuentes no reputación.
Tambaleante Baco
ebrio trajo a su ejército victorioso de Hemus; después de usar dos inviernos
introducir sus orgías entre los guerreros getas, a verde las laderas blancas de
nieve Otris y para acostumbrar a los Ródopes a la sombra de la vid, empujó a sus
paredes maternas carros decorados con la vid : libre de freno, derecha e
izquierda después de los linces, tigres y lamerse las riendas empapados de vino.
Detrás de él obligado Bacantes, [4660], con trofeos para los lobos y los osos
medio muertos rotos. Y su cortejo no está en uso: la ira, la furia, el miedo, la
fuerza, todavía borracho intemperancia; ejército para caminar inestable, y
aunque similar a la orden. Tan pronto como Dios ve una nube de polvo se
arremolinaba por encima del bosque de Nemea, y el sol brillando en la armadura
de acero, y Tebas que aún no está listo para entrar en conflicto; profundamente
conmovido a este aspecto, aunque colgando boca y el estómago dwelt, silenció
cornetas, tambores y flautas, todo rugido que ensordeció sus oídos, [4670] y
exclamó: "Ese soy yo este es mi nación que quiere destruir a las tropas; y esto
furia, este está apagado; esta guerra es la cruel Argos es la ira de mi
madrastra implacable excita contra mí! Era muy poco probable que mi madre se
quemó, mi lugar de nacimiento cambió pira mismo alcanzado por un rayo! La misma
tumba donde yacen los restos de este polvo era su rival, y los tristes Tebas,
que quiere destruir el hierro, crueles! Me entraverai proyectos con engaños.
Esta llanura, esta llanura, andad por él, caminar en ella, así, camaradas! " A
esta señal, tigres Hircanio cerdas de crines; Dios habla de nuevo, y ya fue
detenido en la llanura.
[4680] Este fue el momento en que el sol alcanzó la
cumbre del mundo en llamas la atmósfera, donde los campos agrietados pesa un
fuerte calor que penetra en la parte inferior de las maderas más gruesas.
Bacchus llama diosas del agua, y, de pie en medio de su partido en silencio,
comenzó:
"Dioses ríos, ninfas rurales, que también son parte de mi
procesión, estad sujetas a la obra te necesitaba. me preocupa de los ríos Argos,
estanques, arroyos vagabundos, y los cubren con polvo. Lo Nemea especialmente
donde la guerra marcha ahora en contra de mi ciudad, está profundamente estéril,
lo tenemos, siempre y cuando su voluntad no es rebelde, [4690] usando el mismo
Febo a la altura de su Por supuesto; nuestra empresa las estrellas sonríen y mi
Erígone cuya espuma perro caliente: ir voluntariamente entrar profundamente en
el suelo; Más adelante os haré salir cama de matrimonio; los regalos más bellos
que se ofrecerán a mí mismo en sacrificio, que honrarán; Yo te defenderé
thievery sátiros lujuriosos nocturnos y amante de secuestro faunos ".
Dijo,
vemos el rostro de las ninfas cubre una espuma ligera y el pelo verde se sequen.
Inmediatamente una sed ardiente devora los campos de Inachus; [4700] ondas de
huir, fuentes y lagos se secan, y en los lechos de los ríos, los calores de limo
y se endurece. El suelo se vuelve triste y delgada, con el nacimiento de sus
tallos arco de la cosecha; engañado en su expectativa, la manada se detiene en
la orilla, y los toros están buscando ríos que una vez que se cruzaron a nado.
Por lo tanto, cuando el Nilo, doblado en su inmensa cueva, se detuvo, y se
mantiene en la boca funde la nieve desde el este que se alimentan de ella,
profunda en su lecho de humo abandonada valles, y Egipto, con todo la
impaciencia del deseo, a la espera para el fuerte ruido del río que lo alimenta,
hasta que finalmente ceder a su oración, vuelve campañas engordar Faro, [4710] y
traer año abundante cosecha.
Vemos seque la falta pantano de Lerna, Lyrcius
se secan, y el poderoso Inachus y Charadrus, rocas rodantes en su curso, y la
negrita rra que sus bancos no pueden, y las olas Asterion calmar: la primera,
saltando ruidosamente en alturas inaccesibles, y el sueño perturbador de los
pastores. ---. [4.720] El único Langie sin embargo, sino por el orden de Dios,
sigue su curso en silencio en el bosque solitario sombra. Ofeltes, traídos a la
luz, sin embargo, no habían dado su nombre sombría, ella no tenía la reputación
de una diosa; por su parte, se mantiene a estos lugares remotos, el bosque, el
arroyo; pero mayor gloria reservada para ello, cuando los líderes de Grecia, por
las luchas laboriosas, para banquetes funerarios renueva cada tres años,
celebrarán el dolor de la Hipsípila y la memoria sagrada de Ofeltes.
[4.730]
Así que los griegos ya no tienen la fuerza para soportar ni sus escudos
calentadas por el sol, ni sus corazas estrechamente ajustado al cuerpo, al igual
que la terrible sed que atormenta; no sólo su palacio encendió no sólo sus
contratos de garganta, sino un fuego interior devora; càeur sus latidos con
esfuerzo, sus venas son inertes, y un amargado sangre se adhiere a sus entrañas
resecos; reducido a polvo por el calor, la tierra exhala esa nube quema polvo.
Los caballos han sin espuma, que arrugar su boca contra el freno, la boca de la
que cuelga de largo y encadenado, su lengua; que ya no sufren ninguna ley o
maestros; sino que saltan en el campo, [4740] tropas de fuego y furioso. De
todas partes Adraste envía exploradores para ver si estanques Lycimnie no se han
secado, por lo que la fuente Amimone conserva un poco de agua, todo lo que es
absorbido por las luces ocultas; sin esperanza del cielo en el lado; parece que
deambulan por las arenas de Libia, los desiertos de África y Siena nunca nube
cubierto con su sombra.
Por último, en los bosques (y había resuelto
Baco), en su deambular, ven pronto, todavía hermosa a pesar de su dolor,
Hipsípila: a pesar de su pecho se suspende a un niño que no es suyo, Ofeltes,
hijo de Licurgo, rey de Nemea; [4.750], aunque su pelo es descuidado y mal
vestido, hay marcas reales en su cara, y sus desgracias no lo ha borrado en un
resto de magnitud. Adrasto, que es tan sorprendido, dirigirse a él con estas
palabras:
"Poderoso dios de los bosques, por su cara noble dijo lo
suficiente para que usted no es una raza mortal, tú que, bajo el fuego de los
cielos, no tienen que buscar dónde saciar su sed, venga al rescate de las
naciones se preocupan por usted por la sangre; es la hija de Latona, la diosa
armado con un arco, se han hecho sin ella procesión casta en el lecho de un
cónyuge o un amor celeste, y el mayor de todos, han fertilizado sus flancos
porque no sería la primera vez que el maestro de los dioses mismos se habría
unido a las vírgenes de Argólida, echa un vistazo a este triste ejército.
[4.760] Nos querían destruir Tebas, que ganó por sus crímenes; pero ahora
condenarnos a una falta de acción cobarde, horrible sed supresor nuestro valor y
nuestra fuerza enojado. En esta calamidad, ven en nuestra ayuda, nos dice, si
fuera una corriente fangosa, ni siquiera un pantano falta; nada, en tales
circunstancias, nada vergonzoso, nada es vil: es decir que ahora que imploramos
el viento y la lluvia, no es Júpiter; quifuient nuestros puntos fuertes, les dan
a nosotros; sacrificados nuestros corazones, se llenan con el calor de la
batalla. Puede crecer en una estrella favorable que la carga que llevas! Júpiter
nos trae únicos ganadores en nuestra tierra, oh! cuántos botín enemigo que
recibe como ofertas! [4,770] Entre los rebaños de Tebas, que optan por ti, oh
diosa, la mayor cantidad de víctimas que se han ahorrado los guerreros, y de
esta madera Dedicaré un magnífico altar ".
El dice; respiración jadeante y
inflamado intersecta sus palabras, y su respiración rápida está oscilando su
lengua reseca. Palidez uniforme en todos estos guerreros, incluso fuera de la
respiración boca abierta. La princesa de Lemnos, con la mirada baja, respondió:
"Diosa, yo! aunque en realidad tengo un origen celeste, ¿dónde cree? Haría
que los dioses nunca había superado la humanidad a través de mi dolor! Usted ve
una madre sin hijos, una enfermera extranjera; mi hijo! lo que les daba de comer
de mama, lo que los pechos fueron amamantados, [4780] Sólo Dios sabe; y yo
también, sin embargo, tenía un reino, que tenía un padre famoso. Pero ¿por qué
hablar de eso? por la que mantener lejos de estas aguas qu'implore su angustia?
Venid conmigo; quizá Langie ha Mantuvo sus olas, que nunca se secó: ella incluso
no bajo el abrasador cáncer, incluso cuando brilla la estrella Erígone, siempre
siga su curso.
Inmediatamente a los griegos para no ser demasiado lento una
guía, este bebé colgando en su pecho, (ah infeliz niño!) Lugares que ella (y
quería que el sinos) en una loma cercana, a pesar de la capa de él en un lecho
de flores, y un susurro suave alivia su dolor infantil, así, [4790], cuando la
diosa Bérécynthe ordena a los Curetes a correr alrededor del Tronador para
acunar sus bailes alegres y rápidos, que ataquen a voluntad en sus tambores;
pero el llanto de Dios resuene Ida.
Sin embargo, el niño en el regazo de
flores de arcilla esmaltada, en medio de matas de hierba, a veces hierbas capa
flexible en sus esfuerzos para avanzar confiando en la frente, a veces, la leche
alterada de su enfermera, la es llamado por sus gritos y luego repetir a
sonreír, y tratar algunas palabras para hablar, escuchar con asombro a los
sonidos del bosque, o agarra lo que está a su alcance, o aspira el aire por la
boca abierta; haciendo caso omiso de los peligros a los que se enfrenta en esta
madera, [4.800] y la seguridad completa de su vida, él vaga aquí y allá. Como
hijo de marzo en las nieves de Tracia, como Mercurio niño en la parte superior
de Maenalus como gatear en la orilla de Ortigia, Apolo, demasiado poderoso para
ella, punta de la isla de su lado.
El griegos Hipsípila seguir a través de
los matorrales y matorrales oscuros del bosque, donde no hay carretera está
pavimentada; cada guía les rodean, otros siguen en una banda apretada, otros
finalmente renunciar. Para ella, ella camina en medio de estos hombres armados,
con un rápido y orgulloso; Pronto, la llegada de la primavera, el valle sonaba,
y el murmullo del agua que fluye sobre rocas golpeando sus oídos; entonces
bondissaut alegría, a la cabeza del ejército, en las filas de las tropas
ligeras, donde es [4810] Argus enseña a sus estudiantes, y gritó - "Las aguas!
"Y en los labios de todos los cortos de este grito:" Las aguas! "De este modo, a
lo largo de la costa del Golfo de Ambracia, jóvenes remeros en la indicación por
parte del piloto, claman que se refieren a la mar se hace eco de la orilla
lorsqu'Apollon invocada por ellos, que finalmente se abre puerto de Lefkada.
Se precipitan a la quebrada, sin orden ni concierto, sin distinción, y los
soldados y líderes; no hay más filas, sed iguala: yugo todavía en sus carros que
llevaban sus amos y sus armaduras, caballos entran en el agua y se sumergen en
ella; [4820] de estos guerreros, éstos son impulsados por corrientes violentas,
los resbalones en las rocas húmedas; sin escrúpulos para pisotear desconcertado
los reyes de las olas, o para presionar la cabeza de un amigo que pide ayuda.
Las olas tiemblan, el río es arrancado de su fuente; sus aguas, una vez que tal
un dulce verde, una vez tan pura y transparente, que ahora se manchen con el
barro de la cama; los bordes de sus bancos tapizados de hierba se desmoronan;
esto es sólo un torrente de barro. La sed se apaga, y siempre bebe. Se ve como
una batalla entre dos ejércitos, combate regular y pesada en una estrecha
garganta, [4830] o ganadores de tomar una ciudad por la tormenta. Así que uno de
los líderes del medio del valle que rodea por todas partes, "O Nemea, si llora,
reina de los bosques verdes, sigue siendo amada de Júpiter, que eras para
nosotros más duro que el Hércules, cuando apretó el cuello amenazando un
monstruo que rabia, que comprima la respiración en las extremidades hinchadas:
es suficiente que usted tenga hasta este punto obstaculizado los planes de las
personas que pertenecen a usted! Y vosotros, para que el sol no puede dominar,
Dador de una onda río inagotable felizmente seguir su curso, independientemente
de la fuente de la que siempre se effused su agua fresca en su cama siempre
lleno; [4.840], porque no es el invierno que se alimenta con sus nieves, no es
que Iris vierte en tu seno se hinchó corrientes llueve, y no tiene nada de nubes
pesadas que cargar el ala de Corus; sólo pertenece a usted, y usted rueda,
invencible a todas las estrellas. En ti, ni Ladón, miel Apolo ni los dos Xanthes
o amenazar Sperchius ni Lycormas donde perecieron podían prevalecer Nessus; a
usted en paz, para que durante las tormentas de la guerra, para que mis aspectos
en los banquetes. Después de Júpiter, el primero será para usted. Sólo de mayo,
cuando volvemos batallas victoriosas, damos la bienvenida con alegría, todavía
abrir nuestras fatigas sus ondas de hospital [4.850] y de buena gana reconocemos
estos batallones que ha guardado ".
LIBRO V.
[5,1] La ola calmó su sed, y el ejército de distancia después de
llevar el caos en el lecho del río y reduce sus bancos. Más corcel de fuego
devora el espacio y el soldado alegre cumple con las campañas; Guerreros se
sintieron revivieron su valor, sus amenazas y sus deseos, como si hubieran
llegado a su fuente de sangre al fuego de la guerra y la temperatura de
ebullición de la batalla.
Dispuestos de nuevo escuadrones, se han reformado
en filas apretadas. Todo el mundo ha tomado el primer lugar, sus antiguos
dirigentes, y que entrará de nuevo a una señal dada. [5,10] ya la tierra levanta
remolinos de polvo, y las armas de rayos perforar la oscuridad de los bosques.
Tal volar más allá del puente, batallones roncos de grúas, impulsado por el auge
del Nilo que baña Parétonium, cuando el invierno ha presentado su rigor. En su
huida ruidosa, vuelan por la proyección de sus sombras en el agua y en las
campañas, y resuenan llanuras inaccesibles del aire; felices, Boreas y tormentas
eléctricas valientes nadan por jugar en los ríos libres de su hielo, y
simplemente disfrutar del verano al pie de Hemus despojado de las heladas.
En medio de un numeroso círculo de príncipes griegos, el noble hijo de tálao
detuvo bajo un antiguo ceniza, y, apoyado en la lanza de Polinices colocado
junto a él: [5,20] "Quien te dijo -es, que te fue dado la gloria de salvar las
innumerables cohortes gran honor no desdeña el padre de los dioses a sí mismo,
nos dicen (ya que feliz aquí cerca de su río) ¿cuál es su familia, su tierra
natal , lo que las estrellas han dibujado la vida; Por último, nos dirá lo que
su padre.
No hay duda de que toque cerca de los dioses, a pesar de que su
fortuna ha pasado. La nobleza de la sangre y respirar por su Majestad
affligés.La Lemnienne características gimió, lágrimas mojando su hermoso rostro;
Finalmente, después de unos momentos de vacilación, ella comienza con estas
palabras: "Oh rey, que ordene volvamos a abrir lesiones crueles [5,30]
recordando la furia, y Lemnos, y las armas ocultas en la capa nupciales, y los
cónyuges sacrificados por el hierro sacrilegio; Todavía veo este horrible
crimen, veo las Euménides que congela mi corazón. O lamentable! lo furia os
engañe! O noche terrible! ¡Padre! que soy yo (líderes de Grecia, no lo rechazo
con desprecio la mano que te rescató), sí, era yo el que sólo se han salvado mi
padre por él robar a sus golpes. Pero ¿por qué tener hasta ahora mis desgracias?
--- Armas y proyectos nobles se llaman; baste decir que la hija del ilustre
cautivo Toas Hipsípila ahora llevar el yugo de Licurgo, su aliado. "
[5.40]
Estas palabras han despertado el interés; Hipsípila parece más grande y más
noble fin digno de una cubierta tan hermoso. Todo continuación brillar el deseo
de conocer sus desgracias; más que cualquier otro, el venerable Adraste el
impulso de hablar.
"Sigue el contrario, dijo, mientras que en la distancia
son la mejora de nuestros primeros batallones porque Nemea con sus ramas
frondosas y intrincada sombreado no permite que nos permite ampliar el frente de
nuestro ejército. Cuéntanos estos paquetes, nos dice su gloria y gemidos de
necesidad; nos dice qué fatalidad que te hace caer del trono a la humilde
trabajo: es suave al hablar desafortunado, y recuerda sus viejos dolores! "
Comienza así: "Desde el corazón del mar Egeo, que, en todos los lados, la prensa
sus olas [5.50] se eleva Lemnos, donde, cansado del Etna fuego, Vulcano viene
respirar. No lejos de allí, el Athos cubre la tierra de su inmensa sombra, y
oscurece la imagen del mar de sus bosques. Vis-à-vis los bancos son cultivados
por los tracios, orillas fatales y de donde vinieron todos nuestros males. Con
su bebé Lemnos florecido, y su fama no tenía nada que envidiarle a Samos, Delos
el sonido, a las innumerables islas del mar Egeo ataca sus olas espumosas. Los
dioses querían perturbar la paz de este lugar. Nuestros corazones, es cierto, no
son puros de cualquier fallo: habíamos pasado ni altar, ningún alto templo a
Venus; a veces también se agitó dioses resentimiento ceeur, [5,60] y el castigo
se arrastra lentamente. "Venus de salir de la antigua Pafos y sus cien altares,
no tienen la misma cara o el mismo pelo, desatado, se suele decir, el cinturón
de casado, y la había dejado fuera de su ldalie aves. Incluso añadió que en
medio de las sombras de la noche, la diosa, armado con otras antorchas otros
rasgos como la suya propia, y rodeado por las hermanas de Estigia, se agitaba en
la sala de novia; Apenas tenía completó sus horribles reptiles los apartamentos
más secretas y sembrar el terror por todas partes, sin piedad por la gente de su
esposa fiel, [5,70] repentinamente lejos de Lemnos, huyes, tierna ama; Himen
sacude y vuelca sus antorchas capa legítima permanece desierta y el hielo, la
noche trae más placer; más horas de sueño en el brazo de un marido, todo el
odio, toda la rabia. En el seno de la capa se encuentra Discord. Los hombres no
tienen más cuidado que exterminar a los tracios desde la orilla opuesta, y
destruir, hierro en la mano, esta nación bárbara. Ellos tienen ante sí sus
hogares; sus hijos están allí, de pie en la orilla, y que son más suaves a
desafiar el frío de Edon y el viento aproximada del oso, o, finalmente, después
de los combates, [5.80] para escuchar en la noche silencio la repentina caída de
los torrentes rompiendo.
"Pero ellos, sumidos en la tristeza (porque para
mí, siendo virgen, que estaba libre de preocupaciones y protegido mi juventud),
el día y la noche lloran, se lamentan, intercambiando palabras de consuelo, y
mirando más allá los tracios crueles mares país.
"El sol, en medio de su
carrera y tan inmóvil, de pie encima de Olympus suspendido sus caballos
relucientes. Cuatro veces bajo un cielo claro truenos retumbaban; cuatro veces
las cuevas del dios Etna arrojaron sus remolinos llamas, y en el silencio de los
vientos sacudieron el mar Egeo, y golpearon sus costas sus olas hinchadas.
[5.90] De repente Polixo ya ha alcanzado la edad madura, es aprovechada por
todas las furias, y juncos más allá de la cámara nupcial, su residencia
habitual, como un Thyade de Theumèse, entrando en un santo furia cuando orgías
llaman cuando el sonido sagrado de Ida sonaba, y de las montañas que se propone
Evohe. Por lo tanto, la cabeza alta, el ojo pierde, sangrienta, perturba sus
gritos furiosos la ciudad desierta, llamando a las mansiones cerradas todavía en
todos los niveles, y se encuentra con sus compañeros; no es formular un niños,
jóvenes y procesión infeliz. [5100] De repente todas las mujeres a salir de sus
casas y se precipitan al templo de Palas; allí pronto estamos unidos en una
turba sin fin. Entonces, con la espada en la mano, este crimen consejero triste
impone el silencio, y la multitud se puede decir así:
"Inspirado por los
dioses y justo resentimiento, medito un gran proyecto: O viudas Lemnos, a
fortalecer su valor, la tira de su sexo, y este proyecto lo cumpliré. Si usted
está finalmente cansado de mantener sus desiertos eternamente pisos en alquiler
marchitan vergonzosamente la flor de tu juventud y consumida en un tiempo de
luto años estériles, encontré y te prometo los medios (porque los dioses son
para nosotros ) [5110] aquí para volver a encender el fuego de Venus. Sólo
tienen un valor proporcional de su dolor, y ha respondido primero a mis
preguntas.
"Tres veces blanqueado de invierno de nuestras campañas ha
experimentado los lazos de himen y misterioso de honor compartido capa separada?
Lo pecho calienta una Llama pareja? ¿Quién de vosotros Lucina ella ha asistido?
Que se sentía impaciente del término, creciendo dentro de ella el objeto dulce
de sus votos? Sin embargo, vemos en un acuerdo suave apareamiento aves y
bestias. Oh! cobardes somos! Un griego, un padre era capaz de armar a sus hijas
Vengadores características, y su dolor alegre, espolvorear con la sangre el
sueño tranquilo de la joven pareja! [5120] y nosotros, empresa vil y sin corazón
---. Pero qué quiere hechos más frecuentes de nosotros? Recuerde que el valor
heroico de que la esposa de Tracia que vengó a su Mano a su pañal sucio, y comió
la carne de su hijo a su marido. Y también quiero mi parte de la delincuencia;
No te insto allí, tranquila para mí, mi familia es grande; ver, aquí está el
resultado doloroso de mis hermanas. Pues bien, estos cuatro hijos, el honor, la
comodidad de su padre aquí en mi pecho, incluso a pesar de sus abrazos y
lágrimas, perforar el hierro de esto, voy a confundir a su sangre y heridas, y
su que expira el cuerpo, he sacrificado su padre. ¿Quién de vosotros me
prometió, durante tantos asesinatos, el mismo valor? "
Estaba a punto de
hablar de nuevo: [5.130] velas brillaban en el mar que se extendía delante de
ellos; que era la flota lemnienne. Polixo presa de joy fortune, y exclama: "Los
dioses nos llaman! No escuche que no es su voz? Aquí los barcos! Dios, dios
vengativo les lleva a nuestra furia, y promueve nuestros proyectos. No, no era
un vano fantasma que se me apareció en un sueño.
De pie espada desnuda,
Venus se muestra claramente a mí en mi sueño, "¿Por qué perder su juventud, así,
que me dijo? perseguir sus capas tales maridos desdeñosos. Yo mismo encender
otras velas; Voy a formar para la relación más feliz ". Ella dijo, y puso en mi
cama, toma mi palabra, hierro, sí, el mismo hierro. [5.140] desafortunado, el
tiempo es corto, y deliberada todavía! Véase, la espuma del mar, levantado por
brazos fuertes; Probablemente llegan con sus esposas Tracia".
Y la rabia
estimula sus almas, terribles gritos suben a las estrellas: parece que el fuego
Escitia, mientras que descienden las Amazonas tumulto de las montañas con sus
escudos de media luna luz de corte, cuando el dios su padre les permite armas, y
abre las puertas de la guerra cruel.
Sus gritos son unánimes; punto de
desacuerdo, como le ocurre a la multitud entrenado a la opinión contraria; la
misma furia que los impulsa; todos tienen el mismo deseo de despoblar sus
hogares, para decidir el tiempo de los hombres jóvenes, los ancianos, [5150]
para aplastar a los niños todavía en el pecho, la espada a caminar a través de
todos los âges.Près el templo de Minerva, a continuación, una floresta cubre la
tierra con su sombra negro, qu'épaissit siquiera la sombra de una montaña: los
rayos del sol expiran en esta doble oscuridad. Allí se unen con un juramento. Tú
testigo, bélicas Enyo, y tú Infernal Ceres, y todos ustedes, diosas de la
Estigia, que, obligando al Acheron, accourûtes antes de ser mencionado! Mezclado
con sus tropas, Venus está en todas partes y engañar a los ojos; Venus está
sosteniendo espadas, Venus gira su ira. La sangre del sacrificio no es una
sangre normal; esposa Caropée ofreció a su hijo; [5.160] Así se arman, y para
levantar los brazos a la vez con ganas de matar al niño sorprendido, rompen su
pecho tierno, y su sangre, todavía caliente, tan dulce jurar el paquete a su
corazón: la sombra de la joven víctima ya revolotea alrededor de su madre.
Al ver esto, qué emoción corrió a través de mi cuerpo? lo palidez cubrió la
cara? un ciervo tales rodeado de lobos rapaces, que, temblorosa y débil, tiene
poca esperanza en su luz corriente, precipitó su fuga, y en sus preocupaciones
terroristas, ya piensa entrado, y tiene la intención choque los dientes de sus
enemigos cuya hambre fue engañado.
[5.170] El Lemnians llegó. Ya la flota
alcanzó la orilla, y todos se disparan a voluntad para tocar la tierra. Infeliz!
que son bastante muerto, domesticado por el brazo asesino de Marte Tracia, o
engullido por las olas inclemencias del mar! Sin embargo fuman los altares de
los dioses, están arrastrando a sus víctimas prometidas; pero en todas partes
brota la sangre negro; en cualquiera de la matriz es Dios manifestado.
Júpiter hizo más adelante en la noche de la Olympus húmeda, y la bondad a cabo,
creo, el movimiento del cielo hasta la hora marcada por el destino; [5.180]
jamás oscuridad no siempre pronto sustituirá el sol alcanza el final de su
recorrido. Finalmente las estrellas aparecieron en el cielo; encendieron Paphos
y Thason sombra y mil Cícladas; solo, Lemnos se envuelve, oscurecido por un
cielo de espesor; alrededor de ella se extiende como una red de nubes oscuras;
solo, Lemnos no es visto vagando marineros.
Ya, dispersos a sus hogares y
bajo la espesa sombra de los bosques sagrados, se entregan a las fiestas
suntuosas y vacían sus vastas y profundas copas de oro, contando sus gloriosas
batallas de ocio del Estrimón, Ródope, y áspero fatiga secó el frío Hemus.
[5.190] Sus esposas a sí mismos de tropas sacrilegio, sentarse en el banquete,
coronado de guirnaldas, y en todo el esplendor de sus adornos. Cytherea tenía en
esta noche suprema, llegó al corazón de su marido, y, volviendo después de
largos días de la discordia, una paz temporal, había calentado el préstamo de un
incendio se extinga.
Los coros se han detenido; la alegría del banquete, los
juegos de licencia subsidios y las primeras sombras son silenciados
progresivamente los susurros. Sleep luego se envuelve la oscuridad de la muerte,
su hermana, y húmedo con una de rocío infernal, abraza la ciudad que pronto se
pierda, y su mano fatal paga por separado en los hombres un descanso para luego
ser molestado. [5200] Las esposas y vírgenes aseguran por el delito, y, feliz,
hermanas bajo mundo afilar espadas crueles. Ya se levanta el hierro; cada furia
se apoderó de un corazón donde reina conjunto. Al igual que en los campos de la
Escitia, una manada es asediado por leonas que Hircanio prensa, al amanecer, la
primera punzada de hambre, y cuya pequeña buscan con avidez la mama.
Entre
las mil formas de delincuencia, vacilo, no sé qué elegir paquetes. Hélime
coronado ramitas acostado en una alfombra masa profunda exhalado en el sueño los
vapores del vino, cuando la negrita da asco en él, [5210] y la difusión de su
ropa, en busca de un lugar para el hierro. Pero, ante la proximidad de la
muerte, sacude este sueño mortal, y, perturbado, los ojos abiertos, pero todavía
incierta, que envuelve el brazo a su enemigo, que sin piedad, lo sumerge desde
detrás de la espada entre las costillas hasta que la plancha ha tocado el pecho,
sólo entonces se detiene sus brazos criminales. Hélime inclina la cabeza, y en
las últimas convulsiones de la muerte, sus ojos y su voz sigue buscando Gorgé
caricias, y sus brazos todavía están entrelazadas el cuello de su esposa
indigna.
No volver sobre sus asesinatos vulgares, mientras que son
terribles; No recuerdo que las desgracias de mi propia familia. [5.220] Te vi,
oh hermoso joven Cydon, y que, mella, cuyo cabello virgen colgado sobre sus
hombros (la misma mama nos había alimentado, a pesar de que eran a la vez
rechaza la ilegítima mi padre) y tú también, mi prometido, Gias valientes
nobles, que estaba pensando con miedo, me vi caer bajo los golpes de la
sangrienta Mirmydon; Vi, en medio de las flores y bailes lúdicas, bárbara Opopée
matar a su hijo.
Lycaste Cydimon llora por su hermano; que nacen juntos; se
le cae el hierro contemplar ese rostro, ¡ay! de modo similar a la suya, y que la
muerte se marchitará, estas mejillas juveniles brillantes, el pelo que ella
misma ha forjado con oro; pero su madre bárbara, ya manchado con la sangre de su
marido, junco, [5230] excita con amenazas, y la propia impulsa la espada. Como
una bestia salvaje, con un maestro suave, despojado su ferocidad; ella no sabe
usar sus armas; en vano la picadura, los golpes redoblados lo estimulan, se
niega a volver a su ferocidad natural: Lycaste y cae sobre el cuerpo de su
hermano, y, inclinado sobre él, hace que la sangre burbujeando de su regazo, y
pulse , que arranca el pelo, se separaron de la lesión.
Pero cuando vi
alcimede llevando la cabeza de su padre, que se separa del tronco, incluso
murmuró a la vista de su espada apenas tinte de sangre, me pusieron los pelos de
punta, un estremecimiento corrió hasta el fondo de mi corazón . Creo que veo a
mi padre Toas; [5.240] me parece que esta cruel mano es la mía. Inmediatamente
fuera de mí mismo, corro el palacio paterno. Ya hace mucho tiempo (cómo el sueño
puede degustar uno que garantiza el cuidado del imperio?) Me preguntó, poniendo
los miles de pensamientos en su mente, lo que podría ser el ruido que llegaba
hasta su casa, a pesar de su distancia de la ciudad; por eso el clamor en el
medio de la noche, por lo que en la hora de descanso estos gritos tumultuosos.
Revelo con miedo todos estos paquetes de baño; ¿de dónde viene su
resentimiento, su atrevimiento: "Ninguna fuerza, mi desgraciado padre, puede
detener su furia; Sígueme en este lado; nos presionan, y si esperamos, tal vez
caerán conmigo.
Movido por esto, sélève; caminamos por las calles de esta
gran ciudad, donde aquí y allá, a nuestra disposición enormes pilas de
cadáveres, [5250] tumbado en el bosque sagrado, el mismo lugar donde en la noche
sangrienta, el sueño traicionero los alcanzó. Una nube nos roba todas las
miradas; todavía están pegados caras de la capa en la que se basan, espadas cuya
custodia los pechos destino separado, restos de largas lanzas, desgarrado de
hierro ropa, tazas, platos derramado ensangrentados, nadando en la carnicería ;
Bacchus licor de escape a través de las ranuras abiertas, cayendo en secciones
con chorros de sangre. No se amontonan revoltijo de los jóvenes, los ancianos
como el hierro deberían haber respetado, [5.260] niños medio muerto, que la
mentira en las caras de sus padres desafortunados exhalación por el esfuerzo, en
el umbral de la vida, su alma palpitante. Crueles menos menos enojado son las
fiestas de los lapitas, cuando, por el frío Ossa, el vino se vierte a raudales
irritaban los niños descalzos; justa ira se ha desvanecido su cara, que volcó
las mesas y se precipitan en la batalla.
Luego, en la oscuridad que nos
aterrorizan, se ofreció de repente mis ojos Bacchus, que tenían, al final,
ayudar a su hijo Toas. Su rostro brillaba una luz brillante; Reconocí. Sus
templos no fueron acusados de guirnaldas, ni su pelo entretejen grupos
bermellón; pero su frente estaba hundido, [5270] y los ojos húmedos de lágrimas
indignas de un dios. Está dirigido a Toas: "Mientras las Parcas, mi hijo, que ha
permitido gobernar a los poderosos de Lemnos, y que sea formidable incluso a
naciones extranjeras, siempre mi preocupación secundado sus nobles esfuerzos.
Pero la triste Parcas cortan los marcos de su tiempo cruel, y fervientes
oraciones y lágrimas que derramé pies de Júpiter no pudo desviar estos
infortunios; que dio a su hija ese horrible rabia. Apresurar su vuelo! y usted,
mi sangre verdadera, chica, guía lateral de su padre como estas hermosas paredes
se extienden sus brazos hacia la orilla; [5280] allí en esa puerta tan fuerte,
que es la cruel Venus de pie ejército de hierro, anima la furia de la mujer
lemnias (de ahí llegó a esta diosa esta digna furia de Marte?): Usted, dice que
su padre en la inmensidad del mar, que le sustituya en su cuidado ".
Dijo, y
se desvaneció en el aire; y, mientras las sombras oscurecen la vista de los
mortales, que lanza en nuestro camino a lo largo de una ranura de luz. Yo soy el
camino, lo que se señala a mí, y pronto me encomiendo mi padre a los lados de un
buque, al recomendar a los dioses del mar, los vientos y las olas del mar Egeo,
que abarca las Cícladas. [5.290] Los dos lloramos, y las lágrimas no dejaron de
ser confundido que cuando Lucifer condujo a las estrellas de las playas del
este. Así que finalmente me fui de la orilla con susurros roncos, presa de un
millar de temores y confiar sólo en la palabra de Dios; mis pies hacia adelante,
pero mi corazón sigue preocupado detrás de mí, y no tengo descanso hasta que he
visto el surgimiento vientos, y que la parte superior de cada colina, no han
contemplado las olas. El día parece enrojecimiento en la frente, y Febo, que
ilumina el cielo, sus rayos lejos de Lemnos y oculta su carro en una nube
espesa. A continuación, descubrir la furia de la noche daba miedo la luz del
día, [5.300] todas estas mujeres, aunque entre ellos el crimen es igual, rubor
de vergüenza, ETSE prisa para enterrar en el suelo las víctimas de sus crímenes
o hacerlos desaparecer en las llamas de la pira. Ya las tropas de las Euménides,
ya saciados crímenes Venus, huyeron de la ciudad desolada; las mujeres lemnias
podrían entonces entender lo que habían atrevido: se rasgan las vestiduras y se
bañan con lágrimas sus caras.
Esta isla es tan rica en sus campañas,
recursos, armas y guerreros, tan célebre por su posición, y una vez más
enriquecido con los despojos de los getas, no abrumado el mar, ni el enemigo ni
las malas influencias aire, que venció sobre ella; sin embargo, ella ha perdido
tanto sus habitantes, se corta del resto del mundo. Más hombres que aran los
campos, que navegan por las olas; [5.310] casas están en silencio; a través de
las olas (sangre por todas partes y un lodo espeso de color rojo! En las paredes
de esta gran ciudad estamos solos, y en lo alto de las casas gemimos crines
irritados.
Yo mismo, en la parte más interior del palacio, construyo una
gran hoguera en la que lanzo el cetro y los brazos de mi padre, y la ropa
conocida, regalía. Triste, yo estoy cerca de llamas se fusionan, una espada
ensangrentada en la mano, y lloro por mi propia fraude en la pira que debe
engañar a su furia: tiemblo por descubrir, y ruego a los dioses . de distancia
de mi padre, que triste presagio, y lejos de mí estas alarmas, estos temores de
muerte [5320] de este ardid, contaminan a mí mismo un crimen imaginario, gané su
confianza; y para mí rémompenser se inflija tormento que me siente en el trono
de mi padre tuvo éxito su poder sitiada sus oraciones podía negarme? Yo estaba
de acuerdo, pero primero attestai muchas veces los dioses son testigos de mi
lealtad y mi inocencia. Finalmente yo reino, oh terrible poder! un imperio que
es un cadáver, en una ciudad desolada y sin líderes. Pero al día aumenta cada
remordimiento; asegura, y oprime el alma; gemidos ráfaga; poco a poco Polixo
inspirado nada más que de terror. Recordamos el delito se consume; se levanta
altares a los espíritus; sincera imploramos que la ceniza que contiene la tumba.
[5.330] Así que cuando el guía, el marido de la manada, el rey de la selva,
orgulloso de su descendiente joven, sucumbió al diente de león Massylie los ojos
de la manada novilla aterrado caminar mutilados, sin honor, y el país, los ríos,
los animales irracionales, llorar la muerte de su rey.
Pero ahora, la
escisión de las olas con su arco de bronce, los avances de los vasos monte
Pelión, nuevo huésped, en el vasto mar; los Minyens la delantera. La espuma
rugido onda blanquea sus flancos elevados. Veías su caminar Ortigia, arrancadas
de sus cimientos, o correr en un agua de las montañas desarraigados. [5.340]
Pero cuando los trenes suspendidos dejan dormir en el mar, a continuación, más
suave que los sonidos del cisne moribundo y la lira de Apolo, se oye una voz
desde la mitad de la popa; las olas sí se acercan a la nave. Allí, el hijo de
Eagro (aprendimos más adelante), Orfeo, apoyado en el mástil, cantando en medio
de los remeros, y hecho olvidar su trabajo peligroso.
Estos guerreros se
dirigían al frío Escitia, y, en primer lugar, a las orillas estrechas entre las
rocas Cyanean. En su opinión, convencido de que se trataba de los tracios que
nos traen la guerra, que se precipitan tumultuosamente en nuestras casas, como
una manada juntos a través del miedo, o un enjambre de aves fuera de control.
[5.350] ¡Ay! Lo que ahora se convierten en nuestra furia? Subimos el puerto y
los diques que abrazan la costa, donde la vista se extiende mucho sobre el mar;
cabalgamos sobre las altas torres. Aquí traemos a toda prisa piedras, estacas
endurecidas por el fuego, las armas de nuestra desafortunado marido, incluso
tonos de espadas de sangre; ¿Qué estoy diciendo? las mujeres se atreven lemnias
tomar la armadura sucia, el casco y la frente de la mujer del arnés. Pallas se
sonrojó al ver su audacia, y la parte superior de Hemus el dios de la guerra
sonrió. Pero pronto este afán sin sentido abandona: no es un barco que ellos
creen que se avance en el mar, [5360], pero a finales de justicia de los dioses
y el castigo por sus crímenes.
Ya son cerca de la orilla, con el alcance de
una flecha de Tracia, cuando Júpiter trae una nube oscura, hinchada con lluvias
y se detiene por encima de los vasos griegos. Inmediatamente el horror se
extiende sobre las olas, el sol se esconde su luz en el día y se sumerge en la
oscuridad; las olas son de color oscuro, rabia con furia, los vientos arrancaron
los desnudos interrumpen el mar; volver arena mojada en vórtices negros; toda la
llanura líquida, levantó las conversaciones Notus, suspendidas en el aire, que
va casi a las estrellas, [5.370] y se rompe y cae. El barco ha perdido su primer
ímpetu; vacila, vacila. Newt adornar su arco, a veces se hunde en el abismo más
profundo, a veces el cielo se golpeó sus espuelas: la fuerza de los semidioses
es impotente; mate supera el arco con furia y constantemente equilibrada, da un
peso, cae y levantarse trae consigo olas; los remos caen marineros pecho
innecesarios.
Y nosotros, de las rocas y las paredes, mientras que los
guerreros que luchan con esfuerzo contra el mar y los vientos indignados, los
brazos débiles atrevería a lanzar golpes inciertos sobre Tehamon en Peleo [5380]
y nuestras flechas atacar al dios Tyrinthe de sí mismo. Estos héroes sostienen a
la vez el asalto de la guerra y de las olas; cada recipiente a proteger sus
escudos, otros alivian el agua de sentina que llenarlo; otros luchan, pero la
agitación les priva de su fuerza; tambaleante y como suspendido, que se agotan
en vano. Nuestras líneas de vuelo con más fuerza, y el granizo vies de hierro
para la tormenta del mar; montones enormes de roca, distritos, lanzas, dardos al
cabello inflama a veces caen sobre las olas, a veces en la popa. La nave se
cubre y se sonó ruidosamente; sus placas se separan y gimiendo abierta.
[5.390] Tal lanzado por Júpiter, nieve azota al norte del campo verde; todos los
animales están enterrados en la llanura; pájaros, sorprendidos en su huida,
caen; bateador cosecha en el terrible helada; y pronto los torrentes rodar
ruidosamente montañas y ríos se precipitan furioso. Pero cuando el poderoso
Júpiter ha dado a luz un rayo entreabierta desnudo, y como nuestros ojos
aparecen estos marinos gigantescos valor se congela, los brazos caen por el
miedo, y dejar fuera las armas prestadas; recordamos nuestro sexo. Vemos tanto
el hijo de Éaco, Anceo que amenaza nuestras paredes de furia, [5400] y Iphite
que su larga lanza golpea las rocas. Por encima de hacer sus compañeros
sorprendieron eleva el hijo de Anfitrión; su peso es de forma alterna en ambos
lados ven la nave; se quema en medio de las olas. Sin embargo ligera Jason
(lamentable! Yo no lo conozco a continuación) se ejecuta a través de bancos,
remo y marineros, dirigiéndose ahora el valiente hijo de Eneo, a veces Idas a
tálao, el hijo de Tíndaro, mientras goteando con el blanco rocío del mar,
Calais, que en medio de una nube de Boreas frías su padre trabajó para unir
velas al mástil; insta al gesto y la voz. [5.410] Éstas, por un poderoso
esfuerzo venció alternativamente mar y las paredes; pero las olas espumosas
resisten, y lanzas embotadas rejaillissent torres. Typhis onda de fatiga
enojado, y el timón sin brillo a su voz; se volvió pálido, órdenes de cambio en
cada momento, y se vuelve a veces bien, a veces la izquierda, el arco con ganas
de romper contra las rocas. Por último, al final de la embarcación, el hijo de
Aesón plantea la rama Pallas, el olivo, que ciñe la parte delantera de Mopso, ya
pesar de sus compañeros, le pide por la paz: la puerta de la tormenta a su voz
nosotras.
[5.420] Y la lucha contra la tregua se hace; a la vez agotados los
vientos disminuyen, y el día ilumina el cielo. Los cincuenta guerreros se unen
remos, como de costumbre, y se apresuran para un salto rápido en estas nuevas
costas. En ellos brilla toda la majestad de sus padres, su frente es serena, su
puerto reconocible, donde el miedo y la ira habían desaparecido de sus caras.
Estos, dicen, los dioses del Olimpo que escapan a través de un pasadizo secreto,
les gustaba visitar las costas y las casas de los etíopes negros, y sentarse en
la mesa de los simples mortales. Los ríos, las montañas abren su paso, la tierra
se enorgullece de sus pasos, [5430] y Atlas respiran un momento, aliviada de su
carga.
Así vemos Teseo, el orgullo de haber entregado los campos de hermanos
Marathon y Ismariens, hijos del norte, incluyendo los templos sonaron el sonido
de sus alas brillantes y Admeto que obedecía sin ira Febo y Orfeo n no tiene
nada de la ferocidad de Tracia, y el héroe de Calidón, y el hijo del dios de las
profundidades del mar, y los dos gemelos de OEbalie, cuyo parecido desafía
miradas inciertas; ambos cubiertos con una capa brillante, ambos armados con una
lanza; sus hombros están desnudos, [5.440] sus suaves mejillas de nuevo, y el
mismo sol brilla en su cabello. Hylas atreve a pie los pasos de Hércules; se
mueve y multiplica sus pasos; pero, aunque el héroe gigantesca camina
lentamente, el joven Hylas apenas puede seguir funcionando; flechas cargadas de
Hydra, es orgulloso de llevar el peso aplastante de la aljaba.
Pero Venus y
Amor en llamas de nuevo un secreto corazones la llama mujeres lemnias feroces.
El Auguste Junon brilla en sus ojos las armas fuera de estos guerreros, la
gloria de su origen noble; Todo apresurar, por lo tanto, a voluntad, para abrir
sus puertas y darles la bienvenida. Así, por primera vez, [5450] se enciende el
fuego en los altares; luego viene escozor olvido y fiestas, un sueño feliz, y
noches tranquilas. No deja de tener la voluntad de los dioses que a pesar de la
confesión de sus crímenes, ellos saben cómo encanto estos héroes.
Tal vez,
oh líderes de Grecia, ¿saben lo que el destino me ha llevado un error excusable,
probablemente. Certifico por la ceniza y las furias de la mina, no es
intencional o por la delincuencia, ya que encendió la antorcha de un matrimonio
extranjero; Los dioses saben, aunque Jason estaba listo para encantar y para
someter a sus nuevas leyes de aguas cristalinas: la fase sangrienta tiene sus
leyes; que le estaba salvando, O Cólquida, otros amores!
Ya privado de
heladas, las estrellas se han calentado a las largas soles de primavera, [5460]
años rápida renace y vuelve a sonar. Ya una nueva semilla, fuera de nuestro
pecho, llena nuestros deseos, y Lemnos sonidos inesperados lamentos sus bebés
nouvaux. Yo mismo, bajo la influencia de un host inflexible, que se convirtió en
una madre; Di a luz a gemelos, la garantía de una unión forzada, y les hizo ver
el nombre de su antepasado.
Dado que la restricción a los abandonó, no podía
conocer su destino; que ahora completan el quinto brillo, si los destinos
permitidos, y si Lycaste, ya que había pedido, ha nourris.Le ira lamer calmado,
y la más favorable Auster llamadas de los velos; El barco en sí es retrasos
irritados, el ocio del puerto, [5.470] y quiere romper el cable tanto tiempo
conserva la roca. El Minián exigiendo la salida y ardiente Jason excita a sus
compañeros. Siento como que no ha caminaba a lo largo de nuestras costas sin
tener en cuenta que, quien no recuerda las promesas de su amor, o muere la fe
prometida! La fama ha llegado incluso entre las naciones más remotas, y que la
memoria ha renovado el vellón de Frixo.
Tan pronto como el día cayó en el
océano, que Tifis fue reconocido en el cielo el presagio de un viento favorable,
y al oeste de la capa de Febo brilla púrpura, luego se echó nuestros gemidos;
esta noche es para nosotros otra vez anoche. El día brilla, y ya de pie en el
barco, Jason dio la señal, [5480] y, como cabeza, golpea al mar desde el primer
golpe de remo. Desde lo alto de la roca, la parte superior de las montañas, los
vemos agrietan la parte posterior espumosa de la inmensidad del mar, y nuestros
ojos siguen hasta que el cansancio se vean fuera, nuestra visión se oscureció,
confundido onda distante con el cielo y el mar representa para el extremo del
cielo.
cerdas fama en el ruido de puerto que transporta más allá de los
mares, Toas reinan en el trono de su hermano; Soy un punto de penal una pira
vacío estaba iluminado por mí este pueblo impíos se estremecieron, encendida por
la picadura del crimen y se preguntan por mi inocencia. [5.490] Los golpes
circulan en la multitud: "Sólo ella habrá sido fiel a su pueblo; y nosotros,
estaremos encantados de inmersión en nuestras manos en la sangre? No: es
castigado por el dios, por el destino que está al mando de la ciudad culpable!
A estas palabras refrigerados por el miedo (debido a una tortura espantosa
me amenaza), cansado del trono, solo, sin séquito, yo robo, huí a la orilla, y
alejarse de estas paredes fatales. Yo soy el camino por el que guié a mi padre
en su vuelo; Baco pero esta vez no vinieron a mi rescate. Una banda de piratas
que habían desembarcado en nuestras costas se apoderó de mí que no me atrevía a
levantar la voz, y me llevó esclavos a estas costas ".
[5.500] Si bien
Lemnienne exiliado dio esta cuenta a los reyes de Grecia y el encanto de sus
quejas de dolor por mucho tiempo, se olvida (y que había ordenado, oh dioses!)
Abandonó a su bebé. Que su voluntad, los ojos sobrecargados, lánguida cabeza, se
había hundido en la hierba espesa, y, cansado de sus juegos infantiles, se
durmió; su mano todavía con la hierba que había entrado.
Sin embargo, en
medio de la llanura, una serpiente, un hijo de la tierra, que llena la madera
con un terror religioso, destaca, colocar la enorme masa de sus pliegues, y sin
embargo, deja tras de anillos largos. Sus ojos lanzan un fuego oscuro, la boca
hinchada es de color verdoso espuma veneno; la lengua vibra tres dardos; tres
filas de dientes afilados aparecen amenazante, [5510] y la frente de oro se
eleva terrible y majestuoso. Los trabajadores han consagrado a Júpiter Inachus,
protector de estos lugares, en los que podrían ofrecer un precio tan bajo un
altar de tributo de césped. A veces reptil, sus anillos tortuosos rodea el dios
del templo; A veces se muele los árboles de este bosque desafortunado, y se
estrella en sus abrazos la gran ceniza. A menudo se cubre ríos y clave a ambos
lados. La ola golpeó sus escalas, burbujas. Pero ahora, por fin de Baco, toda la
tierra está jadeando de calor, las ninfas angustiados esconden en el polvo,
[5520] más terrible monstruo se pliega sobre sí misma sus flancos, su
liquidación posterior, irritada por el fuego de su veneno seco. Roda en
estanques, lagos secos, las fuentes se secaron, valles vacíos de sus ríos, y en
su ansiedad, a veces con la cabeza echada hacia atrás, la bomba de aire húmedo,
a veces, rozando las llanuras gimiendo, se curva en el suelo, se aferra a
extraer el jugo de la hierba verde. La hierba alcanzó su aliento caliente cae
donde anda el dardo, y silbatos llevar a la muerte en el campo.
Como esta
serpiente que comparte el cielo, desde el carro del oso a su ajuste, [5530] y
entra en otro hemisferio; sin embargo, como esta serpiente envolvió sus anillos,
sacudió los dos picos del Parnaso, hasta que, golpear a sus características, oh
Dios de Delos, arrastró con sus cien heridas, flechas forestales.
O niño
pequeño! Lo que Dios ha colocado en que un destino cruel? ¿Tuvo en el umbral de
la vida, caer bajo tal enemigo? o era que la muerte fue en los siglos futuros,
tu nombre sagrado para los pueblos de Grecia, y que merecía una gloriosa tumba?
Uno se muere golpeado por los últimos eslabones del monstruo, que hace caso
omiso de su víctima; [5540] sueño tan pronto escapa a sus miembros y sus ojos
abiertos sólo para morir. En su terror, el niño empuja un último grito
agonizante, y pronto la queja expira en la boca, como los sonidos
qu'interrompent sueños. Hipsípila oyó, y el hielo por el miedo, ella se
apresura; pero sus rodillas temblorosas retrasar su carrera. Ya aseguró su
miseria por un sentimiento de tristeza, ella viaja, se cuestiona su aspecto
todos los lugares, y llamó en vano a sus hijos nombres que él sabe: ella ve en
cualquier lugar. El terrible enemigo, recogió en sus anillos verdes [5550] se
extiende casualmente, y cubre un área enorme; todavía con la cabeza se apoya de
forma oblicua en el vientre de su joven víctima. Al ver esto, el desafortunado
Hipsípila estremeció de horror, y deja escapar un largo grito que sacude el
bosque profundo: el reptil no está consternada, y permanece en el suelo. Sus
gemidos golpean el oído de los griegos; De repente, en el orden de Adrasto, el
ardiente Parthenopaeus roba, y sólo aprender el rey cuál es la causa. A
continuación, sólo el brillo radiante de las armas, los guerreros se estremece,
monstruo feroz eleva su cuello escamas erizadas. La gran hipomedón capturado por
un poderoso esfuerzo, una enorme piedra que servía de un terminal a un campo, y
se lanza en el vacío; [5.560] Comienza impetuosa, como los barrios de rock,
influido por un brazo fuerte, saltar sobre las puertas de una ciudad sitiada.
Pero toda esa fuerza se pierde porque, echando hacia atrás la cabeza flexibles,
la serpiente se escapa el golpe que le amenaza; tierra tembló, y las ramas del
bosque en añicos el aire entrelazado. "Usted no es mi voluntad evitar golpes,
gritos Capaneo, que, armado con una larga ceniza, corrió a su encuentro. Si
usted es feroz serie de este terror madera, o entregado a Dios, que haga sus
delicias, y él puede ser así! se muere, cuando estos mismos enormes miembros que
todavía usan un gigante.
[5.570] La lanza vuela frémissaant, entra en la
boca abierta del monstruo, cortar lazos con su lenguaje triples y feo, perfora
la cresta erizada que adornan su hermosa cabeza y va, manchada de sangre impura
de la cabeza negro, se hundidos en la tierra.
Apenas el dolor viajó a todos
sus miembros, que rodea la línea de pliegues, lo lágrimas, y prevalece en el
templo de Dios con sombra. En este caso, la medición de la tierra con su enorme
masa, exhala su último suspiro silbante al pie del altar del dios a su amo.
El pantano de Lerna se indigna y llora su bebé; [5.580] ninfas acostumbrados a
cubrir el monstruo de flores de primavera, las llanuras de Nemea, entrecruzado
con él gemir; y tú también, faunos, los anfitriones forestales, a romper sus
antorchas. Júpiter mismo, desde el aire, ya había pedido a sus características;
ya reunidos las nubes y las tormentas; sino que la ira de Dios era aún demasiado
débil, y Capaneo estaba reservado para un castigo más severo. Pero los vientos
de Júpiter ha puesto en marcha robos relámpago, y toca la cresta del guerrero.
El desafortunado Lemnienne recorría el campo. Tan pronto como la exhalación
monstruo había entregado estos lugares, se levanta sobre una pequeña eminencia,
[5590] y se puso pálido al ver la hierba sucia de un rocío sangriento engañado
por la violencia de su dolor se precipitó sobre sus pasos y reconocer todos la
terrible sacrificio; entonces cae fulminado en esta tierra mortal, y se
encuentra, en el primer ataque de desesperación, ni palabras o lágrimas. Apoyado
en este niño desafortunado, sólo puede cubrir de besos, y su boca mirando a los
miembros tibios sin embargo, su alma fugaz; pero por desgracia! no tiene ni la
cara ni el pecho, la piel se rasga, sus delicados huesos muestran pocas
palabras, se une a los miembros todavía se inundan con una lluvia de sangre, y
el cuerpo es sólo una herida.
[5.600] Así, cuando una serpiente de medio
entumecido, deslizándose en un roble devastado gruesa nido y cría tierna un
pájaro, madre, a su regreso, es sorprendido por el silencio de su mansión
ruidosa; pasa por encima, y la entrada de terror, rechaza la comida que trajo,
cuando se ve que la sangre de su amado eje, y las plumas esparcidas aquí y allá
en su capa devastado. Después de la desafortunada Hipsípila estaba presionada
contra su pecho y envolvió su pelo estos restos mortales, su dolor se calmó
dejar a su paso libre de voz, y respira en estas palabras lastimeras:
"Opheltes O, dulce imagen del hijo no tengo, oh tú que yo consolaba de mi pasado
fortuna, perdido en mi país; [5.610] que Honorio mi esclavitud, que eran mi
alegría; Lo dioses crueles que han deleitado en el día? A principios de dejar
que te dejo feliz, y pisoteando la hierba bajo los pies de su luz. ¿Qué ha
pasado, por desgracia, sus características radiantes, estas palabras a medio
formar que la lengua tartamudeó terca, esa sonrisa, esos susurros que sólo yo
entiendo? ¿Cuántas veces te he hablado de Lemnos, la nave Argo, y su sueño
acunado por mis muchas quejas! Así que soulageais mi dolor, y te he ofrecido una
casi vientre: ahora es en vano que mis moja leche tus labios; ya no se ejecuta
en sus heridas. [5.620] que reconocen la mano de los dioses: O terribles
presagio de mi sueño, terrores nocturnos O! O Venus, diosa fatal, que nunca
llegó a asustarme con impunidad en la sombra! Pero ¿por qué culpar a los dioses?
Este soy yo (debería tener miedo de admitir cuando me muera?), Es lo que se
ofreció a la muerte: lo que yerra el ánimo?
Yo podría olvidar esta mi mayor
preocupación? Aunque me gusta decir a los infortunios de mi país, me siento
orgulloso de mis obras, que es mi gran piedad, que mi lealtad! O Lemnos! He
pagado la deuda de mi crimen! Jefes de Grecia, arrastrarme al homicidio
serpiente, si usted tiene algún tipo de reconocimiento del servicio fatal Te
prestados, [5630] si adjunta un cierto valor a mis palabras; o yo meter las
espadas, no muestro mi cara a mis maestros atroces tristes, el desafortunado
Eurídice me privó de su hijo, pero igual ellos mi dolor. ¿Debo dejar este triste
carga en el útero de una madre? Lo que la tierra me abra por primera vez su
oscuro abismo "?
Ella dijo, y, manchando la cara con sangre y polvo, se da
la vuelta al pie de héroes griegos tristes, y los acusa suavemente las olas que
su montrées.Déjà la fatal noticia, penetrando repentinamente en Licurgo palacio,
echó a llorar y el rey y toda su casa.
[5.640] Incluso ahora regresó los picos sagrados de Perseo, donde ofreció un
sacrificio al dios del trueno, y, asustado presagios siniestros dadas por la
víctima, que tristemente sacudió la cabeza. Este príncipe no ha tomado las armas
con los griegos, no le querer como el valor, pero el templo y el altar de Dios
retenido; que no ha olvidado las respuestas del oráculo, las viejas advertencias
de los inmortales, y esas palabras salieron del santuario: "O Licurgo! que
deberá sangre por primera vez en la guerra de Tebas ". Eso es lo que temía, y
ante los ojos de polvo que Marte no levanta lejos de él, años suena la corneta,
su corazón es apretado tristeza y envidia estos guerreros que marchan a la
muerte.
[5650] La palabra de los dioses se cumplió: la hija de Toas llega
acompañando a los tristes restos de Opheltes. La madre infeliz corrió, seguida
de una procesión de mujeres, llanto y lamentos de tropas. Pero el magnánimo
Licurgo rinde señalar arrepentimientos cobardes; Él es más fuerte que el dolor,
la ira y el padre hizo las lágrimas; impaciente, viajó por el valle a un ritmo
rápido, y exclama: "¿Dónde está ella, esta mujer, que es poco, para los cuales
es una alegría tal vez perdiendo mi sangre? Compañeros, van, correr, cuando,
consideradas, traédmelo! que arrastra aquí! Voy a hacerlo bien, yo, toda esta
charla de Lemnos, y el padre salvo; y el orgullo se encuentra un origen sagrado,
desaparece para siempre "! [5.660] avanzaba, y, furioso, levantaron el hierro,
se va a golpear; De repente, el héroe, hijo de Eneo, se opone a su escudo y
repele, exclamando furiosamente: "Infeliz, quienquiera que sea, recuerda que
rabia!" Al igual que él Capaneo hipomedón y guerrero Erymanthus prisas, con la
espada en la mano; los ojos están deslumbrados el rayo príncipe que fluyen de
las armas. Por otro lado, un grupo de campesinos se ubica en torno al rey;
Adrasto, entre ellos, quiere tranquilidad y Anfiarao, lleno de respeto por las
tiras sagrados que también se ciñe la frente, exclamó: "Stop, se lo ruego, a
reducir sus espadas; [5.670] una sangre nos une: moderar su ira, y que el
primero! "Pero Tideo, cuyo corazón está burbujeando nuevo, otra vez:" ¿Qué?
nuestro guía, el liberador del ejército griego, que se atreve, a los ojos de
tantos ingratos immolate en una tumba? y lo que la muerte, dioses grande,
¿quiere venganza? y en eso? una reina, la hija de Toas, el ilustre descendiente
de Baco! No es-es suficiente para su orgullo, cuando las naciones en todas
partes amigables toman las armas, que sólo en medio de cohortes rápidos, a
mantenerse en paz? Así que disfruten de esta paz y la victoria de los griegos
todavía cree que está quejándose de su mala suerte frente a una tumba! "
[5.680] Dijo, Licurgo y más tranquilo, más moderado en su ira, responde:
"No
creía que fuera contra Tebas y en contra de mí que caminar sus escuadrones
enemigos. Y bien ! por lo tanto, acelerar la ruina de un aliado; si la sangre
para usted tan atractivo, rubor aquí sus armas; este templo de Júpiter (por lo
que el crimen no se atreve?) este templo, por lo que muchas veces anhelaba en
vano, o víctima de una llama malo, ya que no es posible que un corazón que
romper un dolor cruel para creer que un maestro, un rey tenía derecho a un vil
esclavo. Pero él te ve, ve su audacia, el Dios que gobierna el inmortal, y su
ira, aunque tarde un día os sorprendan todavía ".
