La vida de Hans Rottenhammer , pintor de Amberes

Biografía desde

Karel van Mander , Schilder-boeck

 


Es muy beneficioso para los jóvenes artistas encontrar precursores en su lugar de origen cuyo ejemplo les sirva de estímulo.
La ciudad de Múnich, gracias al apoyo ilustrado del Duque de Baviera, se convirtió en el lugar de encuentro de varios maestros, cuya excelencia fue capaz de pasar a primer plano.

Es allí que vino al mundo en 1564, el pintor Hans Rottenhammer, que provenía de una familia honorable.

Su aprendizaje fue con un pintor mediocre llamado Donouwer. A su llegada a Roma, comenzó a pintar sobre placas de metal a la manera de los holandeses, pero no como la mayoría de los aprendices, sino haciendo verdaderas composiciones.

La primera obra que lo llevó a la fama fue un placa bastante grande, en altura: El Día de Todos los Santos, es decir, una asamblea celestial de santos y ángeles, una obra considerable de excelente ejecución: cortinajes, cabezales, herrajes y todo tipo de cosas bonitas, de un hermoso colorido.

Luego fue a Venecia, donde se casó con una veneciana, y produjo un número considerable de hermosas pinturas sobre metal, grandes y pequeños, que se pueden encontrar hoy en día entre los aficionados. En particular, hay en casa de Jean Knotter, en Utrecht, varias muestras del talento de Rottenhammer.
Me gustaría mencionar en particular, la Asunción de la Virgen María, y Diana y Acteón #, de una composición entendida, de un colorido agradable y cálido, y, así como sus obras son buscadas por aficionados, su nombre merece un lugar entre los más estimados.

Adam Elsheimer. — Actualmente existe en Roma un excelente Pintor alemán llamado Adam. Nació en Frankfurt, hijo de un sastre. Bastante mediocre cuando llegó a Italia. En Roma progresó rápidamente y se convirtió, mediante el estudio, en un hábil artista. No sólo se preocupa por el dibujo, sino que, en las iglesias y en otros lugares, se queda absorto en la contemplación de las obras de los grandes maestros, y las graba en su mente.
Sobresale pintando sobre cobre invenciones curiosas, aunque no produce mucho, lo que hace es muy hábil.
Extremadamente servicial, no pide ayuda. Estimo que en el presente año de 1604, puede tener entre veintiocho y treinta años.

Dierick de Vries. — Todavía quedan dos holandeses en Venecia de talento: Dierick De Vries, un frisón, y Lodewijck Toeput , que es de Mechelen, creo. Me hubiera gustado poder detenerme más tiempo en estos artistas, pero me veo obligado a limitarme a decir esto: que he visto a De Vries varios cuadros de bodegones y mercados de frutas, tratados al estilo veneciano, muy bien pintado y en un color cálido. Yo no podía silenciarlos. Desconozco absolutamente la edad de este pintor.
En cuanto a Toeput, vive a cierta distancia de Venecia, en Derviso. Es un hábil compositor, digno de ser contado entre los buenos pintores. Estoy seguro de que también es un buen retórico, que no es nada sorprendente, la pintura y la poesía siendo hermanas.

 



 

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