esde muy antiguo se sabe que una cuerda tensa, al pulsarla, emitiendo un sonido característico.
El sonido se produce cuando un objeto vibra. Por ejemplo, cuando una persona habla, el sonido que emite es producido por las vibraciones de sus cuerdas vocales. Cuando tocamos un tambor, un pedazo de madera o de metal, una cuerda de violín, etc., estos cuerpos vibran.
Parece ser que fueron los pitagóricos, o incluso el propio Pitágoras, quien descubrió que si esa cuerda se sujetaba por la mitad, cada uno de las dos partes en que quedaba dividida la cuerda producía un sonido consonante (agradable al oído) con el anterior, pero más agudo. Este sencillo pero importante hallazgo es el fundamento de la música.
La pregunta más importante, y justamente la que trataremos de responder en las siguientes páginas, es:
VALE, PERO ¿POR QUÉ NOS SUENAN BIEN?
Hoy poseemos mucha más información
que los pitagóricos sobre la naturaleza y transmisión de los sonidos. Veamos
pues qué sucede cuando hacemos vibrar una cuerda.
En la siguiente escena puedes ver
una cuerda, sujeta por ambos extremos. Modifica el tiempo para ver qué sucede
cuando hacemos vibrar la cuerda.
Como ves, el punto pulsado en la cuerda oscila verticalmente entre dos extremos: realiza un "sube y baja" conocido como movimiento armónico simple, que es aquel que se obtiene cuando los desplazamientos del punto son directamente proporcionales a las fuerzas causantes de este desplazamiento. La distancia que separa en cada momento el punto de su centro de equilibrio (cuerda en reposo) se llama elongación y .
La elongación máxima, es decir, la mitad de la distancia entre los dos extremos, se llama amplitud A . Al número de oscilaciones completas (dobles) que realiza por segundo se le llama frecuencia F , y su unidad es el hertzio (hz). Es decir, cuando decimos que el punto oscila a 100 hz queremos señalar que realiza 100 oscilaciones completas por segundo.
Comprueba en la escena anterior que la frecuencia es independiente de la amplitud (los osciladores con esta propiedad se llaman armónicos). |