[5.690] Para ello, vuelve
los ojos hacia el paladar. Resuenan otros gritos. La fama tuvo un momento
anticipó los escuadrones rápidos, y cubrió sus alas un doble tumulto. Un poco de
ruido cerda qu'Hypsipyle, su benefactor, es arrastrado a la muerte; otros que ya
sucumbió. Se cree, y de repente las luces de ira; Ya antorchas, espadas amenazan
el palacio. En su furia quieren derrocar al imperio, tomar y hacer desaparecer
Licurgo, con Júpiter, con sus altares. La residencia real sonidos de mujeres
gritando, y el dolor dio paso al miedo.
Su carro a los caballos veloces,
[5700] Adrastus llevó consigo a la hija de Toas, avanza a través de los
batallones, y muestra sus guerreros temblorosos: "Alto, alto! si lloraba; no
hubo crueldad cometidos; Licurgo no ha merecido esta ruina espantosa: Aquí uno
que le mostró la fuente benéfica ".
Así que cuando, por sus vórtices
opuestos de Boreas y Eurus lado, la otra la Auster, tormentas eléctricas negras,
mares estomacal, cuando el día y huido de la reina tormenta, luego viene la
ondas soberanos, montados en un tanque; Triton, la forma doble, natación dócil
en blanco con el freno de la espuma y da el vasto mar la señal para bajar sus
olas; De repente el mar se aplana, y las montañas y costas están creciendo.
[5.710] ¿Qué dios, a la comodidad del Lemnienne de esta muerte fatal y pagar sus
lágrimas, escuchado sus deseos más queridos? Que trajo en Hipsípila una alegría
inesperada? Es usted, autor de raza, O Baco, que condujo a su hijo dos orillas
de Lemnos las regiones de Nemea y préparas estos maravillosos destinos.
Su
madre era la razón de su viaje. Apenas se habían fueron recibidos bajo el techo
hospitalario de Licurgo, un nuevo rey fatal aprende el triste final de su hijo.
Por lo acompañan, y (el destino de O, O ceguera de los hombres!) Se aprovechan
para él. [5.720] Pero sólo los nombres de Lemnos, Minas golpeó sus oídos, se
lanzan a través de las líneas, a través de los batallones; y ambos se lanzaron
llorando en los brazos de su madre, las caricias ávidos de cobertura, ya su vez
la multitud contra ellos.
Ella, como una roca, permanece inmóvil, mirando, y
no se atreve a confiar en los dioses, ella sabe muy bien. Sin embargo, al
reconocer sus caras, y la imagen grabada en Argo espadas que habían abandonado
el Minián, y el nombre de Jason bordado en el manto de los jóvenes príncipes,
todo su dolor se disipa; turbado por tal felicidad, cae, y sus ojos llenos de
lágrimas de alegría. Al mismo tiempo signos favorables aparecen en el cielo: el
tumulto y los gritos alegres, [5730] tambores y platillos dios sacuden las
airs.Alors el hijo piadoso de Oïclée, cuando la gente se calmó hojas un reino
momento de silencio, y que su palabra puede alcanzar hasta sus oídos, "Escucha,
oh rey de Nemea, y vosotros, ilustres líderes de Grecia, lo que el verdadero
Apolo prescrito por mi voz. Este duelo se reservó tiempo para nuestras armas:
las Parcas siempre van bien para su objetivo. Estos ríos se secaron, esta sed,
esta serpiente matar a este niño pequeño, Opheltes, cuyo nombre presagio de
desgracia, todo esto viene de la voluntad suprema de los dioses. [5740] Reservar
su valor caiga estas espadas se levantó demasiado pronto. Hay que dar a este
niño los honores que duran en la sucesión de las edades; que se merece. Qué
valor ofrece libaciones noble manes, y puede que, ô Phébus, todavía dar lugar a
nuevos retrasos; nuevos obstáculos pueden oponerse continuamente a esta guerra,
y las Tebas fatales todavía lejos de nosotros! Y, los padres felices, cuyo
destino no supera la de los mortales ricos; Usted, cuyo nombre vivirá en la
posteridad, siempre y cuando el pantano de Lerna, siempre y cuando el río
Inachus desplegarán sus olas, y que se proyectará la llanura de Nemea temblando
sombras, [5750] no deshonrar, por sus lágrimas, la majestad, lloran no dioses;
porque este niño es un dios, sí, un dios; no preferiría su destino el antiguo
héroe de Pilos, o los largos años de frigio Tithonus".
Él deja de hablar, y
la noche envuelve el cielo con sombras profundas.
LIBRO 6.
[6.1] La fama, en su curso errático, corre a través de las ciudades
de Grecia, anunciando que los descendientes de Inachus instituidos en honor a la
tumba que sólo plantean, partes y. juegos, donde el valor bélico está preparado
y consciente de las fatigas de la guerra: era entre los griegos antiguos usos.
La primera, en los campos de Pisa, el piadoso Alcide dedicado este honor a
Pélope, y se limpió con la corona de polvo olivier sauvage de su pelo. Después
de él Fócida emitió reptil con pliegues largos, que se celebra la primera hazaña
de la flecha de Apolo niño. [6.10] Al poco tiempo, alrededor de los altares de
Palémon triste, religión desplegó su dispositivo sombrío. Siempre que Leucothoe
en su dolor agudo, exhala de nuevo sus gemidos, y que en este día de celebración
se dirige a una orilla amigo, los dos cuellos de sonido del llanto y Tebas,
construidos por Equión cumple con estas lágrimas. Y ahora esos reyes ilustres,
los bebés Argos, que por su enfoque original de los dioses y cuyo nombre es el
suspiro terrible tierra Aonie y madres de Tebas se reúnen y realizan sus
extremidades desnudas fatigas de lucha .Así los buques que, por primera vez, han
de visitar playas desconocidas, [6,20] y hacer frente a la tormenta Tirreno o
las olas del mar Egeo, en primer lugar tratar en un lago tranquilo su área, su
timón , los remos de luz, y se educan en peligro. Por último, cuando se
experimenta la tripulación, se lanzan con valor en el medio del océano, y ya no
buscan la tierra que escapa a su esposa regards.La brillante de Tithonus se
elevó en el cielo, montados en su tanque que trae el trabajo; y, antes de que el
servicio de mensajería pálida diosa vigilante, huido y noche y el sueño, cuya
bocina se había agotado. Ya las calles de la ciudad, el palacio que ya están en
duelo sonido del llanto y lamentos, y se hace eco de los bosques profundos se
rompen y se repiten una y mil veces los sonidos que les golpeó.
[6,30] El padre de Opheltes se sienta en tiras de la frente desnudos que
adornaban la, cara y la barba tiñe de un polvo funeral. Pero más violento en su
desesperación y superando a su marido por sus gemidos, la madre infeliz excita
sus esposas por su ejemplo, estimula su dolor y quemaduras de correr sobre los
restos desgarrados de su hijo; se tira en vano, ella siempre vuelve, y él mismo
Licurgo intenta sacarlo. Pronto los hijos de reyes Inachus, los rostros
consternados, entran en este palacio lleno de dolor. Entonces, como si en ese
momento el tiro fatal que golpeó de nuevo, [6,40] como si los niños pequeños
sintieron el golpe mortal y el élançât serpiente en el vestíbulo, los senos,
aunque cansado ya, resonancia disparos se multiplicaron y gritos lastimeros y
desgarradores están de nuevo haciendo eco en todo el edificio. Los griegos
entendían el dolor que los condena, y se disculpan por su crimen por abundantes
lágrimas. Adrastus a sí mismo, siempre que pueda oírse, y el tumulto, un tiempo
interrumpido, dado paso a unas sombrías palabras afectuosas consola silencio que
desafortunado padre, a veces recuerda a sus destinos, el destino mortal cruel,
paradas
Fates irrevocables; a veces se le hace esperan otro hijo, hijos que
retienen el favor de los dioses; [6.50], pero aún no ha terminado y ya
lamentación estallar de nuevo. Licurgo, por su parte, no es más sensible a estas
palabras amistosas del mar jónico, que, en su ira terrible, no escucha o gritos
o los deseos de los marineros, o los errantes rasgaduras relámpago nubes.
Sin embargo se construye con ramas oscuras y cama entrelazados ciprés suave
condenados a la llama, el sofá funeral del joven príncipe. Ramificaciones verdes
decoran la base; el segundo plano se forma con más guirnaldas hierba de arte
salpicado de un racimo de flores que morirán pronto; el tercero está acusado
perfumes de Arabia, [6,60] de todas las maravillas de Oriente, el incienso
blanco sobre el suelo, y la canela se conservan de la antigua Belus. La cumbre
está coronada con temblorosa franjas de oro, y un paño suave de Tiro gemas de
color púrpura que brillan: Linus está representado en el medio de hojas de
acanto, rodeado de devorar a los perros; el trabajo maravilloso que todavía
tenía la madre infeliz con horror, y ella apartó los ojos como un presagio
siniestro.
Los brazos de sus antepasados y los despojos ganados por valor
también se colocan alrededor del féretro (ya que incluso en medio de un dolor
tan grande, incluso se desliza el orgullo ambicioso de luto en la corte), como
si esperara que el funeral una carga noble y pesado, como si la cama era para
recibir el cuerpo de un gran héroe?
[6.70] Pero esta bomba vana y estéril
halaga el dolor de los padres, y la sombra de un niño crece con esta oferta. A
continuación, se paga en sus cenizas abundantes lágrimas homenaje
tristeconsolation para un padre! Le ofrecemos regalos por encima de su edad
debido a Licurgo, en la impaciencia de sus deseos, había destinado a él carcaj,
rasgos proporcionales a su tamaño y las flechas inofensivos; que ya se puso de
pie para él en los establos de caballos de élite de sangre noble; para él
guardaba un arnés rotundo, y las armas que tenía que esperar un brazo más
fuerte. O espera codicioso! Cómo ansiosamente su madre ingenuos tejió para él la
ropa, [6,80] y le preparó un vestido púrpura, insignias de la realeza, y un
cetro hecho por sus manos infantiles! En su desesperación, el infortunado padre
condena llamas funerarias y fundido en nuestra propia armadura, para calmar, si
es posible, su dolor cruel.
Por otra parte, el ejército, por las órdenes de
los sabios augurio, al igual que con los restos de los bosques talados una
enorme pira, como una montaña; ella quiere expiar el asesinato de la serpiente,
y desviar los presagios negros de una guerra fracasada. Esto es lo que los
soldados confiaron la tarea a caer bajo el hacha de madera de Nemea y sombreado
Tempe, y entregar a Febo el secreto de sus retiros oscuros. [6,90] siempre se
respeta hasta este bosque ve caída bajo el hacha de su antigua cabello; ella la
que, matices más ricos que toda la madera de Argolis o High School, levantó la
cabeza a las estrellas. Su vejez expresa una santa reverencia. Ella no sólo ha
visto, dicen, ir a la larga sucesión de edades generaciones de hombres, pero
ella sobrevivió a las ninfas y faunos de la tropa. Hierro en todas partes trae
la muerte y la desolación. fieras huyen, las aves escapan de su cálida nido de
nuevo, impulsado por el miedo. Haya caídas pico alto y el eje Chaonie; inviernos
ciprés invulnerable, [6100] para el eje de resina, llamas de alimentos de la
estaca; los olmos, robles, el tejo el jugo formidable, ceniza ama beber la
sangre de homicidio guerra, y el roble que el tiempo puede dominar y abeto
negrita, y pino perfume destilación sus lesiones se dividen por el hierro. A la
tierra se inclina hacia la cumbre hasta entonces virgen de aliso, amigo de las
olas, y el olmo, obligando anfitrión vid toda la campaña se quejó. Por lo tanto,
pero con menos ruido, la Ismare, por ejemplo, cuando cae desarraigados Boreas,
rompiendo la prisión, sube de su guarida; menos rápidamente llama la noche,
empujado por el Notus, devora todo un bosque.
[6.110] Que está llorando como
Pales con el pelo blanco, Silvano, el rey de las sombras, y la tropa de
semidioses, dejando el resto de dulces estos lugares preciados; gemidos
forestales de su partida, y las ninfas no pueden salirse de los árboles Toman
besaban. Así, cuando una ciudad es saqueada asaltar ganadores codicioso, apenas
se hicieron dieron la señal, y ya la ciudad no es más. Implica, se invierte,
cazamos, Saqueamos, desenfrenado y sin ley. Menos miedo es el alboroto de un
campo de batalla.
Ya, con igual cuidado, fueron llevados dos altares
similares, una de las tristes sombras, el otro a los dioses de Olympus, [6.120]
cuando el luto de la señal viene dada por el sonido de bajos de la flauta
curvada; Es la flauta, concedida en virtud del modo frigio sombrío, se utiliza
para evocar los espíritus se suavizó. Pélope la primera, dicen, impartido estos
sacrificios funerarios y sombras himnos para la juventud; Niobe y cantaba al ser
golpeado en el último de sus hijos por las flechas de dos dioses opuestos, y lo
llevó a gemir en Sípilo doce urnas funéraires.Les líderes griegos son las
ofertas y el alimento para las llamas, porque certificar su homenaje piadoso,
cada uno muestra la insignia de su nación. Un intervalo largo, realizado en los
hombros de los jóvenes escogidos por Adrasto en todo el ejército, se encuentra
el féretro, [6130] que acompañan lamentos feroces. Alrededor de Licurgo son
líderes de Lerna almacenado; La madre de Opheltes acompañó a sus mujeres
desoladas; Hipsípila viene después de ella con un gran número de seguidores;
envolvente agradecidos griega; su hijo apoyó sus brazos contusiones lívidas, y
feliz de haber encontrado a su madre, que sólo permiten las lágrimas a sus
désespoir.Eurydice habían cruzado el umbral en cuanto desafortunado pecho,
desnudo, que da rienda suelta a su dolor, y después de preludio por los sollozos
y gritos de largo, que comienza:
No es con la procesión de las mujeres
Argive de lo que esperaba, mi hijo, que siga un día! [6.140] Esta no es la
suerte de que mis deseos clamando por sus años más jóvenes! Yo estaba loco, no
me temo ningún mal; porque en mi ignorancia, ¿podría temer por que, a la entrada
de la vida, y Tebas, y la guerra? Lo que Dios tuvo a empezar a luchar con
nuestra sangre? Lo mortal prometió este crimen para asegurar el éxito de sus
brazos? Pero tú, Cadmo! su raza sigue intacta; Theban ningún niño sigue
llorando. Los inicios de lágrimas y el derramamiento de sangre, era yo el que,
antes de que el sonido de la trompeta y iron've ofrecido! mí, la ternura
perezoso confía en la lealtad de una enfermera; Yo, que renunciar a mi hijo en
su pecho! Pero podría desafiarme? dijo que su padre había sido salvado por su
astucia, [6150] de que sus manos estaban limpias: este es el que, si le creemos,
renunció a un juramento horrible, y sólo a todas las mujeres de Lemnos,
resistido la furia de su país; Aquí está! creer en la dedicación! admirar el
poder de su piedad filial! se lanzó en un campo vacío, no el rey o su maestro,
que era demasiado pequeña, pero la cruel, un niño extranjero. Se trata de todos
los peligros de un bosque solitario que no sólo una terrible serpiente (lo que
era necesario que este monstruo para matarlo?), Pero los golpes violentos de
aire, impulsado por el follaje Notus, un ruido vano podría matar!
[6.160]
tengo ningún hijo, y no puedo, oh reyes, que te persiguen con mis lágrimas. El
destino inmutable reservado una madre infeliz con el crimen de esta mujer, y sin
embargo mi hijo, nunca en sus brazos, todas las caricias fuera por ella; solo se
sabía que se podía escuchar la voz; Yo te eran desconocidos; nunca dio su madre
no hay alegría. Ella, en cambio, el cruel, escuchó sus quejas, tu risa mezclada
con lágrimas; recogió los primeros sonidos de la voz; todavía era tu madre, como
lo han vivido; Ahora bien, es para mí ser. Pero, por desgracia! Ni siquiera
puedo castigar a pesar de su crimen! Guerreros, ¿por qué estos dones? por qué
estas honras fúnebres a la pira? [6.170] Esto es lo que pide la sombra de mi
hijo, y nada más: la concesión, la gracia, sus cenizas en una madre
desafortunado que no tiene nada que concede a la vida! Entregarlo a mí, Te
encargo por el comienzo de una guerra para la que he nacido en una víctima,
"dijo ella, y, tirando de su pelo, renueva su oración:" Deliver Me, ym llamar no
cruel y sanguinaria. Muera yo con ella! y mientras mis ojos se llenan de su
justo castigo, lo que pone en las mismas llamas ".
Mientras que ella
desprendía dichas quejas, Hipsípila, por otro lado, gimiendo, y salvó ni sus
pechos ni el pelo. Eurídice ver en la distancia, y, indignada que comparte su
dolor:
[6.180] "Jefes de Grecia, si llora, y que quienes he comprado en el
precio de mi gloria inmortal sangre, me ahorre al menos ese tormento; Funeral de
distancia de este objeto de mi odio: ¿por qué sólo ofender a los ojos de una
madre, con el rostro sombrío, y ver el espectáculo de mi desgracia? ¿Quién puede
que llorar cuando se trata de abrazar a sus hijos ", dijo ella, y de repente se
desvaneció; la queja expira en los labios.
Así lorsqu'arraché amamanta un
ternero cuyas fuerzas son todavía inseguro, y tiene para cualquier sangre que la
leche materna está encantado por una bestia salvaje, o impulsado por un pastor
en el altar implacable madre, privada de su bebé, movido por sus gemidos del
valle, ríos, rebaños, [6190] y pide el campo desierta. Se vuelve de mala gana a
la granja; el último que queda de la llanura mortal, y aunque sin alimentos,
desprecia la hierba antes de ella.
Sin embargo, el padre de Opheltes
lanzados en la pira su cetro real y la insignia del dios del trueno. Se le cae
bajo la barba cincel que cubre el pecho y la extensión del pelo sobre los
hombros; que navegan el delicado rostro de su hijo, y sus lágrimas se mezclaban
con paternos estas tristes palabras: "No está allí, Júpiter traicionero, lo que
esperaba cuando hice una promesa a usted dedicar este pelo, el día en que me
habría permitido ofrecer sus altares en la primera por las mejillas de mi hijo;
[6200], pero no se ha escuchado la voz de su sacerdote; Habéis condenado mis
oraciones. Deja que ella recibe mi ofrenda de esa sombra que es más digno que
tú! "
Finalmente la antorcha se coloca bajo la primera follaje. Con la llama
gritos estallan; se esfuerza de distancia y este padre desesperado y madre. Se
da una orden, y los griegos de pie, los brazos levantados en el aire, roban sus
ojos este espectáculo espantoso. Las llamas son cada vez más ricos ofertas:
Nunca tanta riqueza se había prodigado en las cenizas: las piedras irrumpieron
en los escombros; masas de plata licuan, fluye oro paño ricamente bordado y la
madera alimenta jugos Asiria. [6.210] La miel encendió chispas con azafrán
pálido y ganchos de vinos espumantes se derramó sobre el juego, y el negro
cortes de sangre y leche, libaciones agradables para las crines.
A
continuación, siete escuadrones, cada uno con un centenar de caballos de fuego,
por adelantado, derrocaron signos, bajo las órdenes de los líderes griegos;
corren hacia la izquierda, como de costumbre, sus avances en torno a la hoguera,
y doblar la parte superior de las llamas bajo una nube de polvo. Tres veces se
doblan sus arcos, y los rasgos de entre-choque y el sonido. Cuatro veces las
armas enviadas fuera un accidente horrible, cuatro veces las mujeres responden
al ruido cortando el propio seno.
[6.220] El otro juego recibe en sus llamas
emocionantes ovejas, toros todavía respirar. El contador del tiempo borrará el
dolor y la pérdida de portentos de los funerales, aunque sabe que estos
portentos son demasiado reales. Los escuadrones regresaban de ese lado, y están
a la vuelta de la hoguera blandiendo sus lanzas; cada guerrero lanza su ofrenda
en el fuego: uno de sus riñones, el otro su cinturón, es jabalinas, que una
garza que haga sombra en su casco. La llanura apagar sonido estridente acuerdos,
y el oído en caso de atropello alta suena la corneta. El bosque está
aterrorizado de este clamor. [6.230] Así, cuando en el sonido de la bocina
guerra se debate banderas, rabia todavía en plena ebullición en los corazones,
el hierro es todavía roja de sangre, y en este preludio de la batalla, la guerra
guardado todas sus galas; que se coloca en el medio de la desnudo, planar en
combatientes de marzo; que aún no ha decidido quién va a dar victoire.Tout está
terminado, el fuego cayó y se quemó. Es rápido alrededor de las llamas, y muchos
aspersiones sofocar la estaca; trabajar sólo con fines caída de la noche, y
finalmente dió a la oscuridad finales nuit.Déjà la estrella de la mañana había
llevado nueve veces las estrellas del cielo húmedos de rocío, y nueve veces,
[6.240] cambiar los caballos por la noche, que había superado las luces de la
luna, la revolución no sorprendió a las estrellas, porque en su vaivén hacia
arriba, siempre es la misma estrella. Ya, con maravillosa rapidez, un monumento
de una masa enorme, un gran templo en las cenizas de Opheltes. Muestra
representado con el fin todos los detalles de este triste evento aquí Hipsípila
muestra un río griegos agotado; De ahí que el desafortunado niño se arrastra el
rastreo, no se encuentra en el suelo; la tumba está envuelto pliegues de extremo
de la horrible serpiente; usted cree escuchar la terrible silbido de la boca de
morir, y verlo rodar alrededor de la lanza de mármol.
Ya con ganas de
contemplar la imagen vano de los combates, [6.250] el pueblo, la voz de la fama,
corrieron en las multitudes de la ciudad y el país. Incluso aquellos a los que
no se conocen los horrores de la guerra, los lánguida vejez o joven mantuvo en
sus hogares, acudieron a este espectáculo. Nunca la orilla del Ephyra, o el
circo Enomao, no vio agitando una multitud mayor.
Cerca hay un valle rodeado
de verdes colinas de la corona, y abrazó a todos los gruesos acciones
forestales. A su alrededor resistido rocas duras que rodean como una muralla; se
llega por una trayectoria suave de largo, donde se ve sólo unos arbustos,
[6.260] y ligeras eminencias salpicados de una hierba verde.
Aquí es donde
la cohorte belicosa aussitôtque el sol doraba el país, recoge y se sienta. Allí,
se mezclaron y confuso, que cuentan su número, piden a sus rostros y actitudes;
muy dulce espectáculo de estos guerreros, y que cumpla con la confianza en una
gran guerra. Hay cientos de toros negros, el rebaño de élite al peso pesado, se
entrenó con esfuerzo y un número igual de vaquillas del mismo color y terneros,
cuya frente todavía no se ha superado el crecimiento. Nos vemos luego vienen las
muchas imágenes de sus antepasados magnánimos, cuyas características, un
prodigio de arte, parece que respirar de nuevo. [6.270] En la delantera es el
dios de Tirinto, que presiona contra su pecho jadeante áspera un león, la brisa
y las rutinas entre sus brazos huesudos. No es, sin temor; aunque el monstruo
que se respira en el latón, el hijo de Inachus contemplar su héroe. A la
izquierda, en la misma línea, vemos Inachus situada al pie de un banco, entre
los juncos y apoyándose con complacencia su abundante urna. Detrás de él se Io
ya se inclinó hacia el suelo, Io el objeto de su dolor, que considera todos los
ojos de Argos radiantes abiertos. Tocado por su situación, Júpiter había
planteado en los campos de Pharos, con la cabeza inclinada, y el Este que dio la
bienvenida al entonces adorado como una deidad.
[6.280] Luego viene Tántalo, su
antepasado, no se vio como el infierno, considerado una ola engañosa, o entrar
en el aire en lugar de disparar fugas, pero de invitados, pero respetando la
gran Júpiter. Por otro lado, ganador Pélope sacude las riendas de sus caballos,
esta Neptuno; en Myrtilus vanos presione sus ruedas temblorosas: Myrtilus se
deja lejos del carro rápido de su rival. También es grave Acrisio, y la COREBE y
Danae terrible imagen que lleva en su interior una fruta culpables; Amimone y
las lágrimas cerca de las olas que habían descubierto, y Alcmena, madre del
joven Hércules, y cuya frente está coronada con tres lunas.
[6.290] No vemos
los dos hijo de Belus presente como muestra de una alianza traicionera manos
hostiles. La cara de Egyptus tiene más dulzura; pero mentirosos rasgos de Danaus
uno ve claramente los paquetes de esta paz desastrosa, y la noche que sigue. Un
millar de otras imágenes vienen después de ellos; Por último, cuando los ojos
están llenos de este espectáculo, el guerrero de élite se prepara para competir
en el precio de la primera valeur.Aux caballos sudor de las listas. Dime sus
nombres, noble Phoebus; decir los nombres de sus guías. Nunca había visto a más
generosa tropa de caballos con alas en los pies; más lenta son las aves cuando
están luchando por la división de la velocidad del aire; [6300] son vientos
menos impetuosas, cuando desatada por Aeolus, se enfrentan en una orilla. Antes
de todos los demás cables son Arion, notable por el fuego de su melena dorada.
Neptuno, si uno cree que la antigua fama, era el padre; la primera, por ejemplo,
un arrugado manejado con cuidado la boca de la potencia en caballos, y superó el
polvo de la tierra, sin tener que recurrir a la picadura; porque devorado un
entusiasmo sin límites, que era tan móvil como el océano en la ira. se mezcla a
menudo con caballitos de mar, se cortó a través de las olas de los mares de
Jonia o Libia, y cubrió todas las orillas dios de los mares azules; las nubes se
sorprendieron al ser superado por él, [6.310] y Eurus y Notus luchaban en vano
para llegar a él. No menos impetuosa en la tierra cuando el hijo de Anfitrión
enfrentó a las órdenes de Euristeo, peleas peligrosas, que era el héroe, dibujo
en el suelo un surco profundo; Hércules mismo apenas podía contener su espíritu
rebelde. Pronto dada por los dioses presentes al rey Adrasto, se inclina bajo el
nuevo maestro; madurado con la edad, su fuego era mucho más tranquilo. Ahora el
rey confía su hijo Polinices, pero no sin darle un buen consejo; se entera por
lo que el arte cuando gana, que está acostumbrado a moderar su ardor. Deje que
su lado, dijo, no lo hacen en bruto que es, y que las riendas no dejan ninguna
libertad para su crecimiento: Pulse el otro por la picadura y las amenazas;
[6.320] irá a sí mismo, y más de lo que desea. "Por eso, cuando el sol volvió a
su hijo las riendas del fuego y lo colocó en su coche rápido, enseñó llorando
Phaeton, transportados alegría, ¿cuáles fueron las estrellas peligrosas, zonas
de difícil acceso, y el camino a seguir en la región media entre los polos
opuestos: un sabio consejo inspirado por la ternura y el miedo prudente! pero
los hados crueles habían cerrado el oído del infortunado joven.
De pie en su
carro Anfiarao, dirigido por la esperanza de la victoria, empujando sus caballos
a OEbalie. Es que, oh, que cyllarus engendras el chivato cuando Castor en
dirección al mar Escitia intercambió el freno contra el tren. [6.330] La ropa de
Anfiarao son de color blanco como la nieve, sus corceles blancos; su casco,
cresta andits tiras sagrados son del mismo color.
El feliz Admeto de
Tesalia, con apenas contiene sus yeguas estériles; Se dice salidas centauro;
Creo, como se resienten de su sexo; Venus descendió por completo en sus miembros
vigorosos. Salpicado de manchas blancas y negras, que incluyen el día y la
noche; y ver a estos dos colores tan fuertemente impresiones, parece que la
noble descendencia de las ovejas de Castalia que escucharon con deleite los
acuerdos de la flauta de Apolo, y desdeñaba el pasto para sus canciones
armoniosas.
[6.340] Se trata de dos jóvenes guerreros, el hijo de Jason, la
reciente gloria de su madre Hipsípila, ambos montados en su carro: uno, llamado
Toas, como su abuelo, otro Euneo, nombre de buen augurio para el Argo. Entre
todos ellos es similar: las mismas características, mismo coche, mismos
caballos, los mismos deseos; cada uno se quema para ganar, o al menos no a ser
derrotado por su hermano.
Luego avanzar Chromis y Hippodamos, uno nacido del
gran Hércules, el otro Enomao. No se puede decir que guían los caballos feroces;
se mantiene el tracio Diomedes, que uno de su padre, el rey de Pisa. [6.350] Sus
tanques están adornados con horribles despojos
y empapado.
Los
terminales de la carrera son, por un lado, el tronco de un roble desnudo,
despojado de su largo pelo verde; la otra, una zona rocosa y la frontera con los
agricultores: entre los dos extremos se extiende el espacio de cuatro veces una
lanza, tres veces a la flecha lanzada vigorosamente podía cruzar.
Pero
Apolo, mezclando su voz con los acordes de su lira, encantó al noble montaje de
las Musas, y la parte superior del Parnaso rostro en tierra. A menudo, sus
himnos piadosos habían cantado Júpiter y llanuras Flegra su triunfo sobre la
serpiente Pitón, y las obras de los dioses de sus hermanos. [6.360] Ahora se
revela su poder maravilloso; dijo lo soplo divino dirige el rayo, y conduce las
estrellas que dan vida a los ríos; lo que alimenta los vientos; la fuente que
suministra el vasto mar; qué fuerza precipita el curso del sol y amplía las
noches; si la tierra está en el extremo o en el centro del universo, si no está
rodeado de un mundo desconocido.
Sus canciones habían cesado; Ahora se niega
a escuchar sus hermanas deseosos de encontrarse con él; y mientras él colgaba
una lira de laurel y tela brillante de su corona, y se separa el pañuelo
bordado, un ruido repentino en huelga. Él no se ve mucho de él el bosque de
Nemea, y ve la imagen tumultuosa de un carro de combate; [6.370] reconoce a
todos los rivales. Admeto y Anfiarao habían detenido accidentalmente en un campo
cercano; en esta vista, se dijo: "Lo que Dios, por tanto, ha enfrentado a estos
dos reyes, de todos los mortales el más dedicado a Febo? Tanto de la igualdad de
la piedad, ambos por igual a mi corazón; yo no puedo elegir entre ellos. Uno de
ellos, mientras que el ordrede Júpiter y voluntad hermanas infernales, yo era un
esclavo en los campos de Pelión, me ofreció incienso a mí su esclavo, y me hacen
sentir que osapas fue mi maestro. El otro es un fiel ministro de mis trípodes y
discípulo devoto del arte Celestial. El primero, sin embargo, prevalece en el
mérito, [6380], pero el archivo del Parque los últimos días de la segunda; una
vejez larga, muerte tardía, están reservados para Admeto; pero para usted,
Anfiarao, que hay más alegría. Ya está cerca de Tebas, con su oscuro abismo;
usted sabe, por desgracia! largos mis aves que han predicho. "dijo y su rostro
celestial es casi llenos de lágrimas. De repente, un brillante obligado que
salta a través del aire, más rápido que sus flechas y el rayo de su padre. Ya
está en la tierra, su huella se encuentra todavía en el cielo, y los Zephyrs
mantuvo la estela luminosa de sus vol.Prothoüs agitó nombres en un casco de
bronce; [6390] cada uno tiene su lugar y su lugar asignado. Guerreros, la gloria
del universo, y sus nobles corceles, como ellos mismos una raza divina, a la
espera en la cola en la puerta. En su corazón está la esperanza agitado, temen
negrita, pálido confianza. Agitado por sentimientos contrarios, se queman y el
miedo a la vez de precipitarse. Un valor de escalofrío recorre los extremos de
los miembros; el mismo celo anima a los caballos, explosión de fuego de sus
ojos, sus dientes resuenan en la mandíbula, se calientan su espuma y su sangre;
puertas, barreras no pueden resistir sus esfuerzos; sus fosas nasales de fuego
respira ira, [6400], ya que sufren de haberse detenido. Muchos de ellos no se
pierden antes de la señal, y sus fuertes pies de alcanzar el suelo que se les
escapa. Los escuderos que les rodean, desentrañar y peinan las crines y
exhortaciones affermissent prodigaron su valor.
La trompeta sonó Tirreno, y
todo se fue: que navega en el mar, que cuenta en los combates, que las nubes en
el cielo volando con la misma velocidad? acometidas menos impetuoso y torrentes
de invierno y un rayo en sí. Más lenta caída y las estrellas se están reuniendo
las lluvias; ríos más lentos van desde las montañas. [6.410] Los griegos vieron
ir, les conocían. Pero ya robados de sus ojos, envuelto, con polvo grueso, que
desaparecieron en la nube y en el torbellino polvoriento velo sus caras; es sólo
si pueden con sus gritos y sus nombres los reconocerá. Finalmente traspasaron la
nube que los envuelve, y aparecen, de acuerdo con la agilidad de sus caballos, a
distancias desiguales; los surcos trazados un tanque destruido por el coche
después de él; a veces, en su afán impaciente y se apoyan en sus corceles que
toquen el pecho; A veces, instando a la rodilla, se doblan hacia atrás para
apretar las riendas. Los caballos del cuello se hincha musculares y el viento
sacude sus pelos erizados; tierra seca realiza un rocío blanco; [6420] para el
pesado sonido de los pies se mezcla el débil sonido de las ruedas. Los golpes de
mano sin descanso aire sonó incesantemente silbar látigos: granizo saltaron
menos prensado en las regiones heladas del oso; menos abundantes lluvias caen
los cuernos de Amaltea.
El Arion profética sintió que una mano extranjera
tiene las riendas y guía, y el crimen detout pura, tiene miedo del hijo
sacrílego Edipo. Desde la barrera obedece único pesar e indignación, porque la
carga que lleva poco acostumbrado con más furia; Griegos creen que su inflamar
la alabanza; pero huye de su conductor, amenaza, terrible y feroz, [6430] y
busca a su maestro en todas las listas.
Pero venció a todos los
combatientes. Después de él, pero a gran distancia, justo Anfiarao, el tesalio
Admeto igual en su curso rápido; entonces los hermanos gemelos, ahora Euneo,
ahora Thoas, tienen la ventaja; con ellos se obtienen, triunfan vueltas, y no la
ambición
la gloria ofende su sensibilidad fraterna.
En el último lugar
con antelación y Chromis feroces y feroces Hipódamo, no es que carecen de la
capacidad, pero el peso de sus caballos frenaron su carrera. Hipódamo, que
venció a su rival, lleva el peso de las cabezas de los caballos que siguen,
revisan el gemido de ellos, y se siente hombros quemaron su respiración.
[6.440] La esperanza auspicioso Apolo, llevando las riendas del centro, el
afeitado terminal, acortar su curso y tomar la iniciativa; la misma esperanza se
enciende el héroe de Tesalia, mientras Arion, la mano rebelde que lo guía, se
pasea en circuitos largos, y gira a la derecha. Ya el hijo de Oïclée es el
primero; Admeto es ya la tercera ya no, cuando el hijo de caballo de mar, trae
su carrera en un estrecho círculo, efecto invernadero y casi supera algunos de
sus rivales ya triunfante. El sonido de los aplausos se eleva jusqu'auxastres y
sacude el cielo. De repente, el público se puso de pie, y todos los asientos
vacíos appanaissent de la vista. [6.450] Pero Labdacide, pálido de miedo, ya no
se ejecuta las riendas, ya no levanta su látigo y, en las olas, un piloto cuya
razón los neumáticos se precipita sobre las rocas; se ve más estrellas, y
gracias tirar al azar vencieron a su arte.
Todo, de nuevo con una carrera
hacia delante, se precipitan directamente a la meta: ejes chocan contra los
ejes, las ruedas contra la rueda; Punto de tregua de precaución: la guerra es
más suave con la espada; se ve como una batalla fea. Tal es la furia de la
gloria! tiemblan, amenazan con la muerte, y un caballo siente que sus pies
tocaron las ruedas cruzan. [6.460] Pronto picanas, látigos no son suficientes;
Es la voz, es el llamado de su nombre Admeto lleva a sus corceles, Foloe, iris y
caballo de proyecto, Thoe: el adivino codiciosos de Argos rápida y Aschéton
Cycnus que sin cesar su nombre. Chromis, hijo de Hércules, apóstrofe Estrimón; y
Fanée la Equión ebullición; Hipodamo estimula lento Calydon; Thoas pide Podarce
hasten caprichosa su curso. Sólo Equión descendiente de Polinices, que ve su
deambular carro, mantiene un silencio triste temía que su voz temblorosa lo
traiciona.
Apenas caballos comenzaron su arduo viaje, y ya por cuarta vez,
hacen que la marcha de polvo en las listas; [6,470] sudor ya tibia irrita sus
miembros, y su boca deteriorada chupa y rechaza un vapor de espesor; su ímpetu
ya se desaceleró, y sus lados se alargan jadeante.
A continuación, la
fortuna, siempre incierta, comenzó a declararse. Thoas durante la ebullición
desea ardientemente por delante Admeto; se cae, y su hermano no lo puede
soportar ningún tipo de ayuda: la Hipódamo bélico se opone a empujar su carro
entre ellos. Pronto CHROMIS con una fuerza digna de Hércules, [6480] con todo el
vigor de su padre, apoderado cerca del límite interior del eje Hipódamo, y
detuvieron; en los correos vano tratan de huir en vano se endurecen su cuello y
detrás de las riendas. Como en el mar de Sicilia, aparece un recipiente retenido
por la ola hirviente y empujado por la impetuosa Auster; sus velas hinchadas
permanecen inmóviles en las olas. El tanque se rompió y derramó Hipódamo:
Chromis tomaría la iniciativa; pero sus caballos tracios, a la vista de tendido
en el suelo guerrero se sienten renacer su hambre cruel; Ya, en su furia,
comparten sus presas temblorosa: todo había terminado, si el héroe de Tirinto,
desdeñando la palma de la mano, no había puesto violentamente hacia atrás sus
corceles temblorosos, [6490] y no fue derrotado y lejos con aplausos.
Sin
embargo, oh Febo Anfiarao que quiere para el honor que ha prometido mucho. Por
último, a juzgar el momento adecuado, todo se reduce en la arena mortal, cuando
la carrera llega a su fin, y que la victoria vacila por última vez. Antes de él
un monstruo erizado de serpientes cara horrible que vomitó el infierno, o que él
mismo acaba de formar con el arte traicionero; la cabeza del monstruo rodeado de
terror se eleva a las estrellas. Ni el miedo guarda del Leteo negro, ni los
propios Euménides, podrían no han estado observando sin un horror profundo;
[6500] que habría perturbado en sus caballos de carreras del Sol y el carro de
Marte. Por lo tanto, desde Arion ve riza su melena rubia, se levanta, se detiene
y mantiene colgando con su yugo compañero, y los dos caballos que a su vez,
compartir sus fatigas. El noble exiliado Aonie precipitó repentinamente del
tanque; siempre que rueda sobre su espalda, que finalmente emerge de los nudos
que sostienen. Su capital flotante de cualquier freno se deja llevar; pero
mientras que él mismo se encuentra en el polvo a su lado pasar los caballos de
Anfiarao los de Tesalia Admeto y el héroe de Lemnos, que para evitar, describir,
en la medida de lo posible, una barra oblicua . [6.510] Finalmente, con la ayuda
de sus amigos corrieron en su ayuda, Polinices, inmerso en una nube de polvo,
levanta la cabeza, vuelve sobre sus pies y vuelve hacia languidecen Adrasto, que
ya desesperaba de su vida.
¿Qué mejor campo para tu muerte, Polynice, si no
crueles Tisiphone se opuso a ello! Qué terrible guerra que va a parar! Tebas y
su hermano, Argos y Nemea; había dado a ti lágrimas abiertamente; Lerna y
Larissa en lágrimas se habían presentado su pelo en su tumba; Opheltes las
cenizas habrían sido menos honrado que la suya.
Ahora el hijo de Oïclée,
aunque el segundo es seguro que la palma, como Arion anterior derrocó a su
maestro, [6520] y sin embargo, el tanque mientras está vacío, se quema a la
derrota. El dios le da fuerza y valor inflama. Vuela más rápido que Eurus, como
si tuviera que correr a la valla en el centro de la arena. El látigo y las
riendas que acosa a la parte posterior y la melena de sus corceles, y Aschéton
luz gourmet y Cycnus blanco que la nieve. Ninguno ahora hacer lo precede, y su
quema ruedas conlleva el eje, cavar la arena y la dispersión de distancia. La
tierra gimió, y ya la amenaza de su furia. Tal vez incluso Cycnus había
derrotado Arion, pero el dios del mar no queremos que sea derrotado. [6.530]
Así, por una compensación justa y gloria sigue siendo el caballo, la victoria
pertenecía a la vidente.
El precio de su victoria, dos jóvenes le trajera un
vaso que una vez fue Hércules. El héroe de Tirinto llevaba un lado, y, la
formación de espuma, vació la vez, después de que algunos monstruos domesticados
o derrotados en la lucha en marzo. Una mano experta está grabado en las feroces
Centauros de oro y la terrible imagen de la lucha. En medio de la carnicería
Lapitas volar piedras, antorchas, cráteres: la ira hirviendo sobre la muerte. El
mismo dios toma Hylée, y con una mano agarrando su barba, llamó a su club
pesada.
[6.540] Pero tú, Admeto, se lleva a recompensar un manto forrado con
una franja de Méonie y se sumerge repetidamente en púrpura. En esta tela o visto
nadando por el joven audaz que se atreve a enfrentarse al mar Frixo; a través de
la onda transparente brilla su cuerpo azul; parece que él lleva las manos a los
lados, con los brazos se mueven, y las olas mojan el pelo. Vis-à-vis la parte
superior de una torre es lajeune chica Sestus que, con un ojo preocupado olas
innecesariamente cuestionados; ya morir antorcha, cómplice de su amor. Tales son
los presentes subvenciones Adrastus a los ganadores; que su hijo consola
mediante la donación de un esclavo aqueo.
[6.550] Luego invitó a los
guerreros más ágiles para competir por premios de la carrera. Esta lucha
requiere agilidad poco de valor es la ocupación de la paz; que añade las fiestas
religiosas de brillo, y en la guerra, sin la espada, es una ayuda útil. El
primero antes de todos los demás, Idas, que una vez ombragea su rama olímpica
frente, se precipitó en la arena; es recibido por los aplausos de los jóvenes de
Pisa y Elis. Después de él viene Sición Alcon Phedima declaró dos veces ganador
en la contienda del Istmo, Dymas que una vez fue por delante en la carrera de
caballos con alas en los pies, ahora, lastrada por la edad, no puede seguir eso.
[6.560] Muchos otros, que desprecia la multitud de repetir los nombres oscuros,
vienen corriendo desde todos los lados. Pero el nombre de la Arcadia Partenopeo
es en cada lengua; es importante ya que las ondas murmullo de las personas que
se agolpaban en el circo. Su madre era conocida por su ligereza: quién sabe
Atalanta, la gloria de Mount Maenalus; Atalanta, que robó todos sus amantes a
sus huellas? La madre de la celebridad abruma el hijo; Sin embargo en sí ya se
conoce en la distancia. Fama dice que, en las laderas de la escuela secundaria,
se inició en el temblor ciervos raza y tomó una flecha en vuelo. Durante mucho
tiempo se espera; Por último, un salto rápido que él se eleva por encima de la
multitud, [6570] de la broche de oro de su capa, y dado a conocer a sus
miembros, que explota la alegría de la vida; sus bellos hombros y el pecho, que
no cede a sus mejillas suaves y lisos; la belleza de su rostro se borra por el
de su cuerpo. Sin embargo él mismo desdeñar el elogio que le damos a sus formas
elegantes y se extiende a sus admiradores; pero no se olvida de pagar en su
cuerpo las grandes profundidades del licor Pallas; pronto aceite espeso cambió
el color de su piel. Idas Dymas y otros rivales también ungen.
Por eso,
cuando las estrellas brillan en el mar tranquilo, cuando la imagen de un cielo
estrellado parpadea sobre las olas, [6580] todo brilla fuera de vivos; pero
todas estas luces desaparecen antes de que los rayos de Vesper, y los incendios
el que los colores del cielo se reflejan en su totalidad en las aguas azules.
Idas es casi igual a Parthenopaeus por su belleza, casi igual a él por su
ligereza en la carrera, y se trata de la misma edad; Sin embargo, el Palestra
bruto ha adornado su rostro de la flor de la virilidad; vientos suaves abajo en
sus mejillas, y da paso bajo la nube de una gruesa corona.
Todo ello
mientras siguiendo las reglas del arte, trata de la rapidez de las medidas y
girar en la carrera; recurren a mil trucos para despertar por movimientos
rápidos languidez de sus miembros [6.590] a veces se sientan en las piernas
dobladas, a veces llegan a sus disparos rotundo reluciente pecho, a veces se
paran en sus gargantas ardientes, precipitarse por un momento y dejar de
repente.
Ya cayó la barrera, y sale del campo. Rivales corren con ímpetu a
la arena; su compañía desnuda brilla en la distancia. Menos propenso parecía
volar antes en el mismo plano, caballos rápidos: se ve como tantas flechas
lanzadas por huyendo de una banda de cretenses o partos; ciervos no se ejecutan
más rápido cuando en las montañas escarpadas Hircanio que escuchan o piensan que
oyen el rugido de un león hambriento; [6600] en su terror, se alejan a una
carrera ciega; el miedo que les une, y sus ramas son entre en shock con un eco
lejano.
Más rápido que los vientos rápidos, infantil Maenalus, Parthenopaeus
escapa a la mirada; sus pasos se eleva robusta Idas; el soplo de su aliento que
cubre los hombros y el pecho sombreando la parte de atrás de su rival. Después
de ellos, una distancia casi igual, y volar Phedima Dymas, seguido de cerca por
el rápido Alcon.
El pelo rubio de héroe Arcadia abajo, virgen otra vez,
sobre sus hombros; cultivó desde sus primeros años para dar a Diana, [6.610] y
había prometido a los altares paternos, cuando el ingreso haría ganador Ogygiens
de campos: vana esperanza e imprudente! Ahora su cabello, aflojado por los
Zephyrs, vierte libremente sobre su espalda; interfiere consigo misma en su
curso, y cubre sus olas la temida Idas. Esto luego pensar en el engaño, el
tiempo parece propicia; ya que se encuentran al final de las listas, ganador
Parthenopaeus alcanzará la meta, lorsqu'Idas agarró el cabello de su rival, trae
de vuelta, y el primer golpe la puerta larga carrière.Les Arcadians llorar a los
brazos; que quieren a apoyará su rey por la fuerza, si no lo convierte en la
gloria que se toma de distancia, los honores que se le debe; [6.620] ya se están
preparando para dejar el circo; pero entre los espectadores no son los que
aprueban la astucia Idas. Sin embargo polvo Parthenopaeus contamina su rostro y
sus ojos húmedos; las lágrimas todavía se suman a su belleza. En su dolor, a
veces se rasga las uñas ensangrentadas su pecho, sus mejillas y su pelo
desastroso. En todas partes estallar clamor confuso. El viejo Adrasto, después
de vacilar un momento, en su sabiduría, "Los niños, dijo, detener este debate;
debe intentar de nuevo la lucha; pero que no siga el mismo camino. Este lado se
concede Idas; [6630] usted; tomar otro; pero su carrera se ha cumplido sin
fraude ".
Ellos no han oído bien este fin, se someten a ella. La dirección
joven príncipe Tegea fondo de su corazón esta oración a su deidad patrona:
"diosa de los bosques, es a usted que he prometido ofrenda de mi pelo, y este
voto es la causa de la injusticia hecho a mí. Si mi madre si, en el noble
ejercicio de la caza, a veces nos podría usted por favor, no sufren, se lo
ruego, me marcho contra Tebas en estas tristes auspicios, y me baso en Arcadia
tan grande deshonor ".
Un testigo prodigio que se escuchó. La tierra huele
tan sólo ejecute; diapositivas de aire bajo sus pies ligeros [6.640] que dejan
casi ningún rastro en el extremo de la arena Arena. Con gritos, a veces rápido
en la valla, y de vuelta al rey en medio de las aclamaciones, y la palma agarró
parece aliviar el pecho agitado.
Las carreras son más, los premios
distribuidos. El joven de Arcadia ha recibido un regalo para un caballo, los
traidores Idas un escudo. El resto de pilotos está feliz aljaba de Licia.
Así Adrastus llama guerreros que tienen éxito en el lanzamiento del disco y
desean implementar la fuerza de sus brazos. Por su orden, Pterelas lleva una
pesada masa de latón brillante, y todo el cuerpo inclinado, de banda con un
esfuerzo a sus pies. [6.650] Los griegos consideran en silencio y medir la
dificultad de este juego dolorosa. competidores pronto se precipitan en las
multitudes: dos de Acaya, tres de Corinto, una de Pisa, y el séptimo Acarnania.
Un número mayor cedería a la picadura de la gloria, pero hipomedón, impulsado
por los espectadores, aparece con su estatura. Se lleva debajo de su pecho
derecho otra gran unidad, "Los jóvenes guerreros que salieron a socavar los
muros de Tebas y torres de derrames, aquí en su lugar, si llora, aquí es el
disco que debe aprovecharse; cuyo brazo sería lo suficientemente fuerte como
para tirar ese peso? "Dijo, y, sin esfuerzo, agarró el disco y la lanza lado.
[6.660] Todos retroceden, y sorprendido a admitir la derrota. Sólo Phlegyas y
Menesteo que mantenga su propio honor y gloria de sus antepasados, han extendido
la mano. Otros competidores se retiraron a sí mismos, se inclinan al disco, y
regresan sin gloria en el recinto ..
Al igual que en los campos de la
Tracia, el escudo de Ares Monte Pangea golpea una luz siniestra asusta el sol su
brillo y resuena fuera, golpeado por la lanza del dios.
Phlegyas inicia por
primera vez: pronto todas las miradas se dirigen a él, ya que sus miembros
debilitado aún más la promesa de vigor! [6.670] En primer lugar se frota la
parte del disco y de la tierra; luego se sacude el polvo, los rendimientos en
todas las direcciones, y la búsqueda de qué lado debe continuar con más
seguridad sus dedos, lo otro en la mitad del brazo. Se destacó en este juego,
que fue siempre deleita; no contento de disputar la palma en estas grandes
solemnidades que su país está orgulloso, fue visto a menudo medir su unidad de
las dos orillas del Alfeo, y sin tener que tocar la ola se inicia otro lado del
río, donde es más ancho. También, lleno de confianza en su fuerza, no por
primera vez el inmenso espacio de la arena, que al mismo cielo, que quiere medir
su brazo. [6.680] Él pone una rodilla, reúne todas sus fuerzas, se pliega sobre
sí mismo, y elimina el disco en las nubes. El suelo se eleva rápidamente a
través del aire, y se eleva a la misma velocidad como otro pone hacia abajo.
Finalmente, agotado, cae lentamente en el suelo y en el suelo.
Por lo tanto
cae al terror de las estrellas del medio ambiente que está rota, la hermana
oscura del sol. Para rescatar a las naciones, en su vano temor, están fuera de
metal que resuena, la victoria de Tesalia y se ríe ver los correos diosa
corriendo de ruido de la respiración de su adivinación.
Los griegos
aplauden; pero hipomedón lo mira con desprecio; [6.690] que espera mostrar un
brazo más fuerte de nuevo, cuando a su vez se pondrá en marcha la longitud del
disco. Esta riqueza instantánea, que es tan dulce para romper las grandes
esperanzas, traicionado Phlegyas. ¿Qué puede hacer un hombre en contra de la
voluntad de los dioses? Ya que mide el inmenso espacio, la cabeza echada hacia
atrás, los lados hacia atrás; pero la fuga en masa, y se echó a sus pies; el
tiro se perdió, y su mano vacía en vano puso en marcha en el aire.
Al ver
esto, todos los espectadores gimen; risita de su desgracia. Menesteo simplemente
tratar de convertir el mismo esfuerzo; pero intimidado por este ejemplo y con
más experiencia en su arte, después de implorar tu salvación, oh hijo de Maya,
[6700] sostiene entre sus dedos deslizamiento de disco, frotando el polvo.
Lanzado más feliz por una gran parte, se escapa, y no se detiene después de
haber recorrido un espacio considerable del circo; el piso se escucha, y nos
marcan adjuntando una flecha, el lugar donde hay masa cayó.
Hipomedón es la
tercera; avanzó lentamente este año difícil porque en su corazón, él piensa que
el fracaso de Phlegyas y feliz éxito Menesteo. Se levanta el disco que se
utiliza para llevar con una mano, y, sosteniéndolo en el aire, trata la fuerza
de sus flancos y el vigor de sus fuertes brazos, y luego lanza girando como un
torbellino y le sigue en su vuelo a través del aire; [6.710] divide el espacio
en el disco, y, recordando la mano que lanzó fuera de la fuerza de guardias que
se imprimió. La victoria no está en duda; masa ha superado la marca de Menesteo,
se detiene mucho más allá, y por su fuerte caída sacudió la parte posterior
verde y sombreada superior del anfiteatro.
Tel, la parte superior de la
quema del Etna Polifemo, cuyo ojo guía la mano ya no es, sin embargo, pone en
marcha los pasos de la embarcación tiene la intención de huir, y en contra de
Ulises, su enemigo mortal, una enorme roca. Por eso, cuando ya Ossa, erizada de
heladas, ocultando Olympus, los aloides todavía arrojó sobre [6720] fría Pelión,
con la esperanza de alcanzar el cielo asustado.
A continuación, el hijo de
tálao hecho de hacer que el ganador del cuerpo de un tigre que rodea un borde de
color amarillo brillante y cuya oro tenía garras romas. Menesteo recibe un arco
de Creta y flechas de luz. "Para usted, él dijo: ¡Phlegyas, un suceso grave
traicionado, toma esta espada, una vez que el ornamento y la defensa de Argos
Pelasgo. Hipomedón no le envidio este momento. "
"Ahora, añade, se necesita
valor para luchar despliegue de cerca con la terrible cesto. [6730] La guerra y
la espada no solicitaron más. "De repente aparece el Argos Capaneo, asombro
inspirador y el terror con su enorme estatura y aterrador. Y mientras él toma el
brazo de piel áspera de los bueyes, que ennegrece plomo que se armó, tan duro
como el Cestus, exclama: "vamos a oponer a mil de estos guerreros que se trata!
o más bien, no tengo aquí un rival de la carrera de Tebas! Me immolerais sin
crimen, y mi valor no contamina la sangre de un amigo. "Todos permanecen
congelados estupor, todos mudos de terror. Por último, a pesar de todo, el medio
de la multitud de los espartanos desnudos [6.740] se eleva Alcidamas. Los reyes
de Grecia admirar su audacia, pero sus amigos saben que confía en las clases de
Pollux, y él creció en medio de las palestras sagrados. El mismo dios tuvo la
precaución de entrenar y dar forma a las manos y los brazos en este ejercicio.
Amor inspiró su solicitud: a menudo se mide con él y admirando su ardor
estudiante que animó a sí mismo, se levantó con orgullo, y desnudo lo presionó
contra su pecho.
Capaneo indignada ante la vista, que se ríe de sus
provocaciones, y, por piedad, le pregunta a otro
oponente. Por último,
obligado a luchar, se detuvo y miró con desdén cuello se hincha de ira. [6.750]
tanto de pie, el cuerpo suspendido en puntas de pie, levanten la mano del rayo y
echando la cabeza hacia atrás, se pusieron sus vicios un ojo vigilante, y se
protegen contra la cada vez. Al igual que en el gigante Ticio, si buitres
crueles le permitieron levantarse del suelo Estigia, Capaneo descubre su amplia
membresía, enormes huesos, y se encuentra terribles en la arena. Alcidamas
recién salido de la infancia; pero su fuerza es más maduro que su edad, y sus
jóvenes promesas impetuosidad de gloriosos años. Nadie quiere ver derrotado y
contaminadas de sangre: todos son de su ardiente votos, y el temor de que
horrible espectáculo.
[6,760] ojo primer lugar, se miden los dos rivales;
cada uno de espera para su oponente comienza el ataque, pero suspender su ira y
golpes. miedo Mutual agitó durante un momento; precaución se mezcla con su
furia. Lentamente bajan sus brazos el uno del otro por un movimiento rápido,
tratando sus vicios, y les hicieron romos por heurtant.L'un, más aprendido en su
arte difiere impulso; se posterga, hogar y su fuerza; la otra, prodigando sus
tiros sin ninguna preocupación por sí mismo, todo el fondo de su oponente,
fatiga ambas manos sin reglas, stands inútilmente rechinando los dientes, y se
agota por su propio esfuerzo. [6.770] La anticipación y la astucia, los fieles
Spartan a su arte, siguiendo todos los movimientos de un ojo vigilante, cada
bala, evita otros. A veces, con un rápido movimiento de cabeza, se escapa con la
flexibilidad de peligro; A veces se desvía de sus manos vicios que amenazan, y
los avances en recostado. A menudo, luchando con un enemigo que supera en
fuerza, se atreve, ya que se basa en su habilidad, la experiencia de su brazo,
el ataque mismo, cubre su cuerpo y golpeó alta. Como se observa ataque repentino
de onda acumulado en las rocas amenazantes, romperlo, y volver sobre sí mismo y
atacar desde todos los lados Alcidamas su oponente furioso. [6780] Aquí, la mano
alzada: Amenaza lados largos, ojos Capaneo, que vela por la terrible arma; pero
de repente el joven atleta desvía la atención de su rival, y, con la dirección
de deslizamiento un golpe inesperado, lo hizo a la frente una herida cruel.
Ya que la sangre salió a borbotones, y como una corriente cálida corriendo por
las sienes. Capaneo hace aún no se percibe, y es sorprendido por el repentino
murmullo de la multitud; pero después de haber llevado por casualidad su cansada
mano por la cara, que ve a su cestus manchado de sangre: menos terrible
rugiraient un león o un tigre, atravesado por una flecha. La rabia de
ebullición, persiguió a la joven que viaja hacia atrás toda la arena; [6790] y,
apretando los dientes, que hace llover sobre él una lluvia de golpes, y parece
golpear multiplican sus brazos. Los vientos llevan parte de sus esfuerzos. A
pesar de los tiros también caen en los vicios Spartan, que, por un movimiento
rápido por una estampida evita mil muertes que revoloteaban sobre su cabeza.
Pero no se olvida de su arte; huía, la cabeza vuelta hacia el enemigo, y,
huyendo, que adorna los golpes que se señalan a él.
Ya cansado y dificultad
para respirar han agotado los dos rivales. Una presión con menos fuerza, el otro
es menos rápida que esquivar. se sienten tanto flexione sus rodillas y tomar un
descanso. Por lo tanto, cuando una larga travesía cansados marineros errantes en
los mares, [6800] y, a una señal dada la popa, que permiten un momento de llevar
a sus brazos, que apenas empiezan a respirar, otra señal sacude de inmediato los
remos.
Capaneo se lanzó de nuevo con furia. Alcidamas evade y evita
repentina corriendo abajo, la cabeza hundida entre los hombros. Llevado por su
impetuosidad Capaneo cae sobre la frente, y, cuando se levanta, el joven
espartano le asestó otro golpe; meme, pero se puso pálido, asustado de su éxito.
Los griegos gritar, lo peor que nunca golpeó la costa y bosque. Adrastus vio
inmediatamente el héroe para mantenerse en pie, levantando sus vicios y preparar
una terrible venganza:
"Por favor, ejecutar, mis amigos, lloró; furia lo
lleva por mal camino; ejecutar, se detiene, [6810] REALIZAR prisa; ofrecer esta
palma furioso y precio. No se detendrá, ya veo que ha triturado y mezclado
juntos cerebro y el cráneo de su oponente. Tire de los espartanos a la muerte ".
Dice, y de repente se precipita Tideo. Hipomedón siguiendo su ejemplo. Tanto
apenas puede con los mayores esfuerzos para contener, para unir sus manos; en
vano que utilizan las palabras más convincentes: "usted es el ganador, ve; es
bueno dejar que la vida a un enemigo débil; También es uno de nosotros, es
nuestro compañero Nada" le puede mover. empuja la mano la vara y la coraza que
se le presentó, y exclama: "¡Déjame! Qué, no pueda ser confundido en el polvo
[6.820] y la sangre que figura afeminada que le valió a su favor? aplastar a que
la mitad de un hombre? No la voy a enviar a la tumba el cuerpo desfigurado? No
voy a llorar a su amo OEbalie? "
Dijo, y se hincha de ira, se niega la
victoria; sus compañeros se levantan, a pesar de sí mismo. Mientras tanto, los
espartanos llenar alabar al bebé Taigeto, y reír amenazas vanas Capaneo.
Ya
larga los diversos aplausos y conscientes de sus puntos fuertes estimulan el
corazón magnánimo Tideo. También sobresale en lanzar el disco; que podría ser
perjudicial sin discutir el precio de la carrera y luchar con el cesto; [6.830]
pero sobre todo le gusta en los duros años de Palés. De este modo se utiliza
para el encanto del ocio de la guerra, y para calmar su ardor bélico, luchó en
las orillas del Aqueloo contra atletas gigantescas; Dios le había enseñado el
arte de ganar.
Así que tan pronto como el amor ardiente de gloria había
llamado a la lucha de los jóvenes guerreros, héroe de Etolia rechaza sus hombros
la terrible recubrimiento de piel de jabalí. Inmediatamente antes de él se
encuentra Agyllée, que presume de ser la sangre de Hércules, y no cede a este
dios por su estatura. En sus anchos y altos hombros, nosotros no le llevará a
dar un mortal: [6840] pero no tiene la fuerza muscular de su padre; sus miembros
suaves y carnosas se inflan con una abundante de sangre y lánguida.
Eso es
lo que inspira el hijo de Eneo una audaz confianza para derrotar a un enemigo
terrible aunque su tamaño es menor, el esqueleto de su cuerpo es fuerte, sus
brazos están nerviosos, y la naturaleza nunca se atrevió por encierran cuerpo
tan pequeño tanto coraje y fuerza. Después de aceite regado su brillo de la
piel, cada uno avanzar rápidamente en el medio de las listas, y cubierto con
arena. el polvo seco sus miembros húmedas; [6.850] que entierren a sus cuellos
en sus hombros y mantenga sus brazos hacia adelante dobladas. Por lo que un
ardid inteligente, Tideo llamó a su rival en un terreno llano, y, espalda
encorvada, con las rodillas cerca de la tierra, que Agyllée fuerza para caer de
nuevo sobre sí mismo.
Como se ve en las cimas de los Alpes un ciprés, el rey
de la selva, inclinando la cabeza a los vientos que soplan impetuosas, y
manteniendo sólo a sus raíces, a acercarse a la tierra con orgullo hacia la
bóveda del cielo y la gigantesca Agyllée baja su enorme masa, y las curvas
gimiendo en el cuerpo más pequeño de su enemigo. [6.860] Así convertir sus manos
atacan la frente, los hombros, los lados, el cuello, el pecho y las piernas, que
se retiran de forma flexible. A veces se suspenden, los brazos entrelazados; a
veces de repente tiran de sus dedos y emergen por completo. Con menos furia dos
toros excelentes jefes de una doble rebaño, son una horrible guerra en medio de
la vaca de papel blanco que espera al ganador. En sus batallas, se rompen el
pecho; amor los aguijones, y curó sus heridas. Por lo tanto, la rapidez del
rayo, el diente de jabalí terrible abrazo de oso tan horrible de sus
extremidades peludas y disfrutar de peleas horribles.
[6.870] El hijo de
Eneo conserva su resistencia; ni el sol ni el polvo le puede cansar o
dispararle. En su piel áspera y firme surgir músculos, endurecidas por el
trabajo. El otro, por el contrario está fuera de su fuerza: agotado, jadeo, la
boca entreabierta, arroyos de sudor causa la arena que está cubierto; que recoge
incluso furtivamente, para enfriar el pecho brûlante.Tydée implacablemente
acosado; que pretende poner en peligro el cuello de su rival, y de repente se
cae y agarra las piernas; pero no se puede tener éxito en agitación cuando sus
cortos brazos engañados sus esfuerzos. Agyllée pesaron entonces su altura
completa sobre su enemigo, abruma, y las cubiertas entierde su enorme masa.
[6.880] Así que cuando un minero negrita descendió a las entrañas de las colinas
de lbérie, y salió de la claridad a lo largo y mantenerse con vida, si el piso
suspendida sobre la cabeza justo a temblar, si la tierra s' la mitad se inició
con un accidente, desaparece enterrado bajo los escombros de la montaña, y su
cuerpo roto, tragó, no hacen las estrellas su alma indignada.
Tideo es tanto
más ardiente, y se va acontecer ni valor ni fuerza. Pronto se escapa de los
bonos que abrazan, el peso que le abruma; que revolotea a su enemigo vagando por
las listas, se une repentinamente a su espalda, y por un movimiento rápido,
abraza con su fuerza a los riñones y sus paredes laterales. [6.890] Y cuando
Agyllée, luchando en vano de liberarse de este abrazo, se está preparando para
hundir la mano en la cara, que presione sus piernas rodillas del gigante, y
terrible, plantea este masa aterrador y monstruoso. Por lo tanto sua, dijo,
Anteo, este niño de la tierra, sujeta por los brazos de Hércules, cuando el
dios, habiendo descubierto su treta, levantado en el aire, y se llevaron ninguna
esperanza de salir y tocar su madre, incluso hasta el extremo de los pies.
A
la vista de la alegría, aplausos estalló desde todos los lados. Tideo equilibrar
su rival en el aire, y de repente lo lanza hacia abajo, se invierte, y lo sigue
en su caída. [6900] Al mismo tiempo, las manos, aprieta el cuello y los pies de
los intestinos. Agyllée siente débil en este gran esfuerzo, y ya no se destaca
por un sentido del honor. Por último se encuentra en el suelo, el vientre y el
pecho en el polvo, y no se levantará hasta mucho tiempo después, triste, y
dejando huellas en la tierra huellas vergonzosas de la derrota.
Tideo mano
derecha agarra la palma; por el otro, su precio armada brillante de su victoria:
"¿Cómo sería, si llora, por lo que gran parte de mi sangre, ya sabes, había
regado los campos de Dirce, una vez recibí cuando esas lesiones, las promesas de
la fe de Tebas? ", al mismo tiempo que descubre sus cicatrices, y devuelve a sus
compañeros del noble premio que acaba de conquistar. [6.910] Una coraza de poco
valor es el precio Agyllée.
Hay quienes se atreven a enfrentarse a la
batalla con la espada desenvainada. Ya tiene toda la Épidaurien armada
autorizado, y el exilio de Dirce, el destino no llame de nuevo. El rey, el hijo
de Lasus, se opone a su deseo: "Los jóvenes, pronto se dará suficientes muertes
a cara! mantener el valor de ennemivotre y la furia con ganas de sangre. Y los
que nos han despoblado los campos de nuestros padres y nuestros queridos
ciudades, no lo hará, te lo ruego, antes de la pelea, gracias a usted entrega la
oportunidad, (los dioses de distancia Este mal!) Subvención tu hermano les
saludo. "[6.920] dijo, e hizo tanto los ricos regalo de un casco de oro.
Entonces, para su hijo también tenía su parte de gloria, le ordena que ciñe la
frente, y que proclama en voz alta el ganador de Tebas; pero los hados crueles
repelen este présage.Adraste sí mismo, para hacer estos juegos más solemnes y
dan un brillo final a los honores fueron a la tumba del joven príncipe, se le
preguntó por los príncipes de tomar parte en el combate. Queremos que la corona
victoria todos los líderes, e invitó al viejo rey para disparar una flecha de
Licia, o para escindir el aire con una lanza de luz. El rey accedió fácilmente,
y, acompañado por la élite de la juventud, [6930] Todo se reduce a la lomita
verde en la arena. Detrás de él se fue, obediente a su voz, su escudero, que
llevaba un carcaj y las flechas. Adrastus quiere la línea lanzada por su paso
por la enorme circo y vaya golpeó una ceniza que haya designado.
Secreto
determinar las causas presagios: ¿quién se atrevería a negarlo? El destino se
revelan al hombre, pero él se niega a observar sus advertencias, y por lo tanto
permite a perder la garantía del futuro.
De este modo presagios que tuvieron
la oportunidad, y que la fortuna ha visto un aumento de su poder para el mal.
La flecha fatal cruza la llanura, golpeará el árbol, y, prodigio de miedo!
[6.940] se vuelva con la misma velocidad a través del aire que ya ha viajado, y
finalmente cae cerca de la aljaba le conoce. Los líderes se involucran en mil
conjeturas: algunos dicen que el rasgo se reunió nubes y vientos fuertes; el
otro, el golpe lo envió de nuevo árbol de apagado; pero todos están
profundamente ocultos el resultado de los acontecimientos y desgracias
anunciadas por este prodigio. La flecha, volviendo sobre sí mismo, anunció a su
amo que él solo escapar de la guerra y, por desgracia verían sus hogares.
[7,1] Por lo tanto los griegos diferían tiempo luchando. Júpiter les depara
una mirada irritada y sacude la cabeza. Para mover las estrellas son agitados,
Atlas llora que pesa mayor peso sobre sus hombros.
El padre de los dioses y
luego abordar estas palabras a la rápida bebé Tegea "Go, se precipita hacia
arriba, un ligero salto, la estancia de Boreas a las viviendas Tracia en la
región helada donde el oso, que es Nunca se baña en el océano, se come las nubes
frías y lluvias cielo. [7.10] Hay que Marte, que presentó su lanza respirar un
momento, aunque el resto es odiosa; o, como yo creo, carnicería insaciable, que
lleva en la mano sus armas y su trompeta, y se bebe la sangre de una nación que
es querido para él, dile durante las revisiones y la ira de su padre; habla sin
rodeos. Anteriormente, obediente a mis órdenes, que encendió los griegos, de los
bancos de los Inachus al istmo entre dos mares, y la costa donde las olas
rotundo Malea se rompen con furia. Un ardiente juventud dejó sólo las paredes y
la puerta de sus ciudades, y aquí celebrando sacrificios! Ella ya se ve regresó
victorioso, mientras se aplaude con el transporte, ya que se detiene con agrado
el funeral de un tono enojado! [7,20] O Marte! Es esta tu ira? Los saltos de
disco y resuena, los vicios de la cara Oebalie en la arena. Pero si la rabia que
se hincha su corazón, así es intoxicante furia de los combates se apoderó de él,
el fuego y la espada en la mano, implacable, se reducirán a cenizas ciudades
inocentes, será aplastar a los pueblos que en vano imploran mi rayo y la tierra
en soledad. Ahora se olvida de su ardor guerrero, se diferencia mi venganza;
pero si él no espera ahora a luchar, sin embargo, rápida a obedecerme, que
precipita los batallones griegos contra los muros de Tebas, no voy a darle una
amenaza cruel; [7.30] única, que es para los mortales deidad suave y benévolo,
su estado de ánimo indomable suaviza el resto, devuélveme sus caballos, su
espada, y pierde su derecho de sangre: me inclino mi cara hacia el suelo, te
ordeno que la paz reina en todas partes; Pallas es suficiente para la mayor
parte de Tebas. "
Había dicho, y Mercurio ya penetrado en los campos de la
Tracia; pero apenas había cruzado el umbral del imperio de Boreas, la tormenta
eterna de las llanuras del oso, la multitud de nubes que cubren el cielo, y el
viento aproximada del norte, el hacer aquí y allá a lo lejos por supuesto. Sus
orejas son amortiguados ruido del granizo golpeando a su abrigo, y la cabeza es
poco protegidos por la tapa que cubre la Arcadia.
[7,40] Se ve un bosque
estéril, mantengamos dedicado a Marte, y se estremeció ante la visión. Allí, al
pie del monte Hemus, el templo dios inhumano está rodeado de un millar de
furias. Las paredes están cubiertas con hierro, anillos de hierro en su umbral
estrecho, columnas de hierro soportan el techo. Los ojos de Febo están heridos
en su brillo oscuro; Luz misma temían esta visita, la luz siniestra entristece
las estrellas. El guardia es digno del lugar: el vestíbulo prisa la imprudencia,
la ira del crimen ciegos en el ojo con sangre, pálida del susto. [7.50] Una vez
más las trampas que esconden sus armas y armados discordia dos espadas están de
su lado. El interior del templo oyó el estruendo de muchas amenazas. De pie en
medio reposar la triste coraje, y alegre furia; La muerte se sienta, la cara
ensangrentada y los brazos en la mano. En los altares no ve ninguna sangre que
la sangre de las batallas, otro fuego que el fuego llega a las ciudades en
llamas. Las paredes y el hecho del templo están decoradas con los despojos de
los pueblos vencidos; Son restos de puertas talladas y buques de guerra de
hierro, tanques vacíos, cabezas rotas por los tanques. Parece que oímos los
gemidos; [7.60] todo es violencia, todo lo que se enrolla; todas partes vemos la
imagen de Dios, pero en ninguna parte con un aire tranquilo; había mostrado tan
maravilloso arte de Vulcano, antes de que el sol se había mostrado el explante
Adultère su clandestina ama, expuesta en una cama, en una red de acero.
El
mensajero alado Maenalus buscó el rey del templo, cuando de repente la tierra
tiembla, el Hebrus sube y rugidos. Mientras que estos animales salvajes,
alimentados a la lucha y el valle desolado, fiebre; la espuma hierba áspera
blanquea bajo sus pies: esta es la señal de la proximidad de Marte. De repente
las puertas de un descarado indestructible se abren. El dios, gloria a ser
cubierto con la sangre de hircanios [7,70] paseos en su carro, y los colores
llanos horriblemente rosa viaja. Detrás de él siga el botín y una tropa de
cautivos quejumbroso. Los bosques y la nieve apilados a abrir un pasaje. La
cruel Bellona sus manos teñidas de sangre mensajeros de guía y cansado de su
larga lanza.
Al ver esto, el dios Cilene siente muy asustado, y baja la
cabeza. Júpiter en sí, si está presente, sería aterrado; cesaría sus amenazas y
renunciar a sus crueles órdenes.
"¿Cuál es la voluntad de Júpiter? qué orden
me traes desde la parte superior de Olympus, el dios exclama luchando? porque no
es por su propia voluntad se llega, mi hermano, en este país, entre los
inviernos fríos, [7,80] que moras fragante Maenalus, los que, en la risa de
secundaria, respirar el dulce aliento de céfiros ".
Mercurio le dice que las
órdenes de su padre. Inmediatamente, sin salir de su respiración jadeante y
sudor de caballo inundado, les echa hacia atrás, indignada a sí mismo contra los
griegos, que se olvide de los combates. Desde lo alto de aires Júpiter ve, y
calmar su cólera, que poco a poco baja la cabeza amenazante. Así que cuando el
impetuoso Eurus lejos de las olas que se desencadenó, el mar calmante hincha de
nuevo; onda aplanada rollos en el marco del último aliento de la tormenta
expira; los buques han desarrollado reanudado toda su entrada, y los marineros
se atreven respirar pecho.
[7.90] juegos funerarios Finalmente se terminaron
y las luchas pacíficas; montaje ejército separa. Adrasto, en medio de un
profundo silencio, vierte el vino en el suelo, y alivia estas libaciones cenizas
de Opheltes.
"Los niños pequeños, los gritos que, haz que cada tres años que
ahora celebramos en tu honor esta solemne celebración. Que la sombra mutilados
Pélope encontrar menos placer de asistir a los altares de Arcadia, a golpear la
sien mano marfil dedicado a él Elis; el pitón como mínimo para revisar sus
altares de Castalia, y la sombra de Palémon asistir Licked, a la sombra de un
pinar. O niño de corta edad, como Averno, esta estancia de las lágrimas,
pidiendo que en vano! por la solemnidad fúnebre le planteamos a la inmortalidad.
[7.100] Ahora nuestro ejército acelerará su marcha: si usted nos da para
derribar los muros de Tebas, a continuación, vamos a dedicar altares que más
digno de ti, entonces usted será nuestro dios, honores divinos se hizo no sólo a
usted en citado que baña las Inachus; Tebas sí vencido juran por su nombre ".
Estos fueron los deseos gu'Adraste en nombre de todos y estos deseos, cada uno
asociado a ella en su corazón.
Mensajería ya Marte pisó sus costas pies
rápidos de Ephyra, donde Acrocorinthus su mejor estudiante en el aire y
cubiertas girar su sombra los dos mares que domina. El dios ordenó entonces el
miedo, uno de sus compañeros horribles a preceder a su carro: [7.110] nadie más
es mejor en el miedo insinuar en el corazón de los mortales, y para desviar la
mente de la verdad . Este monstruo tiene mil voces, mil manos; que toma todas
las formas, que le plazca, acredita todo el ruido, y su aspecto horrible, la
difusión en el trastorno pueblos y rabia. Si quería persuadir a los mortales que
hay dos soles, las estrellas se precipitan en la tierra, la tierra tiembla, los
viejos bosques descienden de las montañas, infeliz habría engañado a sí mismos
se imagina ver a estos maravillas. Ahora trabaja terrible genio: se plantea en
los campos de Nemea una nube de polvo engañosa. Los líderes de asombro ven que
va del vórtice negro. El monstruo sigue aumentando el tumulto con falso clamor;
[7.120] que imita el sonido de las armas, no hay caballos, y se propaga a través
de los gritos espantosos de aire.
Los espíritus se agitan: preocupaciones;
incierto, la multitud murmuró en voz baja: "¿De dónde viene este ruido parece
que nuestros oídos? ¿cómo es que las estrellas parecen girar en una esfera de
polvo? Los soldados vendrían Ismenia nos atacan? Sí, el que más. ¿Qué? Tebas
ella tiene tal audacia? ¿Por qué no se atreven? Vamos a continuar para hacer
honor a la tumba, immolons nuevas víctimas! "Así, el miedo trastorno: a través
de las filas bajo varias características; a veces es un millar de soldados de
Pisa, ahora un guerrero de Pilos, ahora una de Laconia.
[7.130] Se dice que
los enemigos se acercan, y los batallones consternado por terrores vanos. Nada
parece asustado personas equivocadas. Pero tan pronto como el mismo dios aparece
en la multitud de espectadores, y llevado por un giro rápido alrededor de la
parte superior de la montaña sagrada, tres veces se levantó la lanza tres veces
sacudió las riendas de sus caballos y tres sonidos una vez que su bonclier
contra su pecho, gritando: "a las armas, a las armas, tontos! "Cada uno tomó sus
armas o armas de otro; el cambio de casco, fueron aprovechados los caballos a
los tanques que no conocen. La ardiente amor a la muerte y la carnicería todos
los corazones en llamas. Nada se interpone en su ardor; corren, compran sus
retrasos. [7,140] Por lo tanto los sonidos fuertes orilla, cuando al primero el
viento los vasos dejan escapar puerto, cuando las velas se entregan a los
vientos, cables sueltos, y remos y anclajes nadar en la onda de superficie;
entonces el medio del mar, echamos un último vistazo a la amada tierra, y todo
el mundo da la bienvenida a los amigos de popa que se vaya.
Baco había visto
las cohortes de Inachus para avanzar a un ritmo rápido; gime, y convirtiendo su
ve a Tebas, a la casa de su infancia, que recuerda la ira de su padre. El
desorden de su alma está pintada en la cara rojiza; su pelo, guirnaldas están en
desorden; [7150] su mano deja caer su tirso, y sus cuernos, aguardad toda su
racimos.
Por lo tanto, todo bañado en lágrimas, sin insignias, sin adornos,
que viene antes de Júpiter, que fue retirado en un lugar secreto de los cielos.
Su padre nunca había visto delante de él en un desastre: supuso la causa, e
inmediatamente Baco, suplicante: "Oh padre de los inmortales, Dios
misericordioso, dijo, se destruye Tebas su querida ciudad? su esposa ella será
cruel con el punto? Y no va a tener piedad de esta tierra que amabas tanto,
aquellos hogares que hizo trampa, y la ceniza de la mía? Sí, una vez, a pesar de
sí mismo, Lancas sus luces sin protección, creo; pero una vez más que suscitar
este fuegos de tierras horribles, [7160] y, sin embargo usted no ha jurado por
la laguna Estigia, que no ha cedido a las artimañas de un amante. ¿Cuál será el
final de nuestros problemas? Calma o enojado, padre mío, hacer lo que siempre
has truena para nosotros? Nunca mantras que tan terrible para las paredes de
Danae, madera o Parrhàsie Amyclae, la ciudad de Leda. De todos sus hijos,
debería ser el más despreciado? y, sin embargo, una vez que yo llevaba una carga
muy dulce, cuando se dignó a abrir las puertas de la vida, la madre con mi lugar
hasta el final de mi nacimiento.
Además de los tebanos, tropa afeminado,
poco adaptado a los campos de trabajo, sólo conocen mis ejercicios y mis peleas,
[7170] no saben qu'entrelacer sus guirnaldas de pelo y bailar al unísono con el
sonido de la flauta: temen thyrses las bacantes y lucha; la forma en que
soportarían-ataque de marzo y el sonido de su corneta? Ver cómo, mientras
hirviendo de rabia, este dios nos amenaza! Lo que se hace llamar a los brazos de
su curetes? que no pudo forzar a luchar con sus escudos inocentes? ¿Qué estoy
diciendo? como si el enemigo estaba ausente de Tebas, Argos es la odiosa que se
eleva contra nosotros! O cruel necesidad, más terrible que el mismo riesgo! esto
es, de hecho, nuestra madrastra Micenas enriquecerá nuestros despojos. Doy: que
sin embargo se convierten en los sacrificios y las fiestas de mi nación
destruidos? ¿Destruirás lo que queda de mi madre infeliz? [7.180] voy a volar en
Tracia, en los bosques de Licurgo? o tendría que buscar la plancha entre los
indios que he derrotado? Dar por lo menos un asilo a los fugitivos tu hijo.
Hermano, no estoy diciendo la envidia; era capaz de fijar la isla flotante de
Latona y fortalecer los profundos abismos. Pallas ha conservado su amada
ciudadela de oleadas de enemigos. Yo mismo he visto las epaphus poderosas dictan
sus leyes a la gente del Este. Ni el monte Cilene ni Ida, patria de Minos, no
temen el sonido de la trompeta. ¿Por qué, por desgracia! Mis altares son sólo el
objeto de su ira? Pero ya que no tengo una baja potencia con usted, [7190]
sueño, al menos, las noches suaves de Alcmena, al amor tan caro a su corazón la
hija errante Nyctée; Recordemos que reinaba una carrera de Tiro y Antíope como
el toro era menos fatal que su amor con nosotros por lo menos proteger a los
descendientes de Agenor. "
Estas quejas amargas de su hijo en las rodillas,
las manos extendidas, hacen Júpiter sonrisa; eleva los bondadosos, besos y una
voz suave contestó con estas palabras: "El consejo de mi esposa son parte en
esta guerra; por error se cree, hijo mío! sus crueles oraciones no tienen ningún
efecto en mí; Me formé en el círculo del destino inmutable; causas bien pasadas,
aunque remota, condujeron a los combates. Para que, más a menudo que yo, lo dejó
dormir su cólera? ¿Quién es más moderada de la sangre humana? [7.200] Juro por
esta bóveda celeste, el palacio eterna como yo, ¿cuántas veces no he presentado
mi rayo, ya preparada para atacar! Rara vez las luces de mi ordenó a la tierra.
Por otra parte, a pesar de mí mismo que para satisfacer la venganza demasiado
justo, he sacrificado Lapitas Marte, la antigua Calidón a Diana. Esto sigue
siendo una pérdida para mí, y que me cuesta reemplazar a tantas almas, para
hacer tantos cuerpos a la vida; pero me largo a destruir a los descendientes de
Lábdaco y sobrinos de Pélope; usted se conoce, por no hablar de los crímenes de
los dorios, cómo Tebas siempre ha sido rápido para insultar a los dioses,
[7.210] insultar a ti mismo: pero desde su antigua ira es más, no me ' por no
decir nada. Penteo no se regó la sangre de su padre, no había ensuciado la cama
de su madre, no se le dio por un horrible hermanos delito en sí mismo, sin
embargo, los sangrientos jirones de su cuerpo rasgaron sus altares han sembrado!
¿Dónde, pues eran sus lágrimas y sus oraciones ingeniosa? Esto no es un
resentimiento particular que sacrifico hijo de Edipo: es una venganza exigente y
la tierra y el cielo, la piedad, la buena fe violada, la naturaleza y las
Euménides implacables. Pero constantemente se mueva. el destino de la ciudad que
usted acaricia. No he resuelto hoy la ruina de Tebas; [7220] vez más formidable
y otros vengadores un día Juno ahora solo gemido. "
A estas palabras renacer
la alegría en el alma y el frente de Baco. Por lo tanto, cuando un sol ardiente
o una tormenta Notus ha secado y es de color rosa pálido, si el día amanece
claros y serenos, si el viento dn Zephyr refresca el cielo, toda la frescura de
vuelta, botones florecen, y marchita deriva reanudar sus mejores galas verde.
Sin embargo extraña noticia llegó a los oídos de Eteocles. Un fiel mensajero
le informa que los líderes de Grecia avanzan con muchos batallones; que pronto
recibirán tierra de Aonie; [7.230] que en todas partes se fueron tiritamos, que
pena que el destino de Tebas. La presentó a la raza, el nombre y los brazos de
cada uno de los guerreros. El rey, ocultando su miedo, quiere saber todo, a
pesar de que la historia es odiosa. A continuación, resolvió solicitar la ayuda
de sus aliados, y reunir todas sus fuerzas. Todo Aonie, Eubea, los campos
vecinos de Fócida, se había levantado la voz de Marte. Así que había querido
Júpiter. El lema circula rápidamente en todos los rangos; el ejército avanzado,
se desarrolla bajo los brazos y se detiene en una llanura que se extiende desde
la ciudad, el teatro fatalmente condenado a ver toda la furia de la guerra.
[7.240] El enemigo está aún muy lejos, y las madres todavía temblor rápido de
montar en las multitudes en las paredes, donde muestran a sus hijos las armas
brillantes y cascos que dan sombra a las caras amenazantes de sus padres.
A
lo lejos, una torre solitaria, Antígona; no se puede mostrar a los ojos de la
gente, un velo negro esconde sus jóvenes atractivos. Cerca de ella es un
anciano, antiguo escudero de Layo, y ahora el hombre de confianza de la joven
princesa, que adora a su edad. Ella y hablar con él primero: "¿Espera, mi padre,
que este ejército puede detener a los griegos? Se dice que todas las fuerzas de
Pelopidae se están ejecutando en contra de nosotros. Muéstrame, te ruego, los
batallones de los reyes aliados que vinieron a nuestro rescate. [7.250] que
segrega a nuestros propios soldados; Aquí el nivel de Menoeceus, las armas de
Creonte; y allí, en la esfinge de bronce que corona el casco, reconozco Hemon,
veo que corre a través de la puerta de par Homoloïde. "
Así dice el ingenua
Antígona; Phorbas viejo respondió: "Aquí DRYAS controlar mil arqueros descienden
de las regiones frías de Tanagra: sus brazos, más brillantes que la nieve,
llevan distintivos de un tridente y relámpagos, el oro. Descendiente del gran
Orion, que no niega su origen. Los dioses lejos de ella augurio paternos! la
casta Diana olvida su edad rabia! En su campo se han unido a las ciudades que
reconocen su rey, [7.260] Ocalée, Medeon, bosques sombreados Nisa y Tisbe como
Venus pájaros resuenan con sus canciones. Cerca de él es Eurymedon; que lleva,
como el dios de la fauna a su padre, pastores de armas; una rama de pino
sombreado de su casco como crin de caballo; terribles en el bosque, no va a ser
menos, creo que, en el campo de batalla.
Por debajo de él caminando Eritrea,
rico en rebaños, Scolon, Étéonon erizado de rocas, Hylé ubicados en una orilla
estrecha y Schénon tierra Atalanta, cuyos habitantes se enorgullecen de cultivar
el suelo que pisoteó el pie luz. Todas estas personas ejercen, al igual que los
de Macedonia, las lanzas de fresno, [7.270] y poco propios escudos para
garantizar la lesión Marte cruel.
La multitud gritando juncos, que era el
hijo de Neptuno, los Onchestes que viven campos Mycalesse sombra de pinos y
beber las aguas de Melas, dedicados a Pallas y Gargaphye agua si caro a Hécate.
Sus orejas están cubiertas campañas envidian Haliarto cuyas cosechas sonriendo
morir ahogado en la hierba espesa. Sus armas son troncos retorcidos; sus cascos,
cabezas vacías de leones; sus escudos, la corteza de árbol redondeado. No tienen
reyes es nuestra Amphion llevándolos. Se puede reconocer fácilmente a mi hija en
su casco que adornaba una lira y un toro, la imagen de su abuelo. [7.280]
guerrero noble y valiente, pronto se sentará en medio de espadas y entregar
golpes su pecho desnudo, en defensa de sus queridos paredes.
También los
pueblos de Helicon, vuele al rescate; y tú, Permessus! y tú, felices Olmius,
ondas armónicas, que se arma a sus hijos tranquila, poco hizo para la lucha.
Escuchar los himnos de canto con antelación de transporte del país. Tal, cuando
huido los cisnes invierno pálidos deslizan a través de las aguas
resplandecientes del Strymon. Hacia adelante, guerreros! su gloria no se pierda,
y las musas se repetirá sus peleas en el verso inmortal. "
[7290] La chica
interrumpió el anciano con estas pocas palabras: "¿Cuál es, dijo, el origen de
estos dos héroes que veo allí, porque parecen ser hermanos? Ambos tienen las
mismas armas, ambos han superado sus cascos de la misma garza. Haría los dioses
que mis hermanos estaban unidos como ellos! "
El anciano sonrió: "No eres la
primera, O Antígona, que ser engañado por ver; muchos otros, abusa de su edad,
han dado por hermanos. Uno de ellos es el padre, el hijo del otro; pero se
siguen tan de cerca en la vida, que parecen contemporánea. Como un niño y
demasiado débil para ver a Venus y sus quemas, el padre inspiró un amor violento
una ninfa Dirce, Lapithonie que, independientemente de su juventud, se une a él
por una matrimonio precoz. [7.300] Poco después nació la hermosa Alathrée, que
pronto llegue a su padre todavía en la flor de la juventud; La tomó de la cara,
y se mezcló sus años con los suyos. Ahora que les gusta el error que hizo que
los hermanos, especialmente el padre; con mucho gusto vendrá la vejez en sí.
Cada guía en la batalla trescientos jinetes, dicen, vienen de humilde Glisante y
Coronie; Coronie ricas cosechas y viñedos Glisante. Sino más bien buscar hipseo
la que eclipsa exagerado los cuatro caballos del carro. [7.310] En su mano
izquierda, un escudo formado por siete cueros y una hoja de hierro triple,
protegiendo su pecho; porque él no tiene miedo de ser atacado por la espalda. Su
lanza era una vez que el honor de los bosques; contra el enemigo, siempre cruza
los brazos, pechos: la mano nunca ha engañado a su esperanza. Se dice que es el
hijo del Asopo, y el padre es digno de un hijo así, mientras que mover de un
tirón los puentes, se lanzó impetuosamente o vengador ardiente de su hija, se
plantea sus olas, enojado tener que dominar el hijo del trueno. De hecho, se
informó que, encantados de olas paternos Egine eludió a la vista, [7.320]
escondido en el brazo de Júpiter. Transportados por la rabia, el río se está
preparando para hacer la guerra en el cielo, que incluso los dioses se habían
atrevido a hacer. En su audacia ciega, se eleva hinchados de ira, y se atreve a
atacar a Júpiter, sin ninguna ayuda implorar; luchó hasta derrocado por los
terribles golpes de truenos y los fuegos ardientes del rayo, se vio obligado a
ceder. Incluso ahora, el río impetuoso y aliento a lo largo de sus bancos como
para contemplar las cenizas de su desmayo bordes monumento glorioso de la
venganza divina, y el lanzamiento como el Etna, la llama hacia el cielo. Como
admiramos hipseo en campos cadmeos, si es que el feliz Egina podría apaciguar al
dios del trueno. [7.330] Llevó a los guerreros Ithon y Alalcomène dedicado a
Minerva, que ha proporcionado Midé Arné y húmedo, los que siembran los campos de
Áulide, de Grea, el verde Platea, que domesticar con las llanuras de arado
Pétéon, y tierras que Euripo, pasando en nuestro territorio, baña sus olas
inconstantes; Por último, los que viven Antedón, en el límite de nuestras
fronteras, donde Glauco, corriendo la costa verde en aguas que atrajo vidas con
miedo, mientras que su cabello y su rostro tomó el color del cielo, su acabado
de la carrocería en los peces. Estas personas, armados con hondas, hienden el
aire con balas de plomo; sus características vuelan más rápido que las flechas
de Creta.
[7.340] Y también, ô Céphisse, habría nos envió el hermoso
Narciso; pero este niño salvaje ya palidecía en campos Tespia. Ya satisfechos
con amor paterno, no es una flor que su padre rocía sus olas.
Cómo hablar
con usted guerreros ApolIon queridos de la antigua Fócida? Dejaron Panope,
Dáulide, Cipariso, y sus valles, O Lebadea! y Hiámpolis sentado en una roca
empinada, parnasianismo la doble colina Cirra a pastos, Anémorie, y madera
Corycie y Lilee, de donde brota la fuente de hielo Céphisse; [7.350] Es en este
río que el pitón vino menudo saciar su sed, y retire el mar el tributo de sus
olas. Ver, todo adornado con corona de laurel de sus cascos; sus armas emblema o
Titye o Delos, o carcaj con flechas innumerables sirven a Dios para dar la
muerte tantas veces. Caminan bajo las órdenes de Iphite de ebullición que
recientemente perdió el hijo de su padre naubolus de Hippasis una vez que su
invitado, Layo O, O dulce de los príncipes! Con toda calma llevaba las riendas
de su tanque cuando su cabeza, golpeó golpes mortales, rodó por debajo de los
pies de los caballos. ¡Ay! ¿por qué mi sangre no fluye con la suya? "
A
estas palabras, las lágrimas mojan las mejillas, [7360] palidez cubre su rostro,
y sus sollozos se cruzan su voz. La niña calienta el pecho de hielo de su viejo
amigo; le corresponde a él, y con voz débil, y continúa: "Oh tú, mi gloria
querida, mi última y única felicidad, Antígona, es necesario que yo extiendo mi
carrera dolorosa, eso es que me expongo tal vez incluso ver los crímenes y
asesinatos, como los que se ven por sus antepasados. Pero permítame que le deje
caer una virgen y puro en la cama de matrimonio; No pido nada más, y el Parcas
entonces me lleve una vida que yo era dependiente.
Pero a medida que me
abandono a mi pesar, cuántos líderes ya han presentado junto a nosotros! Yo te
Clonius ni tampoco Abantiades, cuyo cabello cubre los hombros, he nombrado
[7370] tú, rocoso Carystus ni humilde Egas, ni el anterior Cafareo, y mi vista
ya debilitada se negó a servir . Pero ahora tienen parada, y los comandos de tu
hermano silencio. "
Apenas edad de hielo en la torre pronunció esas
palabras, Eteocles, de pie sobre una colina, comienza: "magnánimos reyes, que a
quien yo, jefe del ejército, yo no se niegan a obedecer, en el que ando como
soldado en la defensa de mi ciudad, no voy a tratar de aumentar su valor; por
ello es que se apresure voluntariamente es que asoció voluntariamente con
juramento de mi justa ira. No puedo alabar lo suficiente dignidad, ni usted
testigo de todo el reconocimiento que se merece.
[7380] Los dioses y las
manos victoriosas te alabarán mejor que puedo hacer. Usted ha comprometido a
defender una ciudad que no ataca extranjera beligerante aliado, venido de
tierras lejanas, sino que incluso un niño de esta tierra, que el líder del
ejército enemigo, en las filas opuestas y su padre, su madre y sus hermanas, y
el que una vez fue su hermano. ¿No lo ves, Polinices, tu maldad ataca a las
tumbas de sus antepasados?
De sus propios pueblos de Aonie voló en mi ayuda;
no entregar mí, cruel, en su ira. Lo que hace este ejército, también había que
entender; [7.390] Me prohíben dar vuelta al trono. "
Se dice, y da todas sus
órdenes. Se refiere a aquellos que deben luchar contra los que deben defender
los muros; cohortes que caminarán en la primera fila, quienes se sitúan en el
centro.
Como un pastor levanta las puertas de su granero y pantallas que
dejan pasar la luz, cuando el suelo está todavía húmeda por el rocío. Líder del
rebaño que dirige; su no trabajar la banda de ovejas; soporta a los que están
llenos, las madres cuyos pechos casi tocar el suelo, y les da a sus corderos
débiles.
Sin embargo, el avance griegos; caminan el día, caminan la noche y
el día y la noche siguiente todavía se encuentran bajo los brazos, como la ira
transporta! [7.400] desprecian a los demás; sueño, el hambre simplemente
retrasando; tienen que cumplir con la velocidad enemigo que otros tendrían que
huir. Se dejan ser detenido, de acuerdo con ese destino, también precursor de un
desastre seguro, ofrecen multitud para su apariencia. Todo, de hecho, sus
aflicciones augurio más agreux: pájaros, bestias salvajes, estrellas, ríos
desviados de su curso. Júpiter tronó signo enojado; brillo relámpago siniestro
en la nube; santuarios de voz a cabo terribles; las puertas de los templos están
cerrando a sí mismos; a veces llueve piedras, a veces de sangre; las sombras de
la funeraria a cabo; las sombras en duelo de sus antepasados están disponibles
para reunirse con ellos. [7.410] A continuación, conforme a las palabras de Dios
Cirra estaban en silencio y escucharon la noche a una hora inusual, gritando a
Eleusis; y Esparta, en sus templos abiertos, vive, paquete de O! O horribles
augurio! los gemelos Amyclee llegan a las manos.
Los arcadios decir que la
sombra enojado de Licaón gritó en el silencio de la noche; Pisa, qu'Œnomaüs
atravesada la contención fatal; Acarnania los qu'Achéloüs privadas vagabundos su
última cuerno levantó la ceja deshonrado; Micenas está orando por los afligidos
a la cara de Perseo y la estatua de Juno, cuyo marfil es mojada por las
lágrimas. [7.420] En el campo se escuchó el poderoso rugido Inachus, y en las
orillas de los dos mares, el tebano Palaemon colgó sus gemidos. El ejército
griego oír estas historias, pero el espíritu de lucha hace sordos a las
opiniones de los dioses, y echa fuera el temor.
Ya que habíamos llegado en
sus orillas, O Asopo, en el fértil Viotia. Las escuadras no se atrevieron en el
acto a través del enemigo río, que luego descendió como un gran río a través del
campo, o el mensajero del arco de lluvia o las nubes de las montañas había
aumentado su curso; ya sea que tal era la voluntad del río, y que en su
oposición a los enemigos en masa de sus aguas, que pretendía poner fin a sus
batallones.
[7.430] Y la feroz hipomedón crece en las ondas de su caballo
vacila; que lleva consigo gran parte de la costa y lejos de otros líderes,
elevando la media de las riendas del golfo y las armas, "Sígueme, guerreros,
llora; y juro que le guiará en los muros de Tebas, y juro a descomponerse. "
Todo precipitarse en el río y avergonzado de ser superado por él. Por eso,
cuando un pastor a su rebaño quiere cruzar un río desconocido, la manada se
detiene consternado; Por otro lado está tan lejos! el viaje parece tanto tiempo
en su susto! pero apenas el toro que va delante de ellos entró en el río y anotó
el vado, que se vuelven más fáciles olas parecen abrirse ante ellos, [7440] y
los bancos más juntos.
No muy lejos de los griegos notado un lugar limpio
para establecer un campo; se trata de una colina desde donde se puede ver la
ciudad y las torres de Tebas este puesto, y les ofrece una jubilación segura. La
colina, de hecho, tiene en su parte superior una amplia meseta, ya sus pies se
encuentra una vasta llanura, donde el estudiante hace cualquier otra montaña.
Este lugar no es su defensa en un largo y doloroso trabajo, la naturaleza ha
favorecido maravillosamente. Alto rocas en una esquina de zanjas excavadas
agrícolas en la llanura, cuatro rocas juntos por casualidad, y similar a las
torres, que sus defensas naturales; [7.450] Los griegos añadir lo que aún falta
allí hasta que el sol desaparece detrás de toda la montaña, y que el sueño trae
descanso a los mortales cansados.
¿Quién podría expresar los terrores de
Tebas? La ciudad, en presencia de la guerra, observando para completar los
preparativos. La noche oscura asusta, y la amenaza de aquel día se acerca.
Llevamos a cabo en las paredes. En este horror, nada parece lo suficientemente
fortificada, nada parece lo suficientemente sólida; ciudadelas de Amphion son
demasiado débiles contra el enemigo. En todas partes rumores sordos; el número
de enemigos, su fuerza exagerada por el miedo; las miradas se dirigen a las
tiendas de los griegos a las luces exteriores que brillan en la montaña tebana.
[7.460] Algunos atienden a los dioses sus oraciones y quejas, otros se
armaron-sus golpes o excitan sus monturas guerreras, otros llorando multitud de
seres queridos, y el control, por desgracia, Al día siguiente una pira
funeraria.
Si un sueño ligero cerró los ojos, luchando único sueño. En su
miedo, a veces se ven en los retrasos como una ganancia, a veces están cansados
de la vida; temen a la vez y quieren luz. Tisiphone está sacudiendo sus dos
serpientes y juncos furiosos de uno a otro campo, mostrando Eteocles y Polinices
Polinices a Eteocles, y tanto su padre. Éste, oculto en su palacio, ansioso,
inquieto, implora a las Furias y pide a sus ojos arrancados.
[7.470] Ya el
frío Phoebe y oscurecían las estrellas habían desaparecido antes del día. En un
momento en el océano hinchazón en el enfoque de Febo, abre su vasto seno para
dejar salir el carro de Dios, luego cae calentado por los rayos de los corceles
jadeantes, he aquí que de pronto los ojos desorbitados , pelo despeinado y
sucio, las mejillas pálidas magullados golpes brazos, Jocasta, que lleva una
rama de oliva rodeada de una tira de negro, y similar a la anterior de las
Furias, de las puertas de la ciudad a lo largo la majestad de la desgracia.
Junto a él, sus hijas, que no tienen la feroz corazón de sus hermanos, [7.480]
no apoyan su año qu'affaiblissent, y se precipita con un esfuerzo por encima de
ella, la edad; ella llega a los enemigos, su pecho desnudo contra las barreras
de, y un temblor de voz triste y pedido que sea introducir "Abierto a que no
santa causa de esta guerra; Tengo en este campo de una ley horrible que tengo de
mi vientre. "Al ver esto, estas palabras, batallones tiemblan de terror.
Un
mensajero enviado a Adrasto es poco hacia atrás; obediente a las órdenes del
príncipe, soldados introdujeron la reina y su paso abierto a través de las
espadas. Tan pronto como se ve a los líderes griegos, dirigidos por mal camino
por su dolor, ella deja escapar un grito terrible:
[7.490] "cabezas Argos,
oh! que me va a mostrar al enemigo a quien he dado a luz? Dime lo que el casco
aparte de otros guerreros. "El príncipe tebano corrió a su encuentro, los
abrazos, el regado con lágrimas de alegría, la consola y no deja de repetir:" Mi
madre, mi madre! "Esta prensa se vuelve contra su corazón y su madre y su
hermana querida. Pero pronto la reina sour dulces lágrimas por sus palabras de
enojo. "Príncipe Argos, ¿por qué fingir afecto por mí estas lágrimas y estos
nombres venerables? ¿Por qué rodear el cuello a sus brazos y aprieta contra el
pecho del Ejército de Hierro una madre que es detestable para usted? [7.500] Es
este realmente el exilio errante, aquel digno anfitrión de piedad? ¿Quién no ser
sensible a sus infortunios? Hay sus cohortes esperan sus órdenes aquí,
alrededor, usted, brillar miles de espadas. Ah! malheuureuses madres! y ahora
que yo estaba llorando día y noche! Pero si no despreciarás las palabras, las
opiniones de los suyos, mientras que el campo es tranquilo, la piedad vacila y
el horror de la guerra, como madre, yo os mando, que te pide, ven conmigo; de
nuevo, al menos aún ver a los dioses del país, los techos de dónde va a llevar
la llama a tu hermano: (¿por qué mirar hacia otro lado?), su hermano oiga tu
voz; Voy a ser su voluntad, venido a reclamar el trono que le es debida. [7.510]
Si él no te hace, te reprenda tu espada para convertirse en una causa justa.
¿Teme alguna trampa en la que su madre, cómplice en el fraude, quiere hacer que
se caiga? No, nunca la justicia en este punto desterrado de nuestro hogar
infeliz. Si Edipo mismo que conducía, solo en caso de que temer. Yo era una
esposa y madre por un crimen espantoso, pero no me gusta mi hijo menor Ay!
incluso ahora me disculpo su furia; pero si persisten, así! nosotros mismos,
crueles, traemos un triunfo fácil. ¿Sus hermanas atrapados, los conecta sus
manos detrás de la espalda, me carga con cadenas, pasar el rato aquí haciendo su
padre, a pesar de su pesada vejez. Ahora es que mi voz qu'implore gemido de
ellos, [7520] generoso hijo de Inachus; porque dejó sus hogares y sus niños
pequeños, sus viejos padres, y al igual que muchas lágrimas que derramar, creer
en el vientre de una madre. Si mi hijo es querida por tan poco tiempo, y él
puede ser tan! lo que debería hacer a vosotros, griegos, el amor de una madre,
el amor de quien alimenta? Reyes Hircanio y Odryse, incluso aquellos que, de ser
posible, habría superado nuestra furia, no rechazan mi oración. No me empujes! o
abrazar a mi hijo, si usted no pone fin a la guerra, voy a morir aquí. "
Estas palabras han desarmado a la ira de los soldados entonces habríamos visto
agitando cascos y armas, salpicadas de lágrimas. [7.530] A medida que el choque
de sus impetuosas pecho leones derrocó lanzas y cazadores, su ira es menos
ardiente; seguros de su presa que mantiene cautivos, les gusta posponer su
terrible fiesta. Así, los griegos sienten que su valor se debilitan y vacilar, y
calmarse en ellos el amor ardiente de la lucha.
Polinices, el más agitado
que los otros, pasan a su vez de los brazos de su madre en los brazos de la
joven Ismene y Antígona que pide llorando. En medio de las emociones tormentosas
que perturban su alma, se olvida el trono, él quiere ir; pacífica Adrastus no se
opone; pero Tideo, que no ha olvidado su justa ira, advierte en estas palabras:
"Soy yo más bien, compañeros, yo, que recientemente han experimentado la
buena fe de Eteocles [7540] (y yo no era su hermano), es lo que necesito para
estar frente a ese rey cuya la hermosa paz, cuyos tratados buena todavía están
grabados en mi pecho. Y que, a su madre, el guardián de su palabra y la paz, en
el que estaban, en esa noche, cuando una hermosa casa hospitalidad refrenado mis
pies? Este es un elegante ejemplo de que, probablemente, a entrenar a su hijo?
llevarlo por lo que en este campo se cebó aún más su sangre y la mía.
Usted
sigue el príncipe demasiado débil, por desgracia! y demasiado olvidadizo de sus
amigos! Sin duda, cuando los brazos del enemigo brillarán alrededor de su cabeza
espadas desnudas, al igual que llora por espadas caen! [7.550] ¿Cree que, tonta,
Eteocles que una vez que sostenía en sus paredes, que se ha apoderado de la
presa que quería que su odio, que le deje en el campamento de los griegos? A
principios de esta lanza despojado de su verde de hierro de nuevo, y antes de
que Inachus y nuestra Aqueloo rebrousseront su curso. Pero se trata de una
entrevista pacífica, es la paz que buscamos en el medio de las armas, así, este
campamento también está abierto, y no ha merecido el miedo. ¿Soy un sospechoso?
Me retire, me sacrifico mis heridas. Que venga, y con él su madre aquí, y sus
hermanas, sus mediadores; pero quiero, presentando al pacto, le da el trono: su
vez, esto le dará los Polinices? "
[7.560] Estas palabras llevan el ejército
y cambian todas las resoluciones. Así, el Notus, salte de repente del cielo en
el torbellino rápido, por delante de caza Boreas y reinar sobre el mar.
Una
vez más la guerra, y su valor encanto furia. La feroz Erinnys aprovechó la
oportunidad y lanzó las primeras semillas de la lucha. En los bordes de dos
tigres vagado Dirce, pacífica dios de enganche que una vez subió a su carro,
devastado las tierras de la Aurora. Ingresos lados de Eritrea recién victorioso,
que habían lanzado en los campos de la Aonie justa recompensa por sus servicios.
Los dos primeros despojados de su ferocidad y exhalando su alrededor los aromas
de Oriente, [7570] eran el deleite de Ministros del dios y su sumo sacerdote, a
quien le gustaba decorar las hojas de palma, guirnaldas hiedra, para casarse con
sus diversas tareas que el brillo de la púrpura. Ya las colinas de los
alrededores, ya que (lo creería?) Los rebaños hacerse querer, vaquillas
atrevieron rugido alrededor de ellos. De hecho, atacaron persona para satisfacer
su hambre; esperaban una mano amiga debe presentar su comida, y, revirtiendo su
horrible cara, recibieron el vino que vertimos: dormían en el campo, y todos
respetan su descanso; aunque a veces entraron pacíficamente la ciudad, todas las
casas, todos los templos eran quemar incienso, y se hubiera dicho que el propio
Baco había hecho su entrada en las paredes.
Pero tan pronto como las
Euménides fue alcanzado tres veces con su látigo víbora, [7580] y emocionante su
furia, el primero fue llamado a su naturaleza, que se elevan en medio de los
argivos que no reconocen similares dos relámpagos que dos puntos opuestos del
cielo estallan en un momento, caída y arrastre a través de las nubes una larga
melena. Con la misma velocidad que cruzan la llanura, rugido, y, corriendo a un
terrible salto, Grab (presagio terrible para ti, Anfiarao!) Su escudero que
ofreció el primero en encontrarse con ellos. Se dirigió este momento sus
caballos al cercano lago. Pronto Idas de Ténaro, viene después de él, y el
etolio Acamante, caen a su vez, sus caballos asustados huyen a los campos.
[7590] La vista de la carnicería enciende Acontée, cuyo brazo se ejerció para
matar a los animales salvajes Acontée era Arcadian; se lleva a cabo una lluvia
de misiles bajo el amparo de sus paredes, y multiplicando sus tiros, les golpea
repetidamente hacia atrás y flancs.Celles huirá dejando tras de sí un largo
rastro de sangre y arrastre a las puertas de los dardos que están erizado; allí,
casi expirando, que exhalan gritos lastimeros, y presionar contra las paredes
aprecian su pecho herido.
[7.600] Se podría pensar, al clamor que se
levantan en las paredes cuyas puertas permanecido abierta, los templos y toda la
ciudad saqueada, y antorchas sacrílegas devorar casas tebanos. IIs preferiría
que la berrceau el gran Hércules, Sémele el apartamento, el santuario se
Harmonia se derrumbó. Por el momento, con las manos vacías rasgos Acontée
aplaudió a sí mismo por su doble victoria, Fegeo, sacerdote de Baco, se
precipita sobre él y lo golpea con su espada. Los jóvenes de Tegea la rescata,
pero era demasiado tarde; Ya acostado en los restos sagrados de dos tigres, el
joven guerrero feliz, caída, el dolor y la venganza, Baco.
El alboroto que
se levanta de repente en el campamento griego disuelve la asamblea: Jocasta
flees a través del enemigo, [7.610] sin atreverse a recurrir a las oraciones.
Ella y sus hijas son repelidos por estos mismos soldados de tiempo tan
dulce. Entonces Tideo, rápido para aprovechar la oportunidad, "Bien! a partir de
ahora contar con la paz, en la buena fe! Eteocles que al menos ha pospuesto la
traición? Podía esperar el regreso de su madre? "Dijo, y sacando la espada,
llamó a sus compañeros. Ya ambos lados clamor terrible explosión, ya la ira se
inflama. La batalla comenzó tumultuosos, líderes y soldados por igual, las
órdenes no reconocidos; jinetes, infantería, tanques, todo se mezcla. Una masa
confusa detiene cualquier impetuosidad; [7.620] no puede ser de día ni de
reconocer al enemigo. De esta manera los jóvenes de Tebas y Argos formar
batallones a toda prisa y llega a las manos. Detrás están las banderas y
trompetas; Trompetas encontró la lucha comprometida. Sólo hacía falta un poco de
sangre a Marte déployât toda su furia. Al igual que en las nubes el viento
concentra por primera vez sus fuerzas; todavía débil, que las ondas del follaje
y los árboles; pronto tomó la leña, y puso al descubierto las montañas
despojados de su ombrage.Maintenant, hermanas Pierius Sing (No voy a preguntar
sobre tierras lejanas), cantar las batallas de tu querida Aonie. [7.630] Usted
los ha visto, de hecho, cuando el enfoque de Marte, el brillante sonido de las
trompetas fue laúdes Tirreno emocionantes de Helicon.
El tebano Pterelas,
arrastrado por su caballo qu'effarouche el ruido de las armas, la fuerza
innecesariamente riendas; el fuego de los animales, freno y no obedecer a la
cansada mano, arrastra aquí y allá a través de los batallones. La lanza de Tideo
alcanzó el hombro del joven guerrero, se cruza en su flanco izquierdo, y
revierte clavado en su caballo. El tábanos, unido a su muerte maestro, y sin
embargo la puerta cuando su mano ya no admite ni las armas ni las riendas. Así,
un centauro que todavía no ha respirado las dos explosiones que cae unidad que
mueren en su grupa. [7.640] Pero la espada se calienta la carnicería. La furia
anima a ambas partes. El Pylian Síbaris fue derrocado por hipomedón, Perifante
por Menoeceus, Itys por Parthenopaeus. Síbari cae bajo el hierro sangrienta
Perifante feroz es golpeado con una lanza, ltys, inesperado auge. Hemon,
estimado a marzo, cabeza robada de Inachien Ceneo. Separado del cuerpo mutilado,
los ojos abiertos mirando el tronco, el alma busca la cabeza. Abas ya retirado
las armas tumbado en el suelo guerrero; pero, sorprendido por una flecha griega,
se le cae al morir su propio escudo con la de su enemigo.
¿Quién te
aconseja, O Euneo, dejando el culto de Baco, [7.650] bosques sagrados donde está
prohibido el sumo sacerdote para escapar, y el intercambio de Baco furia de los
de Marte? Su escudo penetrable las líneas se corona de hiedra pálido y las
guirnaldas Nisa; tiras blancas nudo la vid su lanza; sus hombros se ocultan bajo
su pelo; una pelusa creciente luz en sus mejillas; Neumático brillo púrpura en
su bajo coraza; mangas envuelven sus brazos; las correas de la zapata están
pintadas; la camisa es de tela de lino fino; un broche de oro pulido brillante
mantiene con Jasper Laconia su abrigo, [7660], que resuenan, que cuelga de su
hombro, un arco con su caja de luz y el carcaj, decorado con un lince donde el
oro chispa. Camina por mal camino por el espíritu de Dios, en medio de muchos
batallones, gritando en voz alta: "Estas paredes son altas bajo el auspicioso de
Apolo; donde el dios Cirra guió su novilla profética, las piedras llegaron a
presentarse a sí mismos. Somos una nación santa. Esta ciudad tiene el hijo de
Júpiter padrastro a Marte, para los niños (y esto no es una afirmación vacía)
Baco y grandes Alcides. "Él pronunció estas palabras inútiles, cuando el fondo
impetuosa Capaneo en él, armado con su lanza.
[7.670] A medida que la mañana
en su león negro den sintió despertar su ira, vio la parte posterior de su cueva
una cierva o un ternero cuya cabeza es demasiado débil para luchar, él entra
rugido de alegría, a través de los brazos y la multitud de cazadores que causan;
ve a su presa sin pensar en la lesión. Por lo tanto Capaneo aplaudiendo a sí
mismos de esta lucha desigual, blandiendo un enorme ciprés fuerza; pero, antes
de golpear, "¿Por qué, dijo, está buscando cuando se muere, para asustar a los
hombres por su esposa grita? Serían los dioses que vino aquí a sí mismo, que ha
perdido la razón! Cargará estos cuentos las mujeres de Tebas. "Al mismo tiempo
que empuja la lanza [7680] volar como si ningún obstáculo lo detuvo, y, al mismo
tiempo, sonaba en el escudo y cruzó el guerrero hasta la médula. Armas escapan
de sus manos; y sus lágrimas están haciendo un ruido horrible de oro que lo
cubre, y la sangre brotando borra el esplendor de su atuendo. Uno se muere,
erupción; se muere y su muerte es un tema nuevo Bachus de duelo; que arranca a
las armas Ismare, que, en su dolor, rompe sus thyrses; la Tmolus en el fértil
Nisa, Naxos Teseo testimonio del amor, y el Ganges, cediendo a la festoneado,
una vez que se comprometieron a celebrar orgías de Tebas. El batallones Argos
también éprouvèrent el valor de Eteocles; pero la espada de Polinices, más
ahorradores de la sangre, se estremeció de pie sobre los ciudadanos.
[7690]
se eleva Foremost Anfiarao cuya caballos ya estaban miedo de la tierra, y elevar
los remolinos de polvo indignados lisos. En su dolor; Apolo da su vanagloria
ministro; que quiere ilustrar sus últimos momentos e irradia su escudo con un
resplandor divino. Estás tan ansioso, O Marte, el acceso a la oración de tu
hermano, y se defiende la
mano y cuenta con una herida mortal que héroe.
Santo víctima, Plutón solamente tiene derechos sobre ella. Tel Amphiraüs se
eleva en medio de los enemigos, seguro de sí mismo de su muerte, y esta
confianza se suma a su furia.
[7700] Su tamaño aumenta, el día brilla más
bella en sus ojos, y nunca había mejor do su ciencia penetrado los secretos del
cielo, si hubiera tenido la oportunidad; pero tan cerca de la muerte, su valor
desvía sus pensamientos en otro lugar. Encendido el fuego de Marte, que tiene
sed de sangre; disfruta de la fuerza de su brazo, que está orgulloso de su ardor
de fuego. Él vivimos tan a menudo suavizar las desgracias y derrotar destinos
mortales; trípodes que guarda sagrados y de laurel de Apolo, sabían, después de
saludar al dios de que se trate al descubierto el vuelo de las aves, de cómo se
convirtió completamente diferente disparo de sí mismo! Similar a la plaga
destructiva de un año fructífero en la muerte, o la chispa traviesa de un
planeta enemigo, [7710] su espada sacrificó sus propios crines una innumerable
multitud de guerreros; su jabalina tira Phlegyas y excelente Fileo; guadaña de
su carro, y Clonis Crémétaon; uno estaba de pie cerca del tanque cuando fue
golpeado, los otros corvejones corte. Se invierte su lanza Chromis Iphinoüs,
sabia, Gias con el pelo largo, y por último, pero a pesar de él, Lycorée,
sacerdote de Apolo: reconoció sólo después de su lanza ceniza se cayó de sus
manos moribundas, y su casco recortada había dejado ver las tiras sagrados. En
una piedra que morder la Alcátoo polvo, que habían salido de las orillas de los
estanques Carystus su casa, su esposa y sus hijos, que les gustaba divertirse en
la playa. [7.720] Había vivido mucho tiempo pobre, buscando en las profundidades
de su existencia dolorosa; la tierra le entregaba, y lamenta vientos, tormentas
y menos formidables peligros del mar que tantas veces se enfrentaron morir.
Con mucho, hipseo hijo del Asopo, vio la derrota y la matanza de los tebanos, y
se quema para distraer a luchar contra él. A sí mismo, su carro y no menos
terribles qu'Amphiaraüs, hicieron retroceder a los batallones de Tirinto; pero
cuando ve el augur, la sangre se paga menos que en su vista; sus armas, valor
que buscan Anfiarao; las apretadas filas de un grupo de combatientes de la
separada. A continuación, dibuja una línea con orgullo que él había elegido a sí
mismo en las orillas de los padres, [7730] y antes de lanzar el "Oh, épands sus
aguas fértiles en los campos de la Aonie, Asopo, cuyos bordes carbonizado
todavía llevan las huellas de la gloriosa rayo de Júpiter, conducir mi brazo,
sino que es un favor te pido en nombre de mi nacimiento, y esto roble, aguas, tu
bebé. Yo también puedo desafiar Febo, ya que el padre de los dioses os han
combatido. Ganador, derramaré en su augurio de onda con sus armas y tiras,
restos tristes de su frente. "
Su padre había oído; Febo, pero le prohíbe el
acceso a sus deseos, se da la característica de gradas, el escudero de Anfiarao.
Gradas cae: el dios toma su lugar y agarró las riendas flotantes bajo la
Aliagmon de características prestadas de Lerna. [7.740] Y todo el rendimiento a
la furia del héroe. Los batallones se vuelcan por terror solo, y sin haber
recibido ninguna lesión; Guerreros se logran en su huida por una muerte
vergonzosa. No podemos decir si la gravedad del dios más lento o precipitar los
pasos de sus feroces caballos.
A medida que la ladera de una montaña que se
eleva en la nube, sacudida por los vientos a la devolución de invierno, o
debilitado por la edad, se colapsa bajo su peso, y se precipita en la llanura
con un accidente horrible, .
Él lleva sus armas de caída desiguales,
hombres, viejos robles; y, finalmente, su impetuosidad se agota, se detiene, y
el valle hueco o interrumpe el flujo de un río. [7.750] De este modo, doblado
bajo el peso de un héroe y dios, tanques de buceo aquí y allá en la sangre de
sus ruedas en llamas. Sentado en el asiento, el mismo Apolo cuida todo al mismo
tiempo y se lanza riendas; dirige golpes de distancia flechas del enemigo, y
engaña a la lanza que fue golpeado. Ya se extendió a la tierra Ménalas que
luchan a pie; Antifo, su alto caballo no puede proteger; Etión, nacido de una
ninfa de Helicon; Polites, deshonrado por el asesinato de su hermano; y Lampus,
que intentó contaminar la capa de Manto sacerdotisa. Fue el propio Febo arrojó
contra ella su flecha sagrada.
[7.760] corceles jadeantes ya tienen
problemas para encontrar el lugar de sus pies en el suelo sembrado de
emocionantes y medio muertos guerreros. Las ruedas trazan surcos a través de los
cadáveres, rasgó sus miembros, y son vergüenza de flujo de sangre; aplastarlos
cuerpos inanimados sin piedad, y los que respiran incluso verlas venir en su
cara. Ya el freno está manchada de sangre, el eje endurecido ya no puede
mantenerla; las ruedas giran sangrientas con dificultad, y los pies de los
caballos se enredan en las entrañas que aplastan. Anfiarao rabia borracha,
lágrimas rasgos que permanecían en los cuerpos, y las lanzas que han penetrado
hasta la médula: [7.770] almas volando con un chillido, y siguen el carro.
Finalmente Apolo descubre a su sacerdote: "Disfrute, dijo, el último día que
brilla para ti; cubrirse de gloria inmortal, mientras que se coloca cerca de mí,
la muerte irrevocable que se reúne de nuevo: somos derrotados; las Parcas sin
piedad, ya sabes, no giran dos veces el tejido de nuestras vidas. Hará que la
alegría de la gente del Elíseo, esperando a que desde hace mucho tiempo. Por lo
menos no tendrá que sufrir las órdenes de Creonte, y su cadáver no será arrojado
desnudo sin honor, y el entierro privado. "El adivino, poniendo sus brazos,
respirando un momento, y él responde:" Dios Cirra cuando entró en honor a un
débil mortal, sentado en ese tanque que pronto se pierda, [7780] he reconocido
la emoción de eje. ¿Cuánto tiempo con vosotros para el destino que me esperan?
Ya puedo escuchar el sonido de la Estigia a las ondas rápidas, ríos negros de
Plutón, y los ladridos de su triple guardián feroz. Recuperar los adornos, que
usted parece mi frente; laureles reprender que no esté autorizada a llevar al
infierno. Ahora mi voz que implora por última vez: si la última vez que se digna
conceder algún favor a su adivino fiel, esto es suyo, Febo, recomiendo la
venganza del traicionado a mi casa, mi castigo penal de la esposa y el noble
furia de mi hijo. "
Apolo salta del carro, y salen por desgracia los ojos
húmedos de lágrimas. [7790] Privado de su rescate, el carro y los caballos
gimen. Que, en una noche oscura, golpeado por remolinos del negro de Corus, un
recipiente sabe que morirá cuando la estrella Helen él a través de los velos ya
ha sido condenado, y condujo a sus hermanos Thérapnée .
La tierra,
dispuestos a medio abrir, se estremece poco a poco; su superficie es sacudida,
el polvo se eleva vórtice más gruesa, subterráneo rugido ruido hecho llano. Los
soldados aterrorizados todavía creen que es la guerra, es el rugido de los
combates y les insta a apoyar el choque; pero un nuevo terremoto sacudió los
brazos, hombres y caballos sorprendido. Ya los árboles, [7.800] Ya paredes
tropiezan; fugas de Ismene, y descubre sus bancos. La furia de combate se
extinguió, los soldados yacían en el suelo agitando sus dardos; se tambalean a
sí mismos, y se basan en gran medida en sus lanzas inestables; que se miran
entre sí, adelante y atrás asustado de su palidez. Así que cuando Bellona,
desafiando el mar, las olas cometido en una batalla naval, si hay una tormenta
beneficiosa, por lo que todo el mundo teme por sí mismo; muerte, visto desde
otro aspecto, está regresando las espadas en la vaina, y el temor común llegó a
la conclusión de la paz. Tal era la imagen del combate flotante en el llano
sacudido.
Si la tierra, trabajado por los vientos encerrado en su seno,
[7.810] habían dado paso a su ímpetu irritado por los obstáculos; si la onda de
agua subterránea se había comido el suelo suavizado por socavar el secreto; ya
sea la máquina desde el cielo, rodando en su órbita, se habría visto en esa
dirección; Neptuno es el tridente había sacudido todo el mar, y se había puesto
en marcha terribles a sus límites extremos; ya sea que accidente no tenía porque
el adivino; ya sea que la tierra menaçât los dos hermanos enemigos, de repente
el suelo se abrió la mitad de sus abismos. Las estrellas y las sombras temblaban
en la percepción. Un enorme socavón se traga el héroe, y los mensajeros que se
disponían a cruzar la misma. Anfiarao deja escapar ni sus brazos, ni las
riendas; [7.820] mientras estaba de pie en su carro, que va directamente al
Tártaro, y, al caer, todavía mira al cielo. Gimió al ver el estrecho de civil;
Por último, un ligero movimiento reúne a los dos extremos, y roba a la luz del
día Averno.
Libro VIII
[8,1] En vista de la vidente que, cayendo de repente en medio de las sombras
pálidas, entró en las casas de la muerte y la profundidad misteriosa de los
bajos fondos, los espíritus, preocupado por la apariencia de sus armas están
aterrorizados. Es sorprendente ver en las orillas de los rasgos Styx, caballos,
un cuerpo vivo: Anfiarao de hecho, no había sido entregado a las llamas de la
pira. No era una sombra oscura, se escapó de la urna; todavía húmedo por el
sudor caliente de combate, que estaba armado con un escudo que estaba goteando
con sangre y cubierto con el polvo del campo de batalla donde había
desaparecido. Las Euménides aún no habían considerado a la luz de su antorcha
resinosa; [8,10] Proserpine no había registrado con la puerta negro, admitiendo
en el montaje de los muertos. La hora del destino en sí es culpable, y fue sólo
el punto de vista de la auspicioso las Parcas asustado a cortar el marco de su
vida.
Al oír el ruido, los pacíficos habitantes del Elíseo y aquellos que,
inmersos en profundos hoyos en medio de una noche de espesor expían sus delitos
en la oscuridad negro de otra región, echarlos en torno miradas curiosas.
Mientras que los lagos aguas perezosas, estanques de fuego de sonido de gemido y
ferryman pálida de las ondas oscuras estremecieron indignado al ver que la
tierra se ha demostrado primera mitad Tártaro a los seres humanos, [8,20] y
crines se introducen en el mundo subterráneo sin cruzar el río.
Sentado en
un trono en medio de su triste imperio, rey de Erebus pidió a su pueblo los
crímenes de sus vidas. No hay piedad para los hombres, y él se irrita contra
todas las sombras. En torno a él se varió las Furias, la muerte con sus miles de
aspectos, y el castigo cruel, sacudiendo sus canales ruidosos. Las Parcas llevan
a sus pies almas, y la misma mano que prolonga su vida los condena a muerte.
Ellos no son suficientes para la tarea. Colocado al lado de su hermano
formidable, Minos mortales suplica y suaviza el tirano sangriento. No muy lejos
Parece hinchada por las lágrimas y el fuego, [8.30] Cocito, Phlegethon y Styx
perjuros revelando dioses. propio Plutón, cuando terrenal bóveda de medio
abierto, tembló por primera vez a la vista de las estrellas, e hirió a la suave
luz del día, dijo:
"¡Qué cobarde traición de los dioses lanzó a la luz
odiosa Averno? Que se atrevió a romper la oscuridad, y más cerca de la vida de
las crines silenciosas? De donde me estas amenazas? El que uno de mis hermanos
que me atacan? Espero: se pierden la división del mundo! Quien, de hecho, puede
apelar más? Derrotado por fortuna, que, mientras estaba en tercer lugar,
expulsado del cielo, [8,40] que gobierna el Imperio del crimen, y ya que ya no
es mío; aquí está disponible en enemigos estrellas, se expone la vista de todos!
El rey orgulloso de Olympus que reconocería mis puntos fuertes? ¡Y bien! Voy
a romper las cadenas de los Gigantes y Titanes, que se queman en la estancia
etérea; Voy a entregar mi desgraciado padre. Qué! la cruel no me permite
disfrutar de mi tiempo libre triste, agitado mi reposo! Él no quiere que yo odio
ese día perdí! Si yo quiero, lo descubro todo mi imperio, voy a envolver el sol
del cielo oscuro de los bajos fondos, no voy a enviar al dios olímpico de la
Arcadia (¿qué necesito un mensajero que pasa sin cesar de un reino a otro?),
[8,50] y voy a recordar los dos Tyndarides. Eh! ¿Por qué romper Ixion en fosas
codiciosos? ¿Por qué permitir la ola siempre evitó los labios de Tántalo?
Sufro que el caos es tan a menudo profanado por un huésped vivo? Pirítoo en su
celo imprudente, y Teseo, dedicado a su amigo atrevida, vinieron a atacar
incluso en mi imperio. También llegué frente a la feroz Alcides, protegido por
el silencio infernal puertas privó de su tutor. También vi, todavía me sonrojo,
Tártaro abierta a las quejas Cantor Tracia; Sí, vi, por el sonido armónico a
ella, las Euménides pagan las lágrimas vergonzosas, y los tres Soaurs escotilla
de un nuevo marco. [8.60] a mí mismo .... pero la necesidad inflexible
prevaleció sobre mi compasión. Una vez, robándome de mi imperio, fui, no al
cielo, pero en el campo de Sicilia, deleito una mujer, y se dice que no me está
permitido. Inmediatamente, el orden injusto de Júpiter, Ceres cada año tiene su
hija en medio de mí. Pero ¿por qué estas quejas? Ir Tisiphone, vengar las
moradas del Tártaro; y si alguna vez effrayas seres humanos por espectros
horribles, ahora da a luz a un monstruo horrible, extraordinario, terrible, el
cielo aún no ha visto; Admiro a mí mismo y sus sudores envidia. Dos hermanos
(primer presagio de nuestro odio), [8,70] como dos hermanos fundadas de alegría
unos de otros para matarse unos a otros; que entre estos luchadores que
encuentra uno que, como fieras que devoran la cabeza de su enemigo; otro tira
los restos inanimados estaca, y dejar que los cadáveres desnudos infectan el
aire. Que este espectáculo deleitado el maestro del trueno! Pero para un ataque
de este tipo no se ejerce en mi imperio solo, en busca de un mortal que se
atreve a atacar a los dioses; que, en su escudo de fumar, empuja los fuegos del
rayo y Júpiter irritada. Quiero que tártaro negro de ruido que se mueve, todos
los dioses tiemblan, como una vez a la vista, apilados Pelión sobre Ossa verde.
"
[8.80] Dijo, y su Dios oscura voz tiembla de palacio; Y debajo de sus pies
por encima de la cabeza de la tierra sea removida: Júpiter es menos terrible
cuando sus ojos se sacude el aire, desviando el eje del cielo. "Pero, dice, qué
castigo es lo que merece, ustedes que, defendida por una carretera, que tenga
prisa en el reino de la oscuridad?
Incluso amenazó, y ya el adivino era sólo
una sombra ligera; ya sus armas habían desaparecido; Estaba de pie, pero sus
rasgos la majestuosidad del augurio aún estaba huella; su cara todavía llevaba
la tira se oscureció y se sostenía una rama de olivo morir.
[8.90] "Si
sombras le permite hablar sin cometer sacrilegio, Dios principio y fin de toda
existencia, y yo también pueden elevar la voz, sabía que las causas y los
principios de las cosas. Te lo ruego, me suavizar sus amenazas y alivia tu
corazón; No su rabia caiga sobre él débil mortal teme tus leyes. No vengo como
Hércules (que inspiraría tan atrevido?) Sacrílego intento de secuestro; esto no
es un amor culpable que me empuja hacia abajo imprudentemente en las orillas del
Leteo. Que triste Cerberus no se escape en su guarida; No Proserpina temer mi
carro.
Anteriormente apreciado augur Apolo, [8100] Juro Caos (porque ¿por
qué aquí Juro por Apolo?), He sufrido un nuevo destino, sin ser culpable de
ningún crimen, y que no merecía estar y encantados de la benéfica luz del cielo:
el juez no sabe Dictado punto de Minos puede descubrir la verdad. Traicionado
por una esposa traicionera que sedujo a una de oro culpable, fui al ejército de
los griegos, ¿de dónde sacaste esta serie de nuevos matices, algunos de los
cuales han caído bajo mis golpes; pero yo era consciente de mi destino. De
repente, la tierra tembló y se abrió, y todavía me estremezco en medio de la
pelea la noche del Seol me envuelve. ¿Cuáles eran mis pensamientos durante el
que a través de las entrañas de la tierra, [8.110] que se suspendió largo y que
estaba conduciendo en los espacios oscuros? ¡Ay! He nada me izquierda a mis
compañeros en mi país; Tebas me encantó no hay trofeos; Nunca veo los tejados de
Lerna, mis cenizas ni siquiera consolar a mi pobre padre; Voy a disfrutar o una
tumba, ni las llamas de la pira, ni lágrimas de la mina; Vine aquí por completo,
y estos caballos no fueron aprovechadas para luchar contra ti Estoy listo para
convertirse en una sombra de olvidar mis trípodes. Por qué necesitas un presagio
de que puede predecir el futuro, ya que las Parcas siguen sus órdenes? Pero
calmar su corazón, [8.120] y ser menos severo para los otros dioses; si algún
día mi esposa Penal aquí, eso es todo lo que tiene que reservar un horrible
calvario, Dios justo! Ella se merece algo mejor de todo su enojo. "
El Dios
da la bienvenida a su oración e indignado a ser tocados. Por lo tanto un león
Massylie si ve brillando en sus ojos brillan de hierro, prepara su ira y
terribles garras; pero si el enemigo cayó, él simplemente caminar por encima de
su cuerpo, y dejar que la vida de lo que ha ganado.
Sin embargo el carro
adornado con filetes y laureles sagrados vez tan temidas en el cuerpo a cuerpo
con sangre, nadie ha visto derramado o puesto en fuga. [8.130] Se busca por
todas partes. Los batallones se están alejando; la tierra se convierte en
sospechoso en absoluto; el soldado recorrió las huellas dejadas en el suelo
traicionero, y ese triste lugar donde la tierra se abrió para descansar
codiciosos desierto se evita por respeto a la tumba infernal de héroes.
Adrastus corría de aquí para allá, instando a sus tropas cuando Palaemon, que
apenas puede dar crédito a sus ojos, corre anunciar esta triste noticia; todavía
es temblando y pálido; porque estaba cerca el abismo de Anfiarao cuando se
ingiere, y vio con horror la tierra a punto de abrir.
"Convierte tus pasos,
huido, oh rey! -exclamó, sin embargo, si la tierra dórico si las ciudadelas de
nuestro país todavía existen en lugares donde los dejamos. [8.140] Ya no hay
necesidad de armas o de sangre. ¿Por qué tomar la espada innecesaria contra
Tebas? armas tragado esta nefasta tierra, combatientes: ¿No se siente temblar el
suelo bajo nuestros pies? Me vi la manera de la noche oscura, y la tierra abrió
su vientre devoran, por desgracia! uno que era tan caro a las constelaciones
proféticos, el hijo de Oïclée, que ascendió en vano para las manos, los brazos,
y su voz gemido.
Esta historia te sorprende: bien! Oh rey, que han dejado
impresa en los surcos del suelo del carro, y la humeante tierra y espuma húmeda.
El peligro no es para todo el mundo: esta tierra reconoce sus hijos, [8150]
ejército tebano está de pie. "
A estas palabras Adrastus está aturdido. Duda
para creer; pero Mopsus Actor, pero traerlo con horror la misma noticia. La
fama, el terror envalentonado, no lo ha hecho felices de anunciar una más
guerrero se vio envuelto. Entonces, sin esperar a que el sonido de la trompeta
recuerda, batallones en retirada de sí mismos y huir. Sin embargo, su progreso
es insensible, sus rodillas endebles traicionan. Los caballos propios, como si
tuvieran la sensación de peligro, resistir y feroz, la voz rebelde, al funcionar
no apresurar su marcha, o los ojos de la tierra. Los tebanos presionar a sus
enemigos con más celo; [8,160], pero oscuro Vesper ya está llevando a los
caballos de la luna; una tregua de corta duración otorga guerreros triste
reposo, y una noche que deben aumentar su miedo.
¿Qué aspecto de los argivos
ofreció el ejército cuando podrían quejarse de la libertad! Lo lágrimas cayeron
sobre sus cascos sueltos! Nada les agrada lo que solía suavizar su fatiga:
rechazan sus escudos, dejan húmeda de sangre; sin sueño pulir sus dardos a su
caballo más plano, para ajustar la alta cresta que adorna su casco brillante.
Apenas si se resignan a lavarse las heridas grandes y vendaron sus heridas se
separaron, ya que el dolor es grande y universal! [8170] El mismo miedo de
combate puede instarlos a tomar el alimento que hace que la fatiga de la batalla
si es necesario. Todo O Anfiarao, repita su elogio, todo lloran el adivino cuya
boca era tan fructífero en oráculos verdaderos. Bajo todas las tiendas de
campaña que oímos una voz: "Los dioses se han ido, salieron de nuestro
campamento. ¡Ay! qué fue de aquel carro adornado con laureles? estas armas
solemnes? Este egret tiras entrelazado? Entonces, ¿qué le sirvió las cuevas
sagradas, la ola de Castalia y trípodes de culto! que es el reconocimiento de
Apolo! ¿Quién nos dirá ahora el curso de las estrellas y el presagio de un rayo
que cae hacia la izquierda? ¿Quién va a leer la voluntad de los dioses en las
entrañas de las víctimas? ¿Quién nos dirá cuando a caminar, cuando esperar? que
hora es derecho a luchar, [8180] conducente a la paz? Que descubren el futuro?
Quiénes prueban mis pájaros para? Todos los males que la guerra traería y para
nosotros y para usted, usted sabe, y sin embargo (lo que el valor de un alma
santa!) Usted vino, que ha asociado con nuestras armas infeliz.
Cuando llamó
el infierno y el tiempo marcado por el destino, aún se podía revertir los
batallones de enemigos del neumático banderas; Por otra parte, en el medio de la
muerte, que te vimos, terrible de los tebanos desaparecen, la lanza. Y ahora
¿cuál es su destino? [8.190] ¿Va a volver mansiones de la Estigia? Te que
éloigneras de nuevo de las profundidades de la tierra? O es usted feliz que se
sienta cerca de las Parcas, sus dioses, y, en un acuerdo feliz, obtener una
educación destino mutuamente futuro? o de nuevo, movido de compasión, el dios
Averno siglos, se admitió la madera rica, que ha confiado el cuidado de las aves
del Elíseo? Sea cual sea su destino, su muerte será para Febo eterno dolor, aún
reciente desgracia Delphi se convirtió en llanto mudo ti larga.
Ese fatídico
día se cerrará los templos de Bozcaada, de Cirra, Delos como el nacimiento de un
dios fija en las olas, y el santuario de Branchus con el pelo largo. En este
día, ni Claros ni el Gemelo, [8200] o Licia verán mortales vienen pidiendo
cuestión sus oráculos.
¿Qué estoy diciendo? Bosque profeta cuyo frente está
armado con cuernos, el dios roble fatídico adora Epiro, y el troyano Thymbra, ya
no escuchar sus voces. Ríos, laureles mismos querrán a secarse. El aire, por
medio de sonidos proféticos, no auguran nada a ciencia cierta, y las aves se
caigan los más desnuda de sus alas. Finalmente, un día vendrá cuando la gente le
glorificaron como a un templo que contiene los secretos del destino; un
sacerdote, dedicado a su culto, habrá sus respuestas!
Estos son los últimos
honores que prestan a su rey y su profeta, al igual que, en este momento, le
pagaron el último y doloroso tributo de las llamas de la pira y los funerales,
[8210] o que habían presentado su alma con la tierra suave. A continuación,
todos los corazones están rotos, y la guerra se vuelve odiosa. Por lo tanto,
cuando una muerte súbita Tifis estaba encantada de valiente Minián, remos que
apoyaron su noble compañía parecían divididos regañadientes olas, y el retraso
más lento sus vientos de marzo.
Finalmente, cansado de gemidos y ventilar
sus quejas en una entrevista dolorosa, griegos han disminuido gradualmente su
corazón. Llega la noche dormitar sus preocupaciones, y el sueño se adapta
fácilmente en sus ojos húmedos de lágrimas.
Pero este no es el aspecto que
en esta noche, este enemigo de la ciudad. Los tebanos se extienden las horas
alegres caer en varios juegos, [8.220] o bien a sus casas o en sus hogares. Los
propios guardias perdido el control sobre las paredes; oímos el sonido como el
sonido de los platillos y tambores de Ida y sonidos modulados de la flauta. En
todas partes, en honor de los recién nacidos inmortales y divinas cuenta con
Tebas, los himnos sagrados resuenan; en todas partes se ve sólo guirnaldas y
tazas coronadas de flores. A veces se burlan de la muerte de la vidente
descalificado y se apresuran en la emulación de la ciencia alquilar su Tiresias;
a veces hacen un recuento de los hechos de sus antepasados y cantar el origen de
su antigua ciudad. Celebran el mar desde Sidón, y las manos débiles [8230] que
se adhería a los cuernos del dios lanzando un relámpago, y el imperio de Nereo
surcado por un toro de gran alcance; los, Cadmo, novilla cansada, y los campos
que engendraron una cosecha de guerreros sedientos de sangre; otros, por tierra
las piedras con el sonido de la lira de Tebas y Anfión animación de rocas
insensibles; o el embarazo o el himen Semele Harmonia, hija de Cytherea, sus
hermanos condujo al lecho nupcial con antorchas.
Cada tabla tiene sus
maravillosas historias. Parece que, una vez de vuelta bordes de la Hydaspes
donde crecen las perlas, y los países del Este, donde pasó la ganadora tirso de
Baco muestra sorprendió a poblaciones banderas conquistadas en las tribus
negras, y los indios los cautivos desconocidos hasta 'en ese día.
[8.240] Se
dice que entonces, por primera vez, Edipo, que todavía tenía lo ocultó el fondo
de su horrible palacio, se mezcló con la multitud, se sentó en una mesa de
novia, y, en la frente sereno, lejos de su cara manchada de cabello sucio y
desordenado que lo cubría, sufrieron las amables palabras de amigos y consuelos
empujó pasado. Incluso se dice que probó los platos y se quitó las mejillas
sangre que fue congelada; escuchó a todos, dijo, que estaba acostumbrado a que
no se cansan de sus tristes quejas que Plutón, las Furias, ya veces su fiel
Antígona. [8.250] No se sabe cuál es la causa de este cambio. Esta no es la
victoria de los tebanos, esta es la única guerra que le gusta; insta a él
aprueba su hijo, y sin embargo, él no quiere que sea victorioso; pero quiere
irritar el ardor de los primeros combates, fertilizar las semillas de crímenes
que está pidiendo secretos. De ahí su presencia en el medio de la fiesta, y
alegría desacostumbrada brilla en su rostro. Esto, después del largo ayuno que
se impuso como castigo, Phineas, escuchar más silbido en su palacio horribles
arpías, casi sin atreverse a creer su partida, se sentó alegre fiesta en la mesa
y cogió la copa no derrocan el latido de sus alas. Mientras que el ejército de
los griegos yacía dominado por las preocupaciones y fatigas de batalla, [8260]
Adrasto, la cima de una colina con vistas al campo, está escuchando el tumulto
alegre. A pesar de que se ha debilitado por la edad, tristes deberes del poder
lo obligaron a velar por los males de todos. Su corazón está roto, imbuido de
amarga tristeza cuando oye resonar en todas partes el sonido del bronce, los
gritos de los tebanos, los sonidos de la flauta e insolente de la embriaguez;
cuando ve el resplandor de morir de las antorchas y luces que no puede mantener.
Así que cuando, en las ondas, un barco enterrado en su totalidad en el sueño de
moda en silencio, y que sin miedo el mar y sus tormentas, la juventud libro
confía en reposo, solo, de pie en la popa, [8270] la piloto antes, y con él el
dios que protege la nave, orgulloso de llevar su nombre.
Fue un momento en
que la hermana de Febo brillante, viendo los caballos de su hermano listos para
funcionar y pensiones del rugido del océano cuando se acercan al sol, reunió a
sus rayos dispersos, y su látigo ligeramente agitado caza antes de que sus
estrellas. El rey llamó a los guerreros del consejo afligidos; que se preguntan
quién va a quejarse de legado trípodes, laureles y tiras de la vidente que ya no
existe. Por el momento todos proclaman un guerrero ilustre, el hijo del
venerable Melampo, Thiodamas, [8.280] los únicos qu'Amphiaraüs habían iniciado
en los misterios sagrados, el que Associat cuando se le preguntó al vuelo de las
aves, y sin deseo de su ciencia, le gustaba escuchar a anunciar su igual, o al
menos segundo después de él. Tal honor a confundirse, esta gloria problemas
inesperados; Cae de rodillas, y el amor de la bahía que se le presentó; se niega
una carga demasiado pesada para él, y por lo tanto merece para obligar al
accepter.Tel un joven príncipe que la fortuna llama al trono de los partos y la
herencia de la autoridad parental, dejando a su vida pacífica y segura bajo el
gobierno de un padre se siente en su corazón el temor alegría balanceo. La gran
van a ser fieles, y la gente tema? [8.290] A los cuales él confiará las orillas
del Eufrates y los desfiles del mar Caspio?
Incluso se atreve a tomar el
arco y montar el caballo de su padre; el cetro parecía demasiado pesado en su
brazo, y demasiado amplia diadema en la frente. Thiodamas, ceñidos sus tiras de
cabello y habiendo obtenido el favor de los dioses, los avances en el triunfo
por el campo, en medio de aplausos. Por primera evidencia de su arte, que se
prepara para apaciguar a la Tierra, y este plan no parece inútil para los
griegos afectados. Ordenó la construcción de dos altares con ramas verdes y
hierba alta; [8.300], añade un sinnúmero de flores, dulce presente de la diosa
misma, frutas montones y todos los primeros frutos del año; a continuación,
haciendo en el altar de libaciones de leche pura, que comienza así: "Eterna
Madre de los hombres y los dioses, tú que traer los ríos, los bosques, las
semillas de todos los seres, el barro, piedras Prometeo Pirra, finalmente, todos
los seres; ustedes que han dado a la primera comida, la comida cambiado poco más
suave; thou sobres y las puertas del mar; que alimentó ambos animales pacíficos
y vacas, y salvajes, y aves como para descansar en su seno; en el centro del
universo móvil, [8310] su única base es firme e inmóvil en suspensión en el aire
vacío, se trata de que ese cielo máquina rápida roll y dos tanques que nos
ilumine. Centro del mundo, que no se han distribuido entre tres hermanos
poderosos. Oye lo que! beneficiosa para ambas naciones, por lo que muchas
ciudades, para muchas personas, que por sí sola suficiente a todo el universo;
Apoya usted fácilmente Atlas dobla bajo el peso de las estrellas y las mansiones
celestiales, y que son los que se niegan a usar Sólo nosotros, diosa O, la carga
de la odiosa a usted! ¿Qué crimen hemos cometido sin nuestro conocimiento?
Podría ser porque somos extranjeros y obtenemos los bordes de las Inachus?
[8.320] No ¿No es la tierra de la patria común de los mortales? diosa benéfica,
no ponga entre los pueblos barrera enemigo, como si no fueran dignos de su
menosprecio eso. Sea cual sea el lugar de dónde vienen, dónde están, los hombres
son sus hijos; se mantiene neutral, también cubre los guerreros de ambos
partidos de mama; vamos, te rogamos, que, según la ley de los combates, que
exhalan su espíritu guerrero y que sea al cielo. No toma repente nos dio vida de
nuevo en la tumba; no tengas prisa nuestra muerte. Lo haremos, no hay duda de
que, por el camino que todo el mundo sigue, y que está abierto a todos los
mortales. Digne a ceder a los ruegos de los griegos, fortalecido el terreno
inestable, no da demasiado pronto para Parques del orden fatal. Y usted, querido
profeta de los dioses, que ni la mano del hombre o de la gloria de los tebanos
no han sido muertos, [8.330], pero la naturaleza ha recibido dentro de su medio
abierto, sacudió en sus abrazos, como si quería caerle una placa y sólo por la
guarida de Cirra, ser favorable a nuestros deseos; me da sé, te lo suplico,
oraciones que son agradables a usted; dame el cielo favorable y altares
proféticos, y enséñame lo que has provisto a descubrir el pueblo. Es a usted que
voy a ofrecer sacrificios de adivinación. El protagonista de la divinidad, que
le invocan en ausencia de Febo. Los santuarios de Delos y Cirra son mis ojos
menos poderoso, menos cierto que el lugar dónde lo has escondido. "
Dicho
esto, se sumerge la vida en la tierra de las ovejas y terneras negro colores
oscuros: [8.340] que los cubre con montones de arena tumba vano se levanta en
honor del profeta.
Tal era el cuidado que ocupó los griegos; pero ya, el
lado enemigo, el sonido en pleno auge del clarín guerrero se agitan homicidios
espadas. Desde lo alto de Theumèse, feroz
Tisiphone, sacude su pelo, se suma
a este accidente, y el sonido de la bocina, lo hace más aguda, que se mezcla es
horrible sibilancias. Este tumulto inusual sorprendió Citerón ricos dones de
Baco, y las torres de Tebas, que una vez siguieron más melodiosa. Ya Bellona
golpea umbrales fortificadas, y su lanza puertas qu'ébranle ejecuta en sus
bisagras y abrir un pasaje a los tebanos.
[8,350] se precipita en desorden;
caballos, carros lanzaron el desorden en las filas, detener el impulso de los
guerreros. Parece que los griegos son en su persecución, ambos batallones están
apretados en todas las puertas! Las siete salidas están bloqueadas. Creonte
corrió la puerta Ogygia, que ha caído a él por sorteo; Eteocles de geneidad;
Hemon ocupa un lugar destacado Homoloïde; Hipseo, la Prétidé; Dryas gran cruzó
la Electra; cohortes Eurymedon socavar los Hypsiste y Menoeceus sus muchos
batallones estorba la Dircée. Como el Nilo, cuando alimentó a mediodía las nubes
del cielo y bebió nieve derretida con movimientos largos de Oriente, [8360]
comparte los tesoros de su fuente, y, siete enormes bocas puerta sus tormentosas
olas del mar.
En su enfoque, las Nereidas huyen abismos profundos y miedo a
encontrarse con la dulzura de sus aguas.
Pero los guerreros de la Inachus, y
especialmente las cohortes de Elea, de Esparta y Pilos, avanzan un triste y no
tarde; ya que, privados de sus augurio, siguen Thiodamas, de repente se
convirtió en su líder, y que aún no se ha ganado su confianza. Estos no son sus
únicas bandas, oh príncipe, trípodes que se pierda! Echo de menos todo el
ejército. El penacho de Thiodamas brilla sólo en las filas séptima y de todo lo
que es la más baja. [8.370] Así que cuando una nube celosa ha cubierto una de
las estrellas de la Osa Mayor, el camión parece mutilados; el eje del mundo, que
vio a una de sus luces, no brilla el mismo brillo, y los marineros han
sorprendido el número de estrellas.
Pero la lucha llámame. Vamos de nuevo, O
Calliope! dame fuerza nueva y Apolo no mi lira resonar más machos acuerdos! El
avance destino negro, de acuerdo con la gente, la hora fatal. Breakaway oscuro
Styx, la muerte se apodera del cielo; de las cubiertas de aire de sus alas, y el
campo de batalla, la apertura de una boca enorme negro,, excita los guerreros.
Estos no son los más oscuros que elija, [8380], pero los que, más digno de la
vida, brilla la juventud y coraje; que marca una serpiente con sangre, y ya toda
la tarea de las tres hermanas se comparte entre estos desgraciados, y las Furias
han arrebatado la iniciativa en manos de los Destinos.
De pie en medio de la
llanura es el Dios de las batallas, seca iniciado todavía; A veces se vuelve su
escudo contra éstos, a veces contra ellos; que les lleva a la batalla; que les
hace olvidar hogares, esposas, hijos, y expulsados de sus corazones el amor de
país y de la vida, el último puede tirar adentro. La ira inflamada, tienen sus
manos en las empuñaduras de sus espadas y sus lanzas lista para atacar. Su
corazón saltó jadeos, y golpearon a su armadura. Sus cascos se agitan en el pelo
que se eriza.
[8.390] ¿Quién se sorprende de que la furia guerrera? Los
caballos se encienden ellos mismos contra el enemigo, y espolvorear el polvo de
una espuma blanca. Parece que son un solo cuerpo con sus amos, y que respiran
los guerreros furia que los montan. Ellos tasca el freno, llamando a la lucha de
su relincho, trasera y derramar sus jinetes de lomo.
Combatientes se
precipitan, se levanta el polvo bajo sus pies. Se cruzan igual espacio, y el
intervalo entre disminuye gradualmente. Ya, escudo contra escudo, espada contra
espada, amenazan; Ya el pie presiona el pie y la lanza golpea la lanza. [8.400]
En esta lucha luchadores cuerpo a cuerpo se mezclan sus respiraciones
intercaladas, garcetas se fusionan, y el brillo en los cascos extranjeros. La
guerra es todavía hermoso para ver. Las crestas se mantienen en pie, los correos
no han perdido sus jinetes o tanques de sus conductores. Las armas están en su
lugar; escudos, se estremece, los cinturones todavía brilla, y el oro no está
manchada de sangre.
Pero cuando finalmente fueron Ira desatada y valor
pródigo de la vida, es menos espesa nieve que golpeó el oso antes de acostarse
durante las cabras, alta Rodopi; menos rotundo rotura violenta de Ausonian
sacudido, [8.410] cuando Júpiter sacudió todo el cielo del ruido de los truenos;
más lenta de granizo golpeando golpes presionados Syrtes, cuando el Boreas negro
trae tormentas a Libia desde Italia. El día se oscurece sus líneas, flechas
nubes cubren el cielo; El aire no aprieta lo suficiente como para jabalinas.
Estos mueren golpeados con un golpe de esa mano, los que tienen un accidente
cerebrovascular que vuelve sobre sí misma. Spears, lances'se chocan en el aire,
y otro colchón de sus golpes. Las frondas envían una lluvia de piedras
sibilante; balas de plomo en vuelo rápido, y las flechas formidables, que llevan
una doble muerte, imitan los rayos. No es la tierra de espacio para funciones,
[8.420] que toda la caída de los combatientes: éstos dan muerte sin saberlo, o
caducar bajo los golpes no han proporcionado. El azar ha tomado el lugar de
valor: a veces a la multitud, a veces de antemano, ya su vez perdiendo y ganando
terreno.
Así que cuando Júpiter irritó a los vientos y las tormentas
desatadas, y entregado a su vez al mundo sus torbellinos devastadores, ellos,
como dos ejércitos enfrentados colisionar; a veces el Auster, a veces fiera
Aquilón triunfo, hasta que, en este control turbulenta, uno de los dos ha
derrotado a la otra, y la lluvia inunda el renacer la tierra o la serenidad.
En el comienzo de la lucha hipseo hijo del Asopo, repele batallones OEbalie,
que, orgulloso del glorioso nombre de su nación, [8430] habían roto con sus
pesados escudos, tropas eubéennes. Él los rechaza hacia atrás, y mató a su líder
Menalcas. Este último, por el corazón Spartan, y digno hijo del Eurotas
impetuosa, no deshonrar sus antepasados, y aprovechando la lanza cuando pasó por
el pecho, por lo que no se imprime en su lesión en la espalda vergüenza, que
tira de sus huesos y sus entrañas, y una mano sangrienta morir lanza a su
enemigo. En los ojos de que todavía trazan los valles preciados de Taigeto,
luchas sangrientas y látigos, que aplaudieron su madre.
Amintas de Dircée
dobla su arco contra Phedima hijo de Iasus. O Parcas, sus tomas son rápidos!
[8.440] Ya Phedima cayeron emocionante en el suelo, y el arco de Amintas todavía
resuena. Aprobado Calydonian separa del brazo Fegeo hombro; el brazo cae al
suelo, pero la mano furiosa todavía con la espada, y agitado. Acetes, que
todavía temía ver a su amenazante en medio de los rasgos dispersos, avances, y
golpeando su espada, todos mutilado que es. La feroz Athamas, el cruel y hipseo
Feres caen bajo sus golpes Iphis, Argus y Abas. Los tres han gemido, que sufren
de diversas lesiones; Iphis es golpeado en la garganta, el flanco Argus, Abas
frente. Iphis estaba a caballo, a pie Argus; Abas rode un carro. Dos bordes
paralelos de Inachus sus espadas (O cruel error de lucha!) Dos sangre gemela de
Cadmo, cuyo casco de ocultar su rostro; [8.450], pero, mientras que roban sus
cadáveres, los hermanos perciben su crimen, para buscar consternado y gemido de
su error. Ion, sacerdote de Pisa, cayó de su caballo aterrado Daphne, Cirra
cura. Júpiter el cielo aplaude el de arriba, y Apolo se quejó otra, pero era
demasiado tarde. De uno y otro lado, la fortuna muestra dos grandes guerreros
que cubren la sangre de sus enemigos. Hemon invierte los griegos, y la caza con
furia ante él. Tideo persigue los batallones tebanos; Pallas es que cumpla con
cualquiera de su ardor, y el otro es dirigido por el dios de Tirinto.
[8.460] Estos dos stormy rivers se precipitan desde lo alto de una montaña y
caen tanto en la llanura. Se podría pensar que luchan para resultante de la
cosecha, los árboles, y cubrir las olas más altas de puentes; pero aquí que el
mismo valle recibe y confunde sus olas; en su orgullo que todavía quieren montar
por separado y se niegan a descender mezclados entre sí en el océano.
Idas
de Oncheste entró, agitando en medio enemigos una antorcha humeante y se llevó
el trastorno en los batallones griegas, donde tiene su lado pasa la llama. La
lanza de Tideo la cruel alcanzado y robado su casco. [8.470] Se cae, y su gran
vuelta cubre la tierra; Lanza permanece insertada en la frente, y la antorcha
golpea las sienes. Entonces Tideo grita: "No acuse Argos crueldad de Tebas! Le
damos la estaca, la quema de fuego que ha encendido! "
Entonces, como un
tigre, atraídos por la sangre se trata de gustos, la quema de tirar toda la
manada; Tideo y tonos de piedra Aon, perfora su espada Pholus, Chromis, y su
lanza tanto Hélicaons, una sacerdotisa de Venus, Mera, había dado a luz, a pesar
de la defensa de la diosa. Ambos, por desgracia! usted es la presa de Tideo
sangrienta, aunque ahora incluso su madre besos para ti altares insensibles.
[8.480] No menos impetuosa, Hemon, el favorito de Hércules; corta aquí y allá,
sediento de sangre; se eleva, armado con su espada insaciable, a las olas
impacientes de combatientes, golpeando defensores veces belicosos excelente
Calidón, ahora los feroces batallones Pylene, a veces triste, hijo de Pleurón.
Finalmente, cansado de blandiendo su lanza, se encuentra con un Olénie terco, y
el ataque en el momento, se dirigió a sus soldados, que se oponía a su vuelo. Se
trata de un niño cuya barbilla está desnudo, incluyendo el hierro nunca se tocó
el pelo; se proporciona ningún peligro cuando el hacha de Tebas se abrió con
fuerza, golpeando el casco; la cabeza se comparte y separar el cabello cae sobre
sus hombros. [8.490] La muerte le sobrevino de repente, y su alma se escapa de
su pecho. El rubio Hypanis el rubio Polites (uno dedicado su barba de Febo, el
otro el pelo a Baco, pero estos dos dioses tienen piedad de ellos), y Hypérénore
Dámaso a su vez caen bajo los golpes Tideo. Dámaso tomó vuelo cuando alcanzado
por la lanza del enemigo, que, penetrando entre los hombros, a través de su
pecho y se quitó el escudo, se necesita salir, unido a hierro aguda.
Hemon
el derrocamiento Ismenian todavía muchos hijos de Inachus (como Hércules dirige
sus características y apoya a sus fuerzas), [8500], si Pallas le habría empujado
contra la terrible Tideo. Ya que se mueven, protegido por dos deidades rivales;
pero el dios de los primeros en abordar Tirynth Pallas estas palabras pacíficos:
"O mi hermana fiel, ¿qué posibilidades en medio de la espesa scrum y nos expone
el uno al otro? ¿Es esta la excelente Juno que diseñó esta lucha impía? Más bien
me ven valiente el rayo de Júpiter con una audacia sacrílega, y pelea en mi
formidable padre. Hemon es un origen ....; pero no voy a hablar de ello, ya que
tiene la parte contraria. No, incluso cuando la lanza de tu Tideo, que proteja,
amenazar o hyllus Amphitryon moradas ingresos de Styx, recuerdo, siempre me
acuerdo [8.510] ¿cuántas veces esta mano divina, el paraguas estaba cansada de
me lorsqu'asservi a crueles pruebas, caminé toda la tierra a sí mismo, por
desgracia! que me han acompañado al Tártaro inalcanzable si los dioses podían
pasar Acheron. Es a usted que tengo y para mi padre, y mi regreso al cielo.
¿Cómo reconocer por lo bien hecho?
Tebas, si quieres destruirlo, es
enteramente suya; Yo te abandoné, y le ruego que me perdones. "
Dijo y se
retiró. Este homenaje alivia Pallas su cara brillando con furia marciales, tomó
su dulzura habitual, y delante de sus serpientes del pecho ya no están en
peligro su cabeza.
El Cadméen Hemon siente que el dios se alejó. [8.520] Ya
no blande sus características con la misma fuerza y ya no reconoce su brazo en
hits de esa puerta. Su fuerza, su coraje abandonar el cultivo, y él no se
avergüenza de retirarse. Al ver esto, los antecedentes Tideo en él, y, lanzando
una jabalina que sólo él puede correr, corre a donde la punta del escudo toca la
punta del casco y revela la garganta; su mano no se volvían perdido.; La lanza
era la muerte, pero Pallas lo contrario: sólo se permite que toque el hombro
izquierdo del guerrero, y le agradece su hermano. Hemon sin embargo se atreve ni
a pie ni para avanzar a la batalla, [8530] o apoyar el aspecto de Tideo con
sangre; sus fuerzas se debilitan, y la confianza no está en su corazón. Como un
jabato Lucania golpeó en la frente con un dardo, que, engañando a la mano del
cazador, no ha penetrado en el cerebro, lo comprime su furia y no se atreven a
enfrentar el arma mortal.
Pero ahora el hijo de Eneo impetuosa ver un líder
de la caballería tebana Prothoüs cuyo brazo feliz lanzamientos en torno a él
siempre seguro de accidentes cerebrovasculares. Él se indigna ante la vista, e
incluso jabalina perfora tanto el caballo y el jinete; [8.540] se caen y ruedan
una sobre la otra, y al mismo tiempo tratando de recuperar Prothoüs riendas de
fuga de las manos, la multitud aplastados caballo y el casco en la cara del
jinete y el escudo en el pecho hasta 'esta última, exhausto, se rechaza el freno
con las últimas oleadas de sangre, y cae la cabeza apoyada en su amo. Por lo
tanto un olmo y la vid que abarca toda la caída del montaje Gaurus; el
agricultor lamenta esta doble pérdida, pero incluso más triste de abulón se
arrepiente de su doble follaje, y menos lamenta la pérdida de sus ramas que las
uvas aplastadas en la caída que lui.Chorèbe pesar de Helicon, había tomado armas
contra los griegos. Una vez fue el compañero de las Musas, y Urania, iniciado en
los misterios de la laguna Estigia, [8550] le tenían a sí misma, después de
observar las estrellas, hace mucho tiempo que anunció la muerte menaçait.Mais
que no se quema menos volar a los brazos de cantar probablemente luchando y
guerreros; Ahora que está mintiendo en el polvo, dignos él mismo canciones
inmortales; pero está en silencio doloroso duelo por las musas de su muerte.
Prometió desde la infancia, una princesa de la sangre de Agenor, el joven
Ismene, Atis entró en la refriega. A pesar de que Cirra a otro, no hubiera sido
por los tebanos una ayuda exterior, porque los crímenes de este triste familia
habían sido capaces de desviar a unirse a ella en una alianza. Su dolor casto,
luto inmerecida su amante le hizo aún más caro a su corazón; fue hermoso en sí,
y el joven virgen compartió su amor. [8.560] Si la fortuna no se opuso a ella,
había un matrimonio feliz que los unió; pero la guerra no permite a la luz de
las antorchas; esto es lo que aún inflama el odio contra los enemigos: el joven
guerrero se precipitó en la primera fila, y, a veces a pie, que recoge sus
batallones espada incansables de Lerna, a veces de pie en su carro, a las
riendas mano, conduce delante de él, parece que luchar bajo los ojos de Ismene.
Su madre había puesto sus hombros y el pecho blanco más fino de color púrpura;
ella persiguió su collar de oro, flechas, su cinturón, sus brazaletes, que para
mostrarse digno de su joven esposa. Su cresta también brillaba con el brillo del
oro. ¡Ay! confianza en la riqueza de su armadura, se atreve provocar a los
griegos en la batalla. [8.570] En primer lugar sólo atacar a los enemigos
débiles, y ganar sin riesgo se refiere a sus compañeros de las armas que acaba
de conquistar: la carnicería completa, en voz baja se retiró en medio de los
suyos. Al igual que en los bosques de Hircania, un león del Mar Caspio, pero
impotente, cuyo cuello aún no está listo para una terrible melena, que hasta la
fecha no se ha contaminado con sangre noble, relojes cerca de su guarida un
pequeño rebaño, antecedentes sobre él cuando el pastor de distancia, y satisface
su hambre en una oferta ovejas.
Pronto Atis se atreve a atacar a Tideo a sí
mismo, que no conoce el valor, y se mide su tamaño por sí solo. Hace que su
frágil espada que vemos constantemente, terrible, amenazan entre sí o continuar.
[8580] se convierte accidentalmente ojos Tideo a su débil enemigo, y con una
sonrisa aterradora: "Puedo ver que, infeliz; desea ilustras por una muerte
hermosa. "Él dijo, y no juzgar este joven imprudente digno de su espada o lanza,
él abre los dedos y lo deja caer en una lanza sin fuerzas; Sin embargo, la línea
penetra hasta el fondo de sus entrañas, como si hubiera sido lanzado con gran
fuerza. El hijo de Eneo pasa a su víctima moribunda, se burla de sus restos,
"No, no me ofrezco a ti, Marte, dijo, ni a ti, guerrera Pallas! [8,590] Me
sonrojo al desgaste. Difícilmente, si Deifila había dejado su palacio para que
me acompañe en esta guerra, apenas se atreven lo ofrezco a él como un juguete.
"Dijo, y el valor conduce a mayores hazañas. Como un león, llena de sangre,
pierde de novillos, vaquillas tierna, se quema para bañarse en la sangre de una
presa más noble; que es el poderoso rey de un rebaño que él quiere doblar la
parte delantera excelente.
Pero los gritos de Atis cayeron bajo el golpe
mortal golpeado oído Menoeceus. Amplía sus caballos, y sube de su tanque rápido.
Los jóvenes Tegea apretado alrededor del cadáver, [8600] y los tebanos
ninguna resistencia, "La culpa es tuya, raza Cadmo, la descendencia degenerada
del hijo de la Tierra! Cobardes, en el que correr lejos, grita él? Es este el
entierro apropiado del que la derramó su sangre por nosotros, nuestro anfitrión
Atys? Todavía era sólo nuestro anfitrión, y se armó para la causa de una chica
que no era su esposa; y nosotros, traicionamos compromisos tan caro! "
A
estas palabras, los tebanos revividos por un sólo sentido de la vergüenza, se
están recuperando amenaza; la memoria de los seres queridos que se despertó en
sus corazones. Sin embargo, retirado en la parte inferior de sus palacios, niñas
inocentes de la desafortunada Edipo, dos hermanas muy diferentes de sus hermanos
se mezclan con sus conversaciones de gemidos dolorosos. [8.610] Desviar sus
pensamientos de los males presentes, que se remontan a la misma fuente de sus
desgracias; recuerdan, una de las himen de su madre, la otra Edipo privado de la
luz del día; teniendo en cuenta tanto la guerra; crueles vacilación suspende sus
oraciones y votos; Se estremecen en los dos adversarios; saben que desean
derrotar o la victoria, pero el exilio ha recibido en sus corazones.
Así que
cuando las hijas aladas de Pandion retorno a su leal y asilos, donde las
pensiones ha impulsado el invierno, que están por encima de sus nidos, que
vuelven a contar sus antiguos sus desgracias; [8.620] creen que hablan, mientras
que escucharon un murmullo triste y intercalados; pero su queja es tan expresivo
como sería hablar.
Finalmente, después de muchas lágrimas y un largo
silencio Ismene de nuevo diciendo: "¿Qué es este
error común de los mortales
y esto vana creencia de que el día antes de un dolor en el resto de la noche, y
que, durante el sueño, los fantasmas están realmente presentes en nuestra mente?
Yo, que nunca se había atrevido incluso en la tranquilidad de la paz profunda,
inquietante pensamiento en la cama de matrimonio; Esta noche, me da vergüenza,
mi hermana, vi celebrando mi himen. Sleep (de ahí la ilusión?) Me ofreció la
imagen de un marido que apenas conozco. Una vez, en el palacio, [8.630] Lo miré
a pesar de mí mismo, cuando, por alguna desconocida Acuerdo, que comprometidos
el uno al otro. De repente me pareció ver el sacrificio con problemas, las luces
se encienden, la madre furiosa después de mí, derramada por mí Atis voz alta.
Qué desgracia desconocida anunciar estos presagios? No tengo nada que temer, sin
embargo, siempre y cuando nuestra familia está a salvo del peligro, el soldado
Dorian distancia, y que se nos permita conciliar nuestros hermanos de ira. "
Tal fue su encuentro, cuando de repente el palacio, tranquila hasta entonces oyó
un tumulto espantoso. Se dice que el cuerpo de Atis, arrancado dolorosamente de
las manos del enemigo, y, agotado de sangre, todavía conserva un resto de la
vida; su mano está en su lesión; [8.640] lánguidamente su cabeza cae fuera del
escudo, y el trastorno de pelo son barridos hacia atrás.
Yocasta, la
primera, ve, y con voz temblorosa que ella llama a su amada Ismene; porque es
sólo a través de la voz qu'implore morir de su hijo, el único nombre que vaga
por los labios fríos. Las mujeres lanzan gritos de desesperación; doncella 1a se
llevó las manos a herir la cara, pero la modestia severa sostiene.
Sin
embargo, ella es forzada a moverse; Jocasta otorga este último para el guerrero
que vence; se le muestra, le presenta Ismene.
En este nombre de cuatro veces
que entreabre sus ojos apagados y no levanta su mente. [8.650] Es el único que
se ve, indiferente a la luz del cielo, y que no satisface contemplar su rostro
amado. Ya que no tiene madre cerca de él, y que su padre descansa en la paz de
la tumba, que es a su prometida que confiamos triste deber de cerrar los ojos.
Entonces, finalmente, cuando ella no tiene testigos, se da rienda suelta a sus
suaves gemidos y lágrimas bañaba el rostro de su amante.
Durante la escena
del duelo en los muros de Tebas, la ardiente Enyo, agitando otras serpientes y
una nueva antorcha, revive la guerra. Se piensa única arma, como si acabábamos
de dar el primer golpe y que las espadas siguen brillando.
Por encima de
todo brilla el hijo de Eneo, [8.660], aunque Parthenopaeus lanza a asegurar sus
flechas disparadas, qu'Hippomédon moler la cara de los moribundos bajo los pies
de su caballo furioso, y la lanza vuela Capaneo lejos a través de los batallones
de Tebas, y lo hace sólo reconocen también.
Este día es uno de Tideo.
Huyeron ante su proximidad, temblamos ante el sonido de su voz: "¿Dónde te
escapas, llora él? Ahora es el momento de vengar a sus compañeros caídos y
cobrarme esa noche que estabas tan fatal. Es a mí a quien regando carnicería,
sólo han arrebatado su vida cincuenta guerreros; juntos igual número, sin
embargo, todos vienen a la vez de atacarme. Oye lo que! han dejado que ni los
padres ni hermanos vengarlas? ¿Qué es esto suelta olvidar su dolor? [8.670] ¡Qué
pena que me vaya; regreso triunfal a Micenas. Son estos defensores de Tebas, los
partidarios del rey? ¿Y dónde está el rey mismo, este rey tan valiente? "Al
mismo tiempo que ve en la banda izquierda exhortando a sus tropas, la cara
resplandeciente de la brillantez de la tiara. De repente, la espalda, no más
lento que el pájaro que lleva la llama cuando se precipita cisne con plumas
blancas, y se abraza a temblar en la inmensa sombra de sus alas. La primera
exclama: "oh la más hermosa de los reyes Aonie, vamos a luchar abiertamente y,
finalmente, mostrar nuestras espadas? o te gusta mejor esperar la noche y la
oscuridad dónde me gustan? "
[8680] Eteocles está en silencio, pero sus
silbidos de proa y envía Tideo su respuesta. El héroe ve el rasgo que lo
amenaza, y lejos cuando llegará. Mientras que agarrar a sí mismo un enorme
jabalina, se pone en marcha con una fuerza desconocida hasta entonces. hierro
homicidio pondría fin a la guerra; los dioses protectores de los griegos y los
tebanos después de la mirada, pero la cruel Erinnys no lo permite. Se reserva
Eteocles con su hermano sacrilegio. La jabalina secuestrado golpeará el escudero
Phlegyas. Una terrible lucha entonces se acopla; más furioso porque el etolio
precipitó espada en la mano, [8690] y los batallones de Tebas cubrir la retirada
de su rey. Por lo tanto, en una noche oscura, cuando un lobo tomó un novillo, un
gran tropa de pastores se esfuerza por hacer que se deje caer su presa; pero
furiosa que está en contra de ella, y sin pensar en atacar a sus nuevos
enemigos, sino contra el toro, el toro sólo él primero agredido, que convierte
toda su rabia. Del mismo modo estos batallones están expuestos a los golpes, la
multitud vulgar, Tideo desprecia. Su brazo, simplemente se abre un pasaje. Sin
embargo perfora Toas en la cara, pecho Déilochus, flanquean Clonius, los
intestinos feroz Hippotade. Se refirió a los miembros que llamó la atención, y
volando en los cascos de aire con las cabezas de los guerreros. [8.700] Ya había
hecho una muralla de cadáveres y restos; tubos de escape solo los esfuerzos de
todo el ejército, sólo él es el objetivo que se quiere lograr todas las
características. Algunos cepillo contra su cuerpo, otros caen sin fuerza, otros
están desgarrados por Pallas; el mayor número de cerdas escudo, que, rasgos
cubiertos, sacudiendo un bosque de hierro. En la espalda y los hombros ceder los
restos de jabalí, este adorno de la familia; su cresta desapareció en marzo de
superación de su casco cayó; augurio tristes para el héroe! de efecto
invernadero desnuda de cerca las sienes latón, [8.710] y en todas partes barrios
roca golpeó la cabeza y el sonido mediante la renovación de sus armas. Ya su
sangrienta casco y un torrente negro del sudor y la sangre se mezclaba inundó su
pecho herido. Él mira hacia atrás y ve a sus compañeros que exhortar y fidèle
Pallas que se aparta en cubrir sus ojos con su escudo. Ella flexionar sus
lágrimas el poderoso Júpiter.
De repente una lanza divide el aire, llevando
consigo una inmensa rabia y la fortuna de la lucha. No vemos el brazo que puso
en marcha; que era hijo de Ménalippe Astaco. No se presenta a sí mismo, que
quería ocultar; [8,720], pero los aplausos de los alegres Thebans designar
temblando de la vista. Tideo se logra: girando la cabeza, se había quitado el
escudo y la izquierda su flanco expuesto. Para los aplausos de los tebanos
griegos respondieron con gritos de dolor. Se precipitan a devantdes-tiros, y ver
el héroe que, furioso, mirando fuera de los ojos a través de la multitud hijo
atroz de Astaco. Entonces, llamando a toda su fuerza restante, lanzó una
característica que lo muestra Hopléus coloca cerca de él.
La sangre sale a
borbotones, agotado por este último esfuerzo. Sin embargo, tal es su ardor de
fuego, que quiere pelear de nuevo. Le pide jabalinas; Ya, a la sombra de la
muerte, luchó contra ella; Win [8.730] amigos lágrimas en los ojos, lo depositan
a los pies de la colina, dos escudos que apoyan sus miembros morosos, y prometer
que llora que pronto volverá al combate.
Pero el héroe se da cuenta de que
el cielo se está eludiendo su aspecto; se siente debilitar su gran corazón, frío
como el hielo de la muerte; y la construcción en la tierra
"Ten piedad de
mí, oh griegos! -exclamó-. No pido mis huesos son reportados a Argos o en mis
dioses de la casa de Etolia; Yo sólo se preocupan por mi funeral, odio estos
miembros, cuerpo frágil que traicionó mi valor; pero la cabeza, la cabeza de mi
enemigo! [8.740] Oh si alguien me trajo su cabeza, Ménalippe! mientras rueda en
el polvo, no tengo ninguna duda; el último esfuerzo de mi brazo no será un
error. Voy, os lo ruego, si la sangre de Atreo nunca se ha fluido en sus venas,
hipomedón, ir, joven Arcadia, ilustrado por sus primeras batallas, y que
Capaneo, el más valiente del ejército de los griegos! "
Todo fueron
trasladados; pero Capaneo se eleva el primero, en primer lugar se encuentra el
hijo de Astaco, tendido en el polvo. Se plantea la respiración de nuevo, y se
impone por encima del hombro izquierdo, que se sonrojó herida de la sangre
volvió a abrir en cada sacudida.
A medida que el dios de Tirinto volvió a la
guarida de Arcadia, [8750] tomar, ante los aplausos de los argivos, jabalí que
había tomado.
Tideo se eleva, y su mirada volar a conocer a su enemigo; que ve con transportes
de alegría y furia esa boca que suena, los ojos están cerrados, y reconoce en
este expirant.Il órdenes guerreras que cortan la cabeza y lo lleva a él; lo
lleva en su mano izquierda, y contempla con alegría feroz estos ojos salvajes,
que la muerte aún no ha rendido inmóvil.
El desafortunado fue satisfecho; la
implacable Tisiphone requiere más. Ya Pallas devuelto sin ser capaz de flexionar
su padre, pero con lo que los honores de héroe de la inmortalidad. [8.760] Ella
ve todo cubierto con la sangre de la cabeza cortada, manchando sus labios y una
sangre caliente de nuevo. Sus compañeros no podían arrebatar su presa. Al ver
esta terrible Gorgona eriza el pelo, las serpientes de pie y el velo de la cara
de la diosa. Ella huye en este espectáculo, y encajará en Olympus después de
haber purificado su mirada hacia el fuego de una lámpara misteriosa y en las
aguas claras de la Iliso.
LIBRO IX
El Tideo rabia de sangre se encuentra con la furia y la indignación Thebans.
Para los propios griegos, lamentaba su pérdida es debilitada; condenan y
deploran que ha superado los derechos odio. Ti mismo, oh Marte, oh dioses más
implacables, de qu'acharné actualmente en el trabajo de carnicería, indignado
dijo de tal ferocidad, que détournas ojos e hizo su turno caballos
aterrorizados. Además, para vengar el cadáver Ménalippe profanado por la
picadura de un atroz, la juventud cadméenne agitado con la misma furia que si
los huesos de sus padres se habían molestado en sus tumbas, y sus cenizas
arrojadas a monstruos crueles. El rey mismo enciende sus guerreros: "¿Es todavía
un único griego que se puede acceder a la piedad y lleva un corazón humano? O
furia! ¿Se han satisfecho al punto sus armas de la sangre, que debemos romper
con sus dientes aún miembros calientes! No ¿No parece que hacer guerra contra
los tigres Hircanio? caminas contra los leones feroces de Libia? Y ahora, este
es el guerrero que, tendido en el suelo, conteniendo la respiración la cabeza de
su enemigo. O gloriosa consuelo de la muerte! muere feliz de mancillar su sangre
sacrílega labios! Menos cruel, luchamos, nosotros, con espadas, con antorchas;
con el odio solo; su ferocidad no necesita más armas. O más grande de los
dioses! se ve que se destacan en este arranque de ira, y disfrutar de la luz del
día! Es cierto que se quejan de que la tierra abierta; gimen de ver huir bajo
sus pies ... la misma tierra que han nacido por lo que iba a poner? "Dijo, y
estas palabras a aumentar el calor y cocine a fuego lento soldados. La misma
furia que los impulsa todo se queme a apoderarse de los cuerpos y restos de la
Tideo odiaba. Tal oscurecer el aire con sus apretadas filas estas aves impuras
que los vientos han sacado los gases fétidos y el olor de los cadáveres sin
enterrar la izquierda: Carnage codiciosos, se lanzan con gritos agudos; aire
resonaba con el latido de sus alas, y otras aves más pequeñas, abandonan el
cielo. El vagabundo fama atraviesa la llanura y se propaga el sonido en todos
los rangos: su vuelo no es más rápido que cuando se anunció la desgracia. Pronto
se lleva la noticia a él que es el más temido, se tira de las orejas inciertos
de Polinices él permanece aturdido; lágrimas listo para fluir parada; vacila
para creer tal desgracia. El valor conocido del hijo de Eneo es a la vez un
patrón que lo convence y le prohíbe a creer que estaba muerto. Pero pronto un
testigo irreprochable había confirmado que lo que la pérdida, una nube oscura
velado sus ojos y su razón, su sangre se congeló, sus miembros cayeron
impotentes y dejar los brazos. Su casco estaba mojado por las lágrimas, y sus
diapositivas protector sobre sus botas: Este tristemente antelación, teniendo
apenas mantenerse a sí mismos, arrastrando tras de sí la lanza, como si lastrada
por mil heridas, había agotado su fuerza. Sus compañeros argumentan, y muestran
gemir, el cuerpo de Tideo. Al ver esto, él lanza sus brazos que llevaba con
dificultad; Se precipita sobre el cuerpo sin vida de su noble amigo y derramó
lágrimas con estas tristes palabras: "Así que mis gracias a ti, oh Tideo! más
firme apoyo a mi causa!
9.50] que es el precio que pagó digna Me! Su cuerpo
ha quedado tendido en la tierra odiosa de Cadmo, y vivo! Ah! es ahora que estoy
en el exilio, desterrado para siempre, ya que he perdido, infeliz de mí! otro
hermano, mejor que el que me dio la clase. No, reclamo sobre los antiguos
derechos de destino que yo quería, y este anillo criminal que ha ensuciado
perjurio. ¿Me compró una alegría tan caro, un cetro que no iba a recibir de tu
mano? Vamos, guerreros, déjame en paz con mi hermano Bárbaro: No hay necesidad
de probar la suerte de la guerra, para pagar innecesariamente mucha sangre; ir,
se lo ruego. ¿Cuánto más valiosa puede todavía me ofrecen? Perdí Tideo. Por lo
que la muerte expiar mi culpa? O Adraste! O Argos! O disputa feliz que nos puso
con armas en la mano, en la noche cuando vimos por primera vez! O la ira tan
rápidamente extinguido, lo que garantiza una larga amistad! ¿Por qué la espada,
oh valiente Tideo (ya que podría, a continuación) ¿Ella no muerto en el umbral
de Adrasto? ¿Qué estoy diciendo? esa es la palabra que tenga a bien sentirse
como en Tebas en el palacio impía de mi hermano, de la que nadie más que usted
sería el ingreso; como si fueras a preguntarse honra cetro. Ya fama no habló de
la Telamón pía o Teseo. Aquí tumbado en el polvo a un héroe que les igualó. La
cual uno de sus heridas me atrevo a mirar primero? ¿Cómo distinguir la sangre de
la del enemigo? ¿Cómo él no toma batallones, el número de falanges incontables,
para derrocar usted? Si no me equivoco, su propio padre era celoso de su valor;
Marzo se golpeó con todo el peso de su lanza. "Dijo, y bañado en lágrimas
amargas la cara sangrienta del héroe; y, poniendo la mano sobre su cuerpo, "Oye
lo que! -exclamó él, que llevaba mis enemigos este odio implacable, y me va a
sobrevivir! "En su perplejidad, que había sacado su espada y se volvió contra su
pecho. Sus compañeros se detienen, Adrasto se reanuda con suavidad, y le
recuerda la oportunidad y la suerte de los combates, se consuela, tranquilo y
alejado gradualmente de estos restos preciados, causándole dolor y la luz en su
corazón el deseo de la muerte; mientras habla con él, se da sin la espada forma
en la vaina. Que conlleva. un toro de inactividad tal, que perdió el compañero
de sus trabajos, abandonados en medio del campo surco a medio terminar y permite
que el cabezal de la unidad hacia abajo, arrastrando una parte de la culata,
mientras que el obrero es compatible con el llanto otra.
De repente, la voz
de Eteocles que los guía, se precipita una banda elegida de jóvenes guerreros
contra la que ni Pallas ni Marte han desdeñado para competir en combate.
Hipomedón, apretada contra el pecho el escudo, la lanza, manteniéndose firmes
delante. Como una roca maltratadas por las olas y las tormentas valientes del
cielo, y la ira del mar rompiendo a sus pies. Se quedó inmóvil en medio de todas
estas amenazas; el propio océano temía sus flancos erizados y el medio del mar,
los barcos reconocer el horror. Así que la primera Eteocles, armándose con una
enorme lanza, "¿No tienes vergüenza, si llora, defender en presencia de los
dioses, en la cara del cielo, estas crines impíos, que el cadáver que deshonra a
la guerra? Oh! el precio digno de su trabajo, la gloriosa hazaña para enterrar
esta bestia! traerla de vuelta a Argos, [9100] para él para conseguir las
lágrimas funerales solemnes, y él rechaza el féretro lo horrible de la sangre
que estaba empapado! Que haya cuidadosamente. Ni los monstruos presa ni impíos,
o incluso las llamas sagrados de la pira, no devorar sus restos, si se entregó a
ellos. "Él no dijo que las palabras y la lanza contra hipomedón su larga
jabalina, que se detuvo por la dureza de latón, sin embargo, el travesaño, y se
fija en el segundo círculo del escudo. Feres y hervir Lico siguen su ejemplo. La
línea de Pherae devuelve sin fuerza; Lico toca el casco coronado una gran garza:
cortar por la punta del dardo, el grito-Niere sale volando, y el auricular
aparece despojado de su ornamento. El héroe no da marcha atrás, que no se
precipitó a conocer rasgos; pero firme al mismo lugar, se enfrenta a sus
enemigos, va hacia adelante, se pliega, y nunca se rinde a su ardor. Para
movimientos rápidos, que protege el cuerpo de su amigo, y sin permiso, a veces
revolotea a su alrededor, a veces la portada de su escudo. Con menos novilla
ardor, se convirtió en madre por primera vez, defiende contra la furia de
infantil baja de un lobo y paseos por sus cuernos amenazantes; sin miedo por sí
misma, olvidando su debilidad, sedimento y los imita las vaquillas tímida los
toros más feroces.
Finalmente rasgos cesar un momento de la lluvia sobre él,
y él a su vez envía los lanzamos ella; porque Sición Alcon, Idas y la luz,
seguido por sus cohortes de Pisa, se había precipitado en su ayuda y tenía la
frente al enemigo. Con el apoyo de ellos, se lanzó contra los tebanos una enorme
jabalina Lerna; la lanza mano tan rápido en su vuelo de la flecha, y,
encontrándose con obstáculos, Polites cruza a través de la parte media del
cuerpo y penetra en el escudo de la desafortunada Mopsus colocado cerca de él.
Hipomedón sacrifica luego Cydon Phocaea, Falante Tanagra, cuando Erice, sin
esperar el golpe fatal, volvió la cabeza para pedir características. Un golpe en
el cuello por detrás, se sorprendió, muriendo, sintiendo en la garganta un rasgo
que no ha recibido en la boca; susurra, y sangre brotando cubre el conjunto.
Su salto dientes, impulsada por la punta de la lanza. Léontée, escondido detrás
de las armas de los combatientes se había atrevido furtivos manos yacía en el
cadáver, que condujo por el cabello. Hipomedón visto, y aunque todas partes la
amenaza hierro la cabeza, se derribó el filo de su espada esta negrita mano; al
mismo tiempo que el apóstrofe: "Es Tideo, el propio Tideo que deleita a su lado;
ahora temen los restos de guerreros que han completado su destino; cuidado,
infeliz, tocando sus ilustres crines. "Tres veces las falanges cadméennes causan
terribles cadáver, tres veces los griegos los lacrimógeno. Como un barco en las
olas del mar de Sicilia se rebelaron, vaga al azar a pesar de los esfuerzos del
conductor, y, obedeciendo las vueltas velo, siempre vuelve a sus propios surcos.
Todos los guerreros de Tebas no podían tener de vuelta hipomedón; el choque
de las máquinas de guerra habría sacudido, y la más terrible masa lanzada desde
las torres había sido impotente contra su escudo. Pero la cruel Tisiphone, que
recuerda a las órdenes del rey de Elysium y no ha olvidado los crímenes de
Tideo, hábilmente deslizó en medio del campo de batalla.
[9.150] Los
combatientes se sienten el efecto de su presencia: un repentino escalofrío corta
en caballos miembros y guerreros, a pesar de que había entregado su exterior
menos terrible en forma de griego Halys. Ella no tiene ni sus crueles incendios
ni sus látigos, serpientes de su pelo, obediente a sus órdenes interrumpió sus
silbatos; que lleva las armas, y vino junto al lado de la feroz hipomedón. Su
voz y sus ojos están llenos de dulzura; Sin embargo, el héroe tiene miedo de su
rostro y se sorprendió a sí mismo del susto. Las lágrimas en los ojos, dijo: "Oh
ilustre guerrero, mientras se protege innecesariamente por los restos sin vida
de nuestros compañeros y sus cuerpos insepultos (lo que el miedo es nuestra
preocupación cómo vano la tumba nos sacudido?); Adrastus mismo, sorprendido por
una banda de tebanos es conducido prisionero, y tú antes que cualquier otro, que
se invoca el gesto y la voz. ¡Ay! Lo vi caer en la sangre; Vi su pelo blanco
despojado de su corona en pedazos. No mirar a lo lejos, vuelve los ojos a este
grupo de combatientes, donde se levanta el polvo grueso. "El héroe, incierto, se
detiene por un momento compartido entre dos miedos iguales. La cruel virgen a la
prensa: "¿Por qué dudar? ejecute: Qué! estas crines insensibles sostendrían que?
Ella tiene la vida de Adrasto menos valor para usted? "A estas palabras
hipomedón dice a sus compañeros su triste tarea y lucha su apoyo a la misma.
Abandona su fiel amigo, pero no sin volver de nuevo y listo para saltar de
nuevo, si su compañero le recuerdan. Entonces se sigue las huellas confusas la
diosa feroz; que en vano lado a lado corto, y se pasea sobre sus pasos.
Finalmente Euménides crueles, lanzando su escudo desaparece en sus ojos y gotas
levantó su casco por un sinnúmero de serpientes.
La nube se ha disipado, y
la desafortunada hipomedón ve a los griegos, que ningún peligro amenaza; Adrasto
se monta en silencio su carro. Ya los tebanos se apoderaron del cadáver, sus
aplausos ya dan fe de su alegría: los gritos de victoria y la mosca de sonido en
los oídos, llenan su corazón de dolor profundo. O cruel poder del destino! aquí
se entrenó en la tierra del enemigo, incluso Tideo que una vez persiguió a los
batallones de Tebas, y si él luchó a pie, si secouât las riendas de rodadura de
su coche, abrió todo un amplio pasaje. Él tiene más armas en las manos; caer los
brazos lánguidamente; el héroe despojado el ardor de su valor. Lo que es un
placer para los tebanos impunemente golpeó estas características contratados por
la muerte, esa horrible cara! Todos tienen el mismo deseo; todo, cobarde y
valiente, quiero ilustrar sus brazos; mantienen sus rostros empapados en su
sangre, para mostrarles a sus mujeres y sus hijos pequeños.
Por lo tanto,
cuando un león que estaba asolando el campo de Mauritania, y ha sostenido
durante mucho tiempo rebaños y pastores cautivos al despertar, finalmente
sucumbió a manos de cazadores cuya defensa ha agotado las fuerzas, da la
bienvenida a la aldea de la trabajadores acuden a grandes voces; desgarran su
melena; abren su enorme boca; que conceden sus restos en la cima de un templo, o
suspendidos como un trofeo en una época de madera, y les gusta decir a todo el
mal que ha hecho a ellos. La feroz hipomedón ahora se da cuenta de que toda
ayuda es inútil, y es demasiado tarde para tratar de tirarse cuerpo de su amigo.
Sin embargo, él se apresura, y sin que nada lo puede parar, que revolotean
alrededor de su espada rayo. Ya no distinguir amigos ni enemigos, si cualquier
obstáculo se opone a su paso;
[9.200] y poco contaminada por este nuevo
derramamiento de sangre, la tierra se desliza sus pies. Armas, guerreros vencen,
tanques rotos avergüenzan a la marcha, siendo frenada por la lesión que la lanza
rey tebano hizo a él en el muslo izquierdo, que había escondido en el fragor de
la batalla, y luego que no había sentido. Finalmente ve Hoplée abrumado por el
dolor, Hoplée, el compañero fiel de la gran Tideo, y una vez, pero en vano, su
escudero. Llevó a su caballo, quien, con la cabeza, no sabía el destino de su
maestro, pero se estremeció indignado de su inacción. Hipomedón lo atrapó y,
saltos más arriesgados con él contra la infantería tebana; el caballo se
encabrita y se niega a llevar un peso inusual; porque desde sus primeros años,
domesticados por Tideo, que sólo había obedecido a su lado. Héroe frente a estas
palabras para él: "¿Por qué se niegan a obedecer a los nuevos pedidos, caballo
infeliz? Usted no sentirá el peso tan dulce a tu gran maestro; no verá de nuevo
los verdes pastos de Etolia o las orillas del Aqueloo, donde sacudiendo su
melena con orgullo. Se le queda para vengar las crines de los héroes queridos, o
para seguirlos. Ir a continuación, y no se lamentan su sombra exiliado caer en
manos del enemigo.
¿Le, después de llevar a Tideo, convertido en el marco de
un jinete orgulloso? "Parece que el animal fieles y enciende oye su voz. Rápido
como el rayo, toma hipomedón, y reconociendo la mano que guía la fuerza de
Tideo, que deja de ser indigna.
A medida que la parte superior del centauro
salvaje Ossa se precipita en el valle, bosques profundos temen hombre, simple
miedo al caballo. Así, los tebanos aterrorizados multitud jadeante en su huida.
Hipomedón construir sobre ellos, y sus golpes rápidos e inesperados, que recoge
las cabezas de los guerreros y deja atrás sus troncos con sangre. Ocurrió cerca
de la Ismene: a continuación, el río había cruzado sus bancos acostumbrados,
presagio de la fatalidad, y rodó sin esfuerzo con la masa de sus olas. Aquí es
donde, por un momento para respirar, batallones tímido, cansado de escapar de la
llanura dirigieron su carrera. La ola se sorprende para ofrecer una re-repelente
a la guerra, y se ilumina el brillo de las armas. Los tebanos se adentró en las
olas; bajo sus pies la tierra se derrumbó con estrépito, y los dos bancos
desaparecer en una nube de polvo. En un salto más impetuosa hipomedón se
precipita en la ola en la persecución de sus enemigos aterrorizados sin soltar
las riendas y completamente armado. Sólo él confía el tronco de un álamo sus
jabalinas, lo primero que plantó en la hierba verde. Por lo que los tebanos,
congelado por el terror, abandonando sus armas saben que impulsa; otros
candidatos de sus cascos, y siempre y cuando que pueden con dificultades para
mantener la respiración, ocultar vergonzosamente bajo el agua; muchos intentos
de cruzar el río a nado; Pero los vínculos de sus zapatos, arnés unido a sus
lados conservan, y se oponen a sus movimientos, y sus armaduras abruma
empapadas.
Tal es, en el fondo de un mar agitado, el terror de los peces,
cuando ven un delfín de buceo en el abismo y ver los retiros profundos; huido a
las profundidades, Multitud temblando bajo las algas verdes, y reaparecen
después de haber visto salir a la superficie y dejar este presas vano de atacar
un barco. Tel hipomedón sigue los tebanos desordenados en las olas. En una mano
gobierna las riendas, el otro dirige sus golpes; y los pies de natación [9250]
alivia su caballo, que solía recorrer el suelo, buscando en vano a su zapato
flotador, para llegar a la cama de arena profunda. Ion fue derrocado por Chromis
Chromis por Antiphus, Antiphus por hipseo; Hipseo incluso revierte Astiages y
Linus Linus ya se alcanzó el borde, y se salvó; pero los hados no permiten;
desde el primer hijo de la estructura destinada a él, se le prohibió a morir en
la tierra. Hipomedón continúa batallones de Tebas; Hipseo hijo del Asopo, pone
en fuga a los griegos. Ambos están sacudiendo el río, tanto teñirse olas de
sangre espesa, y ni uno ni lo otro (como es el destino de parada) no debe salir.
miembros ya arrancadas rodando en la rápida corriente, y las cabezas y los
brazos de hierro que ha cortado los troncos se unirá. Ya la ola lleva lanzas,
escudos, arcos de luz, relajado y cascos que flotan, apoyados por garzas. La
superficie del río está cubierto fuera de los brazos flotantes, y la cama está
sembrado de cadáveres. Aquí es donde los guerreros vencen luchar contra la
muerte, y exhalar el último aliento, ahogado por las olas.
Llevado por la
corriente, el joven Agrio presentó una oreja de mar que bordeaba el río; la
sombra Menoeceus feroz con su espada bellos hombros del guerrero. Se cae, pero
sin soltar; y mutilado, se mira las manos que cuelgan de las ramas más altas. La
lanza hipseo hizo a gota una lesión enorme y la puerta en la parte inferior; el
cuerpo permanece allí, la sangre vuelve solo a la superficie. Agenor corrió a la
orilla, para recuperar su hermano el desgraciado! él sostiene, pero firmemente
sujeta por el guerrero herido, se hunde en el deseo de levantar; que podría
haber llegado de sus brazos y hasta la superficie, pero le da vergüenza volver
sin su hermano. Chalétus, la topografía y el brazo amenazante, golpearía; el
agua del río entra en un torbellino rápido y la ingestión. Ya su vi-sabia y su
pelo desapareció; ya no percibe sus manos, su espada hasta el último fondo del
abismo: Muerte en mil formas persigue estos lamentables. A Javelin Mycalèse se
hunde en la parte posterior de Agyrte; se vuelve y busca en vano la mano que lo
golpeó; arrastrado por el río, lanza en su vuelo había encontrado sangre
esparcida.
El caballo vigorosa Tideo es herido entre los hombros; saltó en
el golpe mortal, se levanta y golpea el aire. A pesar de que en medio de las
olas, su guía se turbe; movido de compasión, se desgarra, gimiendo, la línea de
su herida profunda y suelta las riendas. Y luego caminar de nuevo, la lucha, y
el caminar con más confianza, la mano más firme, él golpea bajo sus golpes
multiplicado tímida nomius los valientes Mimas Lichas Tisbe, Lycétus de Antedón
y uno dos gemelos, hijo de Tespis; otra Panemus, exigió la misma suerte! Usted
va a sobrevivir él! exclama el héroe; es sólo dentro de las paredes de Tebas
odiosa; Ahora usted no ofrece a sus infelices padres una imagen engañosa. Oh
Dios, gracias que están hechos de Bellona el brazo ensangrentado llevó a la
lucha en este río rápido; sueltos son impulsados por las olas del río de su
país. La sombra quejumbrosa de Tideo, entierro privado, no vendrá lloriqueo
alrededor de sus hogueras.
[9.300] Va a ir a servir la comida a los
monstruos marinos horribles; que, al menos, basado en el seno de la tierra, y su
cuerpo disolución de retorno a sus primeros elementos! Por lo tanto hipomedón
persigue los salones de té, y se unió a sus tiros insultos crueles.
A veces,
la espada en la mano, dispara con furia; a veces apoderarse de los rasgos que
flotan, se lanza al enemigo. Tira Theron, el compañero de la casta Diana; Gias
el agricultor con el patrón Ergino; Gradas con el pelo largo y Creteo marinero
intrépido, que muchas veces en un barco frágil habían enfrentado a los cabos
Cafareo tormentosas y las tormentas de Eubea, pero que puede soportar el
destino? Se dio la vuelta en las ondas, el pecho atravesado por el hierro. ¡Ay!
olas en lo que está haciendo naufragio! Y tú también, oh Farsalia, mientras que
en lo alto de su tanque se pasa el río para llegar a sus compañeros, una lanza
Dorian se invierte. Perezca contigo tus caballos, que toda la violencia que
envuelve las olas y las correas del yugo fatales entre ellos.
Pero, ¿qué
esfuerzos se han domesticado, criado en medio de las olas, la gran hipomedón?
Por eso mismo Ismene armó contra él? O aprendió hermanas, vamos a saber, digne
enseñarnos; es para que usted pueda traer su atención de nuevo y proteger los
viejos recuerdos de la Fama. Derivado de dios de la fauna y de una ninfa, hija
de Ismene, el joven Nick regocijó a luchar en las ondas de seno. El lecho del
río, era su tierra natal; eso es donde nació; estos bancos verdes habían sido su
cuna. También convencidos de que, cerca de la Ismene, los terribles hermanas no
podían hacer nada sobre sus días felizmente pasan de un banco a otro, protegido
por las olas acariciando su abuelo. La onda eleva su no, si él vende
conscientes, o que se cruzan oblicuamente el río; si va en su curso, ella le
opone ningún obstáculo y sobre sí mismo. Con mar a menos complaciente oculta
hasta que Glauco cinturón, su anfitrión Antedón. Parece Triton lanzando ondas
medias calentadas por el verano, se ve Palaemon, mientras viajaba en un delfín,
que estimula la lenta, se apresura a acelerar los besos de su amada madre. Los
brazos van bien en sus hombros, y toda la riqueza de su escudo de oro brillante
está grabado detrás de la gente de Tebas. La virgen de Sidón, se lleva en la
parte posterior de alabastro toro caricias ya no es miedo al mar, y más cuernos
de efecto invernadero de sus delicadas manos. Los toques de onda, por jugar, las
plantas de los pies. Usted cree. ver sobre el escudo del movimiento alcista, y
dividir las olas. El río se suma a la ilusión, ya que su color se asemeja a la
del mar.
Los atrevidos jóvenes, sus características y su voz arrogante causa
hipomedón "No es el pantano de Lerna, fértil en venenos u ondas que Hércules
purgada de serpientes! Es un río sagrado, sí, un río sagrado que se atreve a
atacar, un río que alimentaba a los dioses. Infeliz! que recibirá la prueba!
"Sin responder, hipomedón decepcionarlo. El Ismene se le opone la masa más
estricto de sus olas, y tiene sus brazos; la línea se detuvo una cuota momento
sin embargo, y buscará el alma del joven guerrero en el centro de la vida: la
ola tenía horror de este crimen; Los bosques, que ombragiez estos bordes,
lloraste, y los bancos: resonaban los sonidos más tristes. De su boca salía un
último susurro de morir:
[9.350] "Mi madre! "Y las olas ahogaron su voz. Su
madre, hermanas de tropas qu'environnait Náyade repente golpeó grito de aquel
fatídico, se precipitó al valle transparente; , El pelo revuelto furioso; ella
magullada cara y el pecho en su terrible desesperación, se desgarra la ropa azul
SES. Cuando se levantó por encima del agua, con una voz temblorosa que ella
llama varias veces nick: ella lo ve en ninguna parte; pero flota sobre las olas
un índice triste, el escudo de su hijo, que reconoce muy bien! esta
desafortunada madre. El cuerpo se encuentra más lejos de donde el Ismene,
después de haber terminado su curso, se mezcla sus aguas con las del mar. Muy a
menudo Alcyone gimió al solitario en su casa y flotando mojado cuando la cruel y
envidioso Auster Tetis deleitó a las promesas de su amor y su nido siempre fría
en la que se basaron.
Su hijo ya no es: luego se sumerge en el río; oculto
bajo las olas, que lo hará en todos los lados, donde la ola se abre no es una
forma transparente; ella intenta, en vano, el cadáver del infortunado mella,
exhalando quejas dolorosas. A menudo, el río con problemas frena sus pasos, y
una espesa sangre oculta su punto de vista; pero nada lo detuvo en su caminar a
paso ligero, se enfrenta a golpes, espadas, cascos planteadas, devolver los
cuerpos tendidos en el lecho del río, sin tener miedo del mar, que estaba a
punto de entrar en el Imperio Doris, cuando, movido de compasión, la banda de
Nereidas empujó contra el pecho de su madre, los tristes restos, que ya le
habían quitado. La infeliz madre abraza a su hijo como si todavía estuviera
vivo; gana, los depósitos en las orillas de los ríos, secado con sus cabellos el
rostro del joven guerrero, y deja escapar estos gemido lúgubre: "Así que eso es
el beneficio que recibe semidioses sus padres y su abuelo inmortal ! Así que
reinará en el aire! O lamentable! más suave para usted era un extraño y la
tierra indiferente, onda más dulce del mar que llevó su cuerpo al río, y parecía
que esperar una madre desafortunada. ¿Son estas las características de la cara?
¿Es esta la terrible mirada de su padre y el pelo ondulado de tu abuelo? O mi
hijo, anteriormente el adorno de nuestras ondas y el orgullo de nuestra madera,
por lo que vivía yo era el equivalente de las grandes diosas, ninfas y me
reconoció como su reina. ¡Ay! Ahora aquí es donde numerosos corte que pulsa en
su madre, incluso? ¿Dónde están estos napea que aspiraban a servir bajo sus
leyes? Y yo, como los abismos del mar deben tener en lugar de tragar, por qué,
por desgracia! O mella, se informó que entre mis brazos, no a mí, sino a la
tumba? Y deberías estar avergonzado, no tiene piedad, con tan grave
inconveniente, el padre bárbaro! Qué abismo profundo e inaccesible se oculta en
el fondo del río? Qué! ni el grito de su hijo que expira ni nuestros gemidos
podría haber llegado de nuevo a usted? Véase, hipomedón se eleva más furioso y
el triunfo en tus ondas; sacude su agua y su orilla, se golpea, y la onda de
beber nuestra sangre. Usted permanece en reposo, y la paciencia es la furia de
los griegos. Al menos crueles, asistir al funeral de su pequeño hijo, ven a
conocer sus cenizas; no será el único que tendrá la luz de la hoguera. "A estas
quejas se mezcla con sangre gemidos, y su pecho por numerosas contusiones.
[9400] El agua ninfas, sus hermanas se encuentran con sus gritos dolorosos. Por
lo tanto Leucothoe antes de ser una Nereida, gime, se suele decir, en el puerto
de Corinto, hasta que el joven Palmon, ya enfriado por la muerte y el pecho
agitado, rechazó el pecho de la madre, las olas del mar que había tragado.
Sin embargo, tomada en una guarida secreta, la fuente de esta agua como beber
los vientos y las nubes, que alimentan el cielo lluvia arco iris y propagan la
fertilidad en los campos de Tebas, la Ismene no más oído de lejos, a pesar del
ruido de las olas, los lamentos y gemidos de su hija, se levanta el cuello
erizado espuma para el cabello y cargado con hielo. La gran pino que está
sosteniendo le escapa; su tumba urna, y se apartó de él. A la vista del dios que
aparece en sus orillas, frente a todos los sedimentos contaminados de un
endurecido por años, bosques y ríos continuación se sorprenden; admiran con lo
Majestad está, por encima del abismo inflado, la cabeza y el pecho espumosa, que
se escurre y deja caer ruidosamente el agua de su barba azul. Una de las ninfas
vuela a su encuentro; que enseña a su luto por su hija y la muerte de su pequeño
hijo; Ella le muestra el autor crueles de estos males, y presionar la mano la
mano de dios. De pie sobre sus olas levantadas, la Ismene struck su rostro,
sacudió sus cuernos entrelazados con las algas verdes, y en el desorden que
agitado, clamó a gran voz: "¿Hay gobernante de los dioses, el favor que me
honra, yo que estaba tan a menudo su anfitrión y su cómplice; Yo que te he visto
(no tengo miedo de llamarlo), a veces traicionero adornar su frente engañosa
cuernos, a veces el carro de Phoebe, u ofrecer su amante había consumido su Rayo
perdió una pira para la dote; Me he nutrido, finalmente, que el más ilustre de
su hijo? Ellos también han tenido en poco mis beneficios? Sin embargo, es en mis
orillas como Tirinto dios arrastró a un niño; es en esta ola que me apaga la
llama que consumió Baco. Ver qué carnicería en todas partes! ¿Qué rasgos montón
de cadáveres y la sobrecarga de mis olas y me cubre todo! Mi río es solamente un
campo de batalla, donde el crimen pesa sobre cada corriente; en la parte
inferior, en mi cama, pasear sombras recientes, cuyas formas como una nube que
reúne a mis dos bancos innumerables. Moi es invocado por el clamor sagrada que
me purifica en mi horno thyrses mangueras y los cuernos de Baco, ahora cargados
de corpses'm en busca de una salida al mar. Ni el pantano sin Dios ni Strymon
Hebrus la formación de espuma, nunca han sido tan profundamente avergonzado de
ríos de sangre por el dios de las batallas. La ola que amamantó puede ella, oh
Baco, despertar su valor? ¿Ha olvidado su origen? He ganado menor que el
Hidaspes, el río del Este, tener que apoyar el brazo? Y los que, hinchados de
orgullo, que aplaude el botín y la muerte de un niño pequeño, no, no va a salir
del río para ver las poderosas Inachus; no va a regresar victorioso en la cruel
Micenas, al menos que yo soy mortal, y un hijo de los dioses. "El dijo,
temblando de rabia, y agitó las olas furiosas. El frío Citerón envía su alta
cumbre de la ayuda de sus aguas, su nieve y la niebla espesa óntico, inviernos
de alimentos.
[9.450] El Asopo proporciona en nuevas fuerzas secretas, y, a
través de las venas entreabiertos, agrega sus olas a su hermano. Mismo para
sondear el fondo de la tierra; sacude estanques, lagos, pantanos entumecidos
perezoso, y mirando hacia el cielo su boca ansiosa, se chupa las nubes húmedas y
seca el aire. Ya más amplio, que atraviesa sus orillas; Hipomedón y que una vez,
en el mismo entorno del río, superaron todo el camino hasta sus brazos y
hombros, vieron con asombro crecer el río; y sí se hunden poco a poco en el
horno. A ambos lados de las olas se hinchan, y una furiosa tormenta se eleva, al
igual que las tormentas del mar cuando agota las Pléyades y el Orión negro
precipita sobre los marineros temblorosas. Por lo tanto Ismene, sus aguas
turbulentas, atacar hipomedón y siempre repelido por el brazo izquierdo arma
escudo en el héroe que regresa la formación de espuma asaltan la cubierta de sus
caldos negro, roturas, caídas, y volver todavía viene con más ímpetu. Pero eso
es sólo para levantar todas sus aguas; desgarra arbustos que protegen las
orillas de arena, troncos de árboles antiguos y piedras que cubren su lecho; se
lanza con fuerza en su enemigo. Sin embargo la lucha, aunque desigual, es
sostenida entre el héroe y el río que es indigno.
Hipomedón no se retira;
ninguna amenaza sacude, se arroja delante de las olas en base a él y los empuja
entre su escudo. Su pie presiona la filtración de tierra; el tirón en el muslo,
se apoya en las piedras resbaladizas y móvil, y endureció las rodillas, y,
estabilizando con esfuerzo, se mantiene en la engañosa limo que da paso bajo él.
Él envía a lo largo del río estas palabras insultantes: "¿De dónde sacaste,
Ismene, esta repentina ira? Qué abismo has dibujado su fuerza, que protege a
Dios poco a la guerra? ustedes que nunca han sabido que la sangre derramada por
Thyades cuando suene la flauta Baco, y las bacantes contaminado su furia por las
Triétérides? "Dijo, y de repente el dios que se le ofrece, mejillas manchadas
con asfalto negro que flota. Se mantiene un silencio hosco, pero armado con un
tronco de roble, salta sobre él, se levanta y golpea a los tres y cuatro veces
con todo el vigor de un dios y el poder de la ira. El héroe se flexiona; el
escudo se retiró de su brazo; le da la espalda y hacia atrás lentamente. Las
ondas de urgencia y el río continúa su triunfal enemigo se movió. Por su parte,
los tebanos abrumar a una lluvia de flechas y piedras; empujan los dos bancos.
¿Qué va a hacer, acosado por la guerra, asediado por las olas? Los pobres no
puede huir ni sucumbir noblemente. En el borde de la orilla verde, suspendida
entre la onda y la tierra, pero más cerca de la ola, se situó un fresno cuya
sombra enorme cubierta del río. Hipomedón agarró con una mano vigorosa, es la
única esperanza le dejó volver a la tierra; pero el árbol da a sus esfuerzos, y,
vencido por una fuerza más poderosa que unido a la tierra, se tambalea, y
llevando con ella las raíces que penetraron en el río o recurrieron a tierra
arena,
[9.500] se cae, la parte de la orilla, el guerrero terror, y por esta
repentina caída, encerrado en un montón de ruinas y quita todos los medios de
resistencia. Las olas se precipitan en este lugar, el cual forma inextricable
limo en la parte inferior de la recién cavado profundo. El golfo crece y ya la
ola que se arremolina alrededor de los hombros y el cuello hipomedón. Sólo
entonces obligado a admitir la derrota: "O la vergüenza! si llora, O Marte, que
engloutiras en este río coraje como el mío? Bajo a la ola latentes de los ríos
infernales, como un pastor de repente sorprendido por las aguas furiosas de una
corriente? No merezco morir por la espada? "Movido por estas oraciones, por
último, Juno se dirige al dios del trueno," ¿Cuánto tiempo, noble padre de los
dioses, el tiempo que accableras los desafortunados griegos? Ya Pallas continúa
Tideo de su ira, ya Delphi es silenciosa privado de su auspicioso, y he aquí mi
hipomedón, el descendiente de los reyes de Micenas y Argos, que estoy hablando
sus tributos preferiblemente a todos los dioses (es- Por lo tanto, puedo
defender mis adoradores?), aquí se convertirá en la comida de los monstruos
marinos! Tiene que pagar una tumba y el funeral a los vencidos: donde, después
de la lucha, las llamas fúnebres hijos de Cécrope? Teseo dónde están las luces?
"Júpiter no rechaza las oraciones justas de su esposa. Se vuelve buenos ojos a
las paredes de Cadmo, y el único signo de la cabeza, las olas desaparecen.
Así lívido aparecen hombros del héroe, y su pecho plagadas de lesiones. Así que
cuando son criados por los vientos, la tormenta, las aguas dejan dentro de las
rocas y la tierra como marineros deseados, y las ondas hacia abajo desde la
parte superior de las rocas. Pero lo que es para ganar la orilla? En todas
partes los tebanos abrumar a una serie de características, y tiene un mayor
blindaje, más defensa contra la muerte. Las heridas abiertas de nuevo, se
enfriaron su sangre bajo onda larga, escapes, calentado por contacto con el
aire, y se abre paso a través de las venas congeladas por el río, sus pies se
deslizaron inciertos. Él cae. Esto, en el Hemus Tracia, derrotado por la furia
de Boreas, o debilitado por la vejez, un roble que ocultaba su pelo cae en el
cielo, y está en el aire un enorme vacío. El bosque y la montaña misma tiemblan
al ver tambalearse, sin saber de qué manera se va a caer al suelo, que los
árboles van a aplastarla en su caída. Hasta ahora nadie tiene la audacia de
tocar su espada o casco: sólo si creen sus ojos. A la vista de este enorme
cuerpo, temen, y no se acercan a que las armas apretado. Finalmente hipseo
avanza hacia él, arrancar la espada que su mano fría aún sostenía, y despojado
de su casco el rostro feroz del héroe, y luego caminar a las filas de Tebas, que
muestra el casco suspendida a su brillante espada, que es 'exclama con orgullo
"Esta es la cruel hipomedón! esto es terrible vengador de los abominables Tideo,
ese guerrero que hizo nuestro río un abismo de sangre! "El Capaneo magnánimo
reconocida desde lejos; Silenció a su dolor, y, blandiendo un enorme jabalina, y
animó a sí mismo: "Segundo mí, mis brazos, mi único apoyo en la guerra, mi dios
vengativo!
[9550] es que sólo se invoca, solo te adora Capaneo, que
desprecia a los dioses! "Dijo, y él mismo cumple con sus deseos. La línea de
silbar a través del escudo, coraza de bronce hipseo y llegó a su alma
profundamente en su ancho pecho. Se cae en el mismo rugido alta torre, sacudido
hasta sus cimientos por golpes multiplica, se colapsa, y se abre a los ganadores
de una ciudad en ruinas. Pie en su cuerpo: "No lo niego, llora Capaneo honor de
su muerte: convertir sus ojos aquí; yo soy el que soy el autor de esta lesión.
Die tan feliz, orgulloso y una serie de otras sombras. Por lo tanto, le
encanta el héroe de la espada y el casco, arranca su propio escudo; y colocarlos
en el cuerpo sin vida de hipomedón: "Recibe, dijo, ilustre guerrero, el enemigo
sigue siendo y los suyos. Sus cenizas no permanecerán sin honor, ni tus crines
Unburied: llega su turno. Hasta que no estábamos pagando el justo tributo de la
estaca, Capaneo, su pariente, y se entierra bajo este glorioso monumento. Así
que en oscilado de marzo de los crueles posibilidades de la lucha, y también
sembró la muerte en las filas de los griegos y los tebanos. Aquí llorar feroz
hipomedón no Hyp-ver tan valiente como él, y los dos ejércitos se encuentran
consuelo en esta pena mutua.
Sin embargo, perturbado en su sueño por
visiones tristes, la madre del joven arquero Tegea, la naturaleza Atalanta, el
pelo suelto y los pies descalzos, según la costumbre, se fue antes del amanecer
a la ola de frío de Ladón, para purificarse en el agua corriente del río y
desviar estos sueños fatales. En efecto, durante las noches de peso de carga
total de sus ansiedades oscuros, a menudo vio caer los trofeos que había
adherido a las paredes del templo, o parecía bosque qu'exilée, expulsado de la
compañía de Dryades, deambulaba entre extraños tumbas a menudo como podía volver
a la guerra la pompa triunfal de su hijo; reconoció sus brazos, su caballo, sus
compañeros; pero él mismo no lo ve: a veces era su aljaba que se destacó de sus
hombros, a veces su propia imagen, su retrato, incluso mientras las llamas
devoraban; pero sobre todo esta última noche había congelado de miedo por sus
malos presagios, y fue movido profundamente su corazón materno.
Hubo en los
bosques de Arcadia un enorme roble y bien conocido en el país, Atalanta había
elegido entre la multitud de otros árboles para dedicar a Diana, y lo hizo, en
el culto que le hizo una deidad. Aquí es donde, cansada, se colgó el arco y las
flechas, colmillos de jabalí curvos, los cuerpos de leones y ciervos astas
altos, similares a los bosques. Apenas dejó ningún margen de las ramas; Apenas
su sombra verde podría derrotar a la brillantez de hierro, ya que estaban
envueltos en Trofeos rurales.
A la vuelta de un largo y arduo de caza, donde
se informó triunfalmente conducen a un oso Erymanthus, le pareció ver el árbol
caído, inclinando su pelo verde, y sus ramas con sangre muriendo en el suelo.
Ella cuestiona una ninfa, que le dice que las ménades crueles y enemigo de Baco
dirigieron su furia en contra de este roble. Mientras ella gemía y cree en
golpear los tiros precipitados, [9600] De repente los ojos abiertos, y de
repente el sueño que persigue, ella se apresura a su capa desierta, y se
trataron en vano bajo su párpado pista de sus lágrimas imaginarias. Además, para
evitar el mal agüero, después de haber caído tres veces su pelo en el río, y se
añade a esto las palabras de expiación que las preocupaciones maternas
tranquilas, ella corre hacia el templo de Diana ejército, el primer rocío del
amanecer.
Ella ve con alegría todos los árboles que ella conoce tan bien y
aún en pie de roble. Luego se detiene en el umbral de la diosa, y lo aborda esta
oración no debe ser contestada, "bosque virgen de gran alcance, a quién estoy
compartiendo las normas bélicas y el trabajo duro, a pesar de mi sexo I m '
costumbres indignas, y griegos que valientes, o las naciones de la Cólquida los
ritos feroces, ni las cohortes de las Amazonas, hicieron lo más que honrado sus
altares. Si alguna vez los bailes de Baco y noches de juegos lascivos han sido
un encanto para mí; Si, a pesar de que adolecen de una unión odiosa, he traído
ni los afeminados thyrses ni la rueca pero, fiel a los bosques silvestres,
incluso después de mi matrimonio si todavía estoy quedé cazadora virgen y el
corazón; así, sin pensar en una piel de mi culpa en las cavernas secretas,
mostré mi hijo, y depositar el temblor en sus pies, he declarado culpable; si no
ha degenerado de su madre; Si cualquier niño, que ya se arrastró hasta mi arco,
y sus primeros gritos, sus primeras lágrimas, preguntó por las armas; Te lo
ruego, oh diosa, me dice lo mal agüero a dormir mis noches de insomnio. Mi hijo,
que, imprudente y demasiado confiado en que voló en combate, deja que vuelva a
visitar el ganador; o, si pido demasiado, simplemente dejar que lo vea otra vez;
aquí está cubierto de sudor, él usa sus armas. Quita de estas señales de
advertencia. ¿Por qué, oh diosa de los bosques, las ménades enemigos, ellos
gobiernan los dioses de Tebas en nuestros bosques? ¡Ay! por eso un sentimiento
secreto (que no pueda leer en el futuro!), ¿por qué es mi presentimiento secreto
entrever un presagio terrible en el roble? Si el sueño hace eso también me envió
algunas visiones, os ruego en por ti, por el dolor de su madre, Oh buen Dictynne
por la fama de su hermano, perfora sus características de seguridad dentro de
este infeliz antes de sucumbir dejar que mi hijo aprenda el funeral de su madre
infeliz! "Ella dijo, y las lágrimas inundaron su rostro; al mismo tiempo que ve
la estatua blanca de Diana sudor de cobertura.
La diosa orgullosos deja el
alcance en el umbral de la sien, barriendo sus altares frías de pelo. Ella cruzó
la Maenalus, cuyo follaje se eleva a las estrellas, y se dirige a las paredes de
Cadmo, a raíz de las fronteras del cielo, este camino brillante, accesible sólo
para los dioses, y cuando su mirada domina la tierra. Ya había alcanzado casi la
mitad de la altura del Parnaso a lo largo de la ladera sombría, cuando ve a un
hermano nube de luz, cuyas características son alterados. Estaba regresando
tristemente desde el juego, de luto por la muerte de sus presagio de que la
tierra se había tragado. El camino de los cielos es de color con el acercamiento
de las dos deidades que confunden sus deslumbrantes rayos chocan arcos y
resuenan su carcaj.
[9.650] Apolo el primer "O mi hermana, dijo, sé que
usted vuela con el joven que se atrevió Arcadia frente a la cohorte de Tebas y
la lucha demasiado pesado. Su madre, su fiel compañero, te imploro: que el
destino permitirá otorga su oración! Pero a mí mismo, me da vergüenza, acabo de
ver, impotente espectador, las armas de mi profeta y los laureles santos; Lo vi
girar en vano de sus miradas suplicantes, en la oscuridad Tártaro. No podía
dejar su coche o cerrar el abismo que se abría.
Bárbaro soy! Ahora indigno
de ser amado! Ya ves, oh mi hermana, mi gemido guarida sagrada, y mi templo
silencioso que es el único favor que tengo que pagar su homenaje y lealtad! Por
lo tanto intentar continuamente una copia de seguridad inútil, el ahorro en
todos los esfuerzos dolorosos; la última hora de este enfoque joven guerrero; el
decreto del destino es irrevocable, y oráculos de tu hermano no te engañe ahora
por su significado incierto. "-" Pero por lo menos cumple con la virgen con
problemas, me permite rodear el desafortunado un último rayo de gloria, poco
consuelo a una muerte cruel, y no va a evitar que mi venganza, que la cruel
contaminará su mano sacrílega sangre de un niño infeliz: mis flechas pueden
servir mi ira! Ella dijo, y después rápidamente presentado en la mejilla a los
besos de su hermano, ella se aleja irritada, y ganó los muros de Tebas. Sin
embargo, desde ambos lados, que lucha con más fuerza; desde la muerte de dos
héroes, la venganza añade a la furia de ambos ejércitos. En los soldados
tiemblan un lado hipseo de la otra, pero más terribles aún, las cohortes griegos
que vieron caer hipomedón: presentan su búsqueda de hierro en el pecho. El mismo
celo furioso hace que quieran beber la sangre del enemigo y su propagación.
Permanecen Immobi ellos en sus puestos. Las apretadas filas que caen en lugar de
dar marcha atrás. De repente, la hija de Latona se desliza por el aire con un
vuelo de la luz y tierras en la parte superior de la montaña Dirce: las colinas
han reconocido la diosa, y, a su juicio, los tiembla forestales. Aquí es donde
la edad, el pecho desnudo, ella se cansó su arco y flechas crueles para destruir
los muchos hijos de Niobe.
Ya Partenopeo se jactó de sus hazañas; su
caballo, más acostumbrados al sonido de la caza que el de las armas, y para el
first'm sufrir las riendas, había ganado en medio batallones enemigos. El cuerpo
manchado de un caballo recinto de tigre, y sus uñas de oro golpean sus hombros.
En sus ganglios del cuello inmóviles mantienen su melena cautivo, y su pecho
lleva la marca de la vida guerrera de los bosques, formado un collar de
colmillos de marfil. El joven príncipe lleva un abrigo empapado dos veces en la
púrpura Œbalie. Su túnica donde el oro chispa, sólo el tejido que su madre había
hecho a sí misma, se mantuvo en el lado por un pequeño clip. Su escudo vuelve a
caer sobre el hombro izquierdo de su caballo, y su mano se carga con una pesada
espada. Se contempla con orgullo sus broches de oro, diente pulido y brillante,
y los ricos bufanda flotando en los flancos del caballo. Le encanta escuchar el
sonido del cañón, el temblor temblor; y cadenas que descienden desde su cresta
sobre sus hombros. A veces se sacude con alegría garbo, y todas las piedras
preciosas casco con gas; o se separa del [9700] Cuando el calor de la batalla
los calores, mostrando su cara descubierta. Así alumbre más suave resplandor su
hermoso cabello, sus ojos animados y las mejillas de color rosa, con una
desaceleración para satisfacer su impaciencia aún no tiene la frescura alterado.
El joven príncipe se avergüenza de su belleza, y quiere dar a su rostro una
expresión amenazante duro; pero la ira sigue siendo agraciado en su rostro. Los
tebanos abrir delante de él en sus filas; piensan que su hijo al verlo, y
desvían los rasgos que lo golpearía. Pero insta enérgicamente, y se lanzó a los
enemigos, pero la piedad se detiene sus crueles lanzas. En co-tasa Theumèse la
Tebas de las Ninfas mirar a combatir un ojo encantados; y aunque él está
cubierto de sudor y polvo, que admiran su belleza y forman un suspiro de deseos
secretos para él.
Al ver esto, Diane se trasladó un dolor vivo y profundo,
y, mejillas bañadas en lágrimas: "¿Qué apoyo, dice ella, puede ofrecer mi brazo
protector? ¿Cómo eliminar a la muerte que amenaza? Así que, ¿cómo combate usted
es delgado que, cruel e infeliz niño? ¡Ay! usted ha escuchado el consejo de un
valor jóvenes y prematura y la voz de la gloria que se llama a una muerte
gloriosa. Durante mucho tiempo Madera Maenalus ya no es suficiente para su
coraje que creció en los últimos años, sin embargo, apenas, oh chico! si el
camino era seguro para usted, sin su madre, a través de los fosos de animales
silvestres; Apenas la mano negrita podría lanzar sus características y doblar su
arco. Y ahora se extiende al pie de mis altares sus quejas amargas, ella puertas
cansados y el umbral de mi templo, que permanece sordo a sus oraciones. Y usted,
usted consintió con el sonido de la corneta, los gritos de guerra; feliz en su
ignorancia, de salir de su madre sola triste anticipación de su muerte. "Sin
embargo, para no asistir vano de su gloriosa muerte, ella se lanza a la batalla,
rodeado por una nube oscura; y robar sigilosamente en la parte posterior de sus
atrevidas flechas ligeras jóvenes, que llena su aljaba de rasgos divinos, que
nadie se roba sin avergonzarse de la sangre; entonces vale la pena en sus
miembros y en los flujos de ambrosía a caballo, por lo que ni el uno ni el otro
se alcanza antes de la muerte, cualquier lesión. Ella dice las palabras mágicas,
esos misteriosos murmullos que ella misma enseña a las mujeres de la Cólquida,
aparte de las cuevas, al tiempo que les muestra las hierbas dañinas.
A
continuación, el arco tenso y ardor de fuego Parthenopaeus revolotea alrededor
de las filas. Perdió el control, y olvidando su tierra natal, su madre,
olvidándose de sí mismo, es un uso demasiado cruel de las armas celestes. Como
león se Gaetulia cuya madre todavía hace un alimento sangrienta, tan pronto como
se siente en el cuello crecer su melena y volvió sus miradas feroces en su uña
en ciernes indigno de su prado, y, corriendo al campo, le gusta ir libre, y
olvidar el camino a su madriguera. ¿Cuáles son los guerreros, oh cruel niño, que
invierte su arco Arcadia? En primer lugar su flecha Chorebe Tanagra llegó hacia
el final del casco y el borde del escudo; que penetra a través de un paso
estrecho. flujos sanguíneos dejan en la garganta, y su cara enrojecida por el
efecto de la quema de veneno de flecha divina. Eurytion es golpeado aún más
cruelmente: [9750] triple de jabalina dardo se hunde en la órbita de su ojo
izquierdo. Quiere tirar de la línea con su ojo que falta, y se precipitan sobre
el que hirió; pero (al igual que las formidables características de los dioses?)
su lesión se extiende a ambos ojos y se sumerge en la oscuridad. Se persigue no
menos furia del enemigo en el lado donde él recuerda haber visto, hasta que,
golpeando el cuerpo de Idas, se cae. Por lo que los desafortunados se agita en
medio de las víctimas de la guerra con sangre; implora tanto la muerte, sus
amigos y sus enemigos. Parthenopaeus sacrificó tanto hijo Abuso Argus a un
cabello hermoso y Cydon que su hermana infeliz amado un amor criminal. Para uno
que atraviesa la ingle hasta la médula la jabalina; a otro que cruza
oblicuamente la aguja de ambas sienes. El hierro se mueve de un lado, mientras
que por el otro todavía podemos ver la luz pluma; la sangre fluye a través de
las dos aberturas. Las características inexorables todos somos mortales, ni la
belleza ni Lamus tiras Lygdus ni la tierna edad de Aeolus, no puede protegerlos.
Lamus se golpeó en la cara, Lygdus herido en el lado; y que, Aeolus, recibirá
con un rasgo gemido que cruza su cara, más blanco que la nieve. La Evia
peligrosa dio a luz a uno; blanco Thisbé enviado a los otros Tebas; el tercer
nunca se ve de nuevo la Amyclae verde.
Nunca golpea el brazo en vano, nunca
deje sus características sin lesiones: punto de descanso para sus golpes: una
flecha sigue a la otra, y se mezcla su silbato a silbar el primero. ¿Quién iba a
creer que un solo arco, con un brazo hace que tantos estragos? A veces se usa
directamente sus tiros; A veces, girando alternativamente a derecha e izquierda,
que varía su ataque; A veces se vende, se haya fugado, y su único arco se volvió
hacia el enemigo. Pero, sorprendido e indignado, los descendientes de Lábdaco
rally. En primer lugar, Anfión, de la noble sangre de Júpiter, incluso ignorando
la carnicería que estaba Parthenopaeus en el campo de batalla: "¿Cuánto tiempo,
grita él, es lo que espera disfrutar de la lentitud del Parque, niño infeliz que
luego, por su muerte, va a sumergirse en duelo por sus padres ilustres? ¿Qué
estoy diciendo? tu corazón se hincha de orgullo, y su audacia aumenta, porque
nadie quiere competir con usted, desprecia una batalla desigual, y en su lugar
debajo de su ira. Volver a la Arcadia, y allí, mezclado con sus iguales, simula
el tono de la lucha contra el palacio inocente, mientras que aquí en marzo,
manchado de polvo, ejerce realmente su terrible furia. Pero si la tumba famosa
triste sedujo a tu corazón, estoy dispuesto a darle a usted: morirás la muerte
del héroe. "Ya desde las primeras palabras, una nueva furia feroz estimuló hijo
de Atalanta, Amphion y aún no se había completado, exclama:" Sí, he esperado
demasiado tiempo para llevar mis armas contra Tebas lo que este es el valiente
ejército! ¿Qué niño sería lo suficientemente pequeño como para negarse a luchar
contra este tipo de guerreros? Usted ve en mí un Arcadio, un vástago de una raza
guerrera, no una tebana. No soy yo quien nació en una noche silenciosa Thyade un
tebano, un sirviente de Dios. Nunca me he ceñido mi frente una mitra deshonrosa,
vergonzosa o blandí una lanza. Desde mi infancia he aprendido a cruzar ríos
helados, para entrar en las cuevas oscuras de las bestias salvajes. ¿Qué voy a
decir más? Mi madre siempre está armado con una lanza y un arco, mientras que
sus padres golpean el sonido tambores de Baco. "
[9.800] Amphion no soporta
este atropello, y, blandiendo un enorme línea, se lanzó contra la cara de la
negrita que el valiente; pero el servicio de mensajería, miedo de la terrible
mirada de hierro cae la cara posterior, y con su maestro, que por este
movimiento se escapa del hierro sed de sangre. Más ardiente todavía Amphion,
espada en mano, se precipitó al joven guerrero cuando la hija de Latona se eleva
en medio de la llanura, se detiene antes de que el tebano, y hace todo su cuerpo
un obstáculo insuperable . Un amor casto unido a los jóvenes Parthénopée DORCE,
Monte Maenalus en el que Atalanta había confiado a su hijo, el objeto de sus
alarmas, para guiarlo en la lucha y moderar su juventud negrita. La diosa,
tomando prestadas sus características, por lo que dicen: "Es bastante causan
graves daños en los batallones de Tebas Parthenopaeus! es suficiente: Por
último, piense en su pobre madre; pensar en los dioses, sean quienes sean, que
se apoyan. "Pero él, sin temor alguno," mi DORCE O fieles, dijo, déjame (voy a
poner más de él), deja que invertir este guerrero que lleva rivaliza con los
rasgos de la mina, una prenda similar en la mina y agitando con orgullo un freno
rotundo. Este freno, que dirigirá; ricas vestimentas que lo adornan, que serán
suspendidos del techo del templo de Diana; Voy a presentar a mi madre de su
carcaj, mi conquista. "La hija de Leto oyó, y dejó escapar una sonrisa mezclada
con lágrimas.
Durante mucho tiempo, Venus había visto esta diosa. Retirado
en una parte remota del cielo, que tenía en sus brazos el dios de la guerra, y
lo recordó en su ansiosa solicitud, Tebas, Cadmo, y los descendientes de su
amada Harmonia toman hábilmente esta oportunidad, da rienda suelta que contenía
el dolor profundo de su alma. "¿No ves, oh Marte, esta diosa altiva de la
virginidad, que fluye en medio de la multitud de guerreros? ¿Cómo se atreve
ordena la lucha y guiar a las normas! ¿Qué estoy diciendo? aquí se sacrifica su
venganza y ofrece la carnicería como guerreros de la nación que es querido para
mí: ¿por eso que Júpiter le dio el valor y espíritu de lucha? Para usted, que
permanece para perforar sus flechas ciervos bosque. "Movido por las quejas sólo,
el dios de la guerra se precipitó en la batalla. La única ira le acompaña en su
carrera rápida a través del aire: las Furias, sus compañeros habituales,
trabajando la carnicería. De repente él está triste en la Diana, y le envió
estas duras críticas: "No es para usted como el padre de los dioses dio a silla
de batalla: erupción cutánea, si no se dé por vencido en el momento este campo
batalla, usted se sentirá que la propia Pallas no puede resistir el brazo. "¿Qué
va a hacer ella? Por un lado la prensa en marzo con su lanza, el otro lo ve, los
niños pequeños, la rueca del Parque ya ofrece alambre para usted, y además, el
rostro severo de Júpiter se detiene. Por lo tanto, se aleja, vencido por la
vergüenza de él solamente dejar este lugar. Luego, en marzo de caminar su mirada
en los batallones de Tebas, y plantea la terrible Dryas, que le sacó sangre de
su padre, el impetuoso Orion, el odio compañeros Diane. De repente furia
transportes; se derrite, espada en mano, en la Arcadia desordenado, y desarma a
uno de sus líderes. Los pueblos de Cilene, los habitantes de la sombra Tegea
cubierta de la tierra de sus cadáveres; Heads Épitiens, falanges de Feneo
huyeron. Sin embargo Parthenopaeus, cuyo brazo está cansado, aún espera para
disparar este guerrero, y no ahorró fuerzas; aunque ya debilitado, él se
apresura,
[850] Se deja caer en batallones enemigos aleatorios. Mil
presagios de su muerte la asaltaron; revolotear ante él las sombras de la
muerte. ya; ay! ve a más de uno de sus compañeros, entre ellos el DORCE
inmuebles ubicados; ya que poco a poco sintió que sus fuerzas abandono, y el
carcaj, flechas vacías, pesan menos sobre sus hombros; Ya que es difícil de
mantener a sus armas, y finalmente reconoce a un niño; cuando de repente viene
Dryas aterrorice la terrible brillantez de su escudo. Un terremoto se contrajo
de repente su cara y aprieta el corazón. Así que cuando un cisne con plumas
blancas, ve por encima de él el mensajero temida de un rayo, que le gustaría que
los bancos del Estrimón es entrouvrissent y presione su pecho contra sus alas
temblorosas. A medida que el joven guerrero, al ver la enorme y salvaje Dryas,
no se siente la ira, sino un secreto terror, presagio de muerte. Sin embargo,
después sin éxito invocado a los dioses y Hécate, pálido, tomó sus armas y
prepara su arco terco. Ya que pone en peligro el enemigo de su flecha, y se ha
apartado los dos brazos a la punta del dardo que toque la parte superior del
arco y la cuerda, su pecho; pero de repente una jabalina lanzada por la mano
fuerte del líder tebano vuela más rápido que la tormenta viene y se corta
oblicuamente la cuerda de sonido. Los disparos de los jóvenes de Arcadia en vano
amenazados al enemigo, caída de su mano, y la flecha innecesaria arco deslizante
relajado. Por lo que el desafortunado, que sufre de un trastorno fatal, riendas
sueltas y armas, y no puede soportar la lesión crueles ese rasgo lo hizo,
entrando en su hombro derecho. Otra de las características es fácilmente se
hunde en la carne, y al mismo tiempo reducir los corvejones del caballo y
detener su fuga. Pero ahora, oh maravilla! Dryas sí cae sin que nadie se diera
el brazo que golpeó el que comenzó la carrera mortal, apenas visible ahora,
desaparecieron.
El joven príncipe, acostado en los brazos de sus compañeros,
se deja llevar muy lejos del campo de batalla y, muriendo, oh tocar la
simplicidad de la juventud! llora su caballo tendido en el suelo: la cabeza,
despojada de su casco, cae, y en sus ojos se desvió fuera el encanto de su
mirada: tres y cuatro veces se levanta por su pelo, su cuello lánguido, que
puede soportar, y su mama nieve (espectáculo doloroso, incluso para Tebas!) un
color rojo sangre brota. Por último, dice estas palabras, intercalados con
sollozos: "sucumbí. Ir DORCE, consola de mi pobre madre. Sin duda, si la
preocupación trae ciertos presagios, ya algún sueño o algunos augurio siniestro
le enseñó mi destino. Usted, sin embargo, por un artificio piadosa que perdona a
su dolor, y por largo tiempo fuera de él mi muerte. No mostrar a usted de
repente, o cuando ella extendió los brazos. Y cuando se ve obligado a admitir la
verdad, dice estas palabras a él: "me merecía este castigo, oh mi madre! niño,
tomé las armas demasiado pesadas para mi brazo; a pesar de que, a pesar de sus
esfuerzos, no podía permanecer en silencio, y en medio de los combates, no he
pensado en mi madre alarmado. Atornillar a continuación, y no acusar a mi valor
ciego. Ahora desterrado sus temores: es en vano que un espíritu inquieto, se
mira a lo alto del monte de alta escuela si algún ruido lejano golpea el aire, o
si la marcha del ejército levanta polvo. Aquí estoy frío y tendido en el suelo
desnudo; y no está cerca de mí para apoyar la cabeza y recoger mi último
aliento.
[9900] Por lo menos, en lugar del cuerpo que no ve otra vez, oh
madre! conseguir mi pelo (y se ofrece a sí mismo con tijeras), el cabello que ha
tenido el placer de peinar mientras desdeñé este cuidado. Va a hacer de él los
últimos honores: pero en los juegos fúnebres, ten en cuenta que el brazo
descalificada embota mis características; y se asegura de que mi fiel paquete no
está impulsado por otro en refugios silvestres. En cuanto a las armas, que me ha
traicionado en mi primera pelea, grabarlos o suspender en ofrenda, las bóvedas
del templo de Diana ingrata. "
LIBRO X.
Phebus se precipita a las puertas de Occidente, eliminados por
la noche húmeda, las órdenes de Júpiter aceleraron la llegada. Este no es el
dios olímpico tiene piedad del campamento griego, o el ejército tebano; pero es
triste ver a tantos aliados batallones, tantos pueblos inocentes diezmadas por
la espada. La llanura descubierto frente a cualquier sangre contaminada que
inunda. Muestra las armas, caballos, una vez que el orgullo de los jinetes, los
cadáveres de enterramiento privados y miembros dispersos. Horrible de ver y usar
sus señales rotas, las cohortes agotados se retiran del campo de batalla, y las
puertas demasiado estrechas para su partida para la batalla, su oferta, a
cambio, un paso fácil. El dolor es igual en ambos lados; pero consola de Tebas,
al ver cuatro batallones griegos vagar sin líderes, similar a los barcos en el
mar agitado, privados de sus conductores, no tienen otra guía su dios tutelar,
el azar y las tormentas.
Además, animado por una nueva audacia, los tebanos
no sólo pensando en la defensa de su campamento, pero para oponerse a la fuga de
los enemigos y evitar que dan la bienvenida a haber sido capaz de volver a
Micenas. La tessera da la consigna para las posiciones; centinelas se colocan y
se elevan a su vez; Meges es el líder elegido por sorteo para conducir por la
noche. Lico se unió a él voluntariamente. Dispuestos según el orden prescrito,
se llevan con ellos las armas, alimentos y fuego. Antes de su partida, el rey
animado por estas palabras: "Los ganadores de los griegos, el día pronto
brillar, y la oscuridad, que protegió a su cobardía, no va a durar para siempre.
Amenizar su valor, y sus corazones son dignos del favor de los dioses. Lerna ha
perdido su esplendor, sus guerreros más valientes; Tideo se baja en el sarro
vengador; La muerte se asustó un la aparición inesperada de las sombras de
Anfiarao; Ismene cuenta con el botín encantados de Hippodémon. No estoy hablando
de los jóvenes de Arcadia, me da vergüenza poner el número de trofeos que se nos
da por la guerra. Que tiene en sus manos el precio de la victoria: ya no
podremos soportar estas cabezas orgullosas, y garcetas brillar en medio de los
batallones. ¿Qué tiene que temer en combate? vejez de Adrasto? la juventud más
indefensa de mi hermano, y la furia sin sentido de Capaneo? Ir y que alrededor
de los enemigos sitiados asegurar que los incendios durante toda la noche se
puede temer? Esta es su presa, que son su propia riqueza se mantiene. "Así,
mediante sus exhortaciones que llena los Labdacides ardor feroces. Se queman a
reformular las fatigas de la guerra, y, todavía manchado de polvo, sudor y
sangre, que a su vez sus pasos. Ellos sólo escuchan las palabras dirigidas a
ellos; se rompieron los brazos de sus padres, y, oscilaron en la batalla, una en
el frente y la otra en la parte trasera y el último en los flancos, que rodean
el afianzamiento del fuego enemigo. hambre para reunir a la entrada de la noche,
una tropa de lobos furiosos había demacrado larga lanza llena de audacia de la
campaña de mediana altura.
Ya que atacan a los mismos establos: engañaron a
la codicia, temblando corderos balando, fuertes exhalaciones de ovejas, irritar
los intestinos. Se rompen las uñas y el pecho contra las puertas inamovibles, y
sus dientes están ávidos romos en el umbral. Sin embargo, ni mucho menos, los
pórticos del templo de Argus llenan una multitud suplicante.
[10,50]
postrados ante el altar, las mujeres griegas anhelan el regreso de sus maridos,
la copia de seguridad de Juno, la reina de los dioses, moretones en el rostro en
las puertas ricamente decorados y en el mármol frío, y aprender sus hijos se
inclinen como ellos. Consumen todo el día en la oración; noche aumenta sus
preocupaciones, y asegura la llama en el altar. Un velo es llevado en una cesta
y se ofreció a Juno; tela admirable, que ha trabajado a mano en cualquier esposa
estéril o distante de la cama marital, ropa dignos de la diosa casto, donde los
resplandores púrpura bajo mil formas, se mezclaron con el brillo del oro.
Representado Muestra Juno a sí misma, se comprometió a la capa del maestro de
truenos: la joven virgen, ¿quién lo hará con timidez el nombre de la hermana,
mira hacia abajo, y le da un beso inocente joven Júpiter, que por sus amores
secretos , no ha hecho común ofendido. Las madres Argos llevaban el velo del
marfil sagrado, y sus lágrimas y gemidos imploraron la diosa Mire fortalezas
sacrilegio de la hija de Cadmo, tu rival odiosa, oh Reina del cielo estrellado!
derroca la tumba rebelde de Semele, y una vez más lanza en Tebas como sea
posible, el rayo vengador. "¿Cómo será la diosa? Ella sabe que los destinos
están en contra de los griegos, Júpiter es hostil; pero ella no quería que la
oración tan ardiente un don precioso, no consigue ningún favor. El azar le da la
oportunidad de prestar a los griegos una poderosa ayuda: desde el aire, que ve
los rodearon el campamento y trincheras vigilados por centinelas vigilantes.
Se estremeció, impulsado por la ira, y sacude su pelo, agitó sobre su cabeza su
formidable diadema. Su ira no era más violenta cuando vio con indignación el
hijo de Alcmena, y los gemelos, el resultado de los amores de Júpiter, colocado
entre las estrellas. Se forma así el proyecto de sumergir los tebanos en la
dulzura de un sueño pérfida, y entregar la espada mortal de los griegos. Ella
ordena a Iris, la mensajera de tomar la cinta de la que es costumbre de
envolver, y confió a la aplicación de su negocio. diosa brillante obedece a sus
órdenes, que deja el cielo, y desciende hacia el suelo, suspendido en su arco
prolongado. Al oeste, más allá de la estancia de una noche oscura y mansiones
etíopes negros, es un bosque silencioso, impenetrable para todas las estrellas.
En la roca se ha labrado una cueva profunda que se extiende bajo la montaña:
aquí es donde la naturaleza colocó el palacio lánguida y dioses familiares
tranquilas de sueño. La calma pesada, olvido indiferente, insensible pereza,
cuyo ojo nunca antes, en la vigilancia del umbral. En la sala se sentó ociosidad
y en silencio Silencio, alas plegadas; que se alejan de los vientos furiosos
pináculo, hacen ramas de los árboles inmóviles, y son silenciosos susurros de
aves. Hay, sin sonido del mar, aunque en otro lugar cada rugido orilla; el cielo
no deja de ser silencioso. El río, que baña la cueva y huyó al valle profundo y
tranquilo que fluye entre piedras y rocas; ovejas negras están dispersos por
todas partes y están tendidos en el suelo; las semillas de las plantas se
marchitan apenas nacidos, y las hierbas de la tierra se inclinan en una pesada
respiración.
[10.100] En el interior, el cincel de Vulcano reproducido miles
de imágenes de Dios. Aquí vemos su lado Placer, coronada de flores; allí, el
Trabajo, su compañero, que se dejó en reposo. En otra parte, las acciones de la
capa de Baco o del Amor, hijo de Marte. Más tarde en el palacio en el fondo del
santuario, corresponderá a la muerte; y esta imagen no tiene nada triste. Pero
el dios mismo, libre de preocupaciones, rodeado de flores narcóticos, durmiendo
en colchonetas en su cueva húmeda: se puede sentir el olor de sus vestidos, y
sus miembros perezosos calentar su cama, encima de la cual un baño vapor negro
rechazar la respiración. Una de sus manos que apoyan su pelo despeinado en la
sien izquierda; la otra, olvidadizo, libera su cuerno. A su alrededor revolotean
mil sueños a varias caras, veraz y engañosas, tristes y agradables a través de
todos juntos. Su procesión enjambre de la noche, se ha comprometido a las vigas,
las jambas de las puertas, o tumbarse en el suelo. Un resplandor débil y pálido
rodea el palacio, y la antorcha parpadeante lánguida y saldrá invita al primer
sueño. Es allí donde los juncos vírgenes de colores brillantes de cielo azul.
Inmediatamente el bosque brilla, este valle oscuro y sonrió a la diosa. Golpeado
por la brillantez de su cinturón, el palacio del dios despierta; para él o
brillo de la antorcha, o ruido, o la voz de la diosa no puede moverse;
casualmente se extendió, hasta que Iris llega a los rayos del todo, ella se
carguen de sus párpados. A continuación, las nubes reina rubia abordan estas
palabras para él: "El sueño, más leve de los dioses, Juno comandos renderizar
inmóvil la carrera de tebanos odiosa Cadmo, que ahora, hinchó su éxito, desvelar
el afianzamiento de griegos, y se resisten a sus leyes. Rendimiento a tales
oraciones poderosas, la oportunidad es rara: reconciliándote Juno, merece el
apoyo de Júpiter. "Ella dijo, y por temor a que sus palabras no se pierdan en el
aire, que llega a la parte adormecer el pecho del dios, y repite varias veces
las mismas órdenes. Por último, la cabeza vacilante y todavía lastrado por el
resto, es una señal favorable a la diosa. Iris, ya lastrada, salir de la cueva
oscuro, y revive el esplendor de sus rayos, embotado por una atmósfera de
espesor. El dios mismo agitando las alas de los pies y las sienes, llenó su capa
flotación frescura de un cielo oscuro, deslizándose en silencio un vuelo en el
aire, y por mucho, pesa sobre las campañas Aonie. Su aliento se extiende
adormecida en el suelo, pájaros, animales de granja, animales salvajes;
cualquier lado del universo que se mueve, cae ola lánguida de las rocas, nubes
amontonadas detienen, bosques doblar sus altas cumbres, y las estrellas, en
mayor número, están separados de la bóveda del cielo colapsando. La llanura se
siente la primera, la repentina oscuridad que lo rodea, el enfoque del dios. Los
innumerables voces, el sonido de los guerreros disminuyen gradualmente. Pero
cuando agitando sus alas mojadas, [10150] desciende sobre el campamento, y el
sobre de la oscuridad más oscura y más grueso, mientras que los ojos lánguidos
estrecha, oprimen a las cabezas arco, y, medio del discurso, las palabras sin
terminar caduca en los labios. Pronto los tebanos dejó escapar de sus manos las
espadas brillantes, características crueles, y su cara cansada cae en su pecho.
Todo está en silencio: los mensajeros mismos no quieres estar, y las luces se
quedan dormidos bajo una ceniza gruesa. Pero el sueño no invita a los mismos
re-POS alarmado a los griegos, y el suave influencia del dios, amigo de la
oscuridad, lejos de su campo de sus nubes. Ellos están debajo de los brazos, y
volver a enviar la vergüenza de esa noche, de ese guardia orgullosos de ver a su
alrededor. De repente, los dioses perturban el espíritu de Thiodamas: un
repentino escalofrío se apoderó de él, y, agitación temerosa de sus sentidos, la
fuerza para revelar el destino; es la hija de Saturno y Apolo, favorable a su
nuevo profeta que inspira a este santo entusiasmo.
Se precipita en el medio
de los griegos, el aspecto y la voz terrible, impacientes del dios que su débil
corazón puede soportar. Se espuma bajo el aguijón que urgen que, explota de
rabia en su rostro, ya su vez encender o palideció sus mejillas temblorosas. Su
mirada se pasea de aquí para allá, y su pelo agitado batir guirnaldas que ciñen
la frente. Etc. Ida, la madre de los dioses corriendo del santo sacerdote su
ensangrentada, y le impide darse cuenta de que su brazo estaba destrozado por el
hierro; se vuelve contra su pecho el pino sagrado sacude su pelo con sangre, y
en su furia, vuelve a abrir sus heridas. Toda la campaña se asusta; el árbol
sagrado es de color rojo con el cuchillo, y los leones, enganchados al carro de
la diosa, de pie consternado. El adivino llega en el lugar secreto de la junta,
en la carpa de agosto Dónde se guardan las normas. Desde hace tiempo ha Adrasto,
pensando en los partidos desesperados, consternado tantas desgracias, que
deliberan innecesariamente. En torno a él se destacan los nuevos líderes, que
colocan el más cercano al rango ilustres guerreros, que deploramos la pérdida,
los siguió a lamentar y llorar por su repentina subida. Por lo tanto, cuando en
medio del mar, de repente privado de su conductor, un recipiente interrumpe su
carrera, que mandó a los lados o en la proa se hizo cargo del timón abandonado
el barco se sorprende y se mueve más sólo lentamente, y su dios tutelar no
protege una mano menos hábil. El adivino, arden de celo, los informes diciendo
que el valor de la caída ilustres cocineros de los griegos, te traemos las
órdenes sagradas de los dioses y su opinión formidable: este no es nuestro pecho
que escapar estas palabras. Es el que habla, cuyo dios su confianza, aprobado
por él, me hizo ministro, dios, que me pongo las tiras. Esta noche puede ser
bajo los auspicios de los inmortales, ricos en el trabajo y proteger a un
glorioso estratagema. El valor en sí recibe una llamada, la fortuna le pide sus
brazos. La legión de tebanos se adormece por un pesado sueño: este es el momento
de vengar la muerte de los reyes y de las desgracias de ese día. A las armas,
entonces! romper las barreras de las puertas: es la luz de la pira de sus
compañeros es ofrecerles entierro. Ya, durante los combates del día, cuando
derrotado, rechazado, nos volvimos [10200] (Juro por trípodes y nuevo para el
maestro que me hace feliz), vi lo debe suceder, y alrededor de mí, pájaros
propicios oído el aleteo de sus alas. Ahora puedo no más dudas: en este momento,
en el silencio de la noche, Anfiarao, subiendo desde el corazón de la tierra de
nuevo como estaba entreabierta (sus corceles sólo había envuelto oscuridad)
Anfiarao mismo me apareció; y estas no son las visiones monstruosas de un sueño
intranquilo o descansan advertencias secretas que traigo. "Oye lo que! me dijo,
deja que los griegos en la inacción? Oh! Dame mi guirnalda de Parnassus, dame
mis dioses! Se sufre pierden una noche tan hermosa, cobarde, indigno de mí? ¿Por
eso me enseñó los secretos del cielo y el vuelo de las aves? Ir a continuación,
vengarnos por lo menos por la espada. "Dijo, y apareció su sombra, la lanza
levantada, empujándome, con toda la velocidad de un carro, y el umbral de la
tienda. Levántate, pues, gozar del favor de los dioses: no se trata de luchar
cuerpo a cuerpo con los enemigos; Ellos están ahí tendidos en el suelo. Sígueme,
todos los que aspiran a la altura de una alta reputación, mientras que el
destino lo permiten. He aquí los pájaros de la noche darnos presagios todavía
felices. Yo, y mis compañeros dussent quedo aquí inactivo, ando solo; Sí,
solamente: Anfiarao viene y se sacude las riendas. "Entonces clamó, y sus gritos
perturbado la noche. Todas las cabezas se disparan, el celo ardiente, como si el
mismo Dios estaba en medio de ellos. Se queman para acompañar al adivino para
compartir sus peligros; pero entre ellos, sólo el treinta, la élite del
ejército, son elegidos por Thiodamas, de acuerdo con el orden de Adrasto. En
torno a él se estremeció este joven guerrero indignado a permanecer en el campo
y tener un descanso suelto. Algunos tout su origen noble, las otras hazañas de
sus padres, o su propio; otros afirman lote: "Y decidirá! "¿Es qué gritas todos
los lados. Adrastus bienvenida entre la solapa, y su valor se eleva. A medida
que el habitante de Foloe, que, en la cima de la montaña, se alimenta corceles
visto con agrado su rebaño para renovar la temporada fructífera de la primavera;
sus ojos siguen sus muchos estudiantes, algunos de los cuales trepan la montaña,
otros se separaron las olas, luchando o la velocidad con su madre se preocupa
libre, se busca reconocer aquellos que presenten mayor facilidad al yugo, ¿quién
lo hará una mejor jinete, los nacidos en los combates y el sonido de las
trompetas, y, finalmente, los que van a empezar más rápido para ganar el premio
de Olimpia. Así alegrado el antiguo líder del ejército griego. Él no se opone a
la empresa: "¿De dónde viene pronto, si llora, esta protección finales de los
cielos? ¿Qué dioses fueron a los griegos sido sacrificados? Este valor es un mal
presagio? La sangre de nuestro valor de la raza y las semillas eran mantuvieron
en desgracia? Te alabo, guerreros valientes, me gusta esta noble indignación de
nuestros compañeros; pero es una sorpresa, que están luchando en las sombras,
meditamos. Hay que roban nuestros movimientos: el gran número puede ser útil
para esconderse astucia. Reserve su valor, el día de la venganza viene: entonces
vamos a tomar las armas abiertamente, entonces vamos a caminar juntos. "Estas
palabras calmaron su ardor de fuego. Esto, cuando los vientos se agitan en su
guarida, la imperiosa Aeolus aplica contra su puerta una enorme piedra, y cierra
todas las salidas, cuando se esperaban para saltar sobre los mares. Los
asociados adivino aún Agyllée, hijo de Hércules, y actor.
[10250] Este tiene
el don de persuadir por su discurso; éste se jacta de no dar fuerza a su padre.
Bajo las órdenes de los tres guerreros a pie diez combatientes formidable de
tropas a los tebanos, que estaban de pie, con los brazos en la mano. Thiodamas,
a partir de esta expedición secreta y la guerra de un nuevo tipo, Apolo deja
caer el follaje, su insignia sagrada, dice que las manos fieles de la antigua
adorno Adrastus de su frente, y lleva una coraza y casco, este Polinices
agradecido. La feroz Capaneo Actor ceñido con una espada pesada; a sí mismo,
enemigo astuto, desprecio para marchar contra el enemigo, y seguir a los dioses.
Agyllée intercambio de sus armas con la terrible nomius: lo bueno que de hecho
en medio de las sombras engañosas, y el arco y las flechas de Hércules? Se
rompieron las almenas de los muros de su campamento, no sea que el estruendo de
las puertas de bronce se escuchará en la distancia, y se lanzan a la llanura de
salto rápido. Caminan, y pronto se ofreció a sus ojos su inmensa presa, tendido
en el suelo, como si ya se cosechan y expirando por la espada. "Camina, oh mis
compañeros! donde quiera que trae placer de la carnicería, muéstrate digno, te
lo suplico, por el favor de los dioses ", clama el adivino ya que los impulsa.
"Ver estas inmersiones cohortes en un sueño vergonzoso. O la vergüenza! Aquí los
que se atrevieron nos asedian y ver a los guerreros! "Dice, y saca su espada
relámpago, y en su rápida carrera, sus batallones brazo sacrificio. ¿Quién puede
contar los que caen bajo sus golpes, o decir los nombres de los guerreros que
sucumben? Afecta en la espalda y los pechos al azar, sofocante bajo los cascos
de los murmullos de los moribundos y siembra las crines entre los chorros de
sangre. Se dormía sin cuidado acostado en su cama; la otra, cuyas rodillas se
había debilitado después se echó sobre su escudo y mal cuidado de sus
características; yacían en medio de revueltas vino y armas; aquellos dormido,
con la cabeza apoyada en sus escudos; de vez en cuando encadenado a la tierra
por un sueño fatal, en el estado que les había sorprendido esta nube que les
trajo la muerte. Una divinidad misma protege el ejército griegos Juno, moviendo
la mano desnuda una antorcha tan brillante como la luna, mostrarles el camino,
fortalece su valor y sus víctimas designadas. Thiodamas reconoce la presencia de
la diosa; pero es silenciosa y oculta su alegría. Ya su brazo habitó, espada y
sin fuerza, y la ira debilita la facilidad de éxito. Como una tigresa del Mar
Caspio, con lo que la matanza en un joven y vigoroso toros de la manada; cuando
su ira se aplaca por la sangre cuando los dientes están cansados, y una sangre
espesa borra los matices de su vestido manchado, se contempla su trabajo, y se
quejó de tener ya satisfecha su hambre. Así, el auspicioso vaga aquí y allá,
vencido por la matanza de los tebanos; Ahora que le gustaría tener cien brazos,
un centenar de manos para la batalla; se avergüenza de estallar en amenazas
vacías, que preferiría que el enemigo se levante contra él. A su vez, el hijo
del gran Hércules y Actor matar al dormir tebanos: su empresa sigue en el camino
sangriento que han dado lugar. Un mar de sangre oscureció el césped y carpas
decaiga; [10,300] humo de la tierra; Sueño y muerte que confunden sus jadeos.
Ninguno de los tebanos tendidos en el suelo hizo mirar hacia arriba o en la
cabeza, como el dios alado representa para estas desafortunadas sus espesas
sombras: se abren los párpados sólo para morir. Alimène había extendido el juego
fuerte de la noche, y disfrutado por última vez, la claridad de las estrellas;
el desafortunado ya no ven el stand, el canto de la lira Péan tebano. Su cabeza
lánguida, que el poder de Dios se ha inclinado hacia la izquierda, y su cuello,
que no pueden soportar, sobre la base de su lira. Agyllée hunde su espada en el
pecho y disparó a su lado, que, colocado en el sonido del instrumento, en
realidad todavía resonando cuerdas bajo sus dedos convulsivos. flujos de sangre
volcó las mesas; vino en todas partes flujos de mezcla con la sangre; Bacchus
entra cortes profundos y ganchos. La feroz Actor construir sobre Thamyrus,
dormido en los brazos de su hermano; Withus perfora la parte posterior Éthècle
repelido su corona; Danaus cabeza rebanada Hebrus que, sin saberlo, por
desgracia! se deja llevar por el parque. Joyeuse, su alma vuela en la oscuridad,
sin sentir el dolor de una muerte cruel. Tendido en el suelo frío bajo el yugo y
las ruedas de su carro de confianza Palpétus asustado de sus ronquidos sus
caballos de Tebas, hierba pastoreo campos paternos. El vino está llena de su
boca sucia y sus trastornos del sueño vapores nocturnos. El presagio de Inachus
hunde su espada en la garganta: los ríos de sangre que brotan del vino caza y
sofocan los murmullos del guerrero moribundo. Ahora un sueño presagiaba su
destino en su profundo sueño, vio Thiodamas y Tebas de luto. Ya no quedaba del
mensajero del sueño nocturno, la cuarta vigilia: es el momento en que se disipan
las nubes, donde las estrellas pierden su brillo, donde BOOTES huye el carro más
brillante del sol. Ya la carnicería de trabajo carecía de sus brazos. El actor
prestación Thiodamas entonces llamado "Un éxito tan inesperado debería ser
suficiente para los griegos. Apenas si algunos de entre la multitud, escapado a
la muerte cruel; algunos guerreros degenerados sólo robado vergonzosamente sus
vidas bajo este montón de sangre moderados a ti mismo en la prosperidad. El
Tebas odiosa tiene sus deidades: tal vez los dioses que favoreció nosotros sólo
ahora están lejos de nosotros. "Thiodamas obedeció, y, levantando al cielo sus
manos manchadas de sangre", Febo, ya que el precio de esta gloriosa noche que
has revelado, recibir estos despojos antes de haber purificado sus manos ofrece
a su vidente fiel, feroz trípodes soldado; porque está en tu honor hice este
sangriento sacrificio. Si es digno cumplido sus órdenes si he apoyado el ataque
de su poderoso aliento, ven a menudo me inspiran, a menudo se digna a agarrar mi
alma. Ahora te puedo ofrecer un homenaje sangrienta, brazos mutilados, guerreros
de sangre; pero, oh Apolo Licio! Si usted otorga a nuestras oraciones para ver
las casas y templos del país, entonces exige que fieles a nuestros votos,
suspendemos sus portales sagrados para muchos ricos presentes y immolions que el
mayor número de toros que nos ha mostrado enemigos. "El dijo, recordando el
campo de la matanza de sus compañeros triunfantes. Entre ellos, el destino había
llevado Hoplée Calydonian y Dymas Monte Maenalus: tanto, amigos, compañeros de
reyes que lamentar la muerte, se resienten a sobrevivir.
[10350] Hoplée la
primera excita el guerrero de Arcadia: "¿Usted, querido Dymas, no se preocupe
matado a tu señor? Tal vez ya pastoreo aves y perros devoradores de Tebas! :
¿Qué hay en su tierra natal, O Arcadians! Aquí vienen a su manera su fiera
madre, donde el cuerpo de su hijo? El recuerdo de Tideo, entierro privado, me
persigue constantemente; y sin embargo, su pérdida es menos doloroso. Cayó en
una edad madura, su juventud no se ha roto en su flor. Sin embargo, para volver
a conquistar su cuerpo, voy a ir, voy a ir a través de la llanura en todas las
direcciones, voy a penetrar en Tebas. "Dymas respondió:" Juro por aquellas
estrellas que ruedan sobre nuestras cabezas, por la sombra errante de mi señor
honro como a un dios, me quema, ¡ay! el mismo ardor. Mi alma, abrumado por el
dolor, ha buscado durante mucho tiempo un peligro compañeros: pero ahora va a ir
en primer lugar. "Y luego salta, y triste, con la cara vuelta hacia el cielo," O
Cynthia! si llora, la que preside la noche misteriosa, es verdad, como se dice,
que su divinidad vestido y tres formas que bajes en el bosque bajo un aspecto
diferente, digne, esta vez desde por lo menos, pasamos a los ojos. Es un
guerrero una vez que su pareja es la noble infante de sus bosques, que es su
hijo, oh Diana! No hemos dicho, la diosa reduce su carro, su estrella brilla
benéfico, y, a la luz de su crecimiento interior de la tierra, se le muestra los
cadáveres. Mientras que aparecerá y la llanura, y Tebas, y de alta Citerón. Así
que cuando Júpiter estallidos de ira en el trueno de la noche, las nubes se
abren, las estrellas muestran una claridad brillante, y de repente el mundo
descubre las miradas de sorpresa. Dymas reconoció a su amigo, y Hoplée, golpeado
por la misma luz, ve Tideo. Por el momento, son mutuamente en las sombras signos
de alegría, y como si sus dueños habían vuelto a la vida, como si la muerte
cruel había abandonado su presa, así entrar en su preciosa carga y la carga en
sus hombros . No se atreven a hablar o llorar mucho: odiaba la luz del día se
acerca, y el sol, listo para subir, amenazando a traicionarlos. Ellos caminan
alrededor de la esquina en un silencio sombrío y profundo, y se lamentan de ver
el fundido oscuridad y desaparecen. El destino ver una piedad ojo celoso, y la
fortuna rara vez se acompaña empresas valientes. Ya que ven el campo y el
enfoque del ejército, y su carga está cayendo, cuando, de repente, a través de
una nube de polvo, se escuchó un ruido detrás de ellos. Estaba hirviendo Anfión,
que, en el orden de Eteocles, avanzaba a la cabeza de una tropa de jinetes; fue
responsable de lugares ex Plorer la noche, y la posición del monitor. El primero
que vio en la distancia, en un camino tortuoso, ambas formas dudosas e
inciertas, que se mueven en las sombras que la luz aún no se habían disipado por
completo. Tan pronto como se descubrió el engaño y gritó, "Stop, quienquiera que
seas! "No hay duda: reconoció enemigos. Los desafortunados guerreros acelerar
sus pasos; y temblar, pero no para ellos. Luego se pone en peligro de muerte, y
lanza su jabalina; pero él tiene cuidado de dirigir el tiro por encima de sus
cabezas, tratando a sí mismo de extraviar su mano. La línea está unido a Dymas
que fue primero, y deja a la vista; pero el magnánimo Epitus no tratar de
golpear golpes innecesarios, [10.400] y perfora los lomos de Hoplée, tocando los
hombros de Tideo pendiente. Hoplée cae; él todavía piensa que su ilustre jefe,
expira en el holding abrazado: feliz, si no previó que tomaremos de él, y
descendió con ese pensamiento a las sombras de vida crueles! Dymas giró la
cabeza y vio a este horrible espectáculo; sabe que los tebanos en conjunto se
alcance: en caso de que recurrir a las oraciones, o repeler a los enemigos con
las armas en la mano? Duda: ira excita la batalla; Fortuna aconseja a su
oración, y defiende su audacia; pero ni una ni otra de estas dos partes
tranquiliza. Por último prevalece la ira; En ella se establecen a sus pies el
cuerpo del infortunado Parthenopaeus, su brazo izquierdo alrededor de la gruesa
piel de tigre que llevaba sobre sus hombros, se enfrentó a las líneas enemigas,
y presentarlos con su espada, listo para dar la la muerte o recibir. Al igual
que una nueva leona madre, como cazadores Numidia empujó a su horrible den, se
levanta, se cubre con sus cachorros, y en su dolorosa ansiedad, oído un terrible
estruendo y doloroso. Se podría dispersar a la multitud de cazadores, sus caras
se rompen entre los dientes; Pero el triunfo del amor materno de su ferocidad, e
incluso en su furia, se incuba a sus crías en sus ojos. Pero ya quoiqu'Amphion
deseaba detener sus golpes, la mano izquierda Dymas recibió un disparo, y el
cuerpo del joven Parthenopaeus fue arrastrado por el pelo. Entonces, demasiado
tarde, Dymas recurre a la oración, y, bajando la espada: "piezas de su cuerpo,
si llora; Te mando junto a la cuna de Baco afectadas por la fuga de Ino, para
los jóvenes de su Palémon! Si alguna de que dejaron el Hogar querido hijo si él
es un padre de vosotros, dar a este niño un poco de polvo y una pequeña antorcha
funeraria. Ver tirado en el suelo y su rostro lo ruego, imploro. Es lo que deben
llenar las aves más crueles; líbrame de los animales salvajes; es lo que han
liderado la lucha. "" Bueno, dijo Amphion, si lo desea tan ardientemente
enterrar a su rey, nosotros lo que su proyecto cobardes compañeros dicen; dicen
que a pesar de que meditan sacrificados y muriendo de miedo; Estados Unidos se
encuentra en el lugar toda la verdad, y obtendrá la libertad de la vida, y una
tumba para su jefe. "Horrorizada, la Arcadia se hunde en su pecho la espada
hasta la empuñadura. "Para colmo de males nuestros, que llora, él sólo quería
deshonrar a los griegos por mi traición! No compramos nada a este precio, y él
mismo no queremos un entierro tal. Dijo, y abrió el pecho por una gran herida,
cayó sobre el cuerpo de la joven, y susurros que mueren últimas palabras "Al
menos el cuerpo de un amigo que va a la tumba! "Así que esta pareja generosa, la
etolio e ilustrado Arcadia, moviendo ambos brazos en su amado maestro, exhalar
su último aliento y morir de alegría. Usted también, aunque mis canciones suenan
en una lira menos sonido dedicado por mí, va a vivir en la posteridad. Tal vez
las sombras de Euryalus y Niso frigio no desprecian a que asociar con su gloria.
Pero feroz Amphion, triunfante, el envío de algunos de su pueblo y di al rey
este nuevo exploit, [10.450] instruir a la astucia, y darle los cadáveres
recuperados. Él mismo va al campamento griego a insultarlos, mostrándoles las
cabezas cortadas de sus compañeros. Sin embargo, la parte superior de las
paredes griegos ver Thiodamas de nuevo a ellos, y su alegría estalló cuando ven
las espadas y armas todavía roja de sangre. aplausos y gritos se elevan en el
aire, y en su disposición deseosos de reconocer cada uno de ellos, ellos se
cuelgan las trincheras. Tal joven cría tierna que se ve muy atrás a su madre;
volaría a su encuentro, y se inclina, la boca entreabierta, en el borde del
nido, a punto de caer, si la afligida madre no cubría su cuerpo, y, agitando sus
alas, para evitar que se caigan . Mientras que la lista de sus logros y rápido
éxito de la noche silenciosa, y que abrazaron a sus amigos felices, buscan
Hoplée y se quejan Dymas tarde, el jefe de la escuadra de Tebas llega una no es
rápido cerca del campamento de los griegos; se goza de la sangre que acaba de
pago, pero su alegría es corto: ve la humeante tierra y sembrado de cadáveres, y
una nación enterrado en la misma ruina. Como un hombre que ha afectado a la
terrible fuego del cielo, el héroe deja quieto y estremecimientos de terror; su
voz, sus ojos se apagó, su sangre corre fría; que está dispuesto a gemir, pero
su caballo, por sí misma, se vuelve y unidades. Su escuadra moscas y volar de
vuelta el sobre de polvo. Todavía no habían cruzado las murallas de Tebas, ya
que las cohortes Argive, dirigidos por el triunfo de la noche, se precipitan en
la llanura; ya través de las armas, miembros dispersos, tierra roja de la
matanza, la sangre de los moribundos, se precipitan los caballos y jinetes. Los
cascos pesados aplastar los cuerpos, ruedas y avergonzar a paso en un mar de
sangre. Es un placer para los griegos para limpiar y un paso a paso: parece que
pisotean con orgullo Tebas sí, volcó y reducidos a cenizas. Capaneo insta: "El
tiempo suficiente, oh griegos, el valor se escondieron en las sombras: es ahora
que es agradable para mí que superar en la cara de los cielos! Camina conmigo
abiertamente, los jóvenes guerreros, en el fragor. Mi brazo también tiene sus
presagios favorables; mi espada, su terrible furia. "Dijo, Adrasto y lleno de
alegría, y el hijo de Argos, de nuevo calentar su ardor. El sigue el presagio,
pero su rostro ya es triste. Pronto se encuentran en las paredes, y que tendrían
en el lugar que penetró infeliz ciudad si Mégarée, la parte superior de una
torre, no se gritó rápidamente "Cerrar, guardias, son el enemigo! Cierre todas
las puertas. "Hay momentos en que el exceso de miedo da fuerza. Por el momento
todas las puertas rodaron sobre sus goznes; pero mientras qu'Échion crece
demasiado lentamente ogygian la puerta, la juventud audaz de Esparta se eleva, y
en el umbral de caída que expira Panopeo, Taigeto vivo; Ebles Manzer, endurecido
para escindir las olas del Eurotas; y que, tan famoso en todos los gimnasios, y
una vez ganado el polvo de Nemea, [10.500] Alcidamas, el hijo de Tíndaro mismo
había armado el primer cesto tiempo: morir, usted levanta sus ojos a la bóveda
celestial brillaba donde su divino maestro, pero la estrella del dios da la
espalda y se desvanece como tú. Bosque Œbalie, banco resbaladiza donde la Virgen
frolicked de Laconia, el río que sonaba canciones cisne engañosa, llorar su
muerte; ninfas de Diana en Amyclae, que pagarán por las lágrimas, y su madre,
quien le enseñó las leyes de la guerra, se lamentan de que te encontré demasiado
dócil a sus enseñanzas. Así Marte desatada por la puerta que se mantiene Equión.
Finalmente Acron empujando su hombro y Aliménide su ancho pecho, cerrado por un
poderoso esfuerzo, sus puertas de bronce. Tal es, la frente curvada bajo el
yugo, dos toros lamentándose dividir el largo del suelo sin cultivar Pangea.
Pero las pérdidas compensadas esta ventaja; encarcelando a algunos enemigos,
cerraron la entrada de sus propios compañeros. En las paredes de la cámara cae
en griego Ormène; Amintor extendió las manos en súplica y pedía piedad, pero en
vano; Su cabeza golpeó y rodar por el suelo, murmurando palabras sin terminar.
El collar que parece lanzó al mismo tiempo la arena enemigo. Sin embargo
trincheras rendimiento a los esfuerzos de los griegos; los primeros obstáculos
se superan. Ya cohortes han reunido bajo los muros; pero los caballos no se
atreven zanjas anchas cruzadas: se detienen asustado y temblando ante la visión
del precipicio, que son resistentes a estimular la prensa. A veces avanzan en el
borde, a veces retroceden contra el freno. Entre los griegos, algunos comprando
estacas clavadas en el suelo, otros están colapsando puertas, y se quedan a
diluirse las cuchillas de sus hierro; armados con enormes vigas, y se sacuden
piedras sueltas ruidosamente. Algunas antorchas de tiro a la altura de las
torres, y salten de alegría ver que arreglarlo; otros atacan al pie de las
paredes y debajo de las pieles de tortuga, socavan los cimientos de las torres.
Los tebanos, en el que no queda nada de que este camino de la salvación, que
corona toda la parte superior de sus paredes, y sus enemigos tirar pilas
ennegrecidas por el fuego, lanzas brillantes hierro, plomo balas que se
calientan en el aire vacío, e incluso las piedras arrancadas de las paredes. Los
muros de contención a los griegos una terrible lluvia, y los rasgos de nicho
vómito armados silbando. Al igual que durante cabo Malea o el Monte Ceraunian,
tormentas dejan en nubes dispersas, se aglomeran por encima de las colinas de
Negro, y de repente sobre la base de las velas, y el ejército de los griegos
aplastado por los descendientes de armas de Agenor. Ni el jefe de los guerreros
o el pecho, se dobla bajo esta horrible lluvia; levantan sus caras a la pared,
sin pensar en la lesión, y sólo ven sus propios rasgos. Anthée en su carro
armados con guadañas, corriendo por las paredes, si se alcanza una jabalina
lanzada la fuerza de las paredes por unos brazos de Tebas más allá de las
riendas de las manos, se vuelve a caer, pero los enlaces de su zapato conservar
su cuerpo suspendido de expirar. juego cruel de la guerra! los brazos colgando
hacia abajo; las ruedas de fumar y la lanza del héroe en el suelo cavar un surco
de triple; [10550] su mente no detrás del polvo y el pelo ralo y revirtió deja
un largo rastro. Sin embargo trompeta golpea la ciudad con el miedo y agitar las
puertas de su sonido terrible, los griegos han compartido el asalto: en cada
entrada asedian, un guerrero feroz les precede, orgulloso de llevar una pancarta
en la que designa cada vez. En el interior ofrece un espectáculo espantoso
apenas sí Marte podría soportar la visión sin dolor. Perturbado por una angustia
horrible, flota ciudad de las mil puntos de vista opuestos que le inspiraron
tanto la desesperación, la rabia, el terror, el deseo de una fuga vergonzosa
amparo de la oscuridad. Parece que la guerra ha entrado en las paredes.
Corremos, de prensa en las ciudadelas; las calles resuenan con gritos; en todas
partes que creemos ver el fuego y la espada, parece sentir sus brazos en
cadenas: el miedo agota todos los males futuros. La multitud llenó las paredes
de los templos, altares y sonido de gemido insensibles. El mismo temor se
apoderó de todas las edades. La muerte petición de edad; juventud palideció y
rojo alternativamente; las mujeres resuenan los hogares de gemido de ellos;
niños llorando y no se puede saber la causa de sus lágrimas: el horror hacia el
exterior, son los lamentos de sus madres. Estos, exaltado por su amor a la vista
del peligro, no se sonrojan más de espectáculo; ellos tienen las armas a sus
maridos, a sí mismos les dan coraje y la ira, la animación, se precipitan con
ellos, y continuar para mostrarles el umbral de sus antepasados y sus hijos
pequeños. Por lo tanto, cuando un pastor, para deleite de las abejas a partir
del hueco de una roca, haciendo que se enjambre armado de la picadura, las
subidas de nubes negras, temblando de rabia: excitan entre sí por su hum, y en
base a toda la cara de su enemigo; pronto se agotan, se aferran desesperadamente
a sus estantes, miel tomadas lejos de ellos, y defender su cuerpo de cera que
han trabajado con tantos problemas. Para empeorar las cosas, la discordia reina
entre la gente; las opiniones están luchando. Algunos preguntan, no en secreto,
pero públicamente, en voz alta, con un tumulto ruidoso, que el trono se hace a
Polinices. El terror destruyó su respeto por el rey: "Que venga el exilio, él
reina del año debido a él; finalmente saludar a los desafortunados, los dioses
domésticos cadmeos, y su viejo padre en la oscuridad! ¿Por qué voy a pagar con
mi sangre fraude y perjurio de un rey culpable? "Otros lloraban al contrario:"
Es demasiado tarde para utilizar de buena fe, ya que prefiere ganar. "En otros
lugares multitud suplicante implorar Tiresias con lágrimas, pregunte (único
consuelo que queda a sus dolencias) desvelar su futuro; pero el adivino mantiene
oculto y enterrado en su corazón el secreto de los dioses. "Sí, sin duda,
exclamó, el rey siguió fielmente mi opinión, cuando me opuse a esta guerra no
santa. Sin embargo, Tebas O infeliz, que vas a morir si sigo tranquilo, y yo no
tener el valor de escuchar el sonido de su caída, y fiesta los ojos de la fuego
encendido por los griegos. Amor a la patria, has ganado! Ven, mi hija, un altar,
interrogar a los dioses. "Ella obedeció, y un buen ojo que observa y aprende el
hombre de edad que los extremos de la llama son una tonalidad con sangre, el
fuego se divide en dos en el altar, [10.600] y que en el medio, sin embargo, y
un haz de luz que brilla en su parte superior con una luz brillante; finalmente,
la llama se lleva a cabo, como una serpiente que se mueve en anillos largos, y
los picos rojizos romper y desaparecer. Así que la niña aprendió de su padre, y
disipa la oscuridad que cubre sus ojos. Pero ya que abarca los incendios que
coronan el altar, y la cara animada, aspira el vapor de profético. Su pelo de
cerda de horror, son agitados y levantó las tiras temblorosas: uno podría creer
los ojos abiertos, y la flor de la juventud renacer en sus mejillas marchitas;
Finalmente derramó estas palabras la furia santa que anima "Sabe, oh culpable
Labdacides, el último sacrificio que los dioses se doblará: llega a su feliz
liberación, sino por un camino doloroso. Las demandas de serpientes Marte para
crines crueles ofrecer un sacrificio cruel. El último vástago de la carrera de
la matriz de dragón: la única condición de la victoria que prometió. Feliz por
un precio tan noble, sacrificar su vida! "Al lado del altar adivino formidable
puso de Creonte, triste, e incluso lloró como el destino común de la patria:
estas palabras lo golpeó como un rayo. Queda añicos, como si el fuego celestial
había atravesado el pecho de su triple de picadura. Se entiende que se solicita
Menoeceus víctima; su miedo le dijo y lo convence demasiado bien: se queda
aturdido en una ansiedad cruel, y el corazón congelado por el miedo. De este
modo las costas de Sicilia reciben las ondas de choque que se elevan las
regiones tumultuosas de Libia. Al poco tiempo, la voz del profeta, que, llena de
dios, las órdenes que se apresura arcos Creon. A veces se besa su regazo, a
veces le evoca a cerrar la boca. En vano, Fama tomó la palabra sagrada; ella
vuela, y Tebas oyó el ruido de este oráculo. Ahora, ¿quién podría inspirar a
este joven guerrero ardiente deseo y la alegría de una muerte noble (por nunca
sin la inspiración de los dioses que el pensamiento ha entrado en el corazón del
hombre)? Enséñame el Clio, como saben; lo que es tuyo de los siglos y los hechos
de épocas antiguas. Cerca del trono de Júpiter asiento de la virtud, su
compañero divina; eso es de donde viene, pero rara vez visitan la tierra, cuando
Dios Todopoderoso concede a los mortales este favor, o que ella misma eligió por
su santuario de un alma digna de ella, y como aujourd Ay, alegre desciende de
playas paradisíacas. En su línea de acercamiento hacia arriba, para hacer
habitaciones, estrellas brillantes y ella misma tiene luces unidas a la bóveda
celeste. Ya que toque el suelo, y su cabeza está todavía cerca del cielo; pero
ella quiere cambiar sus características; que toma los del Manto sabia de modo
que uno agrega la fe completo de las respuestas del oráculo, y oculta esta
disfrazar su forma original. El brillo terrible y poderosa de sus ojos se
desvaneció; que se deja un poco de su belleza, y sus rasgos eran más dulzura.
Ella presentó su armadura y vistió los ornamentos sacerdotisa; sus vestidos
hasta el suelo, con el pelo erizado se ata con tiras en lugar de lauro ceñida su
frente, aunque la diosa traiciona con su mirada severa y un enfoque excelente.
Así Hércules lidio esposa se rió para ver lo despojó de su terrible desgarro
piel de león sobre sus hombros la púrpura Lidia perturban el tiempo, y romper
los tambores de la mano pesada.
[10650] La diosa, O Menoeceus, ¿Le resulta
digno de sacrificio y dedicación que viene a reclamar ti. A continuación,
defendió la torre Dircéenne, la enorme puerta estaba abierta, y allí, de pie en
la puerta, que moissonnais griegos. Con que la lucha contra los belicosos Hemon;
pero aunque estás unido por lazos de sangre y hermanos en todas las cosas, lo
Emportes. Una pila de cadáveres amontonados a su alrededor, sus características
sufrir todas sus vacunas, sin embargo, dan muerte virtud no es todavía a su
lado; sin descanso por su valor y su brazo sin descanso a sus brazos ansiosos.
La figura de la esfinge que protege el casco parece animar, y parece que se
levantó de un salto y corrió a la vista de carnage-; sangre roja Menoeceus
armadura brilla en la distancia. Ahora la diosa agarró el brazo del guerrero y
apagado. "Joven Magnánimo; usted que Marte no dudaría en reconocer como una rama
de la semilla guerrero Cadmo, dejar la lucha vulgar, que no son dignos de su
valor. Las estrellas están llamando, su alma hasta el cielo más atrevido. Bueno,
mi padre, en su furia profética, dio a conocer desde hace mucho tiempo en el
altar conducente a los tebanos; esto es lo que quieren y la llama y las entrañas
de las víctimas; esta Apolo que se requiere es un hijo de la tierra que piden
toda la sangre del país. Fama publicó este aviso de los dioses, y el pueblo de
Tebas, que cuentan con usted, espera: que tu alma abraza a la inmortalidad, y se
apoderaron de esta noble destino. Vaya, Yo te ruego que darse prisa por temor a
Hemón no se advierten. "Ella dijo, y al ver la vacilación que adula a su corazón
por sus seducciones secretas y se apoderaron de toda su alma. Un ciprés
alcanzado por un rayo no absorbe más rápido, de sus raíces a su parte superior,
la llama que lo consumirá, el joven, totalmente poseída por la diosa, no exalta
sus palabras y diseños en dentro de él el ardor de morir. Manto de distancia;
Una vista de su enfoque, su exterior, su tamaño, que de repente se levanta desde
el suelo hasta las nubes, se sorprendió "yo soy tú, quienquiera que seas, diosa
O que me llama ! Obedecí sin demora. "Dijo, y mientras retrocede golpea
Autorizado Pilos, que comenzó la reducción de gastos; el guerrero moribundo es
recibido en los brazos de sus pilotos. Menoeceus continúa su marcha, y no es la
gente proclama que es a lo que va a tener paz, llama a su salvador y Dios y
encender un ardor generoso. Ya una carrera apresurada y sin aliento, se dirige a
las paredes y mira hacia adelante para evitar encontrarse con sus padres
infelices, cuando de repente aparece su padre.
Tanto parar; la voz que
carecen sus frentes se inclinaron hasta el suelo. Finalmente el padre rompe el
silencio: "¿Qué nueva desgracia ti lágrimas de luchar? Lo meditas plan que es
más importante. que la guerra? Decir, mi hijo, yo te imploro, ¿por qué este
aspecto feroz? ¿Por qué esta terrible palidez en sus características? Sus ojos
de la cara paterna. Que aprendió el oráculo, que buena voz, hijo mío, te pido
para mi vejez, por sus años más jóvenes, al seno de tu madre infeliz, no creen,
el adivino, hijo querido. Se dignan dioses inspiran esta profana viejo? él, su
rostro marchito, ojos extinguidos, y que por su castigo, se parece a la de Edipo
sacrilegio. Y si era una trampa, un rey astucia traidora?
[10.700] En su
angustia, que teme que la nobleza de la sangre, y el valor que le distingue de
todos los líderes. Quizás esta supuesta oráculo de los dioses, es el que
dictaba. No se abandonará a su ardor ardor, espere, se diferencia un momento: la
precipitación es una guía fatal. Te lo ruego, esta merced a su padre! Que el
blanco de los viejos templos cubrir su cabello! Que seas un padre a sí mismo, ya
pesar de su valor, sentir los temores de que mis enemigos! No se guíe por su
pérdida lloran mis dioses del hogar. Oye lo que! la vista de los hijos de estos
padres que son nada para ti, todo esto te toca el corazón? Ah! Si usted es
sensible, en primer lugar, ten piedad de tu: esto aquí es lo que la piedad
filial, el verdadero honor; sólo hay una apariencia de gloria, un brillo vano,
un triunfo que desaparecerá con la muerte. No quiero que se flexiona tiembla
padre. Vaya, se enfrenta a la lucha, corriendo por el medio de los batallones
griegos a través de las espadas, no me contengo; pero por desgracia! déjame
lavar su lesión emocionante para secar mis lágrimas con las oleadas de sangre, y
para ver más de una vez, se salta a la refriega crueles: este es el deseo de
Tebas. "A medida que hablaba, se tomaron de las manos apretadas y el cuello de
su hijo; pero lágrimas ni oraciones tocan el joven príncipe dedicado a los
dioses: obedientes a su inspiración, engañó a su padre con una astucia hábil y
ocultan sus temores: "Usted se equivoca, mi querido padre, y el verdadero
propósito de sus miedos, te ignoran: no son ni las opiniones de los dioses, o la
furia de un adivino, ni los espíritus de dragón, que me agitan y me mueven. Que
los oráculos astuto reserva Tiresias para él y su hija, que no, que no creen en
el mismo Apolo, si de pronto, abriendo su santuario, su mano estaba vertiendo en
mi pecho su transporte profética; pero la desgracia le pasó a mi querido hermano
me lleva de vuelta a la ciudad: Hemon gimió, alcanzó una lanza griego. Sólo para
que el medio del polvo entre los dos ejércitos, y cuando los argivos ya se
tomaron en adelante, lo que pude ... pero me detendrá. Revivirá su valor;
decirle a los que llevan de la familia, apoyar suavemente. Aloi, voy a conseguir
Etion; Este hombre listo para sanar las heridas y restañar la sangre que se
agote. "Él no termina su discurso y se escapa. Creon, el corazón se sumerge en
la oscuridad negro, sigue siendo problemático, irresoluto; sus paternos
flotadores de amor de uno a otro, los temores están luchando; pero las Parcas le
llevan a creer Menoeceus. Sin embargo, en todo el campo de batalla a los
tebanos, que se había precipitado a través de las puertas rotas, son perseguidos
por la impetuosa Capaneo. La caballería, infantería, tanques aplastando los
cuerpos de sus conductores, los rendimientos todo a su furia. Aquí se sacude las
altas torres bajo una lluvia de piedras; Allí cae escuadrones y se calienta en
el medio de la carnicería; A veces se trata de robar la muerte con la ventaja
rápido, a veces blandía en el aire y lanza su jabalina; ninguno de sus
elementos, realizado alcanza las paredes que muestra lo que es el brazo que se
puso en marcha, y que cae manchado de sangre. Para los niños de Pélope, Tideo
Hippomé-don, el adivino, el joven Arcadia parece revivir; [10750] unir sus almas
en una: una, que llegaron a vivir en el mismo cuerpo, como se multiplica
Capaneo. Ni la edad ni la insignia ni la belleza, nada se mueve; con la misma
furia que golpea y los que luchan y los que anhelan: nadie se atreve a resistir
o intentar las posibilidades de la lucha. Desde la distancia, la aparición de
sus brazos, su terrible garza y amenazar a su casco, todo el estremecimiento de
horror. Sin embargo, en una muralla de eminencias parece piadosa Menoeceus; su
frente brillando con resplandor divino, la huella de un noble majestad de su
rostro, como si de repente había dejado el cielo para venir a la tierra; el
casco está separado y revela sus características; Luego baja los ojos de los
combatientes, y deja escapar un fuerte grito, que establece que todos los ojos
en él y silenció la batalla, "Dios de la Guerra, y Febo, que me concedió el
honor de una muerte hermosa , dar a Tebas alegría que mi prometido una
dedicación y compro al precio de mi sangre. Manténgase alejado de la guerra de
sus paredes, botella en Lerna cautivo el resto en desgracia nuestros enemigos;
Inachus que, al verlos se lavan las heridas por detrás, indignada contra sus
cobardes infantiles. Ven por mi muerte a los tebanos sus templos, sus campos,
sus hogares, sus hijos y sus esposas. Si, por sacrificarme por la paz, Soy
agradable; si oí, sin asustarme por el profeta; si he suscrito con entusiasmo
cuando se Tebas no creían, dar a la tierra natal de Amphion el precio que se
debe a mí, y yo te imploro, por apaciguarme a mi padre que me engaño. "Dijo, y
su brillante espada, que entrega el cuerpo de la propiedad a su gran alma, que
había gemido largo su cautiverio: una sola lesión rompió esos lazos, el héroe
riega las torres de la sangre, purifica paredes, y, sin necesidad de retirar la
espada, se precipita en el medio de los combatientes; él trata de caer sobre sus
crueles enemigos. Pero piedad y virtud le reciben en sus brazos, y suavemente
llevan su cuerpo a la tierra. Ya su alma está en frente de Júpiter, y en el
medio del cielo, viene a reclamar su recompensa. El tebanos, quitar fácilmente
el cadáver de su príncipe, y triunfalmente a llevar la en la ciudad. Veneración
de los embargos, las cohortes griegos eran diferenciarse. El héroe entra en las
paredes, realizados sobre los hombros de los jóvenes guerreros, los aplausos;
una gran multitud, cantando sus alabanzas, y en su lugar, como su fundador, por
encima de Cadmo y Anfión Algunos cubrir los guirnaldas, otras flores brillantes
de la primavera, y sentar en la tumba de sus antepasados adoraban su cuerpo.
Poco después de que hiciera estas distinciones, vuelven a la batalla. Entonces
Menoeceus padre infeliz, derrotado en su ira, gemidos, y su madre, finalmente,
puede llorar la libertad "niño noble, que era, por tanto, para ofrecerle en
expiación por los crueles Tebas a dedicar tu cabeza a los dioses infernales, que
os, me crió, una mujer de sangre real! ¿Qué crimen he cometido? lo que Dios me
irritaba contra mí? No tengo, por una alianza monstruosa molestó a los leyes de
la naturaleza; Yo no tengo, paquete de O! Los niños dan a mi hijo. ¿Qué, pues?
Sólo tienen sus hijos, se los ve en el trono y al jefe de los ejércitos. Nos
ofrecemos a la guerra cruel expiación para ese turno [10800] (ya que estos son
los deseos del dios del trueno), hijo de Edipo, ciñe su diadema en la frente.
¿Por qué se quejan de los dioses o los hombres? Es que, cruel Menoeceus, es
usted quien, más que ningún otro, avanza el último día de su desafortunada
madre. ¿Dónde te gusta la muerte, esta bendita locura que se apodera de su alma?
¿Qué he concebido en mi vientre? Lo que es triste fruto de mi amor, por lo que a
diferencia de mí mismo? AH! Reconozco la sangre del dragón, la descendencia de
esta tierra de nuestros antepasados, que se cubrió repentinamente cosechar un
armas! Por lo tanto el valor oscuro Marte era del todo en su corazón; no tenía
nada de su madre. Aquí qu'immolé de su propia mano, de precipitarse a sí mismo,
a pesar de los destinos, en las tristes sombras; y temo los rasgos griegos y
Capaneo! Fue brazos, sí, era el brazo que era volver a la duda; fue este mismo
sentido que el hierro, que te di. Vea cómo en la garganta de la espada se hundió
toda: no, la mano de un griego no habría hecho una herida tan profunda. El
desafortunado tendría mucho tiempo siendo seguido llenar la ciudad de sus
gemidos, pero sus compañeros y sus esposas dar lugar contra ella, consolarla, y
retener su lugar. Se sienta, cara magullada, ensangrentada por sus olas; huye la
luz del día, tu oído a la oración dirigida a él, y mantiene los ojos fijos en el
suelo; la voz, la razón de haber abandonado. Tal tigresa feroz, que se privó de
su pequeño, acostado solo en su cueva de Escitia, lamiendo las huellas de la
piedra todavía caliente; Ella no tiene ira, ella se olvidó de su rabia, su
ferocidad, su sed de sangre; cerca de ella en secreto pasar los rebaños de
ovejas y toros; ella se ve sin moverse. ¿Por qué la verdad también cumpliría con
sus pechos? A quién haría una presa una vez tan altamente deseada? Hasta ahora,
el armamento, las trompetas, el hierro y las lesiones fueron objeto de mis
canciones ahora es Capaneo tengo a la altura de las estrellas, no puedo cantar
como otros poetas es blanda Aonie embolden mi debilidad! Ven todo, diosa O!
atrevo a decir que conmigo: ¿Fue enviado ira del imperio de sombras? las
hermanas terribles Styx, marchando bajo las banderas de Capaneo, si hubieran
atrevido a armarse contra Júpiter? Fue un valor desproporcionada o temeraria
amor de la gloria, o el Salón del deseo que acompaña una hermosa muerte, o el
primer señuelo tan seductora del mal, o la ira de los dioses contra los hombres,
la ira tan dulce para el inmortal? Ya el desprecio guerrero para informar de su
brazo en la tierra; mira con desprecio estos cadáveres amontonados y tras haber
agotado todas sus características y las de los griegos, los brazos cansados, él
mira hacia el cielo. Pronto una feroz mirada se mide la altura de la pared, y
empujando delante de él una escalera con muchos escalones, que lleva el camino
que le debe servir en el aire. Él ondas de encina a la que la luz de la antorcha
ardiente sonrojo ambos brazos y se inflama su escudo: "He aquí, dijo, el camino
a Tebas: es aquí que guía mi audacia, a esta ronda de regado Menoeceus sangre.
Experimento lo que se puede sacrificar, y si el oráculo de Apolo no es engañosa.
"Dijo, y subiendo los escalones, se levanta triunfalmente a las paredes
sitiados. Tal es, en el aire, en las nubes, [10850] una vez aparecieron los
aloides cuando la tierra creció impía insultar a los dioses, y la única Ossa,
antes de la gran Pelión había duplicado su altura, ya habían llegado a la casa
Júpiter aterrorizaba. En este cruel final, los tebanos, como si Tebas sucumbiría
a esta última plaga, y Bellona, una antorcha en la mano sangrienta, escaladât
torres de revertir a abajo, hacer que llueva a voluntad a los cuatro vientos
Capaneo de piedras grandes, las vigas, los proyectiles pesados arrojados por
un cabestrillo (por lo que el uso de jabalinas y flechas perdido en el aire?);
que lleguen a los repetidos golpes de sus máquinas de guerra, y abrumados por
debajo de masas pesadas. En vano, esta lluvia de flechas que sitian sus hombros
no pudo mover, colgando en el aire vacío, tan firme como si estuviera caminando
sobre el suelo, avanzó, y valiente este montón de ruinas antecedentes sobre él.
Así, un río rápido atacar sin descanso los arcos de un puente viejo; ya las
piedras de pie, las vigas están desunidos: el obstáculo que irrita el río
aumentando aún más su agua y su violencia, se sacude y hace que la tierra
inestable, hasta que se rompió, en su ímpetu, todos obstáculos, y que el
ganador, que continúan libremente su carrera. Finalmente, después de largos
esfuerzos, Capaneo se lanzó en la parte superior de la torre; desde allí se
domina la ciudad; que ve su temblor, aterrado ante la visión de su inmensa
sombra; insulta a su miedo: "HORRIBLE ciudadela de Amphion! O la vergüenza! Aquí
estas paredes dóciles obedecían acuerdos afeminados, que han promocionado tanto
tiempo las falsas fábulas de Tebas! Qué gloria está ahí para derribar los muros
construidos los bellos sonidos de la lira? "Al mismo tiempo, las manos, los
pies, que destruyen los ángulos que apoyan la masa del edificio y suelos duros;
vigas se rompen y se rompen, los bonos de hierro del techo temblorosos caen, y
todas estas ruinas se hicieron las armas, el lanzamiento de los fragmentos de
roca en los templos, las casas y aplastaron la ciudad de sus propias paredes. Ya
alrededor de Júpiter temblaba, animado por sentimientos diferentes, los dioses
de Argos y Tebas. El dios, para ser justos, ve su ardiente ira a punto de
estallar, y se da cuenta de que su presencia contiene solo. Baco, observado por
su madrastra, gime, y tirando de su padre una mirada de soslayo, "Ahora, dijo,
cómo ha estado tu terribles brazos? Cuando, por desgracia! la cuna de la llama y
de la vista? oh! ¿qué has hecho con tu vista? "Apolo llora sobre estas paredes
fundadas bajo sus auspicios; el dios de Tirinto afligido equilibrio entre Lerna
y Tebas, y el arco tenso, vacila; el hijo de Dánae da alas lágrimas a Argos, su
ciudad natal. Venus llorar por la gente de su hija Harmonia y temiendo su
marido, ella se queda lejos de él, y en silencio la ira, mira el dios de la
lucha. Las negritas Pallas dioses codiciosos de Aonie. Juno está en silencio,
pero su corazón está torturado por este silencio hosco. Pero este programa no
altera la calma de Júpiter; peleas se calmaba cuando Capaneo se escuchó hasta la
mitad de las estrellas, "¿Qué! Tebas está en alarma, y ninguno de sus dioses
llegará a su defensa!
[10,900] ¿Qué le pasó a estos niños suelta una tierra
sin Dios, Baco y Alcide? Me avergüenza causar dioses menores. Ven más bien a ti
mismo, oh Júpiter! (¿Qué es más digno que usted: pelear conmigo?) Véase, ceniza
y de Sémele tumba en mi poder. Vamos, reunir toda su fuerza, todas sus llamas de
lanza. ¿Ha energía que al susto de tu trueno vírgenes tímidas, y consumirá los
palacios de Cadmo su padrastro? A estas palabras, los dioses lanzar un grito de
indignación. Júpiter se ríe de su furia, y sacudiendo las gruesas ondas de su
pelo divina: "¿Cuál es la esperanza de los mortales, después de los terribles
batallas de Flegra? Usted también debe golpear ti? El habló, y la multitud de
inmortales temblorosos co-era, la liberación lenta del dios y piden su rasgos de
venganza. Juno con problemas no se atreve a oponerse a los destinos. El palacio
celeste, antes de que la señal dada tonelada de sí mismo; las nubes se reúnen
sin la ayuda de los vientos y las tormentas vienen corriendo. Parece que Japeto
cortó cadenas infernales y qu'Inarime derrotado, de que el Etna se levantan a la
bóveda del cielo. Los dioses se sonrojan a sentir miedo; pero al ver el medio
del mundo de agitación, un guerrero de pie Júpiter causar una pelea tonta, que
admiran en silencio y dudan de la potencia de los rayos. Ya por encima de la
altura de la torre ogygian el cielo comenzó a rugir en silencio, y la oscuridad
velado las estrellas. Sin embargo Capaneo todavía se adhiere a la fortaleza en
la que él ve, y cada vez que estalló la tormenta, los relámpagos, "No, exclamó,
estas son las luces que quiero empezar de nuevo Tebas: aquí es donde quiero
revivir mi antorcha, suscitar este roble se extingue. "Todavía estaba hablando:
Rayo lanzó con toda la fuerza de Júpiter éxito. Sus moscas garza dispersos en
las nubes; bump escudo, ennegrecida por el fuego, caídas; todos los héroes de
los miembros del reparto un resplandor brillante. Los dos ejércitos se retiran,
y miran con terror qué lado va a caer, lo que llegará a su batallones llamas
cuerpo. Capaneo siente la llama efervescencia en el pecho debajo de su casco en
su cabello; él intenta tirar de su armadura quema, y tomó en su pecho como el
hierro cenizas. Sin embargo se mantiene de pie; en el cielo, respira su último
aliento, y no caer, y se inclinó hacia su pecho contra el tabaquismo estas
paredes atroces; pero sus miembros mortales lo traicionan, y su alma es
despojado de su envoltura. Si sus fuerzas habían sido más lento que abandonarla,
podría haber una segunda blasfemia merece un segundo trueno.
Libro XI.
Cuando el magnánimo Capaneo había agotado, en esta lucha
desigual, ardor sin sentido de su valor; cuando un rayo que encendió; había
desvanecido, y la llama vengadora, siguiéndolo en su caída, se había dibujado en
las paredes a lo largo de un surco, ganador Júpiter fortalece una señal de la
Olympus destrozado, y, con una mirada,. dio al mundo el cielo y el día.
Inmortales felicitarle como sil tenía apoyo, jadeante y exhausto, luchando
Flegra, y abrumar Encélado bajo peso Etna humeante. Capaneo tendido en el suelo,
abrazando las ruinas de la torre, y la terrible cara de nuevo; que deja tras de
sí el recuerdo de las naciones sus hechos, y una derrota de la que Júpiter mismo
podía presumir.
Tal imprudente que se atrevió intento de honor a la madre de
Apolo cubre un área enorme de Averno: ellos mismos buitres, unido a su pecho, se
horrorizan cuando a veces asciende au sobre su presa, contemplan su enorme
miembro, mientras que sus fibras son renacer para ofrecerles una nueva pastura.
Por lo tanto Capaneo pesa en la tierra y se quema el suelo enemigo, donde el
vapor es el celeste sufre exhala. Tebas respira; la multitud postrada en los
templos, se pone de pie: los votos, los lamentos de desesperación se detuvo, y
las madres no instan a sus hijos en sus brazos. Pero el ejército de los griegos
huyeron; ondas de soldados ruedan en el trastorno en la llanura. Estas no son
las cohortes enemigas, no los hombres de hierro que temen: la imagen de la
venganza divina recurrir a ellos en su vuelo; su terror les hace ver sus armas
de fuego, cascos lanzando un rayo, y el propio Júpiter ocupados en la búsqueda,
se enciende a su oponente con fugitivos temblorosas. Los soldados tebanos instan
con entusiasmo y disfrutar de la quia tumulto preocupado Olympus. Así que
cuando, en los campos de Massylie un león rasgó sus dientes terribles reyes de
un rebaño, y se retiró satisfecho, a continuación, los osos gritos pesados y
lobos hambrientos vienen corriendo; y con una rabia fría suelta lamer las
heridas que no han hecho. Por un lado se precipita después de ellos la Eurymedon
terrible y salvaje blandiendo elementos rústicos, y sabe, al igual que su padre,
se extendió lo caos y el terror en torno; por el otro, la licitación Alatrée que
por su noble osadía, por delante de su edad, y el niño ya padre igualmente joven
todavía. Tanto feliz! pero feliz es el que tiene el orgullo de ser padre! Sería
difícil decir cuál es mejor resonar sus brazos y lanza su jabalina con un brazo
más fuerte. La multitud de fugitivos se precipita grosor de la esquina,
demasiado estrecho para dar cabida a la junta Marte, ¿cuál es tu, la
inconstancia! Justo ahora los griegos estaban escalando las paredes de Cadmo;
Ahora defienden sus propias paredes. Por lo tanto las nubes vuelven sobre sí
mismos; Así, bajo la respiración se mueve autans de cada lado están inclinados
alternativamente cosechar; Por lo tanto, en la espuma golfo, onda veces
descubrió, a veces cubrir arena sus orillas.
Los jóvenes guerreros Tirinto,
vestido con el cuerpo de un león, como el dios ha nacido su país, ensuciando la
tierra de sus cadáveres. Desde lo alto del Olimpo, hijo feroz, Anfitrión se
quejó de ver nadar en pieles de sangre extraídos los leones de Nemea, y estos
clubes y éstos aljaba se armó una vez. De pie en el umbral de una torre de
bronce de Argos, [11,50] Enipeo, capaz de encender la lucha por los sonidos de
los guerreros de trompeta Marte favorece, a continuación, dio a los griegos una
señal triste pero útil; los exhortó a huir y buscar refugio en su campamento,
cuando de repente una lanza de aire partido de forma oblicua, y golpeado en la
mano cuando él llevó a cabo descansando en la oreja izquierda, y reforzado
sonido su mano trompeta permanece clavado en su lugar lo ocupa; el aliento de la
guerrera se pierde en el aire, la boca se congeló, y sólo se completa la
trompeta suena comenzó. Finalmente la diosa del mal, Tisiphone, saciado con la
sangre de dos naciones, busca poner fin a la guerra por la lucha de dos
hermanos; pero para ese terrible lucha que no cree que sus fuerzas suficientes y
medios, la pesadilla de vacaciones, evocando su compañero, domada, ya que
erizada de serpientes. Por lo tanto tiene un valle rechazado y solitario, excava
el suelo con su espada infernal, y susurró, dando vuelta a la Tierra, el nombre
de la furia ausente. Para dar a las mansiones del Elíseo una señal segura, se
plantea una de SER-serpientes de su pelo, el más horrible de todos, que se
coloca con un largo silbido. En esta terrible ruido de la tierra, el mar, el
cielo, todo se estremeció, y Júpiter se volvió de nuevo los ojos a las luces
Etna. Musaraña oye este ruido. Estaba con Plutón, cuando Capaneo recibió elogios
de toda la corte infernal; y se sumergió en las aguas de la laguna Estigia
muestra su sombra. la perforación de inmediato la bóveda de la tierra, se cierne
el cielo. Las sombras tiemblan de alegría, y su salida disipa la oscuridad del
infierno, tanto como su presencia oscurece la luz del cielo. El Tisiphone Negro
da la bienvenida a su hermana; y, moviendo la mano, dijo: "Hasta ahora, mi
hermana, que fue capaz de lograr el comando formidable de Dios Estigia, y
bastará la furia me ordenó: solo en el mundo j 'luché contra un mundo hostil,
mientras que el Elíseo para gobernar a sí mismos dócil y sombras. Mi estancia
aquí no ha sido sin gloria, mi trabajo sin resultado. Estos flujos de sangre que
llanura de inundación y el tabaquismo son los pantanos, la innumerable multitud
de sombras cuyas orillas del Leteo alegrarnos, es el trabajo de mi brazo es mi
glorioso trofeo. Pero ¿qué estoy diciendo? Marte disfruta de estos ex ploits
vulgares, qu'Enyo exaltará Es probable que haya visto brillando en las sombras
de la laguna Estigia que la cabeza y la boca cuyos labios estaban manchadas de
sangre negro; era yo quien presentó su rabia insaciable que devora la cabeza.
Todo el tiempo probablemente un horrible rugido descendió del cielo en sus
hogares; Bien, que era yo que se dirige contra la tormenta: inspirar Capaneo su
furia insana, me reí la lucha contra los dioses y los relámpagos desatada. Pero,
lo confieso, mi hermana, labores tanto tiempo han agotado mis fuerzas, y mi mano
es dura. El tejo infernal pierde su brillo bajo el cielo, y el brillo de las
estrellas dormir mis serpientes. Usted, cuya furia todavía está lleno, el pelo
que viven stands restablecido en las aguas del Cocito, el consentimiento para
unir sus fuerzas a la mía. Esta no es una lucha común, no para la guerra similar
a la de Marte, mientras nos preparamos. A pesar de la buena fe, a pesar de los
lazos de sangre demasiado débiles contra nosotros, son dos hermanos convertir el
hierro uno contra el otro [11100] La tarea es grande. Nos asociamos con su odio,
sus armas enemigas . ¿Por qué te detienes? Ahora, el escogido de los que desea
realizar las banderas: ambos son fáciles de entrenar, ambos son los nuestros.
Pero el desplazamiento de personas, las palabras de una madre tocando sus
oraciones Antígona es lo que temo, ese es el obstáculo que podría demorar un
momento en que nuestros proyectos. el propio Edipo, acostumbrados a cansarnos de
sus oraciones para implorar nuestra ayuda para vengar a su triste ceguera de
Edipo de nuevo se convirtió en padre; va solo, lejos de la multitud, llorando
sobre su destino como yo he dudan en invadir Tebas y los hogares, mi residencia
habitual.
Bueno, como usted obedece el exilio impíos! Argos empuja el
crimen, no deje que prevalezca la suavidad de Adrasto, asegúrese de que la gente
de Lerna se detienen sus esfuerzos. Volver de nuevo armado con todo su odio por
esta sangrienta batalla. "Así que las dos hermanas, después de haber compartido
el papel, se separa y se alejan. Tal Notus y Boreas, los dos puntos opuestos del
mundo, uno alimentaron las nieves de rhipheus, otra de las arenas Libia,
participar en combates: sonar fuera los ríos, mares, nubes, bosques. Finalmente
aparecerá sus estragos. El obrero llora por sus cosechas destruidas, y sin
embargo, todavía se queja marineros agredidos por la tormenta en el medio del
océano. Desde la cima del Olimpo Júpiter ve las Furias contamina al día, y las
manchas temblorosas cubierta del disco del sol entonces una terrible voz,
exclamó: "Hemos visto, los habitantes del cielo, ¿hasta dónde van armas furia y
lucha ayudaron a los mortales, aunque uno de ellos intentó una lucha impía y se
atreven a caer bajo el brazo. Ahora se está gestando entre dos guerreros
luchando contra un horrible, desconocida para los humanos insatisfechos.
Aparta tus ojos: que tales paquetes no tienen los dioses por testigos; se
esconden del ojo de Júpiter. Es suficiente como para haber visto el sangriento
banquete de Tántalo, y los altares horribles de Licaón, y la fiesta de Micenas,
que precipitó el curso de las estrellas asustadas. Ahora, de nuevo hay que
oscurecer el día. nubes reclamaciones Tierra re-Coís; un velo cubrió los cielos,
quiero salvar la vista en el empíreo y los habitantes de los mismos; la estrella
benéfica de Virgo, los hermanos, hijos de Leda, no ven al menos este tipo de
delitos. "Así dice Júpiter, al mismo tiempo que gira el aspecto de estos
culpables campañas, y la tierra ya no goza del dulce serenidad del cielo. Sin
embargo la virgen infernal busca rastros de Polinices a través de las cohortes
Argive; se encuentra con las mismas puertas del campo, vacilando entre la fuga o
la muerte, para escapar de tantos males. presagios siniestros habían alterado
sus sentidos. Mientras que él estaba vagando alrededor de una esquina en medio
de la noche oscura, y en la presa de la ansiedad, rodó en su alma inquieta
resoluciones más horribles, que había visto el triste cuadro de su esposa Argie,
llevando una antorcha funerarios (de visión de él es enviado por los dioses: Así
es como qu'Argie tenía que ir a su encuentro, esta es la antorcha que tenía que
llevar a su marido). Las preguntas que le hizo el héroe, "¿Dónde está usted? lo
que es este dolor? por eso estas insignias de duelo? "No se atrevía a responder
con lágrimas, y su mano se había vuelto tímida la llama. Polinices sabe que su
imaginación ha visto un fantasma. Cómo, en efecto, su esposa iba a ser parte de
Micenas y llegado de repente en el campamento? Pero ve un aviso del destino.
Siente que su muerte está cerca, [11.150] y teme tener demasiado bien. Pero
apenas la diosa de la oscuridad Acheron golpeó tres veces la coraza de su látigo
furioso fuera de él ya no piensa en el trono, lo que hace que los crímenes de la
carnicería, lo que quiere hacer en el qu'expirer cuerpo ensangrentado de su
hermano muerto. Se va a encontrar Adrasto y por lo tanto le dice: Hoy yo soy el
último de mis compañeros, he sobrevivido a la nación griega, abrazo, mi padre,
en el extremo que estamos reducidos, un pozo resolución tarde.
Esto es
cuando la sangre de los griegos aún no se había hundido, que quería a mí mismo y
el primer combate cara. No debería haber arriesgado la exposición de la flor de
la juventud y de Argos tan valioso para tantos reyes, ceñir la frente con una
diadema que debe costar lágrimas a tanta gente. Desde hace órdenes de servicio
crueles mí al menos me permitió pagar mi deuda. Ya sabes, mi padre, aunque a
ocultar sus heridas profundas y que respetas mi vergüenza y mi aflicción, soy yo
que perturbar la paz de tu Unidos, tan feliz justo debajo de su imperio (por
desgracia, no Ai yo estaba buscando en otros lugares de la hospitalidad!), era
yo el que le arrebató de nuevo a su país, a su reino. Vengar a sí mismo en el
pasado: yo con mi hermano para una última pelea.
¿Por qué tiembla? es mi
firme resolución; detenga contra allí, no se podía agitar. No, cuando mi madre
de luto cuando nuestros desafortunados hermanas sería lanzarse en medio de las
armas cuando mi padre mismo saltaría delante de mí para detener esta pelea en la
que me encuentro, y tocar mi casco de sus ojos extinguidos, no le daría.
entonces lo beba hasta la última gota de la sangre de los griegos? Sufro, para
mí, todavía vida lujosa? Vi el bostezo tierra a mis pies, y yo no me precipito;
Vi Tideo muerto, y era yo quien lo hizo culpable. Es para mí que Tegea volver a
aplicar constantemente a su rey; soy yo que en las cuevas de Arcadia, una madre
desgraciada continúa sus gemidos: Yo mismo no soy lanzaron a las aguas del
Ismene qu'ensanglantait hipomedón; No te he seguido, O Capaneo, en los muros de
Tebas; No he estado bajo los relámpagos mezclar mi ira a la suya. Entonces, ¿qué
es este amor cobarde de la vida? Pero voy a pagar mi deuda con dignamente. Lo
que todo el mundo se reúnen las mujeres, las madres de los griegos, y estos
pobres padres, responsables de años, al cual quité todas sus alegrías, he
despoblado las casas. Me luchar contra mi hermano, ¿qué puedo más! Se contemplan
este espectáculo, y están llamando a la victoria de Eteocles. Adiós, mi esposa,
adiós, dulce Micenas. Y tú, mi querido padre, recuerda que no soy la única causa
de todos estos males, los dioses y los destinos son culpables conmigo; Sea
amable con mis restos; después de la pelea, romper mi cuerpo a las aves de presa
y mi hermano; protege mis cenizas y depositarlas en una urna. Es gracia que
imploro. Puede que tu hija formar un matrimonio feliz! "Sus ojos estaban llenos
de lágrimas. Así que, ¿Dónde, el calor principios de la primavera se funden las
nieves de Tracia, Hemo baja su parte superior, y el Ródope por las orillas de
los ríos estrechos. Ya anciano, con su voz suave, calmado la furia de su hijo,
cuando las Euménides sangrientas, por un nuevo terror, las interrupciones de
mantenimiento, y, bajo la apariencia de Argos Perinto, tiene que Polinices y su
veloz caballo sus armas letales, [11.200] y que cubren el casco, cierra su oído
a las palabras de amistad. Punto en los últimos tiempos, llora; apresurémonos,
aquí está, dicen, cruzaron las puertas y por adelantado. Por lo tanto, triunfa
sobre todos los obstáculos, Polinices agarra y lanza su caballo. Se vuela en la
llanura, pálido a la vista de la envolvente diosa acompaña y su sombra. El rey
de Tebas, ofreciendo un sacrificio a Júpiter, el dio las gracias por su apoyo:
estaba convencido falsamente que los griegos habían depuesto las armas. Pero el
maestro de Olympus o cualquier otro dios se acercó al altar: la cruel Tisiphone
está allí solo, de pie en medio del temblor sacerdotes, y que desvía las
oraciones al trono de la regla de los bajos fondos, "Padre de dioses, lo que es
tuyo es debido al origen de Tebas, mi país, perseguido por los celos de Argos e
implacable Juno, desde el día en que se fundó, que, para deleite de su amante,
se vinos problemas en la orilla los bailes sidonias, y se dignó a sufrir una de
nuestra virgen le agolpa en sus flancos, mientras que a través de las olas
tranquilas que empujar rugido engañosa. Más tarde, no es un rumor falso, que
FORMAS Cadmo con un nuevo pacto, y pénétras con demasiado poder en el palacio de
Tebas. Finalmente lanzas un ojo favorable sobre la familia en Europa, estas
paredes queridos; que nos protege de tu trueno; que te vimos, no menos indignado
de que si atacaban el palacio del cielo, las nubes se acumulan, iniciar su rayo
terrible, y nos dimos cuenta de que las luces qu'entendirent nuestros
antepasados. Ahora conseguir estas víctimas, estos perfumes acumulados y toro
masculina que se debe usted. No es el poder de los mortales a ofrecerle acción
de gracias verdaderamente digno de ti. Nuestra Baco, Alcide se esfuerzan para
dar testimonio de su agradecimiento a se digna para mantenerlos estas paredes.
Dijo, un tiro de llama negro en su cara y las mejillas, se centra en su corona,
y quemaduras en la cabeza. Al mismo tiempo, el toro asusta antes de que el
disparo mortal, cubre la explanada de una sangrienta espuma se escapa de la
multitud que se opone a sus esfuerzos, y, furioso, golpeó el altar de sus
terribles cuernos . Los guardias huyeron, y el adivino consola rey. órdenes
vacilante que Eteocles comienza el sacrificio que trae una nueva víctima, y
oculta su cara en los temores que agitan. Como cuando el héroe de Tirinto sintió
el fuego unido a sus huesos, y la prenda fatal Eta se adhieren a sus miembros,
que continuó ofreciendo sus deseos y quemar incienso; impasible y sigue luchando
contra el dolor; pronto, vencido por el dolor, soltó un profundo gemido, y la
túnica de Neso victorioso entró en sus entrañas. Sin embargo Épyte, dejando al
cuidado de una de las puertas, corrió casi Eteocles con una dirección apresurada
y sin aliento al rey prohibió estas palabras entrecortadas: "Príncipe,
interrumpiendo esta ceremonia piadosa inoportuna estos sacrificios. Su hermano
toma su furia en torno a nuestras paredes; que las ondas de las riendas y su
lanza, y asedia nuestras puertas. Ese es su nombre que se repite, sólo eres él
llama la lucha. Detrás de él llorar sus compañeros afligidos; los dos ejércitos
gimen oído, y hacen que el anillo de aire con el ruido de choque armas; te
llama, siempre. Padre de los dioses, ahora es la necesidad Capaneo ... fue más
culpable? Turbado al oír estas palabras, el rey temblaba de ira, [11.250] y sin
embargo en su corazón la alegría se mezcla con la rabia. Como un toro que el
exilio de su rival, condenado a la ociosidad, hecho rey de un rebaño, si la
oreja erecta, oye el rugido de su enemigo, reconoce sus amenazas, que s' deja
hervir con rabia antes de que el rebaño, en su ardor guerrero, la formación de
espuma boca, ojos feroces, a veces de pierna excava el suelo, a veces golpea el
aire con sus cuernos. La campaña se estremeció y valles esperan con el combate
el terror. Los compañeros del rey ansiosamente multitud que lo rodeaba. "Vamos a
luchar en vano nuestras paredes, lloran; con su fuerza agotada, se atreve
llegado tan lejos! Esta es la desesperada y adecuada para enfrentar el peligro,
desterrando todo temor, rechazar toda precaución. Manténgase alejado del trono:
es para nosotros para repeler al enemigo, nos ordena a luchar. "Así le habló a
la multitud a su alrededor. Pero aquí viene Creonte exasperada, desesperado por
decir la libertad que da guerra. La memoria de su ardiente corazón sours
Menoeceus; más descanso para el desafortunado padre; que busca, le sostiene en
sus brazos; ve rechazar sus flujos de sangre en el pecho, y constantemente se
caiga la ronda fatal. Eteocles se resiste a aceptar sin resolver la lucha;
Creonte visto, y grita: "Ve, y no sufrir por más tiempo, O más atroz de los
reyes y los hermanos que salen con los funerales y las lágrimas del país, cuando
su cabeza pesa Euménides y la guerra. dioses injusticia tiempo suficiente nos
castigaban tu perjurio.
Esta ciudad, una vez llena todas las armas y la
riqueza, y demasiado pequeño para sus ciudadanos, es usted quien despoblado,
como se podría haber hecho la peste o el hambre. Y sin embargo, su orgullo se
esconde aspirar en que lo hizo. Las personas que carecen de la esclavitud: uno,
privado de la pira llamas tendidos en el suelo; los otros fueron arrastrados al
mar por el río de nuestro país; buscan sus miembros que el hierro ha rodajas,
los curan heridas profundas. Da, pues, a tantos hermanos desafortunados, su
hijo, sus padres; ir a nuestras campañas, nuestros hogares defensores. ¿Dónde
está la gran hipseo? y Dryas, nuestro aliado más cercano? ¿Dónde están los
ejércitos de la armoniosa Fokida y jefes de Evia? Ellos, al menos, es la suerte
de la guerra que los echó en las crines; pero, a mi hijo, que cayó (O
vergüenza!) víctima de la víctima trono sin honor, como un toro vil están
matando en los altares. ¡Ay! es ofrecer a marzo, los inicios de la guerra es
para expiar nuestros pecados, fuiste sacrificado, condenado a morir, y que aún
no se deciden? causado la lucha, no se levante? El laico Tiresias ordenó que
otra marcha a la batalla? Imagínese que hay todavía algo oráculo, me desgarro
hasta las lágrimas? Sólo queda para mí, ¡ay! Hemón de apoyo. Y bien ! enviar a
luchar en su lugar, y aquí, desde lo alto de la torre, lo miraba sin emoción
usted! ¿Por qué estar enfadado, y tiemblan y tirar ojos salvajes en esta banda
de guardias? Ellos también quieren caminar, que lleva tu castigo. Su madre, sus
hermanas mismas te odio, tu hermano enojado le amenaza con su espada y la
muerte; que rompe las barreras de nuestras puertas, y que tiembla! "Así dice el
viejo, temblando de rabia y desesperación. Eteocles respondió: "Usted me hace
ningún abuso, y no a la muerte gloriosa de su hijo que se mueve; Se debe hacer
la alegría y el orgullo de un padre; [11300] pero la esperanza se encuentra
debajo de su llanto, la esperanza y la ambición secreta. La muerte de su hijo es
culpable de la navegación a sus deseos.
Es en vano que me empuja a luchar, a
tomar el trono después de mí, la fortuna no abandonará la ciudad de Tebas, al
caer la vara en la mano, hombre cobarde e indigna de un hijo tan . Véngame no
sería difícil ahora; pero antes de llegar a ustedes, mis compañeros de armas,
tráeme mis armas! Los hermanos llegan a las manos. Creonte quiere suavizar su
pesar. y bien ! disfrutar de mi ira; pero después de mi victoria, ay de ti! "Por
lo tanto Eteocles difiere venganza y re-se reunieron en la vaina de la espada
que la ira había puesto en la mano. Como una serpiente que un pastor tocó un
lado incierta destaca por plegado, y chupa en su boca derramado el veneno en su
cuerpo si su enemigo lejos unos pasos y vueltas de la carretera, su amenazas
caen, el cuello, innecesariamente inflado, caídas de tensión y absorbe en sí la
ira y veneno. En el primer sonido de esa resolución fatal, no vacila en creer,
aterrado, fuera de sí mismo, Yocasta se ejecuta; se rasga su pelo, su cara
ensangrentada y su pecho desnudo, y no recuerda su género o su rango. Como madre
de Penteo se puso en la parte superior de la etapa de montaña de su furia, para
traer la cabeza de Baco cruel que había prometido. Ni sus amigos ni a sus hijas
sí mismos no pueden seguir sus pasos, ya que le da la fuerza del dolor tanto la
desesperación reavivado su edad de hielo! Ya el casco brilla en la cabeza de
Eteocles; Ya se agarraron a los jabalinas, y corre a su palpitante ardor
caballo, y temblando de alegría al oír el sonido de las trompetas y cornetas. De
pronto, su augusta madre delante de sus ojos. En este aspecto, el mismo rey y
todos sus guerreros pálidos de miedo: su escudero elimina la lanza que le había
hecho. "¿Qué rabia! Yocasta exclama: las Euménides de ese imperio se levanta con
una nueva rabia; y nosotros, después de tantos desastres, sólo nos queda la
matanza! ¿No es suficiente para nosotros tenerlo aquí dos ejércitos y han
ordenado el crimen? ¿Cómo será el ganador? Cuando estaba en el vientre? Feliz
Edipo, al ser privado de la luz! y me desgraciada para disfrutar de ella! ¿Hay
que ver entonces aquel fatídico día? Bárbaro, ¿por qué desviar las miradas
amenazantes? Usted pálida, enrojecer, se enfrenta a cambio, se esfuerza por
reprimir sus murmullos; escapan a pesar de que de su boca malvados! Lástima que
yo sea! que sigue soñando con conquistar! ¡Y bien! está en contra de mí que
debemos sentir primero los brazos. Encontrará su madre de pie en la puerta, como
un mal presagio, como un cuadro horrible de sus crímenes. Ah! monstruo! y él
pisa el pelo blanco que, aplastado bajo los pies de su caballo esta mama que se
alimenta, el vientre que te trajo. Parar! ¿Por qué oponerse a su escudo, me
empuje con el cuidado de su espada? No he invocado contra vosotros dioses de
Styx, mi venganza, no tiene la dedicada a las Furias; oye un desafortunado; me
enciende a los ojos: esto no es un padre, que es una madre que pide; el crimen
es diferente, se atreven a medir la extensión. Pero, dirá usted, mi hermano
sacude estas paredes; me causa una pelea malvados. ¡Ay! o una madre [11350] o
una hermana están buscando a flexionar. Aquí toda la familia se lo ruego;
clamamos a su alrededor; mientras que Adrasto es el único que puede desviar los
combates, y que tal vez se excita. Y que es el palacio de sus padres, es el
templo de sus dioses, esto es arrancar los brazos que te lanzas de su hermano.
"Por otro lado, se las arregla para Antígono a través de la multitud. Su timidez
virginal puede detener sus pasos. Confundido, fuera de sí mismo, que se ejecuta
en la parte superior de las paredes. El viejo solo actor acompaña; pero la edad
no le permite hacerlo con ella. Una vista distante guerreros, Antígona vacila un
momento. O el crimen! sus brazos y su voz amenazante, reconoció a su hermano que
venía hacia la ciudad: todo, entonces sonó su gemido, y apoyándose en las
paredes, listo para correr, exclamó: "¡Ah! mantener sus jabalinas; mirar a esta
torre; se vuelve hacia mí la sangrienta cresta de su casco! Son enemigos que
veas? ¿Es así como usted afirma la fe de los tratados? Por lo que las quejas de
un exiliado virtuoso! así es como él afirmó sus derechos! O mi hermano, te lo
suplico por los dioses tutelares de Argos (porque ya no respetan los de Tebas),
se encuentra todavía en su casa que un objeto que es caro, es por lo que yo t
'Beg calmar su furia; Aquí las dos familias, ambos ejércitos te conjuro conmigo.
Escuchar esto Antígona dedicado a la miseria de su pueblo, se sospecha que su
rival, y tiene más crueles, el otro hermano como usted! Ah! plantea este casco
que cubre su cara; vamos a ver por última vez quizá valoro estas
características; Juzgo mis oraciones al menos si se desgarra algunas lágrimas.
Ya las lágrimas de nuestra madre sabían Eteocles táctil; Incluso se dice que la
espada cayó de su mano: yo solo te parece inflexible palabra lamentos noche y
día y su exilio de su error, me viene a flexionar un padre enojado contra usted?
Ah! Su ira justificar su hermano. No hay duda de que violó su fe, rompió un
tratado solemne, se hace culpable, que es cruel con su propia; y sin embargo,
cuestionado por ti, no lo hizo presente para completar su crimen. "Ya estas
palabras comienzan a declinar Polinices a pesar de la furia que trata de
irritar. Ya su mano ya no tiene las riendas débilmente; se calla: suspiros se
escapan de su pecho, y el casco no pueden ocultar sus lágrimas; su ira se
desvanecerá. También vergüenza para ir y volver culpable, cuando de repente
empuja las Euménides Yocasta, rompiendo las puertas y tirar Eteocles fuera de
los muros. Exclamó: "¡Aquí estoy! y lo único que lamento es haber sido
advertido. No me culpe demoro mi madre se aferró a mis brazos. O patria! Oh
tierra que todavía no sabe lo que su rey, la victoria le saber. "" Ah! traidor!
Polinices se reúne con el acento de la furia, como si por fin su palabra? ¿Estás
aquí para luchar? He esperado mucho tiempo! Por último, demostrar que eres mi
hermano! Extremos, vienen a mí: hierro, hierro, que nuestras leyes, que nuestros
Tratados! "Dijo, lanzando a su hermano una mirada terrible.
Un odio celoso
devora, a la vista de esta gran patio que rodea el monarca, a la vista de su
casco real, su caballo cubierto de púrpura y oro que brilla en su escudo, aunque
él mismo lo hizo avergonzarse de su armadura [11,400] o su ropa. Argie, su joven
esposa, en tejido de forma, y una mano hábil se había unido el oro y el violeta
con el arte de la Méonie. Sin embargo, impulsado por los Eumenides, los hermanos
se precipitan en la llanura, en medio de una nube de polvo. Cada uno viene con
su furia, que irrita los aguijones. Sí tienen las riendas, ajustar el arnés. En
sus manos las armas brillan y sus serpientes se mezclan con las crines de los
caballos. Por último par fratricida en vez de luchar: la figura de sus rostros
se rompió bajo el casco, y vemos que estos dos enemigos salieron del mismo
costado. No se da ninguna señal; las trompetas están en silencio, los
instrumentos de Marte son mudos. Tres veces el avaro Plutón tonelada en el bajo
mundo, tres veces la tierra gime, sudores sacudido sus cimientos; los mismos
dioses combates huyeron; el valor virtuoso ya no aparece; Bellone apagó su
antorcha, Marte vuelve su caballo asustado; Minerva arrojó su égida, la
despiadada Gorgona deja inmóvil, y las hermanas infernales mirada rubor. A
continuación aparece una multitud lo siento en las paredes.
Todos los ojos
se llenan de lágrimas y gemidos estallan desde todos los lados por los ancianos
se quejan de haber vivido demasiado tiempo; De ahí que las madres que lloran, de
mama no cubierto, prohíben a sus niños para obtener su re-homenaje a la llanura.
De repente, las puertas del Tártaro abierta, y el gobernante del control negro
imperio a la sombra de los tebanos ir contempla los delitos de su nación. Estos
fantasmas se colocan en las montañas cercanas, su terrible procesión profana el
día; se gozan: sus crímenes son superadas. Adrasto se entera de que los dos
hermanos, enteramente a su furia, volar en combate, y que la pena del delito
conserva la mayor parte. Se precipita y se apresura su carro entre ellos.
Dignidades, edad, hacen que el venerable: ¿qué puede esperar de los que insultan
los sentimientos más sagrados? Sin embargo, se plantea turno: "Hijos de Inachus,
si llora, y usted, raza Cadmo, seremos testigos de este delito? Así que olvida
las leyes, los dioses, los derechos sagrados de la guerra? Parar, bárbaros! Les
imploro, Eteocles, usted, mi enemigo, pero para los cuales, a pesar de su rabia,
la voz de la sangre aún me habla; y tú también, Polinices, mi hijo, te lo
suplico, les ordeno, tirar las armas; y si la sed de regla que consume, que es
mi cetro sólo mandar en Lerna y Argos! "Esfuerzos inútiles! estas palabras de
paz no tienen ninguna influencia sobre el furioso! Las olas del mar embravecido
Escitia se separarían rocas en lugar Cyanean. Ya los dos corredores se
precipitan a través de una nube de polvo, los dardos van a escapar de las manos
de los hermanos, se inicia el crimen. Adrastus detiene oraciones inútiles, se
haya fugado, lo dejó todo, y el campamento, el ejército, y su hijo, y Tebas;
excita el ardor de Arion, caballo profética, cuyo vuelo rápido de lo presagio
destinos fatales. Como el dios elegido por un destino cruel para ser el guardián
de las sombras y el último heredero del mundo palidece inclina su carro, cuando
se vio obligado a abandonar Olympus para gobernar el Tártaro. Pero la suerte es
incierta, vaciló ante la vista de los hechos, y no esperar a comer. Dos veces se
encuentran uno sobre el otro, [11.450] y dos veces, oh alegría! sus monturas
prevalecerán e ir por mal camino. Los dardos no llegan a la meta; un penal de
sangre que se ha contaminado.
Furioso, que tiran de las riendas, cavan la
espuela en el lado de los correos que no han cumplido su rabia. Los dos
ejércitos se indignan contra los dioses que permiten a esta lucha; los murmullos
se elevaron de fila en fila; frecuencia con la que están dispuestos a participar
en su propia rabia y se oponen a la de los dos hermanos. La piedad de largo,
desterrado de la tierra, incluso prohibida la asamblea de los dioses, se había
retirado a un lugar solitario de Olympus. Despojado de sus adornos antiguos,
dolor pintado en la cara, las tiras no se detienen su pelo. El sufrimiento, lo
siento, como hermana, como la madre de los culpables, que dio el crimen lágrimas
fraterno. Se acusa a la crueldad de Júpiter, la dureza de las Parcas; ella
quiere renunciar al cielo y huir de la luz, para vivir Erebus y noche del
infierno. "Destino O! si llora, me has creado para suavizar las inclinaciones
criminales de hombres y muchas veces incluso los dioses; y sin embargo, no tengo
ni asilo entre las naciones, en ninguna parte se me hace tributo. O furia de los
mortales! O culpables industria Prometeo! Por qué es que Pirra ha repoblado la
tierra? Más feliz del mundo, el desierto si se hubiera quedado! Ver paquetes
para los hombres! "Al oír estas palabras, ella aprovechó el momento favorable:"
Vamos a probar un poco de esfuerzo, dijo, que dussent ser inútil! "Tan pronto
como desciende del Olimpo, y aunque guiada por el dolor, se dibuja en el aire
una estela luminosa. Apenas tocar el suelo, ya la dulce paz impregna los
corazones que empezar a entender la enormidad del crimen. Las lágrimas fluyen,
los corazones se tocan, y de los propios hermanos están poseídos de un horror
secreto. Así la diosa toma las armas y el parecido de un guerrero. Ella grita a
su vez a los dos ejércitos: "¿Quién de ustedes tiene hijos y hermanos? que sería
insensible a su difícil situación? Vaya, correr, acelerar para detener la pelea!
"En su caída de voz, las armas, los caballos se detienen; propio destino vacila
Ah! Tal vez los dioses tienen piedad de tantos males. La diosa de triunfo; su
oración no habrá sido en vano; pero la terrible Tisiphone prevé los efectos más
rápidos que un rayo, ella se apresura, y exclama, "que se atreve a oponerse en
la batalla, deidad cobardes, hecho para el resto? Huir, loco! Este campo de
batalla es la mía, el día de hoy es mío; ya es demasiado tarde para rescatar a
los culpables Tebas. ¿Dónde estabas cuando la guerra llamado Baco y sus orgías
con gran ira madres desnaturalizadas? dios cobarde, ¿dónde estabas cuando la
serpiente borracha Marte de una sangre mal, la tierra produjo a los guerreros de
Cadmo, la Esfinge cayó derrotado, que Layo exigía la vida de su hijo y que, a la
luz de nuestras antorchas Yocasta entró en el lecho incestuoso? Por lo tanto
Tisiphone la prensa, y mientras la piedad confusa vuelve su cara cubierta con
enrojecimiento, el rebrote de la furia con su antorcha, y dardos contra sus
serpientes. La diosa tímido velo de su cabeza, ella huye, y se quejará al
maestro de los dioses. De repente, el odio despertar con más furia; que da la
bienvenida a la lucha, los dos ejércitos se queman para contemplar, y los
hermanos continúan su crimen. El rey tomó sus armas, [11.500] y la primera lanza
su jabalina: la línea golpea el centro del escudo, pero es repelido por el oro
que lo cubre. Así avance Polinices, y escuchó la oración fatal: "dioses O ciegan
Edipo no se invoca en vano, dirigir mis tiros! mis deseos no son injustos; Me
expiar mi odio; Voy a lavarme el hierro en la sangre que he teñido el, feliz, si
el aspecto final de un hermano ve el cetro en la mano, y si gana el dolor bajo
mundo de la muerte de mi. "La línea desde el momento en que se desliza entre el
muslo del caballo y jinete, y parece querer romper los dos. Eteocles Evita
descartando la rodilla; y aguijón; engañando a la mano que lanza, se hunde en
los flancos del caballo. El animal ya no se siente la mano enojado que lo guía;
su sangre que fluye, y enrojece el suelo a su alrededor. Polinices triunfo, y
creen ver la sangre de su hermano. Eteocles miedo cree él mismo: ve a su enemigo
que se abalanza sobre su caballo herido; presionan; las riendas, las manos,
jabalinas se fusionan, y en el problema de que los agita, ambos caen en la
arena. Por lo tanto, el medio de una noche oscura, dos embarcaciones empujadas
por la tormenta chocan entre sí, romper sus remos, mezclaba sus cuerdas; luchan
contra el viento, las olas y la noche, y de repente, en la oscuridad, se hunden
y desaparecen juntos en el abismo. Como vemos los dos hermanos, cegados por la
rabia, sin reglas, sin arte; buscan sus espadas, se cruzan; la única furia a
guiar sus tiros; chispa odio bajo sus cascos, y se embarcan ve horrible.
Presionado, entrelazan sus brazos alrededor de la otra, sus feroces gritos
detrás de ellos, como el sonido de las trompetas y cornetas. Así, dos jabalíes
furiosos se disparan con la velocidad del rayo; sus cerdas cerdas, explosión de
fuego de sus ojos, y sus colmillos curvos chocan con estrépito. Desde lo alto de
un cazador de roca cercana se ve pálida este terrible choque, y, temeroso, que
conserva sus perros en silencio como el hijo de Edipo. El golpe fatal aún no
está cubierto, pero los flujos de sangre, se consumó el crimen; no hay necesidad
de las Furias. De pie junto a los combatientes, estas chicas de la noche
simplemente para aplauden y lloran al mismo tiempo para ver su furia superó.
Cada quema la sangre derramada de su hermano, y no se siente su flujo. Por
último, el exilio, cuya cólera es más vivo y el ataque solo, se eleva en sí es
emocionante, y aprovechando la grieta en la armadura, que hunde su espada en el
cuerpo de su hermano. Eteocles ningún dolor, pero sintió el frío acero.
Asustada, se cubrió inmediatamente su escudo; pero ya se siente su lesión; que
respira con dificultad; cada momento se tambalea reduce sus fuerzas. Su enemigo
sin piedad insulto a su debilidad, "¿Dónde huir, rey de Tebas? Por lo que el
efecto de una vida suave y afeminado? Su alma se debilita a la sombra de
grandeza.
[11550] Ver estos miembros endurecidos por el exilio y la miseria,
ver lo infeliz lucha: aprender a brindarle un mejor servicio armas, y desafía a
sí mismo a la prosperidad "Sin embargo, un remanente de la vida es compatible
con el monarca penal, su sangre. no se agota; aún podría apoyar, pero cayó a
propósito, y a punto de expirar, medita última perfidia. El Cytheron crece en un
largo gemido, y Polinices, que cree ganador al cielo sus manos y exclama
fratricidas: "Gracias a Dios, no han hecho inútiles deseos; sus ojos se pesan
abajo, la sombra de la muerte cubre su rostro. Ah! mientras que él me puede ver
de nuevo, date prisa en llevar el cetro y la corona! "Dice, y se apresura a su
hermano para despojarlo de sus armas, como para ofrecerles a su país, y colgar
en templos como trofeo. Pero Eteocles todavía respirando; la única venganza
detener su alma, cerca de escape. Se siente la proximidad de Polinices que lo
mira; secreto levanta la espada; su odio, que vive su conjunto, complementa las
fuerzas abandonan, y lleno de una alegría terrible, se sumerge el cuchillo en el
corazón de un odiado rival. "Ah! traidor, que respira! llora Polinices; tu rabia
que sobrevive. Oye lo que! Puede que no va a morir? Ven conmigo en el infierno;
no voy a reclamar la fe de los tratados, si Minos está llevando a cabo la urna
fatal que penaliza incluso reyes. "Así diciendo que cayó allí, y el peso de sus
brazos, aplastando a su hermano moribundo. Vamos, almas feroces mancharán el
sarro de su presencia, agotará todos los tormentos del Erebus; y usted, dioses
de la laguna Estigia, ahora guarda el ser humano infeliz. Lo que en el universo
y en cada época un solo día había visto esta horrible fratricida; nuestros
descendientes en la pérdida de memoria, y que los únicos reyes recuerdan esta
batalla monstruosa .... Pero Edipo se entera de que el delito se consuma !;
desgarra su profunda oscuridad y arrastra lejos de su terrible palacio su
cadáver viviente. Un negro y la sangre corrompida contamina la barba y el pelo
blanco; tiesa con esta sangre vil, con el pelo ocultando su cabeza sacrilegio.
Sus características son alargadas, las mejillas hundidas y los ojos arrancados
de sus órbitas dejan rastros horrible. Su mano izquierda se apoya en la joven
Antígona, la otra en un palo. Como si, dejando a su barco, el barquero odiosa de
Averno a remansos parece la luz del día, el sol y las estrellas palidecen con
problemas en la vista, y él mismo pronto se siente debilitado y derrotado por el
ambiente de los vivos. Sin embargo, durante su larga ausencia, su triste tarea
se acumula, y de todas las generaciones mortales del banco esperan la roca
pálido. Por lo tanto Edipo cruzó la llanura; junto a su hija quejado del exceso
de sus males. "Guíame, dijo, para mi hijo; lanza un padre desgraciado en su
cuerpo emocionante. "La virgen vaciló, sin saber lo que resuelva. Que avanzan
con dificultad; armas, caballos, carros avergüenzan y se detienen su marcha; en
medio del montón de muertos, no el viejo hombre tropezó, y su desafortunado
compañero se agota para apoyarlo. Después de una extensa investigación, un grito
de Antígona dice a Edipo que están cerca de los cuerpos; [11600] a tiros de
inmediato sus restos de hielo, y cubre su cuerpo. La voz le falta: tendido en el
suelo, crece gemido doloroso, besar sus heridas sangrantes, y desde hace mucho
tiempo trató en vano de hablar. Toma sus manos en sus cascos, que busca su
rostro, y, furioso por el dolor, por fin rompe su silencio y suspira: "Oh Mercy!
si llora, se llega tarde, después de tantos años, se ha llevado mi alma! Está
todavía en ese corazón un sentimiento humano? Tú has vencido, oh Naturaleza! un
padre infeliz. Mira, puedo gemir, las lágrimas fluyen a través de las heridas de
los ojos secos, y mi mano impía obedece mi dolor y hematomas mi pecho. Obtener
este tributo funeral debido a su muerte sacrilegio, hijo cruel y demasiado
similar a mí. ¡Ay! No puedo reconocer mis hijos, o saber quién hablo; Dime, mi
hija, se lo ruego, lo que es el abrazo. Ahora que estoy bárbara, lo haré honores
su estado de ánimo? Oh! Si renacieron mis ojos, si todavía podía rasgar y romper
contra mi cara! O el dolor! O deseos del padre desnaturalizado! imprecaciones,
por desgracia! demasiado bien contestado! lo que Dios vino y se paró a mi lado
para elevar mis oraciones para dictar mis palabras al destino? Esto es una
locura, esto es Erinnys es mi padre, esta es mi madre es un trono perdido y mis
ojos que me inspiró estos deseos! No se lo dije a mí mismo, lo juro por Plutón,
estas sombras suaves, para esta chica desafortunado que mis guías. Así que puedo
descender al Tártaro por una muerte digna de mí! Que la sombra de Layo no
escapar me irrita! ¡Ay! Lo terrible abrazo entre estos hermanos! ¿Qué lesiones
toco! Ah! Te imploro, desatar sus manos, desatar estos nudos fatal! Ahora que se
ha permitido al menos a su padre para conseguir entre ellos. "En estas palabras
exhalando, poco a poco la furia de la muerte se había apoderado de él. En
secreto busca un arma; pero Antígona ha planeado su propósito, y su mano casta
restado espadas. El anciano entonces irritada, "¿Dónde están sus armas
criminales? O Furias! que ha penetrado en el hierro en su totalidad en sus
cuerpos? "Su calma compañera triste desesperación; en sí y silenciados su dolor
sofoca, feliz de ver por fin su padre se echó a llorar hasta ahora tan feroz.
Sin embargo, los primeros gritos de la lucha mortal, la reina fuera de sí misma
era buscar su palacio una espada conocida, esta espada lamentables restos del
rey Layo. Después de mil veces malditos los dioses, y su horrible matrimonio, y
la furia de su hijo, y la sombra de su primer marido, se puso tensa el brazo con
dificultad, miradas, y apenas penetran la espada en el pecho. La lesión abre sus
venas heladas, y la sangre limpia la capa fatal. Ismene cae en el vientre
descarnado, se baña con lágrimas, y secado con sus cabellos herida de la que
brota la sangre. Que, en el bosque de Maratón, el Erígone quejumbroso cerca del
cuerpo de su padre muerto, se detuvo gemidos. Ella comienza a preparar el nudo
fatal, y optó por suicidarse, las ramas más fuertes. Ya feliz de haber engañado
a las esperanzas de los dos líderes, [11.650] cruel fortuna había dado a otro
poder soberano y el cetro de Amphion; Creon heredó los derechos de Cadmus.
triste resultado de la guerra! Es por lo que dos hermanos se matan, que es lo
que importa como los deseos de los hijos de Marte. La dedicación Menoeceus, la
memoria está todavía fresco, que concilia las personas. Se sube, nuevo rey en el
trono de la desafortunada Aonie fatal. O seducciones del poder! Amad el cetro!
consejero fatal! Los ejemplos de reyes que nunca conseguirá sus sucesores?
Creonte está feliz de sentarse en el lugar marcado por tantos crímenes, y
dirigir la sangrienta timón del Estado. ¿Qué podemos hacer acerca de la
prosperidad? Ya que hace desaparecer el padre Creonte, y se aclara la mente el
recuerdo de Menoeceus, a quien le debe el imperio. Enamorado del amor cruel de
la realeza, preludio de su reino, para ser todo, para que los restos de esta
triste guerra permanecen en el cielo, expuesto a todos los ojos, y que las
crines vagar tristemente sin enterrar. Pronto se encontró en el umbral de Edipo
ogygian que regresó a Tebas. Al ver esto, en secreto reconoce más pequeño que
él, y reprime su ira. Pero el rey pronto volverá a ser, envió al anciano ciego,
su enemigo mortal, estas palabras en negrita: "Id y llevar su lejano presagios
siniestros, de odio a los ganadores; distancia a las Furias, y ofrece los muros
de Tebas de su presencia. se cumplen sus esperanzas largas. Vete, tu hijo
tendido en el suelo lo que promete que permanece se entrena? "Edipo se
estremeció, presa de una rabia de su movimiento de los párpados se levanta y
batidos, como si la vida seguía allí; debilidad desapareció. Se fue y el brazo
de su hija y su personal, con el apoyo de su único enojado, diciendo que exhala
su furia: "¿Ya maestro de daño, O Creonte? Hay un momento, infeliz, que posee un
trono manchado con perfidia, y que en mi lugar en el que disfrutar de los
honores soberanos, y ya se le permite a pisotear los restos de la fortuna
¡Reyes! Ya los vencidos se vuelva a fusibles de una tumba, a sus conciudadanos
las paredes del país! ¡Valentía! se puede llevar con dignidad el cetro de Tebas.
Aquí está su primer día; pero ¿por qué tonto, por lo que limitar sus nuevos
derechos? ¿por qué dar límites tan estrechos a su poder real? Usted me prescribe
al exilio? el rigor tímida de un rey! ¿Qué te mando la espada homicidio de
inmediato para teñir mi sangre? créanme que puede venir, por satélite con ganas
de obedecer sin temor y cortar una cabeza que ofrece a sus disparos. Así
comienza: se espera que me inclino a los pies, las manos en súplica? No estoy
apegado a un amo despiadado? Y cuando quiero, es lo que sufre? ¿Me menaceras
cualquier castigo? Pero usted cree que todavía está en mi corazón en lugar de
miedo? Usted me ordenó dejar las casas de su país? Pero no he dejado
voluntariamente el cielo y la tierra? hice no cruel para mí; y sin que nadie me
obligó, mi rostro contra mi mano vengadora? rey bárbaro! ¿qué se puede pedir mí
de esa manera? Que vuelo, me alejo de esta estancia abominable: no importa dónde
voy will hide mi larga agonía, y la oscuridad de mis ojos? Yo temía que algunas
personas rechazan mi espacio oraciones tierra que ocupo en mi país? Pero Tebas
es querido para mí! De hecho, la luz es más brillante para mí, [11.700] La
mayoría de las estrellas son brillantes deleite de mis ojos! Iel no tienen que
una madre y su hijo? Por lo tanto posee y gobierna las paredes de Tebas, en
tiras mismos auspicios como Laius y yo; ser tan feliz como yo en su matrimonio,
en sus hijos. Puede no tener el valor de librarte de tu mano a su fortuna! pero
sorprendido por desgracia, todavía ama a la luz del día: basta de estos
presagios. Vamos, yo, mi hija tomar, muy lejos. Pero ¿por qué se asocia el
dolor? Dame una guía, gran rey. "Los temores Antigone desafortunados a ser
abandonados; que utiliza otras oraciones. "Venerable Creonte, el nombre de su
imperio feliz, el nombre de la santa sombra Menoeceus, perdona a su aflicción
olvidar sus magníficas palabras. Sus largas desgracias han utilizado para este
lenguaje, y no es para usted solo, es feroz: así que apóstrofe destinos y los
dioses. Dolores han endurecido su corazón, y muchas veces por mí mismo no es sin
dureza. de largo por desgracia fermentar en su libertad indomable corazón y la
esperanza inquieta de una muerte cruel, y ahora se utiliza la dirección para
provocar la ira, y afirma la prueba. Pero vosotros, os imploro, hacer un uso más
noble de la realeza. Desde lo alto de su grandeza, ahorro tiemblan, y respeta
los grandes reyes de escombros sus predecesores. Él, también, una vez elevada en
el trono, rodeado de guardias, que socorrió al infortunado, y justo para todos,
y fue recibido quejas de abogados suplicantes. Ahora, esta multitud de
cortesanos, se mantiene cerca de él como su hija. Al menos no fue exiliado! Por
lo que es un obstáculo para su felicidad? ¿Por qué volverse contra todo lo que
su odio, y todas las fuerzas del Estado? ¿Por qué la caza de estas paredes?
¿Teme que vendrá gemir en voz alta cerca de su umbral de palacio, y sities te
hace voto no deseada? Desterrar el miedo: si llora, todavía estará lejos de su
patio. Me Abase su orgullo, le enseño la obediencia del tema, me iré de la
multitud y ocultarlo en un retiro solitario: se exilió. En otros lugares paredes
que se abren para recibir al margen de la ley? ¿Quieres que vaya a Argos, que
arrastra su miseria en Micenas, sus enemigos? en el umbral de Adrasto derrotado,
le dice a los desastres de Aonie; como rey de Tebas, él pide un poco de ayuda?
¿Por qué es complacer a revelar los crímenes del desafortunado familia, para
difundir los ojos de todos sus infortunios vergüenza? Caché, se lo ruego, todo
lo que somos. No pedimos, oh Creonte! muchos favores. Ten piedad de un anciano,
un padre afligido; aquí, te lo suplico, que aquí pueden descansar sus crines! Es
permisible para enterrar al menos los tebanos. "Así reza Creonte, y cayó a sus
pies; pero su padre conduce, y la amenaza con rabia, indignado por sus ruegos.
Tel, una cueva, un león, una vez en su juventud verde, sacudió los bosques y
montañas, y se extendió aún desarmado por la apnea larga. Pero su apariencia
sigue siendo majestuoso y formidable vejez; y si un rugido derriba la oreja, se
para, se acuerda de sí mismo, y se quejó de ver su fuerza agotada, y otros
leones reinado en el campo. La letra de Antígona se redujo el rey; sin embargo,
no proporciona todo lo que piden sus lágrimas suplicantes, y se cortó parte de
la prestación.
[11.750] "No hago el exilio que, dijo, lejos de las fronteras
del país: recibida por su presencia no Sully nuestros templos y nuestros
hogares; que la madera, que Citerón, su primer asilo sigue siendo su estancia;
tu no errante en las sombras todavía puede poner fin a esta sangrienta extensa
tierra donde los restos de la guerra, donde reposan los cuerpos de dos naciones.
" El dice; los cortesanos, las gente quejándose dan su paro ellos su aprobación
engañosa, y Creonte, hinchados de orgullo, fueron al palacio de los reyes. Sin
embargo, los griegos pusieron en fuga en secreto abandonar el campo de tan fatal
para sus armas. Nadie tiene sus normas y su jefe; caminan desordenado y en
silencio, y en vez de una muerte gloriosa, que no obtuvieron una vida
deshonrada, el retorno vergonzoso. favores noche, sobre y no es su sombra
protectora.
LIBRO XII.
(12.1) El sol no tenía, sin embargo, el despertar de la
naturaleza, persiguió a todas las estrellas de Olympus, y la luna menos
brillante vio avanzar el día. De repente, la esposa de Titón disipa las nubes
fugitivas, y se abre a Febo, que reaparece, la vasta extensión del cielo. Ya los
tebanos deambulan multitud alrededor de sus casas despobladas, acusando a la
lentitud de la noche; sin embargo, esta es la primera vez después de tantos
fatigas, que finalmente pudieron encontrar algo de descanso y disfrutar de los
placeres del sueño; pero esta paz, sigue siendo inestable, dejó en ansiedad, y
la victoria recuerda los terrores de la guerra. Apenas se atreven por primera
vez dar unos pasos fuera de sus paredes, que apenas se atreven a abrir todas sus
puertas. Siempre tienen a ojos de sus viejos temores y la llanura desértica el
hecho sigue temblar. Así como bajo los pies de largo el marinero deje llevar por
las olas, la tierra parece asombroso primera, y los tebanos se sorprendieron al
ver ningún guerrero avanzar en contra de ellos, y siempre imaginar que se
extendió a batallones la tierra se levantará otra vez. Por eso, cuando los
pájaros italianos ver una balanza de serpiente se deslizan leonado nido colocado
en lo alto de una torre de antena, empujan hacia el interior de su prole tierna,
hacen su nido en un baluarte de sus uñas, y prepararse para luchar agitando sus
alas débiles. La serpiente fue, sin embargo, la familia blanca teme que el mismo
aire; Finalmente ella vuela, pero temblando, y desde el cielo todavía se ve en
su nido. Los tebanos están avanzando a través de este pueblo sin vida, los
restos dispersos de la guerra; dolor, luto sangrienta es una guía para todos
ellos. Reconocen armas, esos cuerpos, otras cabezas separadas del tronco, junto
a los cuerpos extraños; Algunos lloran en los tanques vacíos, y atender sus
quejas al enganche, ya que eso es todo lo que queda de ellos; Otros Prensa sus
besos extensas lesiones, y el valor maldición. Reúne a la muerte cadáveres
congelados. Vemos manos cortadas todavía sacuden una espada o una lanza; hay
flechas unido al centro de los ojos; muchos pueden encontrar los restos de los
que lloran, y corriendo de aquí para allá asfixia siempre dispuesto a romper en
sollozos. Pero en torno a estos troncos sin forma elevarse debates tristes:
luchamos el derecho de encender la pira, para dirigir el funeral. A menudo, los
tebanos, un momento engañados por fortuna, gimiendo en un enemigo muerto, y
ellos no pueden distinguir los cuerpos que necesitan respeto, aquellos que
tienen habilidad de arrollar. Los que han perdido a uno de sus padres, que no
tienen a nadie a llorar, dispersos en la llanura, vagar por las tiendas
desiertas de los griegos, no son la llama, o (ya que es un gran placer después
de las guerras) que buscan todos los lados Tideo el cuerpo tendido en el polvo,
en lugar del abismo en el que se traga el vidente; quieren saber dónde está el
enemigo de los dioses, si el fuego celestial sigue ardiendo en sus miembros. Ya
que pasaron el día en lágrimas, y la noche pueden mantenerlos alejados de nuevo.
A ellos les gusta saborear su dolor, para disfrutar de sus dolencias. No vuelven
a sus hogares; pero toda la noche la multitud se queda con cadáveres. Hemos
tenido éxito a su vez a gemir y gritos lastimeros, y las luces de distancia
bestias salvajes; ni la dulce influencia de las estrellas o las lágrimas que
derramó constantemente, no podía cansado y cerrar sus ojos.
[12,50] La
estrella de la mañana era la tercera vez que persiguió al amanecer, y las
montañas ya pelados lloran los bosques que son su gloria. Sombreada cumbres
Theumèse y Citerón, amigo de la funeraria, frente a los enormes troncos, y las
baterías de la llama devora árboles apilados los cadáveres de los guerreros.
Estos honores supremos se gozan los espíritus de Tebas; pero la multitud de
griegos dejó sin enterrar exhala quejas lamentables, y vuela alrededor
lamentándose prohibida dispara sus sombras. Las crines de perjurio Eteocles
crueles sólo reciben funeraria sencilla sin pompa real: su hermano sigue siendo
considerado por la ley como Argos, y su exilio sombra vaga sin honor. Pero una
pira vulgar no debe consumir los restos de Menoeceus; ni el rey ni su padre
Tebas permiten. Para él no es viles árboles están montados, como de costumbre;
se plantea un conjunto de instrumentos de guerra, tanques, escudos, y todo lo
que los griegos han salido de los brazos; y el héroe está tumbado en el enemigo
sigue siendo un ganador, el frente decorado con tiras y tranquila bahía, al
igual que el héroe de Tirinto, cuando llama al cielo, él es feliz abajo en la
quema de Eta. Para apaciguar a los espíritus de su hijo, Creonte está cubierto
Inmolar griega cautivos y caballos generosas de su armadura. Pronto el
estudiante burbujeante llama, y luego Creonte rompe estos gemidos, "Oh! Si la
generosa ambición de una bella gloria había tomado posesión de su corazón, hijo,
espíritu santo tú quieres conmigo en Tebas, y que habría reinado allí después de
mi muerte. Ahora envenenado mi alegría y el encanto de esta regalía que fue
ofrecido a mí. A pesar de los cielos y de la asamblea de los dioses, no puedo
imaginar, viven ahora bajo su inmortal, su divinidad siempre será para mí triste
por las lágrimas. Tebas que los estudiantes altares, templos dedicados a usted;
I, desafortunado padre, sólo puedo llorar. Y ahora, ¡ay! puedo ofrecer honras
fúnebres, entierro digno de ti? No, aunque no tengo el poder para mezclar sus
cenizas a las cenizas mortales Argos y Micenas, y la mía con ellos; Me cuya
vida, el crimen de O! cuyos honores fueron pagados con la sangre de mi hijo. En
caso de que el mismo día, la misma guerra impía, mi querido hijo, que ha sumido
en el Tártaro con ambos hermanos sacrílegos? Ahora Edipo y yo, que comparten el
mismo dolor; pero no son, de hecho, aunque similares, oh gran Júpiter, sombras
lloramos? Recibe, oh mi hijo! como la primera oferta, debido a su triunfo,
conseguir este cetro, la diadema de adorno de mi frente real, has sido digno de
su padre y que le costará tanto. Yo te convierta en rey: la sombra de Eteocles
se puede ver en que su amo y gemido de dolor "Dicho esto, se agrega con más
violencia:" Si me llamas si se quiere, crueles bárbaro, ahora defienden los
griegos cadáveres se queman con usted: ¿y se puede extender a ellos la
sensación, y arrebatar sus almas criminales del cielo y Erebus! ¿Por qué no
puedo seguir a los animales salvajes y aves de presa, y designar su voracidad
tiene el estos reyes impíos colgado! Qué dolor para mí ver la tierra benéfica
disolución de sus cuerpos!
[12.100] Así que le dije y repito una vez más,
que nadie se atreve a dar los griegos los honores supremos ni las llamas de la
pira, si él me quiere castigarlo con la muerte, y su cuerpo pasa a sustituir
cadáveres robados mi venganza; Juro por los dioses, por el gran Menoeceus. "Él
dijo, sus compañeros de plomo y lo llevan en su palacio. Tan crueles Fama
arrastra fuera de las paredes de Argos evacuado un tristes madres procesión,
viudas desoladas griegos Rush, como una banda de cautivos. Cada uno tiene sus
dolores, pero el exterior es la misma; su cabello se cae en su pecho, su pelaje
se eleva, la sangre fluye de sus caras desgarradas, y sus delicados brazos están
hinchados con contusiones. A la cabeza de esta procesión oscura y triste marchar
infeliz Argie; a menudo se cae en los brazos de sus mujeres que lloran, a
continuación, se levanta, y, en el error de su dolor, en vano busca su camino.
Ya no se piensa o su palacio, ni su padre; Polinices fue sólo su fe, el único
nombre Polinices está en la boca; Dirce es, es las paredes mortales de Cadmo que
vivirían preferentemente en Micenas. Luego viene la tropa de las mujeres mezcló
Calydoniennes de Lerna, que conduce el funeral de Tydée Deifila, cuyo punto de
dolor da paso a su hermana. El desafortunado no ignora el crimen de su marido,
un diente sacrílega había indignado a los muertos; pero que no perdona un amor
infeliz a una que no lo es? Después de que ella camina Néalcé; sus
características, aunque feroz, todavía inspiran piedad; en su dolor, digno del
héroe, que llama hipomedón. Luego viene el adivino malvados esposa; por
desgracia? eso no lo puede levantar una tumba vacía. Finalmente vemos aparecer
las últimas tropas de las mujeres se lamentan, dirigido por la triste compañera
de Diane, adorado al Maenalus, y el augusto Evadne: uno gemidos y lamentos la
audacia imprudente de su hijo; la otra, llena de recuerdos de su marido
formidable, muestra un dolor intenso, y maldijo el cielo. Hécate los ve en la
madera de la Escuela, y acompaña a sus gemidos; tebano Ino, al verlos, la tumba
de su hijo que viene hacia doble orilla del istmo, no es pequeña contener las
lágrimas. Eleusis, que ya se quejó acerca de sí misma, incluso se quejaron a la
multitud errante llorando en la oscuridad, y para guiar su pie, levantando sus
misteriosos antorchas. Juno a sí misma conducir por caminos tortuosos, y ocultar
sus pasos, no sea encontrada por el ejército griego, se ven obligados a
detenerse, y para cumplir con su grande y gloriosa empresa. Iris también cuidado
de mantener los cuerpos de los guerreros de Argos; se rocía en secreto roto sus
miembros con el rocío del cielo y los jugos de la ambrosía, por lo que mantener
más tiempo, y que puede, sin disolver, esperar que la llama de la pira. Pero
aquí hay un guerrero, de rostro pálido y vencido, Ornite que, debilitado por una
lesión re-reciente y todavía abierta, no podía seguir el ejército de los
griegos, con timidez desliza a través de los caminos torcidos, caminando con
dolor, apoyándose en un trozo de su lanza. Sorprende en primer lugar la extraña
conmoción perturba esos lugares solitarios; pronto se reconoce que la tropa de
las mujeres, ahora el único ejército de Lerna. Él no les pide que la razón de su
viaje que lo vería? pero, con una voz triste, se dirige a la primera palabra:
"lamentable! cuando usted usa su no?
[12.150] es lo que espera hacer los
deberes funerarios a los guerreros muertos y recoger las cenizas? Allí,
alrededor de sus sombras, asegura constantemente un guardia, y responder, al rey
de cadáveres sin enterrar mentir, sin lágrimas; lejos cualquier humano es
empujado; aves y animales salvajes sólo pueden acercarse a ella. ¿Crees que tus
lágrimas Creonte otorga su entierro? Sería más fácil para que usted pueda
flexionar los altares con sangre de Busiris, rey de Tracia y sus caballos
hambrientos, y deidades de Sicilia. Tal vez (si su alma es bien conocida por mí)
que se llevará a pesar de sus oraciones, y acabar con él, no en los cuerpos de
su marido, pero lejos de las crines queridos. Huir mientras que el camino es
seguro, y, de vuelta en Lerna, grabar sus nombres, lo único que queda en las
tumbas vacías, y llamar a la participación vano sus almas faltante. O ir a
Atenas: Atenas no está muy lejano, y la fama publica Teseo vuelve bordes
triunfantes Termodón. Implorar la ayuda de los hijos de Cécrope es la guerra, es
por las armas que debe traer a Creonte a los sentimientos humanos. "Dijo, y se
estremece de horror; sus lágrimas se detienen, estupor hielo inmensa pasión los
llevó, y todas estas caras reinan la misma palidez. Por lo tanto, cuando el
rugido de un tigre de Hircania, irritado por el hambre, sólo para golpear las
vaquillas tímidos para los oídos, la campaña en sí está preocupado por el
sonido, tiembla la manada y espera en una cruel ansiedad , que elegirá a su
víctima cruel hambre. Inmediatamente entre estas mujeres comparten las opiniones
y lucha: algunos quieren que viajemos a Tebas, y Imploramos a los soberbios
Creonte; la otra, que tenemos que recurrir a la generosidad del pueblo
ateniense. De toda la vuelta a Argos sería el peor mal y vergonzoso. Pero, de
repente Argie, armándose con un valor por encima de su sexo, se enfrenta a una
empresa peligrosa. La esperanza de una caja fuerte gloriosa seduce a su corazón:
ella quiere desafiar las órdenes de un rey cruel, ella quiere ir a donde no ir,
acompañado por un ejército de amazonas, una hija de Ródope, o Fase cubierto
nieve. Se imagina un ardid para separarse de sus fieles compañeros, ir a
desafiar a los dioses crueles, sanguinarios Creonte; ella es sin temer por su
vida, y listo para atreverse todo en el exceso de su dolor. Piedad, su casto
amor animado. Poli-agradable en sí le demuestra en cada acto de su vida, ya su
invitado, ahora su novio en el altar, ahora su amado esposo, ahora finalmente
bajo la terrible casco, triste abrazos sus brazos, y que el umbral a su vez dejó
en repetidas ocasiones que su aspecto. Pero ninguna imagen generalmente se
proporciona a sus re-aspectos que el cadáver de Polinices, tendido en el polvo
con sangre, y pidiendo a la estaca; estos pensamientos que agitan encender su
mente, ella le gusta un ardor casta estos restos tristes. Luego, volviéndose a
sus compañeros: "Usted, dijo, llame a su rescate a los guerreros de Atenas y
Maratón, y que la fortuna segundo su empresa piadosa. Para mí, como la única
causa de tantos desastres, déjame entrar en la ciudad, Ogiges [12.200] y la
primera cara de la terrible ira del rey. Las puertas de esta ciudad bárbara no
será sordo a mis golpes. Me parece que el padre y la madre de mi marido; Voy a
encontrar a sus hermanas. En Tebas, que no será desconocido. Sólo pido una cosa,
no me sostiene no: estoy obedeciendo un impulso irresistible y presentimientos
de mi corazón. "Ella no dijo nada más, y opte por acompañar la única Ménète una
vez que su gobernador y guardián de su virtud. Aunque lugares desconocidos, que
se involucra en el camino habían seguido Ornite, y cuando ve a compañeros
bastante lejos de su desgracia: "Oye lo que! dijo ella, mientras que su cuerpo
quema la tierra del enemigo, deberá esperar hasta que Teseo tomar una resolución
tardía? como jefes, un adivino, no son favorables? Durante este tiempo sus
propias sobras disminuyen. ¡No! más bien dar a mi cuerpo a las aves de presa de
efecto invernadero! Sin duda, si todavía conserva cierto sentido, mi marido
fiel! te quejas, los dioses de la laguna Estigia, mi dureza, y mi lentitud para
ir a calmar a su sombra. ¡Ay! que su cuerpo está todavía en el suelo, o que ya
está enterrado, es mi igual impiedad. Los obstáculos no son nada para mi dolor;
ni la muerte ni bárbara Creonte no pueden dejar de Ornite, que ha hecho mi ardor
animado. "Ella dijo, y, con paso rápido, atraviesa las llanuras de Megara;
conoce a decirle los caminos. Sus miedos exteriores, pero sus desgracias
inspiran respeto. Ella se va, el aspecto feroz; sin sonido sorprendió a su oído
y perturba su corazón. Lo que tranquiliza, es el mismo exceso de sus males; se
teme que se temía en sí. Así, cuando Frigia durante la noche, la Dindymus
sonidos de gemidos sacerdotisa furioso en la cabeza de un armadas ramas coro de
pino, se precipita hacia los bordes de Simois; la diosa misma ha puesto en sus
manos el hierro que debe ser teñida con la sangre que es querido para él, y
adornado sus tiras de la frente. El sol ya se había ocultado su tanque en llamas
en el mar de Hircania, a aumentar de nuevo en las ondas opuestas y Argie sin
embargo, que su dolor hace que sea insensible a la fatiga, no se da cuenta de
que el día se ha ido: se no tiene miedo de la oscuridad que cubren la llanura y
continúa su recorrido por las rocas inaccesibles, los troncos secos que amenazan
ruina, retiros bosque profundo que nunca se encendió un día sereno, cortar
zanjas campos invisibles, y los ríos que no busca los vados; va con las bestias
del campo dormido, con las casas de donde se encuentran los monstruos horribles
como el valor y la desesperación dan fuerza! Ménète sonrojó incapaz de seguirlo
de lejos y admirar lo que duerma esta pequeña niña. Lo casas de campo, que
alberga el cual no golpeó sus gemidos tímidos! ¿Cuántas veces no es desviado!
¿con qué frecuencia vio que la llama consoladora que guió su curso él y su
antorcha pálido, vencido por la fría oscuridad perder! Finalmente, después de
muchas dificultades, las pendientes de Penteo se aplanan y se desvanecen.
Ménète, sin aliento y casi agotado, comienza con estas palabras: "Si no me
engaño por el deseo de ver el final de nuestras fatigas, pista! Ogiges la ciudad
y los organismos privados de entierro: el aire que nos rodea es pesada e
infectado; aves rapaces en retorno a través del aire.
[12.250] Que esta
cruel tierra, los muros de Tebas no están muy lejos. Ver cómo su enorme sombra
se extiende en la llanura? como el brillo de la luz de morir de forma
intermitente en la parte superior de las torres? Las paredes están muy cerca.
Justo ahora que la noche era más tranquilo, y las únicas estrellas perforó la
profundidad de la oscuridad. "Argie estremeció, y la celebración de sus manos a
las paredes:" O Tebas! una vez que el objeto de mis deseos y ahora mi enemigo,
usted todavía querido para mí, si me haces intactos los restos de mi marido, lo
que se ve la cámara, con lo que acabo de entrenar por primera vez a sus paredes,
me hija de Edipo genial! Mis deseos no son criminales, imploro su hospitalidad
una estaca, a llorar en una tumba. Este lamentable exilio, empujado por la
guerra lejos de casa, el príncipe no lo hizo digno del trono paterno, darle a
mis oraciones. Y usted, le imploro, venga, si los espíritus conservan alguna
forma, si el alma vaga liberado del cuerpo. Enséñame el camino, me llevan a su
cadáver, si merezco este favor. "Ella dijo, va a la azotea rural de una casa
vecina, que reaviva la llama de una vela morir, y, confuso, fuera de sí mismo,
se apresura a través de la llanura horrible. Tales, encendiendo una antorcha a
las rocas del Etna, Ceres siento iluminado, variadas reflexiones de un enorme
orillas de llama Ausonian y Sicilia, mientras seguía las huellas del
secuestrador oscuro de su hija, y anchos surcos en el polvo. En sus gemidos
furiosos sí Encelado responde; ha sacado fuera todas las luces, e ilumina el
camino de la diosa. Los ríos, los bosques, el mar y el cielo, todas las llamadas
Proserpina; Sólo los restos de Plutón repeticiones del nombre de su esposa. Los
fieles Ménète advierte Argie, qu'égare dolor, recordar Creonte, bajando la
antorcha y eludir, parece. Reina una vez que sacudió las ciudades de Argos; ella
era el objeto de los deseos ardientes de una multitud de guerreros, las
esperanzas más nobles de la nación; y ahora aquí durante una noche terrible, sin
guía, cerca del enemigo, solo, caminando a través de montones de armas, un suelo
contaminado con sangre, y sin miedo a la oscuridad o grupos de sombras a su
alrededor, y todas esas almas que se queja sobre sus cuerpos dejaron sin
enterrar. A menudo, los pies inciertos espadas tropezar y características; pero
oculta su dolor, y sólo piensa evitar los cadáveres. Cada momento que parece
reconocer que se busca, pide un ojo curioso de todos estos guerreros tendidos en
el suelo, sus rostros se volvieron hacia ella, los mira, y se quejó de la tenue
luz de las estrellas. Ahora, a través de las sombras que llevan los hombres
duermen, Juno, que fue robado de la capa de su poderoso marido, en secreto se
dirigió a las paredes de Teseo, para flexionar Pallas Atenas y prepararse para
un fácil acceso la súplica piadosa. Cuando ve desde el aire infeliz Argie
agotarse en vano de volver a buscado en la llanura, se siente excitado ante la
visión, y convirtiendo su carro a la de la luna, ella lo aborda dulces palabras:
"Grant nuestras oraciones ligera favor, Cynthia, [12.300] si tiene alguna duda
respecto de Juno es su deferencia culpable de órdenes de Júpiter que hicieron el
triple de la noche en que fue concebido Hércules ... pero no quieren recordar
viejos agravios. Aquí es una oportunidad para que me ayude: Argie, la hija de
Inachus, tan dedicado a mi religión, que se ve la forma en que se pierde en
medio de esta noche oscura, y débil, no puede encontrar a su marido en el medio
de la oscuridad, mientras que tu disco lánguida es velado por las nubes. Les
imploro, muestra su crecimiento; que las ruedas de su carro pesan más cerca de
la tierra, y del sueño, que, inclinándose al lado de usted, dirige sus riendas
húmedos hasta su voz en los tebanos que ven. Tan pronto como ella había dicho
esas palabras, la diosa a través de las nubes y brilla su enorme orbe. Sombras
huyeron asustados, el brillo de las estrellas palideció, y la hija del mismo
Saturno es difícil argumentar que la luz brillante. En primer lugar, la luz que
se propaga en la llanura infeliz Argie reconoce capa de Polinices, su obra,
aunque el tejido se oculta a la vista y que púrpura está empañada por las
manchas de sangre. Mientras que ella invoca a los dioses, convencidos de que
esto es todo lo que queda de los restos queridos de su marido, se ve a sí mismo
casi enterrada en el polvo pronto abandonar su significado, se ve más, oyó nada,
y el dolor se detuvo sus lágrimas; se cae por completo en el cuerpo de su
marido, en busca de sus besos para recordar a su desaparición alma se expresa la
sangre de su pelo y la ropa, y se recogen para su almacenamiento. Por último,
cubriendo la voz: "¿Es realmente usted, mi marido! que, esa parte, a la cabeza
de un ejército para recuperar el trono que se debió a ti, hijo de Adrasto
pastoreo? ¿Es así como te encuentro? Por lo que la victoria frente a los que
tuve que correr? Levantarse a mí su rostro y sus ojos off: Argie llegó a Tebas;
va, presentarme en estas paredes, muéstrame el palacio de sus antepasados; a su
vez, me ofrece la hospitalidad ... Ay! ¿qué hago? este territorio donde yace su
cadáver, que es todo lo que se dejó de la tierra de sus antepasados! pelea
espantosa! tu hermano o bien no tiene el imperio. Has conseguido las lágrimas
cualquiera de los suyos? ¿Dónde está tu madre? donde es que Antígona tan famosa?
Es cierto, es para mí que moriste por mí sólo indica que ha sido derrotado. Te
dije: ¿Dónde pones tus pasos? ¿Por qué reclamar un cetro que usted se niega?
Argos es suya; tú reinarás en el palacio de tu padre; donde se espera que los
honores de una larga vida y el poder indiscutible. Pero ¿por qué quejarse? Es lo
que han causado la guerra, era yo el que le pidió a mi padre afligido, y que era
para celebrar que en mis brazos, así! Pero estoy satisfecho, dioses inmortales;
Doy gracias a ti, oh fortuna! se alcanza el objetivo de mi largo viaje. He
encontrado en su conjunto. ¡Ay! ¿Qué tan ancha y profunda herida! Su hermano, él
es ... Oh! Os ruego, muéstrame donde amplió este monstruo profano? No puedo
encontrar, y yo surpasserai aves de presa ferocidad, y voy a respaldar las
bestias salvajes. ¿Verdad, sacrilegio! consiguió las llamas de la hoguera? Y
bien ! la tierra de tu país no te verá, ya sea privada, mi marido, los fuegos
sagrados: se van a consumir su cuerpo, que recibirá el tributo de lágrimas que
querían robar reyes muertos. Usted no es, pero voy a mantener mi fe; descenderá
conmigo a la tumba. Nuestro hijo será testigo de mi dolor; mis jóvenes Polinices
consolarán mi viudez. "
[12.350] Ahora, el desafortunado Antígona llevaban
al mismo lugar sus lágrimas y su antorcha funeraria; finalmente encontró, pero
con dificultad, en ocasiones deseaba salir de las paredes, ya que constantemente
se controla por los guardias; el mismo rey ordenó que desafían; centinela éxito
con más frecuencia y en mayor número luces iluminan la ciudad. Por lo tanto,
justifica su lentitud a los dioses, su hermano, y, fuera de sí mismo, tan pronto
como el guardia odiosa fue abandonado algún tiempo para dormir, se precipitó
fuera de las paredes. Al igual que un susto león joven campañas de su rugido
cuando, libre al fin, ella puede por primera vez para disfrutar de su ira lejos
de su madre. Antígona es pronto cerca de Polinices, porque sabe la terrible
llano, que sabe dónde está su hermano yace en el polvo. Ménète, cuyo dolor está
inactivo, ver su movimiento, y trata de ahogar los gemidos de su querido alumno.
Sin embargo, los últimos sonidos de la voz de Argie golpean los oídos de la
Virgen atento. Una mujer vestida con el pelo negro, dispersos y abandonados, la
cara manchada de sangre, que aparece a la luz de las estrellas y el doble de la
antorcha. "¿Cuáles son las crines, que uno que busca, imprudente, esta noche me
pertenece? "Argie permanece mucho tiempo sin respuesta, pero ella tira de su
velo sobre su cabeza y la de su marido, presa de un miedo repentino y olvidando
por un momento el dolor. Este silencio confirma las sospechas de Antigone; ella
insiste en que presione sus preguntas la princesa y su compañero; pero la fuerza
a los dos abandona; Permanecen inmóviles y en silencio. Finalmente Argie
descubre su cara, y abrazando el cuerpo de su marido, ella habla así: "Si en el
medio de la sangrienta guerra de los desechos vez al igual que a encontrar unos
restos de comida, si también teme las órdenes crueles de Creonte puedo,
confiando en que, a decir verdad. Si no está satisfecho, lo que puedo juzgar por
sus lágrimas y sus gemidos, así! hacer un pacto, yo soy la hija del rey Adrasto
... Pero, oh dioses, alguien no se aproxima? Esto se está volviendo a mi querido
Polinices rinde homenaje a la estaca que a pesar de la defensa del rey ... "La
virgen hija de Cadmo, está aturdido, se echó a temblar, y de repente se
interrumpe diciendo" ¿Es me, compañero de sus infortunios, O ceguera del
destino! es que me tiene miedo? Estos miembros que quieren que este cuerpo que
llora, que es también uno que lloro. Me invade ti, oh vergüenza! O cobarde
ternura de una hermana! "Así escribe Antígona. Mientras tanto correr al cadáver
de Polinices, rodeando sus brazos entrelazados, y en su dolor codiciosos se
mezclan sus lágrimas, su pelo, compartir sus queridos miembros, y convierte las
lágrimas se mojó la cara y mirar cuidadosamente la cabeza sin vida. Se habla de
su hermano, el otro de su marido, y ambos son interrumpidos mil veces hablar de
Tebas y Argos. Sin embargo Argie ya recordar las desgracias de su marido: "Te
juro, dijo, por nuestro dolor común, este chivato cumplido el deber sagrado por
estas queridas sombras a ambos, y estas estrellas que me escuchan, a la derecha
aunque él perdido y el exilio, que no era el honor que había perdido ni el suelo
nativo, ni el corazón de una madre querida, que era el único que lamenta, c 'era
el nombre de Antígona se repite día y noche; Lo tenía más barato que tú, y me
dejó sin desesperación. Tal vez antes de que el paquete, la parte superior de
una torre alta, se vio distribuyendo banderas griegas a batallones; [12400]
quizá porque ha mirado el medio del ejército, y cómo ha aclamado su espada y
columna que flota sobre su cabeza; y yo estaba muy lejos ..! Pero lo que Dios lo
llevó a este exceso de rabia? Qué! oraciones eran impotentes sobre su corazón?
se resistió a sus lágrimas? "Antígona le daría una cuenta del delito y su triste
causa: su fiel compañero les da este sabio consejo:" Terminar su negocio ahora
bien; ya las estrellas palidecen, preocupado por la proximidad del día; no
interrumpa esta obra pía; vendrá un tiempo hasta las lágrimas cuando el funeral
se levantará llama, entonces usted va a llorar "No lejos de allí, la ola de
murmullos indicó los bancos de Ismene, sigue funcionando todo con problemas y
manchado de sangre .. Se cuelgan allí, uniendo sus esfuerzos débiles, los
miembros rotos de Polinices, y el viejo se les presta la ayuda de su brazo
debilitado por la edad. Y hermanas Phaéton, hijo del Sol, se lavan en la onda
cálida Po su cuerpo humeante; y casi no tenían encerraron en la tumba, que ya,
árboles lastimeros, que echaron raíces en las orillas del río. Tan pronto como
la ola se había lavado la sangre de las heridas, y que los miembros del héroe
habían tomado la pálida belleza de la muerte, los dos desafortunados después de
los últimos besos, que buscan el fuego; pero no ven a su alrededor en el suelo
excavado una masa de cenizas frías, inanimada; en todas partes se extingue la
llama. Una pila estaba todavía en pie, y es el resultado de la casualidad o la
voluntad de los dioses, que era donde se habían consumido los miembros de la
cruel Eteocles. Tal vez la fortuna que quería crear un nuevo milagro, tal vez
las Euménides tenía que guardaba esas luces listo para dividir. En su afán
iguales que perciben la baja llama que aún vive en las brasas ennegrecidos, y
una alegría triste brilla de forma simultánea en su cara. Ellos no saben que es
la pira; pero sea lo que sea, le rogaron que se permita que otros vengan cenizas
se mezclan con los de ella, y sufren como sombras extranjeros se fusionan. Pero
los hermanos se encuentran de nuevo en cuanto el fuego consumidor tocó miembros
de Polinices, el álamo temblón juego, y empuja a un cadáver atroz; brotan
llamas, dividiendo su punto más alto, y plantean dos picos brillantes rompiendo
a su vez: parece que el pálido Orcus enfrentó a los incendios Euménides, ya que
los dos torbellinos de llamas amenazan, y s' esforzarse para alejarse el uno del
otro; la misma pila de madera se agitó bajo este peso y se aparta. A
continuación, las vírgenes asustadas exclama: "Ya está hecho, nos han reavivado
nuestras manos fuera de su ira! Fue su hermano; porque eso sería tan cruel como
para negar una hospitalidad sombra? Aquí está un fragmento de su escudo,
reconozco que la correa media quemada: era su hermano. ¿No ves las llamas como
separados, y aún así parecen luchar? Sí, su odio terrible que sobrevive; la
guerra no ha hecho nada. Infeliz! mientras que se lucha así, ganador de Creonte,
el trono se pierde en su caso. Lo ciego celo! Contra el cual esta rabia? Calmar
sus amenazas; y ustedes, todos exiliados, siendo una víctima de la injusticia,
finalmente se da; que es su esposa que os rogamos, es su hermana; o ambos
tiramos en medio de las furiosas llamas. "Ella dijo, y de pronto la tierra
tiembla, hace tambalearse la parte superior de los edificios, y promueve la
falta de armonía de dos fuego enemigo. Este choque ha perturbado el resto de los
guardias, [12.450] que duermen en sí ofrecen una imagen de la escena sombría. Se
precipitan a la vez y rodean la llanura de una red de hombres armados. El único
hombre de edad ve con antelación de terror; pero de pie delante de la estaca,
lejos de negar que vienen a desafiar abiertamente las órdenes de Creonte
bárbaro, anunciar por medio de su gemido agudo, su robo pía; están tranquilos
porque han visto la caída de cenizas mientras el cadáver. Ambos competirán a
morir, y su corazón se inflama con la esperanza de la muerte. Acusan
alternativamente encantados de tener, uno de los restos de su hermano, el otro
los de su marido, "Fui yo quien robó el cuerpo y me llama; mí, la piedad me
guió, y me encanta. "Ellos son una alegría para llamar a la tortura en su
cabeza, para llegar a sus manos a las cadenas. Una observación más en su paro
ellos el respeto que mostraron una vez; que parece animado por la ira y el odio,
la discordia que estalla en sus gritos. Por último que causan a los guardias del
rey, que se apoderó de ellos. Sin embargo; ni mucho menos, Juno, que concilió
Pallas introdujo en las paredes de Atenas madres desoladas de Argos. La diosa
está preparando favorablemente a este gemido multitud, y hacer cumplir sus
lágrimas; sí pone sus manos ramas de olivo, tiras de suplicantes, y les
recomienda a recorrer el rostro velado, los ojos bajos, y el desgaste en sus
manos urnas vacías. Todo el pueblo de Atenas en masa y llena las calles y los
tejados de los edificios. ¿Qué es este enjambre de mujeres? por la que muchos
desafortunado a la vez? Todavía no se conoce la causa de sus males, y ya nos
quejamos. La diosa través de las filas de los ciudadanos y los de los argivos;
dijo lo que su nación, que los guerreros que lloran la muerte, y lo que buscan.
Ellos mismos están anunciando en todas partes se fueron a Tebas y la crueldad de
Creonte. Por lo que las aves en Tracia, una voz inarticulada, la dirección de su
techo hospitalario sus quejas de dolor, y le dicen a largo doble himen y el
crimen de Tereus. En el medio de la ciudad se encontraba un altar que se dedica
a ninguna deidades más altas. Clemencia dulce se aseguró su estancia, y el
desafortunado han hecho sagrado. Siempre está instando nuevos suplicantes; Nunca
ningún voto fue rechazada por la negativa; se escuchan todas las oraciones. El
día y la noche, el acceso es libre, y simplemente se quejan de propiciar el
artículo de lujo diosa en su culto; ni el humo del incienso, o la sangre de las
víctimas se reciben en sus aras; sólo las lágrimas de la humedad, y se ve que
suspendió trenzas sombrías de pelo, y la ropa que les han dejado infeliz fue a
un mejor destino. Una ronda es una madera tranquilo donde crecer tiras laureles
cargados, objeto de profunda veneración, y los suplicantes olivo. No hay imagen
de la diosa, sin estatua de bronce que reproduce sus características; se
encuentra en el corazón de los mortales que le gusta habitar. Todavía temblando
y miserable multitud entristece este lugar: la única felicidad no es altares
fatales. Fama informa que después de la muerte de Hércules, sus hijos, protegido
por los brazos de Atenas, fundada este templo. La fama es aquí abajo la verdad;
porque es lo correcto para creer que los dioses, [12.500] a la que Atenas
siempre fue una tierra hospitalaria, premió a los modales más suaves que dan,
ceremonias religiosas: las semillas que la Tierra recibe en su seno, y que
santificado este lugar un asilo común a todos los infortunios; Anger por lo
tanto debería ser prohibido, Amenazas, tiranía; Fortuna también fue excluido del
altar donde se produjo la justicia, y ya en ese momento, era conocido por
innumerables naciones. Aquí es donde reunir a todos los que han sido derrotados
en la guerra, o expulsados de su tierra natal, o despojado del trono, o culpable
del crimen involuntario; no se les antoja descansar. Fue más tarde en el umbral
del hospital derrotado las Furias Edipo, protegido de los escombros de Olinto, y
extendió los Orestes desafortunadas de su espectro madre. La gente de este lugar
muestra la compañía afligidos mujeres de Lerna; van allí, y la multitud de
descontentos, que se les había precedido, se retiraron antes que ellos. Apenas
están al pie del altar, se sienten suavizar los cuidados de su corazón. Tales
como grúas expulsados de su tierra por el norte, una vez flotando en los mares
que delinean Pharos, que despliegan sus batallones en el aire y gritos de
júbilo: contentos de poder, en un cielo sereno, valiente heladas, y cálido en
las orillas del Nilo sus alas congeladas! Sin embargo, después de intensos
combates, Teseo derrotó a las hijas de Escitia, y llevó en un carro adornado con
laureles, entró en las paredes de su país. La voz de alegría, el clamor que
golpea muchas fanfarrias de trompetas de aire, después de los horrores de la
guerra, anunció su regreso. Antes de él caminando los despojos del enemigo y
todos los emblemas de la cruel dios de la batalla: los tanques de estas vírgenes
guerreras, camillas cargadas cascos, caballos tristemente bajando la cabeza,
ejes rotos que una vez que se estaban armando para la tala de bosques o agrietar
el hielo Palus Maeotis, estremecimiento luz, cinturones brillantes joyas,
escudos sangría, todavía manchadas de sangre; siempre sin miedo, traicionan su
sexo ni el miedo, ni gemidos vulgares; desdeñan a rebajarse a la oración, y
buscar sólo el templo de las Pallas castas. Todos los ojos se centran en primer
lugar en el ganador, cuyo carro tirado por cuatro caballos blancos; a
continuación, el aspecto de las personas que se unen a Hippolyte, ya menos
feroz, y que está doblado al yugo conyugal. La maravilla envidia de Atenas y
susurro en secreto, al ver que se atrevieron a violar las estrictas costumbres
de su país; su pelo es fragante; que toda su mama se oculta debajo de la capa:
susurran lo que se mezcla una barbarie con niños nobles de Atenas, hijo y darle
a su enemigo. La triste Pelopidae también un poco lejos del altar donde estaban
sentados y admirando el orden y la pompa de triunfo. Al ver esto, el recuerdo de
sus maridos derrotados de nuevo a sus mentes. El ganador se detuvo el carro; la
parte superior de su excelente asiento, se informa a las causas de su aflicción,
y dar a sus oraciones un oído comprensivo. Entonces la esposa de Capaneo la
primera, por lo que puede decir a él, "hijo Vaillant Egeo, cuya fortuna tiene
repentinamente en nuestra ruina una rica cosecha de gloria, no somos una raza
extranjera; somos puros de cualquier delito. Tuvimos que permanecer Argos para
los cónyuges de los reyes: [12550] ay! que no eran sin valor! ¿Por qué, en
efecto, ejecutar siete ejércitos, y quieren obligar a los descendientes de
justicia de Agenor? No se quejan de su muerte, el derecho de la guerra, es la
oportunidad de armas; pero no eran monstruos nacidos en las cuevas de Sicilia ni
centauros horribles Ossa, estos guerreros caídos en la batalla! No hablo de su
origen, sus nobles antepasados. Era un hombre de sangre, muestra Teseo, que
fluía en sus venas; eran hombres cuya alma emanado de las mismas estrellas como
el suyo, cuyo cuerpo estaba formado por los mismos elementos que: Creonte y les
prohíbe las llamas de la pira! y, como el padre de las Euménides o barquero del
Leteo, que vuelve a crecer desde la orilla del Estigia, y mantiene suspendido
entre el cielo y Erebus! ¡Ay! O la naturaleza! principio de los seres, lo que le
pasó a su voluntad divina? ¿Dónde está el brazo de lanzar un rayo injustamente?
¿Dónde estás tú, oh Atenas? Ya el séptimo día es de ruptura, y desvió sus
cadáveres a los caballos aterrorizados. Horrorizado, todas las luces del cielo
nocturno de distancia de sus estantes; ya los animales salvajes a sí mismos se
encogen de ese horrible comida y aves de presa que huyen del campo del que
escape a las exhalaciones fétidas aire. Lo que aún queda de sus cuerpos? Permite
al menos para quemar sus huesos desnudos, su carne podrida! Prisa, hijos
ilustres de Cécrope. Es hasta usted para vengar este atropello antes Émathiens o
tracios, u otras personas que quieren conseguir un día a sí mismos las llamas de
la pira y habitan en la morada de los espíritus te deleitas este honor, por lo
que será el final de la venganza? Luchamos, tampoco; pero el odio se extingue,
pero la triste rabia debe detenerse antes de la muerte. A sí mismo (como la fama
nos ha enseñado tus hechos gloriosos) No ha entregado a los monstruos más
feroces Sinis y el famoso Cerción; que quería una participación de los restos de
Scyron crueles, y no me cabe duda de que las tumbas de las Amazonas han fumado
en las orillas del Tanais, en la que lleva los brazos victoriosos. No desprecie
este nuevo triunfo; dedica uno de su trabajo a la tierra, el cielo, Erebus: qué
no hacer de la seguridad de los campos paternos de Maratón, liberado el feo
palacio de Creta, y su viejo amigo Did -no recibió el premio de sus lágrimas?
Así que puede que nunca luchar sin la ayuda de Pallas; Que Dios Tirinto no
envidiando sus hazañas, igualando su propia; se puede ver que su madre siempre
montado en un carro triunfal, siempre victorioso; y Atenas, siempre invencible,
nunca tener que descender a tales oraciones! "Ella dijo que todos aplauden, y
tienden al rey, con gritos de dolor, sus manos en súplica. El héroe, hijo de
Neptuno, se sonrojó, se trasladó hasta las lágrimas. Pronto transportado con
rabia, grita: "¿Qué Furia arrojó sobre la tierra estos nuevos hábitos? No es que
no recibieron los corazones de los griegos a mi partida, cuando me dirigía
Escitia y el puente de nieve. ¿De dónde viene esta nueva moda? ¿Es usted Teseo
conquistado, oh Creonte bárbara? Aquí estoy ! la lanza aún sediento de la sangre
de un inocente. Will, punto de retardo; dirige este lado de su caballo, A Mi
Fegeo fieles! y pronto llegó a Tebas, ordenada hogueras para los griegos, o
declarar la guerra a los tebanos. "Dijo, y olvidando las dificultades de la
guerra y la carretera, [12.600] exhorta a sus soldados, y revivir su fuerza
agotada. Como un toro, después de haber recuperado sus amores y el imperio de
los bosques, restos de sus peleas, pero si el rugido suena de un nuevo rival en
el bosque, aunque la cabeza y el cuello eran todavía mojado de una lluvia
sangre, que prepara sus nuevas armas, pie toca el suelo, ocultando sus gemidos,
y ocultar sus heridas en el polvo se levanta. Pallas ella, agitando su escudo,
despertar a la medusa, el miedo a Libia, la medusa protege el pecho. De repente,
todas las cabezas de serpientes pie y mirar a Tebas. Apenas el soldado Attica
preparado para caminar, ya infeliz Dirce tembló acentuado con la corneta. Amor
combate no sólo inflama los jóvenes compañeros de Teseo, que regresó victorioso
de las Cáucaso; los residentes rurales, hasta que los alienígenas lucha se
levantan en armas. Se ve acelerando en las multitudes, y se puso bajo las
banderas de su líder que cultivan los campos fríos BRAURON Muniquia, Pireo,
marineros temblorosos refugio, y Maratón, como derrotado Oriente No. no había
mostrado; a continuación, aparecerá de enviar guerreros que luchaban las casas
de Ícaro y oculta, una vez huéspedes generadores dioses, el Melene green,
Igualada rica en bosques, el Parnitha sonriente viñedos y Lycabessus, que crece
en grasa preferentemente de oliva; Todavía viene Ileen feroz, el labrador de
fragante Hymettus y Acharnien, que cubrió primero thyrses hiedra salvaje. Otros
abandonan el Sunium, qu'aperçoivent mucho, los barcos de Oriente, y que se
desarrolló en el mar que lleva su nombre Egeo infeliz, engañados por engañar a
los buques de vela de Creta. Estos guerreros son de Salamina; Eleusis, dedicada
a Ceres, suspende el arado, y también envía a su pueblo a la batalla. A ellos se
unen a las personas que rodean CALLIRHOE nueve veces sus aguas errantes y los
que refresca los Iliso que anteriormente cómplice en el secuestro Orithyie,
ocultó sus bancos ama el dios de los getas. Para la lucha aún despoblado esta
colina, testigo de la gran disputa que divide dos deidades, hasta el rock de
mama jugó un nuevo Sprang árbol, y se extendió por su sombra en el campo de
Neptuno, forzada rendimiento. Hippolyte también había marchado a las paredes de
Cadmo, a la cabeza de sus guerreros del norte; pero es retenido por la esperanza
cierta de que pronto será madre: su marido pido a renunciar a los peligros de
Marte, y se echó en la cama nupcial su arco probada en combate. Tan pronto como
Teseo ve a sus guerreros, dirigido a la lucha feroz, besar justo a toda prisa
sus consentidos, se dirigió a ellos estas palabras de su carro, "Warriors, que
me va a defender las leyes de los Pueblos, los derechos de la humanidad,
aumentar su valor; que son dignos de esta empresa. Por nuestra parte el favor de
los dioses y los hombres, la naturaleza nos, y el montaje de silencio Averno
guía; por el otro, es la compañía de castigo, Tebas amargas largas - las
hermanas crueles, armados con serpientes, conducen a sus normas. Caminar con
alegría, y tener fe (el rey te pido) en una causa noble. "Dijo, y arrojando su
lanza, le da la señal para empezar.
[12.650] Así que cuando Júpiter,
responsable de las heladas, pesa sobre el eje hiperbóreos, y las estrellas
tiemblan ante la proximidad de la tormenta, la casa de Aeolus se abre con un
accidente, la tormenta de indignación en su reposo se eleva y los vientos del
norte se escuchan sus silbatos. Las montañas, las olas tiemblan, nubes luchan
por el uso, y luego triunfan trueno y el rayo furioso. La tierra gime bajo los
pies que pisotean; mensajeros de zapatos pesados cambia la faz de la tierra; y
el caballo y el pie, sus innumerables cohortes muelen los campos devastados.
Pero las olas de polvo grueso pueden oscurecer el brillo de las armas: su
ruptura relámpago en el aire, lanzas brillan en las nubes. Los atenienses
reunidos con sus negocios en la noche y la oscuridad pacífico. Es una lucha
feroz entre estos guerreros que va a ganar velocidad, que fue el primero desde
la cima de una colina, señalarán los muros de Tebas, y el primer lanzamiento de
la jabalina contra las paredes de Ogiges. El hijo de Neptuno, puerta Teseo
grabado en su escudo batallones enteros; estamos registrados con el bronce sus
primeras hazañas, las cien ciudades, cientos de terraplenes de Creta; visto a sí
mismo en las complejidades de la madriguera, la guarida del monstruo, mientras
que en una lucha terrible, abrazó a sus manos y brazos musculosos erizadas
cuello Minotauro, y evita que los cuernos al rechazar la cabeza espalda. El
terror se apodera de la gente cuando está cubierta de esta imagen espantosa,
Teseo Los avances en el combate: que creemos ver dos veces el héroe, el doble de
las manos manchadas de sangre. Se recuerda a sí mismo de su gloria pasada,
observando a los compañeros de su desgracia, una vez que el umbral tan
formidable, y su amante de Creta palidecen ante la visión del préstamo a echarlo
de menos. Sin embargo Creonte operado bárbara en el tormento, con las manos
atadas a la espalda, Antígona e hija de Adrasto, la viuda de Polinices: tanto
disfrutar de la alegría, el orgullo de hacer frente a esta muerte gloriosa; El
show de la garganta para la espada, y engañar a la crueldad del tirano. De
repente aparece Fegeo, con lo que las palabras de Teseo, que sostiene en sus
manos la rama benéfica del olivo; pero él quiere la guerra, la guerra es en sus
amenazas, su palabra es alta y temblando de ira, y el agente demasiado leal,
repite ese enfoque Teseo, que ya cubre la campaña de sus cohortes. El rey de
Tebas permanece inmóvil, preocupaciones inquietas. Su orgullo que amenazaba
vacila, y su primera attiédit ira. Por último, ha asegurado, y con una sonrisa
falsa y oscura: "Las ruinas de Micenas es tan baja que la lección? Éstos son
nuevos agresores que los recibimos, vienen! Pero después de la guerra no se
quejan: la ley de los vencidos. "Dijo, y vio nubes de polvo grueso que oscurece
el día; los picos de las montañas de Tebas desaparecen. Ya, pálido de miedo,
ordena el brazo de la gente, que lo lleva a su propia espada; y de repente
perturbado, lejos de él, que ve entre su palacio y la Menoeceus Euménides en
lágrimas, y los griegos alegres en la hoguera que los consumen. ¿Qué día cuando
la paz comprada al precio de tanta sangre se perdió a los tebanos!
[12700]
Las armas que una vez colgados en los templos de los dioses del país, que ellos
se separan y cubren su pecho destrozado escudos, cascos sin sus adornos de la
cabeza, y se arman cara todavía manchado de sangre. Nadie se destacó por su
aljaba con su espada, con la belleza de su caballo. Las paredes ya no son
seguros, las paredes están abiertas en todos los lados; puertas requieren nuevas
defensas, que son los primeros que quieren la fuerza; más ranuras, Capaneo ellos
derrocados. Agotado y lánguida, los jóvenes ya no se da el último beso a las
mujeres, niños y padres sacrificados ya no tener el valor de hacer los votos.
Pero el héroe del Ática, cuando ve los rayos brillan a través de las nubes y el
brillo del sol en armas, se precipitó en la llanura, donde se encuentran sin
enterrar al pie de las paredes, los cadáveres griegos. Bajo su casco polvoriento
aire entra en una corrupta es una mierda gimiendo los vapores mortales, y en su
legítima rabia, se quema para luchar. El líder tebano da por lo menos los
desafortunados griegos honor no para cometer sus cadáveres una nueva batalla, un
nuevo cuerpo a cuerpo; pero nada que perder restos de masacre, sacrilegio!
eligió una tierra virgen, sin embargo, que bebe la sangre. Ya Bellona tan
desigual en su favor, llamó a los dos pueblos en combate. En los dos lados No
Cry, la trompeta está en silencio; los guerreros de ambos ejércitos se destacan
solamente, y son una débil mano bajó la espada y el cinturón se relajó sus
jabalinas. Ellos dan en el suelo, y lejos de sus escudos, su viejo programa
sigue heridas sangrantes. A pesar de que los líderes de los atenienses ya no
tienen la misma pasión: la amenaza languidecido en los labios, y el valor
suavizado falta de enemigos. A medida que los vientos con menos furia si algunos
bosques pueden dejar sus olas impetuosas y enojados están en silencio en un mar
sin orillas. El hijo de Neptuno, Teseo, levantó la lanza, de madera de roble
Maratón, cuyo formidable sombra se extiende sobre los enemigos, y que cumpla con
el terrible campo de batalla del resplandor de su hierro. Uno podría ver el dios
Marte cuando voló desde la parte superior de Hemus édonien su carro, y lleva
alrededor de él en su muerte rápida del eje y huyó. Así hielo dispersa
descendientes terroristas Agenor. Teseo se avergüenza de ejercer valor de los
fugitivos, y su brazo desprecia demasiado fácil derramar sangre. Se deja a los
otros guerreros satisfacen asesinatos vulgares; los perros y los lobos miedo se
lanzan alegremente en un tiro y presas sin vida; pero la única ira alimenta el
calor del león. Sin embargo, invierte Olenius y Thamire, cuando se dibujó una
flecha de su carcaj, y, o bien levantado una enorme piedra; tres hermanos de la
carrera Alcé orgulloso de comandar tres naciones se perforan los tres de sus
características; hierro penetra completamente en la Fileo de mama, se hunde en
la boca de Helops morderlo, y pasa por el hombro Japix. Pronto ataque Hemon en
su carro con cuatro caballos, y le da una formidable línea: Hemon vuelve su
miedo caballos de lanza se desplaza un espacio largo, [12.750] a través de dos
guerreros y busca una tercera víctima; pero una barra de tracción se detiene y
evita que ir más lejos. Pero solo Creonte es el objeto de sus deseos; Creonte
está solo, que en medio de los batallones y lo llamó busca una voz terrible.
Finalmente encuentra otro punto del campo de batalla, instando a los nudillos, y
proferir la más espantosa de las amenazas vanas. Compañeros theseus salen lío, y
lo dejan solo, confiando a los dioses y las armas de su líder. Creonte, por el
contrario, retiene y recuerda sus guerreros; y viendo que ambos lados odio hacia
él es igual, se reúne en este último momento toda su rabia qu'aigrit muerte
inminente: "No son niñas, armados con escudos de luz, que va a luchar! si llora;
no lo crean aquí manos de la mujer aquí es una terrible pelea con los hombres;
somos nosotros los que disparó Tideo muerto Hlppomédon furioso, y se precipitó
desde las sombras el valiente Capaneo. ¿Qué locura que condujo a esta guerra,
infeliz? ¿No ves que los vas a la venganza, tendido en el polvo? "Él dice, y
lanza una línea se va a establecer y mueren innecesariamente en la superficie
del escudo Teseo. El hijo temida Egeo ríe amenazas y los brazos de su enemigo,
y, blandiendo su lanza, que se está preparando un golpe terrible; pero antes de
llegar a una voz de trueno, exclama: "Manes de los griegos, a los que sacrificar
este víctima, abrir el caos negro, llamar a las Furias vengadoras;, aquí viene
Creonte. "A estas palabras, la lanza de vibración por el aire y huelga Creon
donde muchas mallas de la capa de brazos se cubren con anillo delgado; traidor
sangre brota de mil; sus ojos se pierden y se cierran, se cae. Teseo poner el
pie en él, agarrando sus brazos: "Usted-Por favor, ahora, dijo, para dar las
llamas de la pira con los enemigos vencidos? placer que nos entierren los
vencidos? Será sometido a torturas terribles, y sin embargo no temer para su
entierro. "Ambas partes están acercando a las normas; manos unen con el piadoso
celo, y sellan la alianza en el medio del campo de batalla; Teseo es ya un
huésped; evoca entrar en las paredes; no despreciar las casas de Tebas. Teseo
acepta; y no desdeña la casa de sus enemigos. Madres y esposas de Tebas le da la
bienvenida con alegría. Al igual que el Ganges subyugado por el tirso bélico, y
ya bajo la suave influencia de Baco, celebrada los días de fiesta, dios
voluptuosa. De repente, en la parte superior opuesto de Dirce, a través de su
espesa sombra, los gritos de las mujeres golpeó el aire. Las madres no
descienden ogygiennes precipitados: como Thyades furioso cuando vienen corriendo
a las orgías de Baco; se podría pensar que requieren algún gran crimen, o que ya
se han comprometido. gemidos feliz, nuevos y dulces lágrimas brotan de sus ojos,
se lanzan hacia adelante y atrás, incierto; van primero a la magnánima Teseo; o,
a Creonte, o para ellos dépouil de ellos? El dolor provocado los cuerpos. No,
incluso un dios obtendría un centenar de voces en mi pecho, no podía cantar
dignamente tantas hogueras arden los líderes y soldados; gemidos tan confusas
[12800] negrita Evadne rushing en medio de las llamas tan cara, ocultando un
rayo en la noble pecho de su marido; la desafortunada Deifila cubriendo besos el
cuerpo de Tideo, y barbarie disculparse; Argie diciendo su hermana la crueldad
de los guardias; Ninfa de Erymanthus en medio de gemidos, dibujo Arcadien
Parthenopaeus; Parthenopaeus cuyo rostro fuera todavía conserva toda su belleza,
Partenopeo también lloró mientras los dos ejércitos. Casi no podía, animado por
un nuevo entusiasmo, inspirado por el propio Apolo, llenar un tema tan; y mi
barco, con uniforme de largo, se ganó el puerto.
Va a vivir en la
posteridad, y el tiempo victorioso, va a ser leído por el amo del mundo, O,
Tebas! que me costó doce años de vigilias? la fama ya benévola ha abierto un
camino fácil y ha demostrado, todavía joven, a las edades futuras; ya la
magnánima César se digna a honrarte con su aspecto, ya que América Jóvenes
enseña duro, y repetir sus versos. Que tu vida sea larga! Pero no trate de
competir con la divina Eneida; Soy la distancia, y todavía me encanta sus pasos.
Si desea aún se opone a las nubes, que se disipará pronto, y merecía honores
serán devueltos a usted después de mí.
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